China 'redescubre' Amrica LatinaAuthor(s): Julio AriasSource: Poltica Exterior, Vol. 19, No. 105 (May - Jun., 2005), pp. 127-138Published by: Estudios de Politica Exterior S. AStable URL: http://www.jstor.org/stable/20645804 .Accessed: 15/02/2011 18:50

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China 'redescubre'

America Latina

Julio Arias

Mas alia del abastecimiento de materias primas, el interes chino por America Latina forma

parte de la nueva politlca exterior de Pekm. Para Esparia, esa presencia en Latinoamerica

le permitira alinear polfticas con China en areas donde sus objetivos puedan coincidir.

Ajuzgar por las inconveniencias del trayecto entre China y America

Latina, separadas por unas 30 horas de vuelo a traves del oceano Pa

cifico, el marat?n de visitas que ha tenido lugar en el ultimo ano en

tre lideres chinos y latinoamericanos revela el despertar de un sor

prendente interes mutuo que contrasta con decadas de mutua ignorancia. Desde la creation de la Rep?blica Popular China en 1949, los lazos que unian ambos lados del Pacifico se han caracterizado sobre todo por su superficiali dad. Incluso las relaciones chinas con Cuba no han sido tan fraternales como

se hubiera esperado entre dos paises gobernados por partidos comunistas, de

bido a la escisi?n politica entre Pekin y Moscu que perdur? hasta imos meses antes de la caida de la Union Sovietica.

La primera visita presidential china a America Latina se prodiyo en 1990, cuando el entonces presidente, Yang Shangkun, visit? Mexico, Brasil, Uruguay,

Argentina y Chile. Hasta esa fecha las relaciones entre China y America Latina

carecian de peso, tanto en el piano politico como en el comercial. Sin embargo a partir de 1992, cuando China emergi? del limbo econ?mico en el que perma necia tras la tragedia de Tiananmen en 1989, los intercambios comerciales, po liticos y culturales entre el gigante asi?tico y America Latina comenzaron a ad

quirir forma y contenido sustancial, debido en parte a la intensification de las

relaciones comerciales y econ?micas, y en parte a imperativos polfticos dentro

del contexto del nuevo orden internacional en Asia-Pacffico.

El apetito chino por materias primas que ha acompanado el ascenso del pais como superpotencia productora, junto con la necesidad de Brasil, Argenti na o Chile de diversificar el destino y la cuantia de sus exportaciones, han crea

Julio Arias es consultor de comercio internacional en Pekm.

PoUtica Exterior, 105. Mayo / Junio 2005

128 Politico, Exterior

do un entorno propicio para el encuentro de estos dos gigantes. America Latina

se ha convertido hoy no solo en "la despensa" de China, al ser uno de los prin

cipales abastecedores de materias primas del hambriento dragon, sino tambien

en el mayor receptor de las inversiones directas chinas. Estos factores han cre

ado un imperativo politico en los paises latinoamericanos para hacer frente al

reto estrategico chino, que por su tamano y su gran influencia en la trayectoria comercial de America Latina no puede ignorarse. El reconocimiento de China como economia de mercado por parte de Brasil, Argentina, Chile y Uruguay de

muestra esta voluntad politica de acercamiento mutuo.

El interes chino por America Latina trasciende no obstante la mera nece

sidad de asegurarse el abastecimiento de materias primas: forma parte de la

nueva politica exterior china, cuyo objetivo principal es proyectar su influen

cia en areas de relevancia estrategica. America Latina, tanto por motivos poli ticos como comerciales, ofrece a China la oportunidad que necesita para po ner en marcha su nueva estrategia fuera de su traditional area de influencia.

Por ello el desarrollo de lazos m?s estrechos con America Latina ha adquirido un lugar prioritario en la politica exterior china. ^Bailar? entonces el dragon chino a ritmo latino?

China y America Latina en la era de la globalization China persigue tres objetivos estrategicos en America Latina: el primero, desarrollar su influencia politica en la region; el segundo, asegurarse el ac

ceso a materias primas; y el tercero, buscar mercados para los productos made in China.

El acercamiento con America Latina responde al nuevo planteamiento en la politica exterior de China, caracterizado por una diplomacia m?s acti va y una mayor voluntad de dejar constancia de su emergencia como gran

potencia mundial. Su punto de partida es Asia, y por extension la region de

Asia-Pacifico. En este sentido, America Latina forma parte del contexto geo

polftico inmediato de China. De ahf surge su deseo de desempenar a fondo

su papel en el foro de Cooperation Economica del Asia-Pacifico (APEC), no

solo para estimular los intercambios comerciales en la region, sino tambien

para demostrar su capacidad de "liderazgo" y proyectar una imagen positiva de su r?pido ascenso como gran potencia. Al fin y al cabo, los paises miem

bros de APEC son "riberenos" de la cuenca del Pacifico y son los primeros

que van a sentir el rugir del dragon a medida que este extienda su proyec ci?n fuera de su ?mbito traditional.

Sin embargo, la relation con America Latina va m?s all? de APEC. Las vi

sitas de Estado que realiz? Hu Jintao a Brasil, Argentina y Chile aprovechan do su presencia en el continente tras su participation en el ultimo foro de

APEC en Chile demuestran adem?s la voluntad de China de sacar partido de

Julio Arias 129

la situation de abandono en las relaciones entre Estados Unidos y America

Latina, debido al pequeno papel que desempena la region en la politica exte

rior de la administration de George W. Bush. En otras palabras, China intenta

aprovechar el vacio politico para cultivar lazos m?s estrechos e incluso forjar alianzas estrategicas en una region tradicionalmente considerada parte de la

esfera de influencia norteamericana.

La relation con Brasil, por ejemplo, demuestra la intention china de forta

lecer su position international a traves de iniciativas politicas alternativas -co

mo el G-20, liderado por Brasil- a los foros tradicionalmente dirigidos por EE UU. El reconocimiento de China como economia de mercado por parte del go bierno brasileno, a pesar de la oposici?n de grupos patronales como la podero sa Federagao das Industrias do Estado de S?o Paulo, pone en evidencia la vo

luntad de anteponer intereses politicos a realidades

economicas. Sin embargo, el quid pro quo chino que ^^^^^^^^^ ha acompanado este gesto va m?s all? de los acuer

dos firmados para exportar productos agroalimenti- El reSUrgimientO cios, e incluso de la compra por parte de China de ^ iZQUievdd una flota de aviones Embraer por valor de 200 millo- A . P71 J\ 771PV1CCI nes de dolares, que Pekin acaba de anunciar. ^

Tambien incluye gestos exclusivamente politi- L?tiflCi fCLVOV?Ce cos, como es el respaldo t?cito chino a las ambi- el efltefldilTliefltO ciones brasilenas de convertirse en miembro per- COTI ChiflCL manente del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. El acercamiento politico explica asimismo

la intensification de lazos en materia de ciencia y

tecnologia con Brasil en proyectos de car?cter estrategico con un alto valor

anadido. Asi lo manifiesta el desarrollo conjunto del programa Satelite Sino Brasileno de Recursos Terrestres (Cbers, en sus siglas en ingles), disenado

para recopilar datos geol?gicos y ambientales necesarios para observar

cambios medioambientales. En 1999 fue lanzado en ?rbita el Cbers-1, que ha

sido reemplazado recientemente por el Ziyuan 2/Cbers-2. A traves de este

proyecto, ambos paises -que comparten una extension geogr?fica similar y una preocupaci?n por asegurar una utilization eficaz del suelo arable- han

logrado disminuir su dependencia de tecnologias extranjeras en materia de

Observation cientifica.

Por ultimo, cabe senalar que el resurgimiento de la izquierda en America

Latina tambien ha favorecido el clima de entendimiento politico con China. Gobiernos como los de Brasil, con Luiz In?cio Lula da Silva, y Nestor Kirchner de Argentina est?n m?s predispuestos a sacar partido de la emergencia del gi

gante asi?tico para contraponer el peso de EE UU en la region, sobre todo en un momento en que Washington presta insuficiente atenci?n a los problemas de America Latina. En el caso de Venezuela, Hugo Ch?vez ha encontrado en

China un socio comercial cada vez m?s importante que, adem?s, est? dispues

130 Pol?ica Exterior

to a establecer una relation "estrategica" con el pats, articulada en un comu

nicado conjunto durante la ultima visita de Chavez a Pekin en diciembre de 2004. Venezuela se comprometi? a reconocer a China como economia de mer

cado, se opuso a la "independencia" de Taiwan y expres? su apoyo al contro

vertido proyecto de ley chino de antisecesi?n, promulgado por la Asamblea

Popular National, y cuyo objetivo es sentar las bases legales para una posible invasion china de Taiwan en caso de que la isla decida unilateralmente procla

marse Estado soberano.

En segundo lugar, la necesidad china de asegurarse acceso a materias pri mas ha estimulado las exportaciones latinoamericanas y ha contribuido a atra

er capital chino en proyectos de extraction de recursos naturales asi como de

infraestructura. El voraz apetito de China, que hoy consume el 50 por cien del cemento mundial, el 30 por cien del carbon, el 36 por cien del acero y el 25 por cien del aluminio y el cobre del mundo, ha favorecido a las estancadas econo

mias latinoamericanas en un momento en que la demanda global no acababa

de despegar. Como consecuencia de esta demanda, los precios de las materias

primas han subido un 50 por cien en los Ultimos cuatro anos seg?n el "indice

de precios de las materias primas", publicado por The Economist, lo que clara

mente ha beneficiado a las economias latinoamericanas. Paises como Brasil y

Argentina gozan de un amplio super?vit comercial con China. En 2004, el valor

de las exportaciones brasilenas a China alcanz? los 8.684 millones de d?lares, convirtiendole en el segundo socio comercial por detr?s de EE UU y por de lante de Argentina y la Union Europea. AI mismo tiempo, las importaciones chinas alcanzaron los 3.674 millones de d?lares, situando la balanza comercial en 5.000 millones de d?lares favorables a Brasil, mientras que Argentina goz? de un super?vit con China que super? los 2.400 millones de d?lares.

El grado de especializaci?n de las exportaciones latinoamericanas a China es bastante elevado. Los paises miembros de Mercosur se especializan sobre

todo en productos agroalimentarios, que representaron el 75 y 47 por cien del

total de las respectivas exportaciones de Argentina y Brasil hacia China en

2003. Chile, Peru, Cuba y Venezuela exportan principalmente metales, en parti cular cobre, hierro, niquel y oro. Venezuela y Ecuador adem?s se han converti

COMERCIO ENTRE CHINA Y AMERICA LATIN A (2004) (en millones de d?lares)

Exportaciones Cambio Importaciones Cambio a China 2003 de China 2003

Total Cambio sobre 2003

Balanza comercial

Brasil 8.684 Mexico 2.139 Chile 3.676

Argentina 3.254 Panama 14 Peru 1.524 Venezuela 738 America Latina 21.784

48,6% 27,6% 63,5% 19,3%

-47,9% 100,6% 36,1% 45,9% 18.242

3.674 4.972 1.688 852

2.186 418 595

71,5% 52,2% 31,6% 90,6% 47,8% 18,3%

198,9% 18,2%

12.358 7.111 5.364 4.107 2.201 1.942 1.333

40.027

54,8% 43,9% 51,9% 29,3% 45,9% 74,4% 79,9% 49,3%

5.010 -2.833 1.988 2.402 -2.172 1.106

143 3.542

Fuente: Administraci?n General de Aduanas de China.

Julio Arias 131

do en importantes suministradores de crudo a China, que ha adelantado a Ja

p?n como segundo mayor consumidor de petr?leo del mundo. A juzgar por las estadisticas, los intercambios entre China y America Lati

na se mueven a ritmo de samba. Seg?n cifras del BBVA, de 2000 a 2003, las ex

portaciones brasilenas crecieron un 500 por cien, las argentinas m?s de un 360

por cien y las chilenas un 240 por cien.1 En terminos globales, el comercio en

tre China y America Latina ha pasado de 1.981 millones de d?lares en 1990 a 12.596 millones en 2000 y 40.027 millones a finales de 2004, seg?n muestran las estadisticas chinas.2 Aunque existe el peligro de que a corto plazo las exporta ciones latinoamericanas de materias primas a China se ralenticen debido a un

posible "atenizaje brusco" de su economia, a largo plazo las perspectivas de

exportation siguen siendo atractivas.3

Para asegurarse un mejor acceso a ciertos recursos naturales y abaratar su coste final, China tambien esta realizando importantes inversiones en Ame

rica Latina, que de hecho se ha convertido en el principal destino de la inver

sion extranjera directa (IED) china, con un total acumulado de 4.620 millones de d?lares.4 En 2003 la region recibi? 1.040 millones de d?lares, equivalente a un 36,5 por cien de la IED china durante ese ano, seg?n estadisticas del minis terio de Comercio. Aim excluyendo las inversiones realizadas en los paraisos fiscales del Caribe, la inversion china en la region es notable. Las grandes em

presas estatales chinas, que impulsan este fen?meno, necesitan realizar adqui siciones de empresas locales para poder ganar mayor control sobre el proceso de extraction y procesamiento de materias primas. China ya ha realizado in

versiones en minas de hierro en Peru, yacimientos de petr?leo en Ecuador y

explotaciones de oro en Venezuela.

En 1993 el gigante sider?rgico estatal Shougang Steel adquiri? la empresa minera estatal Hierro de Peru a traves de una de sus filiales, Shougang Interna tional Trade & Engineering Co. Mas recientemente, el mayor productor de ace ro chino, Baosteel, se comprometi? a inyectar 1.500 millones de d?lares con

juntamente con la Companhia Vale do Rio Doce (CVRD). En el sector energetico, las grandes empresas petroliferas chinas como Sinopec y la Corpo ration National de Petr?leo y Gas Natural de China (CNPC) estan desarrollan do proyectos de exploration y explotaci?n de crudo en esta region. Sinopec es

1. Javier Santiso, "Latin America's friend across the Pacific", Financial Times, 14 de di ciembre de 2004.

2. Existen importantes discrepancias en las estadisticas preparadas por las autoridades chinas y latinoamericanas. En el caso de Mexico, por ejemplo, las importaciones chinas as cienden a 15.000 millones de d?lares mientras que las exportaciones a China rondan los 1.000 millones de d?lares.

3. Seg?n analiza Diana Choyleva, economista en Lombard Street Research, un aterrizaje brusco pondria el crecimiento del PIB chino en un 5-6 por cien anual en terminos reales.

4. Cabe precisar que gran parte de estas inversiones fue a parar a paraisos fiscales como las islas Caiman y las islas Virgenes brit?nicas, que en las estadisticas chinas aparecen en la secci?n de America Latina.

REUTERS/CORDON PRESS

Hu Jintao y Fidel Castro en el palacio de la Revolucion

(La Habana, 22 de noviembre de 2004)

el principal explotador del campo petrolifero de Sacha, el segundo mayor de

Ecuador, mientras que CNPC es el principal explotador en los campos de Ca

racoles e Intercampo Norte en Venezuela bajo licencia otorgada a CNPC y Pe

tr?leos de Venezuela (PDVSA). Durante su gira por America Latina, el presidente Hu prometi? realizar

numerosas inversiones, lo que ha contribuido a generar un clima politico de

buena voluntad. No obstante, m?s que inversiones directas, se trata de pres tamos que Pekin se dispone a extender para la construction de proyectos de infraestructura disenados para facilitar la exportation de materias pri mas hacia China.5

En tercer lugar, la b?squeda de nuevos mercados para las exportaciones chinas ha llevado a las empresas a "descubrir" America Latina. El extraordi

nario comportamiento de las exportaciones chinas a paises industrializados

ha elevado enormemente la cuota de los productos chinos en estos mercados

casi hasta el punto de saturation. Para limitar la dependencia en estos paises, las empresas chinas necesitan buscar nuevas avenidas de crecimiento en pai ses emergentes. Actualmente las importaciones chinas de productos manu

5. La existencia de estos prestamos explica que en algunos casos como Ecuador, contra

tos o licencias hayan sido a^judicados a empresas chinas sin haber lanzado licitaciones las

autoridades a^udicadoras.

Julio Arias 133

facturados en la region estan creciendo a un ritmo mayor incluso que las ex

portaciones latinoamericanas de materias primas a China. En 2004, las impor taciones de China en Brasil crecieron un 71,5 por cien, mientras que en Vene

zuela, Argentina y Mexico crecieron un 198 por cien, 90,6 por cien y un 52,2

por cien, respectivamente. Por otro lado, el interes de las empresas chinas por los mercados de Ame

rica Latina est? relacionado con el proceso de expansion international de

grandes grupos empresariales chinos en sectores de bienes de consumo y de

equipo. Para poder competir con las grandes multinationales, las empresas

chinas, como lo hicieran las coreanas en los anos setenta y ochenta, deben co

menzar su expansion international en mercados secundarios donde disponen de mayor margen de crecimiento. La actividad de las empresas chinas en el

sector de telecomunicaciones en America Latina ilustra las ambiciones de las

emergentes multinationales chinas en la region. El ano pasado ZTE cerro un contrato con VIVO, la sociedad mixta consti

tuida por Telefonica M?viles y Portugal Telecom, por valor de 100 millones de dolares para proveer telefonos m?viles. Los ingresos totales de su rival Hua

wei en el pais carioca, por su parte, alcanzaron tambien los 100 millones de do

lares. Tanto Huawei como ZTE han anunciado su intention de realizar inver

siones en Brasil para fabricar telefonos m?viles y estaciones de base. ZTE adem?s vende equipos de telefoma a Telefonica CTC Chile, Cotecal y Telefoni ca Empresas, mientras que Huawei es uno de los principaies proveedores de la

venezolana Conatel. La expansion de estas empresas esta en gran parte finan

ciada por bancos estatales chinos como el China Development Bank, que ha

concedido un prestamo de 10.000 millones de dolares a Huawei para financiar

sus ambiciosos planes de expansion international.

El desafio chino

De momento, la bonanza econ?mica creada por el dinamismo de las exporta ciones a China ha facilitado el crecimiento sostenido del comercio bilateral y el establecimiento de proyectos de cooperation econ?mica. Pero a largo plazo este logro corre el peligro de convertirse en un arma de doble filo: el hecho de

suministrar al gigante chino con las materias primas necesarias para su desa

rrollo industrial conlleva el peligro de una excesiva dependencia en la deman

da china de estos productos. Hoy el super?vit comercial con China facilita el acercamiento entre China y America Latina. Sin embargo, en cuanto la balanza

comercial comience a mostrar sintomas deficitarios a favor de China, es posi ble que la buena voluntad politica disminuya.

Esto quiz? no afectaria tanto a Brasil que goza de una relation m?s tras

cendente con China que la mayoria de sus vecinos. En cualquier caso, a juzgar por la utilization de medidas defensivas contra las importaciones chinas, el en

134 Pol?ica Exterior

tusiasmo latinoamericano por la Rep?blica Popular tiene sus limites. Argenti na, por ejemplo, inicio 31 investigaciones antidumping contra China, lo que supuso en si alrededor de un 28 por cien de todas las investigaciones realiza

das en el periodo 1995-2004 segun fuentes del Banco Interamericano de Desa

rrollo (BID). Incluso Brasil ha llevado a cabo m?s de 20 investigaciones contra China de un total de 101 desde 1989. A partir de 1996, Brasil ha aplicado medi das de salvaguardia sobre las importaciones de juguetes chinos.

La actual estructura comercial tambien puede conllevar una perdida para los sectores manufactureros en America Latina, que compiten directamente

con China no solo en mercados nacionales sino en terceros paises, en particu lar en EE UU. Este es el caso sobre todo de Mexico y Centroamerica, cuyas in

dustrias maquiladoras compiten directamente con la poderosa industria de

procesamiento de exportaciones china. Los paises del Cono Sur y los exportadores de recursos natura

les como Venezuela y Peru por regia general no

El TLC COfi compiten directamente con China en la mayoria de

Estados UnidOS losproductosqueexportan.

puede convertir a . Para

M*fico' q"e ?!?^

* reJac^n

defi

^ , . . citana con el gigante asiatico, el auge de China se

MeXICO efl deStVYlO ha convertido en un reto economico de especial

pirivilegiddo pava relevancia. La competencia china no solo se nota

Id IED chiflCL en e* merca^? interno (en 2004 el deficit comercial alcanz? los 2.833 millones de d?lares),6 sino en las

exportaciones mexicanas a EE UU. El ano pasado China desplazo a Mexico como primer abastece

dor de productos a EE UU despues de Canada, lo que presenta graves pro blemas para su industria maquiladora, que supone el 55 por cien de las ex

portaciones de manufacturas mexicanas. En parte, este fenomeno se debe

al auge de China como principal destino de las inversiones estadounidenses en el sector manufacturero, debido entre otros factores al encarecimiento

de la mano de obra en Mexico con respecto a China, que en 2003 se situaba

en unos 2,38 d?lares/hora comparado con unos 0,68 d?lares/hora, y a la

existencia de incentivos fiscales en China establecidos para atraer inversion

extranjera en el sector manufacturero.

El extraordinario comportamiento exportador chino y la fuerte compe tencia que ha generado en el sector maquilador mexicano, ha creado un clima

de crispacion en Mexico y por consiguiente la relation bilateral ha sido abrupta y diffcil. Si anadimos la falta de conocimiento sobre el gigante asiati co, no es de extranar que desde Mexico el ascenso de China se perciba m?s

como una amenaza que como una oportunidad. Este fenomeno sin embargo

6. Seg?n cifras mexicanas, el deficit comercial en 2004 alcanz? los 14.000 millones de d?lares.

Julio Arias 135

no es nuevo: el mismo temor a la competencia china explica que, cuatro anos

atr?s, Mexico se convirtiera en el ultimo pais en firmar la adhesion de China en la Organization Mundial de Comercio (OMC). Para paliar los temores me

xicanos, Pekm accedio a que Mexico impusiese cuotas compensatorias sobre

una variedad de productos como complementos de confection, zapatos y ju

guetes, que en algunos casos rondan el 1.000 por cien, como condition sine

qua non de su adhesion en la OMC.7

Hist?ricamente la reaction mexicana al desaflo chino ha sido despropor cionada a la hora de establecer medidas defensivas para proteger su industria

maquiladora de la competencia china. No obstante, las autoridades mexicanas

han decidido que la mejor defensa en el terreno del comercio bilateral con Chi na es el ataque. El objetivo fijado es buscar nichos de oportunidad para empre sas mexicanas en China, asf como atraer inversiones a Mexico. Hasta ahora la

mayoria de estas se centran en la importation y distribution de productos chi nos. Para atraer inversiones chinas de manera m?s estrategica, Mexico, a tra

ves de Bancomext, promociona alianzas entre empresas chinas y mexicanas

en sectores donde Mexico disfruta de ventajas competitivas. En la industria de la confection, por ejemplo, donde China tiene proble

mas de acceso al mercado estadounidense tanto historicos por las restriccio

nes impuestas por el sistema de cuotas, como por motivos de entrega "justo a

tiempo", Mexico se puede convertir en un aliado importante gracias a su pro ximidad al mercado estadounidense. En sectores de mayor valor anadido, Mexico podria ofrecer a China alianzas estrategicas a sus empresas emergen tes en el sector automotriz y de componentes automovilisticos. Para China,

que considera el desarrollo de su industria automovilistica como objetivo es

trategico, Mexico ofrece dos atractivos: por un lado, como miembro del trata

do de Libre Comercio (TLC) con EE UU y Canada, los mexicanos disfrutan de acceso preferente al mercado estadounidense, con lo que se puede convertir

en un destino privilegiado para la inversion china en las Americas; por otro la

do, las empresas mexicanas en este sector estan m?s dispuestas a compartir

tecnologias con empresas chinas que los grandes fabricantes mundiales pre sentes en el pais asi?tico.

Triangulaci?n Espana-America Latina-China

^C?mo puede verse la nueva din?mica politica y econ?mica entre China y America Latina desde una perspectiva espanola? ^Como podriamos sacar

partido de esta nueva realidad? ^Deberiamos incluir el factor America Lati na como una variable m?s de la politica china de Espana? Merece la pena analizar las perspectivas de triangulaci?n entre Espana-America Latina-Chi

7. Estas elevadisimas cuotas explican en parte las importaciones ilegales de productos chinos en Mexico.

136 Politico, Exterior

na en el terreno comercial, por tratarse de una de las areas que mejor ilustra

las oportunidades y las limitaciones que ofrece este concepto para las em

presas espanolas. En primer lugar, las consecuencias indirectas de la "fiebre exportadora"

latinoamericana se reflejaran a corto y medio plazo en el fortalecimiento de su balanza de pagos, dada la expansion de las exportaciones de materias pri

mas y productos agroalimentarios. Este fen?meno facilitar? la recuperation de las econorruas recien salidas de crisis financieras y estimular? el consu

mo, del que dependen la mayoria de las empresas espanolas presentes en la

region. En segundo lugar, de manera m?s directa, la enorme importancia de

America Latina para la econonua china, tanto en terminos comerciales como

de inversion directa, puede reforzar lazos entre los grandes grupos espanoles y las emergentes multinationales chinas. Espana ofrece un atractivo ?nico como plataforma para las empresas chinas que necesiten coordinar las acti

vidades de desarrollo de negocio con las filiales de empresas espanolas en

America Latina. El caso de Telefonica demuestra la importancia para las em

presas chinas de contar con socios en America Latina que puedan ayudarles a alcanzar econonuas de escala.

Sin embargo, estas oportunidades existen en la medida que las empresas chinas necesiten entrar en el mercado latinoamericano de la mano de socios

espanoles, lo cual no siempre es el caso. Conviene destacar que la actividad

comercial e inversora china en America Latina apenas se solapa con la activi

dad espanola en esta region. A nivel inversor las empresas chinas presentes en America Latina buscan asegurarse el acceso a materias primas y nuevos

mercados en sectores de bienes de equipo y de consumo. Las empresas espa nolas en America Latina tambien buscan nuevos mercados que ofrezcan es

pacio de crecimiento, aunque su enfoque se ha centrado sobre todo en el sector servicios. En este sentido, las empresas chinas no presentan un reto

estrategico para las multinationales espanolas. Por ello las posibilidades de

cooperation se limitan, de momento, a nichos de oportunidades donde pue dan encontrarse sinergias.

La nueva din?mica transpacffica tambien ofrece a la empresa espanola la

Fuente: BICE Data, Alfredo Arahuetes, Lourdes Casanova.

Sector servicios

73%

Flujo de IED espanola en America Latina

(1993-1999)

posibilidad de realizar inver

siones y proyectos conjuntos con socios chinos en America

Latina. Los sectores de cons

truction, ingenieria y conce

siones, por ejemplo, son areas

de interes cornun sobre todo en proyectos de extraction e

infraestructura, donde las em

presas chinas estan cada vez

m?s implicadas dada la nece

Julio Arias 137

sidad de facilitar la extraction y transports de materias primas para su expor tation a China. Cabe precisar que las inversiones en America Latina son por

regia general inversiones directas, realizadas por empresas que persiguen ob

jetivos estrategicos, que a menudo se anteponen a intereses comerciales; las

empresas chinas, como las espanolas, estan en America Latina para quedarse. Sin duda, la realization de proyectos conjuntos en America Latina ayuda

ria a mejorar el conocimiento mutuo entre empresas chinas y espanolas, lo

que podria eventualmente dar pie al desarrollo de otra vertiente de oportunida des de negocio en China. Desde esta lectura, la colaboracion economica en

America Latina podria fortalecer la presencia de empresas espanolas en China.

En el sector servicios, en el que nuestras empresas son bastante competiti

vas, existen areas de negocio con mucho potential. Cabe destacar las oportu nidades para los grandes bancos espanoles con presencia en America Latina

para participar en la financiacion del flujo comercial e inversor entre China y America Latina. Los principales conductores del negocio incluyen las remesas

de credito, la participation en la financiacion de exportaciones chinas y de

proyectos inversores participados por empresas chinas en America Latina. Se

g?n Ramon Gascon, responsable del BBVA en China, el comercio entre China

y America Latina se ha convertido en uno de los grandes vectores de creci

miento a corto-medio plazo para el banco en ese pals, que abrir? una sucursal

en Shanghai, operativa en 2006, para ofrecer una gama de servicios m?s amplia a clientes espanoles, chinos y latinoamericanos.

Las areas de medio ambiente, servicios portuarios y logisticos, al estar re

lacionados con la explotaci?n de recursos naturales, tambien ofrecen oportu nidades de negocio. El transporte aereo es otro segmento con potencial creci

miento. Espana puede convertirse en un n?cleo para canalizar el transporte de

pas^jeros hacia los paises latinoamericanos -sobre todo ahora que estos Ulti mos han abierto sus puertas al turismo chino- lo que reduciria considerable

mente la duration del trayecto de China a varios destinos de America Latina.

Finalmente, debido a la falta de conocimiento e information sobre el mer

cado chino en America Latina, las empresas espanolas, sea a titulo individual o

de c?maras de comercio, podrian servir como punto de referencia para aque llas empresas latinoamericanas que necesiten apoyo y asesoramiento para im

plantarse en el mercado chino. En el caso de Telefonica, que acaba de abrir

una oficina en Pekin, las diversas empresas que forman parte del grupo podr?n

gozar del apoyo de un equipo dedicado a China, por ejemplo, para sacar mejor

partido de los proveedores chinos a la hora de realizar compras.

Instrumentes de acci?n

M?s all? de lo comercial, el "descubrimiento" de America por parte de China presenta oportunidades para potenciar nuestra relaci?n con el pais asi?tico en

138 Pol?ica Exterior

el piano politico y cultural. En el terreno politico, China aprovecha la poca atenci?n que Washington presta a America Latina para proyectar su influencia

en la region. Existen posibilidades, por tanto, de alinear politicas con China en

areas donde nuestros objetivos diplom?ticos coincidan, como en ciertos as

pectos de la politica de ayuda al desarrollo. En la esfera cultural, la promotion del espanol en China, por ejemplo, es un interes que compartimos con Ameri

ca Latina y es un area en la que se podrian desarrollar proyectos conjuntos desde ambos lados del Atlantico.

La idea de utilizar nuestra relation privilegiada con America Latina como

palanca para fortalecer las relaciones China-Espana, sin embargo, debe de to

marse con cautela, porque el concepto puede dar lugar a la presuncion de que

Espana puede canalizar las relaciones entre China y America Latina de mane

ra casi sistem?tica. La realidad es que China es reacia a mediatizar sus rela

ciones, no solo politicas sino tambien comerciales, a traves de terceros paises

y es dificil que quiera pasar por Espana como via de penetration a America

Latina, a no ser que existan razones especfficas. Tampoco los paises latinoa

mericanos, por razones similares, querr?n ver sus relaciones canalizadas a

traves de Espana. La triangulacion, por tanto, tiene sentido en la medida en

que ocurra a nivel de empresas y otros elementos con capacidad de maniobra

internacional, como pueden ser las ONG e instituciones como el Instituto Cer

vantes o Casa Asia. La din?mica tiene que producirse de abajo arriba. Por

consiguiente, es dificil que la triangulacion como planteamiento de action ins

titutional se corresponda con los din?micos y complejos flujos entre China America Latina-Espana.

Dada la discrepancia entre la teoria y la practica, convendria enfocar el

marco de action hacia objetivos m?s viables, como la facilitaci?n de encuen

tros entre los actores directamente interesados en desarrollar lazos triangul? res entre Espana-America Latina-China. En el area de promotion del comercio

exterior, por ejemplo, la prioridad es crear grupos de trab^jo mixtos constitui

dos por empresas espanolas y sus hom?logas chinas, en sectores donde exista

una compatibilidad evidente. Aparte de ofrecer resultados mucho m?s pr?cti

cos, este tipo de ejercicio ayudaria a demostrar la envergadura internacional

de nuestras empresas y a facilitar el desarrollo de lazos m?s estrechos entre

empresas espanolas y chinas.

Article Contentsp. [127]p. 128p. 129p. 130p. 131p. [132]p. 133p. 134p. 135p. 136p. 137p. 138

Issue Table of ContentsPoltica Exterior, Vol. 19, No. 105 (May - Jun., 2005), pp. 1-178Front MatterEditorialDe Juan Pablo II a Benedicto XVI: La contencin despus de George Kennan [pp. 5-6]

Antes de la eleccin de Benedicto XVIEl papel futuro de la lglesia catlica: Deberes del nuevo Papa [pp. 7-13]La poltica exterior de un Papa: De la cada del muro de Berln a Irak [pp. 14-16, 19-20]El Papa y los judos: Peregrinaje de reconciliacin [pp. 21-26]Laicismo y religiones: Educacin 'a la francesa' [pp. 27-30]

ActualidadReforma de los servicios de inteligencia: Estrategias contra el antiamericanismo [pp. 31-34, 37]China: El fin de la modestia: Presiones sobre Taiwan, embargo europeo [pp. 39-46]Un poder fuerte para Ruanda: Burundi bajo tutela [pp. 47-52]

EstudiosSobre la tortura [pp. 55-62]El salafismo en Europa [pp. 63-70, 73-75]Ser Irn el prximo Irak? [pp. 77-83, 85-88, 91-92]El futuro del desarme y la no proliferacin [pp. 93-101]Alianza Brasil-Espaa, posibilidades y desafos [pp. 103-106, 109-113]La poltica latinoamericana del gobierno socialista [pp. 115-126]China 'redescubre' Amrica Latina [pp. 127-138]Madrid y los Juegos Olmpicos de 2012 [pp. 139-144]La reforma de la ONU y los Objetivos del Milenio [pp. 145-160]

LibrosFortificar la Luna contra un ataque de Marte: El nuevo nacionalismo de Estados Unidos [pp. 163-171]Memorias de la Convencin: Intrahistoria del tratado constitucional [pp. 172-177]

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