friday, 03 de february de 2012 - binasss
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REVISTA MEDICA DE COSTA RICA Y CENTROAMERICA LVI (548) 99-103;1999
OBSTETRICIA
TRAUMA EN LA
EMBARAZADA
Ronny Calderón Hernóndez (*)Alberto Calderón Zúñiga (* *)
(*) Médico Cirujano(**) Ginecólogo Obstetra, Jefe de Clínica de Ginecología ai. Instituto Materno Infantil Dr.Adolfo Cant Eva
Trauma during pregnancy is the
leading cause of non-obstetrical
maternal death. Preventive
measures such as safety res
traint systems, compliance of
traffic laws, early identification
of domestic violence are part of
the obligatory education for the
pregnant patient during the pre
nal visits. Once trauma has oc
curred, a well organized team
management in essential to ob
taio the best results. The first
priority is always to stabilize
and treat the mother, only then
attention should be focus to the
fetus.
El trauma,accidental O intencional
es la principal causa de muerte noobstétrica en la mujer embarazada(8). El desprendimiento prematuro de placenta se presenta en el40-50% de los traumas severos y
sólo en el 1-5% de los traumas leves (11). La asistencia de traumatismos durante el embarazo obligaa conocer los cambios fisiológicospropios de tal etapa. Virtualmentetodos los sistemas en la mujer seven afectados, siendo el cardiopulmonar el que exibe los mayores cambios. La mayoría de loscambios están establecidos al finalizar el primer trimestre y los efec-
tos pico se notan en el segundo y
tercer trimestre (4, 7, 14, 16, 18).La volemia materna aumenta e 30a 40% mientras que la eritropoyesis sólo 10-15%, lo cual produceuna "anemia fisiológica".(4.7,14,16,18). Como consecuencia del incremento de volumen, la inestabilidad hemodinámica se hace clínicamente evidente hasta que las pérdidas de sangrese aproximen a los 1500-2000 mI,aproximadamente el 30% del volumen circulante. El gasto cardiaco empieza a elevarse en el primertrimestre y se encuentra 50% sobre los valores normales a las 3032 semanas de gestación. Las resistencias vasculares periféricas y
pulmonares disminuyen por la vasodi1atación inducida por la pro
gesterona. Hay un aumento de 1015 latidos por minuto en la frecuencia cardiaca y la presión arte
rial alcanza sus niveles más bajosen la semana 28 y retoma a los ni
veles pregestacionales al final delembarazo.El consumo de oxígeno aumenta20% por encima de los niveles de
la mujer no gestante al final delembarazo por aumento de deman
das metabólicas. Todos estos
cambios fisiológicos y otros anatómicos pueden enmascarar o simular una lesión y dar lugar a interpretaciones erróneas. A pesarde que el feto puede ser la segun
da víctima, se concede prioridad ala reanimación intensiva de la ma
dre porque en definitiva conllevael mejor pronóstico para el feto
(1,16). Es importante considerar
la viabilidad fetal en el momentode enfrentarse a una mujer gestante traumatizada. Algunos centros
consideran viable un feto cuandoha sobrepasado las 24 semanas
(l ,16). La presencia de un fetoviable es una llave importante enel manejo de numerosas situacio
nes catastróficas que envuelven ala mujer embarazada. Es difícilresolver la situación clínica de la
mujer embarazada víctima de
trauma, ya que hay que tratar simultáneamente a dos pacientesque mantienen entre sí una rela
ción compleja, pero si se atiendeel principio de que lo mejor para
la madre es también lo mejor para
el feto, se obtendrán resultados satisfactorios. Es raro conseguir un
neonato vivo si no hay una madreVlVa.
Es indispensable la intervenciónespecializada multidisciplinaria
en estas pacientes, que involucreal técnico de emergencias, al obstetra, el cirujano traumatólogo y
otros especialistas de acuerdo al
tipo de trauma, ya que solo así selogra una asistencia óptima para la
madre y aumenta las posibilidades
de que el embarazo termine satisfactoriamente (1). El objetivo dela presente revisión es el de actua
lizar a la comunidad médica obstétrica y personal dedicado al ma
nejo de trauma, a fin de realizarestudios futuros en nuestro paíssobre este creciente problema e
implementar protocolos de manejo multidisciplinario en los dife
rentes centros de salud.
INCIDENCIA Y MAGNITUD
DEL PROBLEMAEl trauma durante el embarazo
ocurre en el 6-7% de todos los em
barazos (5.17). En general se habla de una mortalidad materna de10% atribuible casi siempre a le
siones craneoencefálicas, cifra similar al del total de muertes des
crito en Jos centros de traumatología (10). Hay estudios en los cuales no se encontró diferencia esta
dística en la mortalidad por trauma entre las gestantes con respec
to a las no embarazadas, lo cualsugiere que el embarazo no reper-
cute significativamente en el pronóstico materno cuando sufre untraumatismo y es asistida en un
centro en el cual el diagnóstico yel tratamiento se hacen en forma
oportuna.
TIPOS DE TRAUMASISTEMA NERVIOSO
CENTRAL
Médula Espinal:Es relativamente frecuente su apa
rición bien sea como lesión únicao acompañada a otras lesiones.Deben sospecharse siempre, prin
cipalmente ante la presencia de unshock neurogénico. Lesiones a nivel de C3-C6 pueden afectar eldiafragma y la respiración por lo
que está indicado la ventilación
temprana.
Trauma Cráneo Encefálico:El traumatismo craneo encefálicose puede dividir en dos tipos:
a. Leves: donde solo existen lesiones superficiales sin daños
significativos. No hay fractura
de cráneo, ni pérdida de conciencia.
b. Graves: cuando existen fracturas de cráneo, inconciencia, dé
ficit neurológico, midriasis, anisocoria etc. Los signos vitales
suelen ser anormales con pulsobajo, respiraciones lentas, rápidas y arrítmicas.
La valoración de la paciente con
CALOEROH, (ALOEROH: TRAUMA EN LA EMBARAZADA mtraumatismo se mlcla con la exploración nellrológica exaustiva(Glasgow) para establecer su esta
do neurológico basal, a pesar deque estlldios han demostrado el
poco valor predictivo para anticipar resultados obstétricos adversos
o necesidad de monitoreo prolongado mediante cardiotocografía
(3)
TRAUMAS NO
PENETRANTES:La primera causa de traumatismono penetrante es la colisión en au
tomóviles (40%), siguiéndole las
caídas (30%). La violencia doméstica ha alcanzado niveles alar
mantes y segCm varios reportes oscila entre 1 y 20% (12). Es funda
mental valorar en todos estos ca
sos: la edad gestacional, la extensión y severidad de la lesión ma
terna y el mecanismo de la lesión(1). Las lesiones craneoencefáli
cas son la principal causa de morbi mortalidad. Lesiones intraabdominales también deben descar
tarse despllés de lln trallma abdominal no penetrante. Es más fre
cliente la hemorragia intra y retroperitoneal por el aumento de los
órganos pélvicos, ingllfgitación delas venas pélvicas y el gran riegosanguíneo. Se ha demostrado que
las vísceras más afectadas durante
el trauma no penetrante son las lesiones hepáticas, esplénicas, renales y pan creáticas. El desp~endi
miento de placenta normoinserta
puede darse cuando la placenta rí
gida se separa de lln miométrio
elástico al defonnarse este por él
impacto y los efectos fetalesusualmente son graves. La ruptu
ra uterina se da más frecuentemente en las pacientes con cesáreas
anteriores. Existen evidencias deque el cintllr6n de segllridad prote
ge a la madre y al feto (6) pero de
be instruirse a las pacientes a usarla parte horizontal del cinturón ba
jo el abdomen a nivel de las espinas ihacas y la sínfisis púbica y la
porción superior entre las mamas.
TRAUMAS PENETRANTES:
Son debidos principalmente a he
ridas causadas por annas de fuego,
heridas por arma blanca o lesiones
autoinflingidas por embarazos no
deseados. La mortalidad fetal se
debe al parto prematuro o a una le
sión fetal directa. Los órganos
matemos afectados en orden de
creciente son: intestino delgado,
hígado, colon y estómago. Si el
útero se lesiona, la mortalidad fe
tal varía de un 40 a
70%.
QUEMADURAS:
Son raras. Estudios han demostra
do qlle las qllemadllfas que afectan
menos de la tercera parte de la su
perficie corporal no repercuten so
bre el embarazo. Se ha descrito
una mortalidad materna cercana al
40% en quemaduras mayores al
60% de la superficie corporal,
siendo la mortalidad fetal del 47%
ESTUDIO DEL FETOEl monitoreo fetal electrónico enembarazos mayores a las 20 sema
nas es de suma importancia, y
puede ser predictivo de abrnptio
placentae. Dicha complicación noocumó en pacientes con actividad
uterina menor a I cada 10 minutosdurante 4 horas en contraste con
lln 20% en aquellas con dinámicamayor (2,17). Esta técnica debeser contínua y debe mantenerse
mientras se llevan a cabo todos los
pasos diagnóstico y terapéuticos.Los elementos a examinar son la
frecuencia cardiaca basal, la varia
bilidad a corto y largo plazo) laexistencia o no de desaceleracio
nes. El LISO de la llltrasonografíano parece ser tan sensitivo como la
cardiotocografía (2, 11, 17). Sin
embargo es útil en determinaredad del embarazo, localizaciónplacentaria, bienestar fetal y muer
te fetal.
ABORDAJE:El propósito inicial es estabilizar
el estado general de la paciente.Debe hacerse una valoración rápi
da para establecer su estado deconciencia, respiratorio y cardio
vascular. Se debe evalllar frecuencia respiratoria, cardiaca, y reflejos pupilares.
a. Vías aéreas y respiración:Debe administrarse oxígeno al100% con mascarilla.Mínimoscambios en sangre materna pue
den acarrear variaciones apreciables en el contenido y reserva feta-
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les. La intubación endotraqueal serealizará en cuanto el caso lo amerite. El uso de gasometría arterialy el oxímetro de pulso deben sersistemáticos en estas pacientes
CIRCULACIÓN Y SHOCK:
La hipervolemia del embarazo
puede enmascarar los signos clási
cos de shock hasta que existan
pérdidas agudas de lOa 20% o
paulatinas hasta de 35%.EI shock
materno acarrea una mortalidad
fetal de hasta un 85%. Se deben
colocar dos vías venosas de grue
so calibre. El mejor líquido intra
venoso es el lactato de Ringer. La
solución salina en gran cantidad
puede someter a la madre y el feto
a una acidosis hiperclorémica.
Hemorragias importantes exigen
transfusión inmediata. No se
aconsejan vasopresores en el trata
miento inicial del shock a excep
ción del shock cardiogénico o le
siones de la médula espinal con
shock neurogénico asociado. La
dopamina tiene pocos efectos so
bre el riego sanguíneo uterino pe
ro eleva la presión arterial media
de la embarazada. Deberá colo
carse una sonda nasogástrica en la
paciente inconciente que sufrió
trauma abdominal grave. También
debe colocarse una sonda Foley,
estudiar por hematuria y diuresis
horaria. Si no se obtiene orina de.
be pensarse en ruptura vesical.
PRUEBAS TÉCNICAS YDIAGNÓSTICAS:
Una vez estabilizados madre y feto deben someterse a un segundoestudio mediante pruebas técnicasy diagnósticas adecuadas que, sinser excesivas, no dejen de omitirlas indispensables (1). Dicha evaluación debe incluir una cuidadosavaloración fetal. El embarazo nodebe alterar el manejo y evaluación de la paciente traumatizada.La tomografía axial computarizada puede realizarse en casos detrauma importante. Dicho estudioexpone al feto a aproximadamente3.5 rad dependiendo del númerode tomas, de la cercanía al útero y
del equipo. Exposición fetal mayor de 20 rads puede inducir efectos adversos (2) El lavado peritoneal abierto puede ser efectivo enel diagnóstico de hemorragia in
traperitoneal durante el embarazo(1). Está indicado en: signos abdominales sugestivos de sangradointraperitoneal, alteración de laconciencia, shock de causa inexplicab�e, trauma torácico masivo ylesiones ortopédicas múltiples.Las radiografías son útiles en casos de heridas penetrantes talescomo proyectiles. La laparotomíaselectiva puede ser de gran utilidad en heridas por armas de fuego(1) Heridas por arma blanca queno aparentan haber penetrado másallá de pared abdominal puedenmanejarse conservadoramente,aunque evidencias de penetraciónperitoneal , signos de hemorragiay lesión intestinal, exigen emplo-
raclOn quirúrgica.(13). El fetousualmente tolera bien la cirugía yla anestesia, siempre y cuando semantenga adecuada oxigenación yperfusión uterina. La utilizacióndel Doppler transoperatoriamentecubierto por un plástico estéril esrecomendada por algunos autores(1). Cuando el útero ha sido penetrado por un proyectil, el feto puede estar lesionado en grados diversos. Si permanece vivo, la decisión de practicar una cesarea debevalorarse de acuerdo a la viabilidad. Todas estas decisiones debenser tomadas en conjunto con un cirujano traumatólogo. La existencia de shock refractario a la reani
mación enérgica es, para algunosautores, motivo de intervenciónquirúrgica, debiendo descartarseantes un shock neurógeno o embolias de líquido amniótico. Noexiste suficiente literatura ni protocolos sobre el practicar cesareaperimortem. Con base a casos aislados, puede considerarse su real ización en los cuatro minutos siguientes a que la madre haya experimentado paro cardiopulmonaren el tercer trimestre.
Los traumatismos durante el embarazo representan hoy la causaprincipal de muerte materna noobstétrica. Medidas preventivascomo el uso adecuado del cinturónde seguridad, el respeto a las leyesde tránsito, la identificación e in
tervención temprana en casos de
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son medidas educativas obligatorias que debe implementar todo
obstetra con su paciente en la consulta prenatal. Una vez ocurridoel trauma, un abordaje organizado,
por un equipo multidisciplinarioes de suma importancia para obte
ner resultados óptimos. Las primeras medidas deben ir siempre
dirigidas a la estabilización materna y una vez logrado esto, debe
enfocarse la atención al feto.
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