caminito feliz, coro contemporáneo

5
1 Ytzel Morán González Caminito Feliz Sistematización de obra con base en el texto La actualidad de lo bello de Hans-Georg Gadamer - Pieza para coro - Idea Original: Ytzel Morán - Año: 2015 - Interpretación: Coro Contemporáneo de la Universidad de las Artes del ICA - Dirección: Ytzel Morán - Sugerencia: escúchese una primera vez sin ver el video (ojos cerrados) - https://www.youtube.com/watch?v=PzRl7IG9MDY Gadamer define como “una tradición sin rupturas” a un nuevo género artístico que comenzó con el coro en la época del Barroco. Ciertamente no se observan grandes rupturas en el uso de este instrumento, el coro, salvo en el siglo XVIII, donde se le concede un gran peso social, por lo que aumenta su número de integrantes, es decir, se vuelven más relevantes los coros con mayor cantidad de integrantes aunque esto no sea proporcional a su calidad. Caminito Feliz anula ambas cualidades atribuidas a los coros: la cantidad en integrantes y la calidad vocal; ni busca la saturación de los sonidos, ni el reconocimiento en cuanto a noción colectiva de belleza. Trata entonces de la interpretación de sonidos e ideas que nos acompañan en la vida cotidiana y, tal vez, en la no tan cotidiana. Cada integrante del coro ha aportado de cuatro a cinco dibujos, los cuales se traducirán a sonidos muchas veces acompañados de acciones. El orden de los símbolos (dibujos) es siempre diferente, pues antes de formar el camino (que se adaptará al espacio) se barajean las cartas que los contienen. Cada dibujo va acompañado de una instrucción; aun así, su interpretación varía de persona a persona. Aunque la finalidad de Caminito Feliz no sea la de provocar un disgusto a la sociedad coral, es evidente el interés por contrastar la polifonía clásica con la que se produce en su interpretación. La reacción de contraste no sólo ocurre en el intérprete auditor, sino también en el intérprete de los símbolos. Pero seguiremos el Caminito Feliz bajo la luz de tres elementos propuestos por Gadamer: lo lúdico, el simbolismo y la fiesta.

Upload: ytzelmoran

Post on 13-Dec-2015

215 views

Category:

Documents


2 download

DESCRIPTION

Sistematización de obra con base en Gadamer

TRANSCRIPT

Page 1: Caminito Feliz, Coro Contemporáneo

1

Ytzel Morán González

Caminito Feliz

Sistematización de obra con base en el texto

La actualidad de lo bello de Hans-Georg Gadamer

- Pieza para coro

- Idea Original: Ytzel Morán

- Año: 2015

- Interpretación: Coro Contemporáneo de la Universidad de las Artes del ICA

- Dirección: Ytzel Morán

- Sugerencia: escúchese una primera vez sin ver el video (ojos cerrados)

- https://www.youtube.com/watch?v=PzRl7IG9MDY

Gadamer define como “una tradición sin rupturas” a un nuevo género artístico que

comenzó con el coro en la época del Barroco. Ciertamente no se observan grandes rupturas

en el uso de este instrumento, el coro, salvo en el siglo XVIII, donde se le concede un gran

peso social, por lo que aumenta su número de integrantes, es decir, se vuelven más relevantes

los coros con mayor cantidad de integrantes aunque esto no sea proporcional a su calidad.

Caminito Feliz anula ambas cualidades atribuidas a los coros: la cantidad en integrantes

y la calidad vocal; ni busca la saturación de los sonidos, ni el reconocimiento en cuanto a

noción colectiva de belleza. Trata entonces de la interpretación de sonidos e ideas que nos

acompañan en la vida cotidiana y, tal vez, en la no tan cotidiana. Cada integrante del coro ha

aportado de cuatro a cinco dibujos, los cuales se traducirán a sonidos muchas veces

acompañados de acciones. El orden de los símbolos (dibujos) es siempre diferente, pues antes

de formar el camino (que se adaptará al espacio) se barajean las cartas que los contienen.

Cada dibujo va acompañado de una instrucción; aun así, su interpretación varía de persona a

persona.

Aunque la finalidad de Caminito Feliz no sea la de provocar un disgusto a la sociedad

coral, es evidente el interés por contrastar la polifonía clásica con la que se produce en su

interpretación. La reacción de contraste no sólo ocurre en el intérprete auditor, sino también

en el intérprete de los símbolos. Pero seguiremos el Caminito Feliz bajo la luz de tres

elementos propuestos por Gadamer: lo lúdico, el simbolismo y la fiesta.

Page 2: Caminito Feliz, Coro Contemporáneo

2

El juego

Cuando hablamos de la voz respecto a lo coral, nos referimos a emplearla de manera

“correcta”, según nuestra herencia de los coros europeos, la cual implica homogenización,

impostación, entre otras cosas. En este tradicionalismo de la voz, olvidamos que esta puede

tener otras formas de emitir sonidos. En Caminito Feliz se reactivan las posibilidades de la

voz a través del juego del instructivo y de la imitación de sonidos humanos o animales (por

ejemplo: canta tu canción favorita, imita al Santa del Parián, anuncia tamales oaxaqueños,

gruñe ferozmente), de sonidos hechos generalmente por artefactos (imita una ambulancia,

haz el sonido de una campana, imita el sonido de una lavadora) y por sonidos provocados o

acompañados de una acción (imita el sonido de una flatulencia, zapatea por 5 segundos, actúa

como cuando muerdes un chile y te das una enchilada tremenda).

La dinámica de Caminito Feliz hace que sea una pieza abierta, libre de un marco rígido.

Por un lado, en cuanto al coro, a pesar de las instrucciones, cada individuo tiene su propia

versión vocal y corporal de “gallina”, “grillo”, “campana”, “gotas de agua”, “la llorona”, etc.

Y por otro lado, se abre al seguimiento del caminito de cualquier otra persona que no

pertenezca al ensamble. A su vez, se abre a la propia interpretación del espectador de los

sonidos realizados por los ejecutantes; es probable que la interpretación del sonido de una

lavadora se confunda con la pretensión de hacer el sonido del andar de un tren, lo cual no

afecta la pieza, en dado caso, la nutre o la reinventa.

A pesar de lo entretenido que pueda llegar a ser la interpretación de una instrucción o la

reinterpretación de un sonido, esto no es la principal finalidad de la pieza, sino la invitación

a jugar vocalmente con todas las posibilidades de representación de todo lo que existe.

El simbolismo

Page 3: Caminito Feliz, Coro Contemporáneo

3

La instrucción que acompaña a cada dibujo permite al intérprete familiarizarse de una

mejor manera con la pieza como primera vez, pero una vez reconocido el símbolo ya no es

necesario leer la instrucción; por ejemplo, basta con ver el dibujo del chile para remitirnos al

gesto y al sonido que hacemos cuando estamos enchilados.

Por supuesto, no podemos hablar de belleza clásica en Caminito Feliz, pues su genialidad

no radica en el producto final de la interpretación sonora de varios símbolos, sino en la

concientización de poder percibir los sonidos de nuestro mundo cotidiano, mejor aún, el estar

en él. La pieza remite, efectivamente, a sonidos ya existentes, sin embargo, los sonidos

realizados en ese momento son únicos e irrepetibles, su efecto sonoro en función de unos

sonidos con otros son los que producen la pieza como tal, no la alegoría de las cosas, acciones,

animales o personas a los que se imita.

Por otro lado, como ya se mencionó, cada integrante del coro aportó sus propios símbolos,

por lo que es importante no dejar pasar la observación del reflejo de las diferentes

perspectivas de la vida. Por ejemplo: algún integrante propuso sonidos que en realidad no

sabemos cómo son, como el “paso de una estrella fugaz” (fiuuuu), hablándonos entonces de

un lenguaje ficticio o fantasioso; otro propuso el sonido de una pistola (bang, bang, bang),

debilitando una idea que puede ser bastante violenta; otro propuso el sonido de una “mujer

sexy pidiendo auxilio”, usando en su interpretación un leguaje totalmente teatral y divertido;

otro propuso el coqueteo fonético al diferenciar y pronunciar correctamente la “v” y la “b”

(va, ba). Finalmente, cada integrante que tenga el turno de interpretar los símbolos tendrá su

propia versión de estrella fugaz, de disparo, de mujer sexy y, tal vez, se entere de la diferencia

fonética entre v y b, todo según la disposición e inventiva de cada uno, aunque el símbolo

será siempre el que concilie todas las versiones.

La fiesta

La dinámica de Caminito Feliz consiste en colocar los dibujos en el suelo al azar.

Posteriormente, los intérpretes a voluntad comienzan a interpretar los símbolos de un extremo

a otro, es decir, todos los intérpretes interpretan todos los símbolos. Por lo tanto no hay

excepciones en los intérpretes ni en los símbolos; es una actividad de inclusión. Sin embargo,

Page 4: Caminito Feliz, Coro Contemporáneo

4

el nivel de efusividad puede ser muy variado, incluso ridículo, al punto de darse una exclusión

del propio intérprete en los símbolos que nos son de su agrado. Esta indiferencia puede causar

una ruptura en la pieza, tanto visual como sonora.

A pesar de lo anterior, la dinámica de la pieza pretende la inclusión a través de la

experimentación de la re conceptualización de la polifonía. Tanto la polifonía clásica como

la polifonía de la vida misma, las melodías principales sobresalen, las frases se ceden de unos

a otros, unos acompañan, otros sonidos no están hechos para sobresalir sino para darle fuerza

a lo que se quiere decir en general, y cuando se ausentan, a pesar de su imperceptibilidad, se

siente el vacío. Lo mismo pasa en Caminito Feliz, pues hay sonidos difíciles de ignorar y

muchos otros que no se distinguen pero están ahí, haciendo un todo.

Otra dinámica de la fiesta, aparte de la inclusión, es la experiencia de la temporalidad. El

tiempo en una fiesta se percibe de manera diferente que el tiempo contado, medido y dividido

para ser llenado; se trata más bien del tiempo propio. En este mismo sentido podemos hablar

del tiempo de la música. Este va ligado directamente con el carácter y exigencia de una obra;

no puede medirse, ni calcularse, es más bien una combinación entre la exigencia de la misma

música y el temperamento o ritmo cardiaco del intérprete.

En lo que a Caminito Feliz respecta, se dan diferentes experiencias de lo temporal. La

primera es cuando cada intérprete decide el tiempo que le dedicará a la interpretación de cada

símbolo; la percepción del tiempo “pertinente” para cada persona puede ser muy distante de

la percepción del tiempo medido. La segunda experiencia temporal tiene que ver

directamente con la anterior, pues depende de la percepción del tiempo dentro de la obra por

parte de los intérpretes, el tiempo total de la obra. Cada intérprete tiene su propia opinión

sobre la duración de la pieza: ya sea que opinen que es muy extensa, que es muy corta, que

tiene un pulso lento, o que es muy dinámica, por lo que la temporalidad de la pieza es

totalmente subjetiva, pues pueden ser 17 minutos muy largos y desperdiciados, o 17 minutos

que se sienten como 5. La tercera experiencia temporal es atribuida al espectador, su

percepción de la duración de la obra puede diferir en mucho con la percepción de duración

del intérprete y con la duración condicionada al reloj.

Cualquiera de las experiencias de temporalidad antes mencionadas son experimentadas

por cualquier tipo de coro, ya sea tradicional o, como en este caso, contemporáneo. Caminito

Page 5: Caminito Feliz, Coro Contemporáneo

5

Feliz no sólo aborda la polifonía y la temporalidad, sino que usa también un recurso extra,

ajeno a los coros tradicionales: la espacialidad. El desplazamiento y la trasgresión del espacio

son características y exigencias de esta pieza, las cuales pueden llegar a alterar la percepción

del tiempo dentro y fuera de la obra.

Conclusión

Caminito Feliz no obedece a ningún convencionalismo en cuanto actividad coral, pero sí

pude ser analizada bajo conceptos aptos para observar cualquier obra de arte. Es importante

mencionar que no es posible sólo tomar en cuenta la subjetividad del espectador ante la pieza,

pues por su naturaleza se le suma toda una colección de subjetividades por parte de los

intérpretes, los cuales tendrían su propia versión sobre los elementos lúdico, simbólico y de

fiesta que puedan encontrar en la obra.

La labor artística de un coro difiere con las demás artes respecto a su contenido social,

por el hecho de llevarse a cabo en equipo. Caminito Feliz, por su exigencia vocal, corporal y

gestual, es una pieza que puede ayudar a definir las convicciones del grupo y el compromiso

de cada intérprete ante el arte contemporáneo y ante sus compañeros; esto se manifiesta desde

la calidad de los dibujos y firmeza de la propuesta hasta en su interpretación. Lo anterior

quiere decir que la complejidad de la pieza radica en cuestiones sociales internas y las

características del ensamble, más que en las características de la misma pieza.