alopecia edition 2016

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  • 8/18/2019 ALOPECIA EDITION 2016

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    Indicaciones para la correctasolicitud de pruebas de

    diagnóstico por la imagen (parte I):cabeza, cuello y tórax

    Introducción

    Este trabajo se centra en las indicaciones de las ex-

    ploraciones radiológicas que habitualmente utilizan

    los profesionales de atención primaria (AP).Las indicaciones que se han estudiado se han prio-

    rizado teniendo en cuenta tanto su prevalencia, co-

    mo su impacto en la práctica asistencial de AP.

    Metodología

    Revisión bibliográfica

    IntroducciónPara elaborar las indicaciones de las exploraciones

    radiológicas en cada condición (signo/síntoma o en-

    fermedad), se ha realizado una revisión bibliográfica

    con el objetivo de identificar la evidencia que sus-

    tente por orden de prioridad:

    — Si la utilización de una determinada prueba mejo-

    ra la evolución de un determinado proceso.

    — La capacidad diagnóstica de cada exploración.

    Tipo de estudios

    Se ha priorizado la localización de guías de práctica

    clínica (GPC) y otros recursos secundarios de infor-

    mación clínica basados en la evidencia, en primer

    lugar, continuando por revisiones sistemáticas (RS)

    tanto de estudios sobre intervención, como de vali-

    dez de pruebas diagnósticas, ya sean de tipo trans-

    versal como prospectivos1.

    Fuentes de información

    A partir del listado inicial de temas, se ha realiza-do una consulta siguiendo el orden propuesto por

    Dicenso et al2 y adaptado por el equipo redactor en

    las fuentes de información siguientes:

    — UptoDate.

    — Dynamed.

    — Tripdatabase, en busca de GPC basadas en laevidencia y RS (Dare, Cochrane Library y otras).

    — Guiasalud en busca de GPC publicadas en español.

    — Excelencia clínica.

    — ACP-Journal Club.

    — Essential Evidence plus.

    — Google académico.

    — También se consultó la GPC del Colegio de Ra-

    diología británico (Making the best use of clinical ra-

    diology services).

    En caso de no localizar suficiente evidencia en es-

    tas fuentes secundarias, completamos la búsque-

    da en bases de datos primarias como Medline/Pub-

    Med, IME e Ibecs.

    Idioma

    Se han seleccionado las referencias publicadas en

    español, inglés y francés.

    Período de la búsqueda

    El período de la búsqueda inicial fue hasta enero del2011. Se ha mantenido una alerta bibliográfica hasta

    la fecha de remisión del trabajo a imprenta.

    Formulación de lasrecomendaciones sobre lasindicaciones de la radiología

    La graduación de las recomendaciones sobre los

    estudios de pruebas diagnósticas es un tema con-

    trovertido que a día de hoy no se ha resuelto com-pletamente3. Por otro lado, la proliferación de siste-

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    mas de clasificar la evidencia produce desconcierto

    y desorienta a los clínicos4. Los efectos de la utili-

    zación incorrecta o sin justificar de un sistema pue-den tener más inconvenientes que la no utilización

    de sistema alguno. Además, las GPC consultadas

    presentan variabilidad en su graduación de reco-

    mendaciones, e incluso algunas no utilizan ningún

    sistema.

    El equipo redactor de esta revisión ha optado por no

    utilizar los sistemas clásicos de letras o números pa-

    ra clasificar la evidencia. Las recomendaciones se

    han adaptado de las GPC originales o de las RS. En

    la tabla 1 se resumen estas indicaciones.

    Cabeza y cuello

    Cefalea

    Presentación del tema

    La cefalea es una de las afecciones más frecuentes

    de la raza humana. Los estudios sobre la prevalen-

    cia de dolor de cabeza de cualquier tipo en estudios

    poblacionales han estimado las frecuencias del 11-48% en niños y del 6-71% en adultos5.

    El 90% de las cefaleas corresponde a cefaleas benig-

    nas, como la migraña, la cefalea tensional o la cefalea

    en racimos. De ellos, la cefalea tensional es el trastor-

    no más prevalente (38%) a nivel poblacional, mientras

    que la migraña lo es en estudios realizados en unida-

    des de AP (5% de las cefaleas consultadas)6.

    Con mucha menor frecuencia, la cefalea se debe a

    otras causas. En un estudio realizado en unidades

    de AP de Brasil, en el 39% de los pacientes con do-

    lor de cabeza se debía a una enfermedad sistémica

    (por lo general, la fiebre, la hipertensión aguda y lasinusitis), y un 5% a un trastorno neurológico6.

    La incidencia anual de tumores cerebrales en Esta-

    dos Unidos es de 46 por 100.000 personas. En una

    revisión retrospectiva de 111 tumores cerebrales, eldolor de cabeza era un síntoma en el 48% de és-

    tos. La incidencia anual de hemorragia subaracnoi-

    dea (HSA) (por aneurismas o en menor frecuencia

    por malformaciones arteriovenosas) es de 9 por

    100.000 personas5.

    En el abordaje de la cefalea y la necesidad de so-

    licitar pruebas complementarias, es fundamen-

    tal la aproximación diagnóstica a través de la his-

    toria clínica y la presencia o no de signos de

    alarma7.

    Cefalea aguda súbita

    Aun en ausencia de signos de focalidad neurológi-

    ca, esta presentación obliga a descartar HSA7 a par-

    tir de un estudio prospectivo.

    Todas las fuentes consultadas recomiendan el uso

    de pruebas de neuroimagen, de las cuales la tomo-

    grafía computarizada (TC) es la prueba de elección.

    Un estudio de pruebas diagnósticas atribuye a la TC

    un valor predictivo negativo (VPN) del 97,5%8. Si és-

    te fuera negativo, se recomienda la punción lum-

    bar6,7,9,10

    .Si se ha descartado la HSA, podría considerarse la

    resonancia magnética (RM), la cual tiene un mejor

    rendimiento diagnóstico que la TC para descartar

    causas inflamatorias10.

    Cefalea aguda recurrente

    Si se asocia a síntomas recogidos en el acrónimo

    POUND (pulsátil, duración de horas, unilateral náu-

    seas y disabling /incapacitante)11, probablemente se

    trate de una migraña.

    Todas las fuentes consultadas coinciden en no indi-car pruebas de neuroimagen si la historia de migraña

    Tabla 1. Graduación de recomendaciones sobre las indicaciones de pruebas de imagen

    Recomendación Significado

    Indicada Opción inequívoca con acuerdo entre las distintasfuentes consultadas

    Indicada 1.ª opción Ordena la selección cuando existen más de unaposibilidad con dificultad para la elección

    Indicada 2.ª opción Ordena la elección cuando existen más de unaposibilidad con dificultad para la elección

    Indicada en determinadas circunstancias Matiza la indicación por existir condiciones relativasa la disponibilidad de la prueba o situación delpaciente que así lo precisan

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    es clara y no hay síntomas ni signos de alarma.

    Podría considerarse en casos de presentación atí-

    pica.

    Cefalea crónica progresiva

    Las fuentes consultadas coinciden en señalar la

    conveniencia de solicitar pruebas de neuroimagen

    ante la presencia de signos predictores de anormali-

    dad intracraneal.

    Una RS11 de estudios prospectivos de diferente cali-

    dad analiza el valor de los hallazgos clínicos como

    predictores de anormalidad intracraneal, en una po-

    blación de 3.725 pacientes con cefalea, tanto ambu-

    latorios, hospitalizados, como atendidos en urgen-

    cias. Los hallazgos con mayor razón de verosimilitud

    positiva (LR+) en orden decreciente son: a) cefalea

    tipo cefalea en racimos; b)  presencia de signos fo-cales neurológicos; c)  cefalea atípica, y d) cefalea

    agravada por el ejercicio. Sin embargo, el hallazgo

    más robusto (el más consistente entre todos los es-

    tudios y referenciado en los estudios de más cali-

    dad) es la presencia de signos anormales en la ex-

    ploración neurológica con una LR+ 5,3 (intervalo de

    confianza [IC] del 95%, 2,4-12).

    Cefalea crónica estable

    Típicamente conocida como cefalea tensional. En au-

    sencia de signos de focalidad neurológica, las prue-

    bas de imagen no están habitualmente indicadas.

    Sin embargo, la RM podría reducir los costes aso-

    ciados a la atención sanitaria en pacientes con cefa-

    lea crónica y altos niveles de ansiedad7, a partir de

    los resultados de un ensayo clínico aleatorizado

    (ECA) (tabla 2).

    Demencia

    Presentación del tema

    En la población europea, se estima una prevalencia

    de demencia entre el 5,9 y el 9,4% en mayores de65 años; la prevalencia se duplica aproximadamente

    cada 5 años. Los estudios en España han mostrado

    cifras que oscilan entre el 5 y el 14,9% en personas

    mayores de 65 años, y entre el 6,6 y el 17,2% para

    personas mayores de 70 años12.

    En cuanto al tipo de demencia, la más frecuente es

    la enfermedad de Alzheimer (EA), cuya prevalencia

    en España se sitúa alrededor del 6% en el grupo de

    personas mayores de 70 años, y que representa el

    70% de las demencias; seguida de la demencia vas-

    cular (DV), en torno al 12,5-27% de las demencias,

    y la demencia por cuerpos de Lewy (DLB), en tornoal 8,9%. La degeneración lobular frontotemporal en

    un estudio realizado en Barcelona mostró una pre-

    valencia de 0,3%12.

    Las demencias secundarias potencialmente reversi-

    bles son infrecuentes7,12-14 y son realmente reversi-

    bles una proporción inferior al 1% en algunos estu-

    dios12,13; por otro lado, entre el 2,2 y el 5% de los ca-

    sos con sospecha de demencia presentan

    trastornos que requieren de la neuroimagen estruc-

    tural para su diagnóstico14.

    Pruebas de neuroimagen estructural

    Tomografía computarizada o resonanciamagnética

    Son un complemento a otras herramientas de diag-

    nóstico y tiene dos finalidades10,12-17:

    Tabla 2. Recomendaciones de pruebas de imagen en la cefalea

    Motivo de consulta/sospecha diagnóstica Opción 1.ª Opción 2.ªIndicada en determinadas

    circunstancias

    Cefalea aguda súbita TC RMa

    Cefalea aguda recurrente Ninguna TC/RMb

    Cefalea crónica progresiva TC/RMc

    Cefalea crónica estable Ninguna RMd

    HSA: hemorragia subaracnoidea; RM: resonancia magnética; TC: tomografía computarizada.aSi la HSA ha sido descartada.bPodría considerarse ante presentación atípica de migraña.cIndicada sobre todo ante presencia de focalidad neurológica.dPuede ser coste-efectiva en pacientes con alto componente de ansiedad.

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    — Descartar causas tratables de demencia (tumo-

    res, hidrocefalia crónica del adulto, hematoma sub-dural).

    — Aportar información para el diagnóstico diferen-

    cial entre los subtipos de demencias.

    En la actualidad, en la mayoría de las GPC2-16,18  se

    aconseja realizar pruebas de neuroimagen en el estu-

    dio de un paciente con sospecha de demencia; otros

    autores19  lo recomiendan en casos seleccionados a

    partir de reglas de predicción clínica, en función, entre

    otros, de la edad (< 60 años), la duración de la demen-

    cia (< 2 años), el rápido declinar cognitivo o funcional,

    etc. Sin embargo, la sensibilidad (S) y la especificidad

    (E) de estas reglas de predicción es baja13-15,18.

    La RM es más sensible para detectar cambios vas-

    culares subcorticales12,14,16, atrofia del hipocampo12,16 

    y enfermedad de Creutzfeldt-Jakob (ECJ)12,16, por lo

    que en algunas guías14,17 es preferible a la TC. En la

    ECJ, la RM con secuencias de difusión parece apor-

    tar una sensibilidad diagnóstica mayor12,17.

    Pruebas de neuroimagen funcional

    Tomografía computarizada por emisiónde fotones (SPECT) y tomografía poremisión de positrones (PET)

    Se pueden emplear como complemento a la neuro-

    imagen estructural para apoyar el diagnóstico o para

    ayudar a diferenciar entre distintos tipos de demen-

    cia cuando el diagnóstico es incierto10,12-17. No se re-

    comienda su uso de forma sistemática, ni tampoco

    como herramienta única de diagnóstico12,15,18.

    La SPECT con transportador de dopamina (123I-FP-CIT

    SPECT) puede apoyar el diagnóstico de DLB y ayudar

    a distinguirla de la EA10,12,17, con una S y E de alrededordel 85% (tabla 3)16.

    Rinosinusitis

    Presentación del tema

    La rinosinusitis es la inflamación sintomática de la

    cavidad nasal y senos paranasales7,20,21, y es el tér-

    mino que actualmente sustituye al de sinusitis, dado

    que la inflamación de los senos raramente ocurre

    sin la inflamación concurrente de la mucosa na-

    sal20,22,23.

    Clasificación en función de la duración

    de los síntomas7,20-22

    — Rinosinusitis aguda : < 4 semanas.

    — Rinosinusitis subaguda: entre 4 y 12 semanas.

    — Rinosinusitis crónica: > 12 semanas.

    — Rinosinusitis aguda recurrente: 4 o más episodios

    al año con recuperación completa entre ellos; cada

    episodio dura al menos 7 días.

    Rinosinusitis aguda

    La etiología más frecuente de la rinosinusitis aguda

    (RSA) es la infección vírica asociada al catarro co-mún, y habitualmente se resuelve en 7-10 días. La

    RSA vírica se complica con una infección bacteriana

    en sólo el 0,5-2% de los episodios. La RSA bacteria-

    na (RSAB) también es autolimitada en la mayoría de

    los casos, con una resolución del 75% de los casos

    sin tratamiento en un mes. Raramente se desarrolla

    una complicación seria en pacientes con infección

    bacteriana no tratada20.

    La incidencia de la RSAB es difícil de obtener con

    precisión, dado que no todos los pacientes buscan

    atención médica23.

    En medicina general, la proporción de pacientesadultos con sospecha clínica de sinusitis que pueden

    Tabla 3. Recomendaciones de pruebas de imagen en la demencia y enfermedad de Creutzfeld-Jakob

    Motivo de consulta/sospecha diagnóstica Opción 1.ª Opción 2.ªIndicada en determinadas

    circunstancias

    Demencia RM o TC sin

    contrasteaSPECT/PETb

    ECJ RM consecuenciasde difusión

    ECJ: enfermedad de Creutzfeldt-Jakob; PET: tomografía computarizada por emisión de positrones; RM: resonancia magnética; SPECT:

    tomografía computarizada por emisión de fotones; TC: tomografía computarizada.aSobre todo para identificar lesiones tratables por cirugía y enfermedades vasculares.bEn centros especializados como complemento de la imagen estructural para aumentar la especificidad en casos de diagnóstico

    diferencial difícil.

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    tener una RSAB es variable entre los estudios por

    los diferentes criterios empleados, tanto de selección

    de pacientes, como diagnósticos; desde el 3824 hasta

    el 50% de prevalencia de enfermedad bacteriana de-

    terminada por punción del seno y cultivo25.

    A pesar de las limitaciones, para un diagnóstico pre-ciso de los criterios clínicos basados en los sínto-

    mas y su duración, el diagnóstico de sinusitis es

    eminentemente clínico20,21,23.

    El estudio radiológico no es necesario en la evalua-

    ción de la RSA no complicada7,20-23,25-27. Las pruebas

    de imagen no permiten diferenciar entre una RSA ví-

    rica y bacteriana7,26.

    Radiología simple

    Comparada con la punción del seno y cultivo (méto-do de referencia), presenta un coeficiente de proba-

    bilidad positivo (CPP) de 4,2 (IC del 95%, 2,6-6,7) y

    un coeficiente de probabilidad negativo (CPN) de

    0,26 (IC del 95%, 0,17-0,37)25. Su S y E para prede-

    cir un resultado positivo de la punción son modera-

    das, del 73 y el 80%, respectivamente21,27 en la sinu-

    sitis maxilar, siendo menores en la sinusitis frontal y

    etmoidal21.

    Para la mayoría de las guías consultadas, es una

    prueba no indicada por su imprecisión y por no ser

    coste-efectiva10,20,21,26, aunque algunos autores acep-

    tan el resultado anormal de la radiografía (presencia

    de nivel hidroaéreo u opacificación completa del se-

    no) para confirmar el diagnóstico de RSAB en pa-

    cientes con síntomas compatibles23,27.

    Tomografía computarizada de senos paranasales

    Suministra mejor información sobre la anatomía del

    hueso y senos paranasales10,26,27. No obstante,

    el diagnóstico de sinusitis no debe realizarse sólo a

    partir de hallazgos de pruebas de imagen, sino que

    también deben interpretarse junto con la clínica.

    Hasta un 40% de adultos asintomáticos presenta

    anormalidades en la TC de senos y más del 80% de

    aquéllos con infección menor del tracto respiratoriosuperior.

    Se utiliza principalmente ante sospecha de compli-

    caciones (presencia de disminución agudeza visual,

    diplopia, edema periorbital, cefalea grave, afectación

    del estado mental, etc.) o de tumor malig-

    no10,20,21,23,26,27, y se considera la prueba de imagen

    de elección sin necesidad de contraste para algunas

    de las guías consultadas20,26  y con contraste en

    otras21,23.

    Resonancia magnética

    Puede proporcionar información complementaria a

    la TC, por su mejor resolución para los tejidos blan-

    dos en la evaluación de las complicaciones de la

    RSA20,26.

    Rinosinusitis crónica

    La TC de senos paranasales sin contraste es la

    prueba de elección en pacientes con sinusitis aguda

    recurrente o sinusitis crónica o para el estudio ana-

    tómico previo a la cirugía21,23,26 (tabla 4).

    Tiroides

    Nódulo tiroideo

    En este apartado nos referiremos tanto al palpable,

    como al no palpable o incidentaloma.

    Tabla 4. Recomendaciones de pruebas de imagen en la rinosinusitis aguda y crónica

    Motivo de consulta/sospecha diagnóstica Opción 1.ª Opción 2.ªIndicada en determinadas

    circunstancias

    RSA No indicadoestudioradiológico

    TCa

    RMb

    RSC TC

    RM: resonancia magnética; RSA: rinosinusitis aguda; RSC: rinosinusitis crónica; TC: tomografía computarizada.aSospecha de complicaciones.bComplementario a TC en la evaluación de complicaciones.

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    FMC – Protocolos

    14

    La prevalencia varía, ya que en estudios poblacio-

    nales se sitúa en torno al 6,4% en mujeres y el

    1,5% en varones, y aumenta con la edad, con ante-

    cedentes de radiación ionizante y el déficit de yodo,

    mientras que en estudios realizados a través de

    exámenes médicos que incluyen ecografía tiroi-dea la prevalencia en las mujeres aumenta a un

    20-76%28,29.

    Su importancia clínica está relacionada principal-

    mente con la necesidad de excluir el cáncer de tiroi-

    des, que representa el 4,0-6,5% de todos los nódu-

    los tiroideos en series no quirúrgicas30.

    La evaluación inicial en todos los pacientes con un

    nódulo tiroideo, tanto palpable, como hallazgo ca-

    sual o incidentaloma, incluye7,28,30 una historia clínica

    y un examen físico. Aunque el valor predictivo es ba-

     jo, hay varias características de la evaluación clínica

    que indican una probabilidad de malignidad mayor30.La medición de la hormona tirotrópica (TSH) se de-

    be realizar porque su nivel es un factor de riesgo in-

    dependiente para predecir la malignidad de un nó-

    dulo tiroideo: mayor probabilidad con valores más al-

    tos de TSH30.

    Ecografía

    Aunque la punción aspirativa con aguja fina (PAAF)

    es la prueba más coste-efectiva para determinar

    malignidad, la ecografía permite seleccionar los nó-

    dulos puncionables, con lo que así aumenta la ren-

    tabilidad de la PAAF según los criterios siguien-

    tes7,10,30,31:

    a) Nódulos sólidos (palpables/no palpables).

    — Hipoecogénicos: > 1 cm.

    — Iso-hiperecogénicos: > 1,5 cm.

    b) Nódulos sólido-quísticos: > 2 cm.

    c) Nódulos puramente quísticos: no requieren biop-

    sia.

    Además, la ecografía permite distinguir las masas ti-

    roideas de las extratiroideas; sirve de guía para la

    PAAF de nódulos no palpables o de áreas específi-

    cas de nódulos grandes; para detectar linfadenopa-

    tía asociada a cáncer tiroideo, y para valorar recu-

    rrencias de cáncer ya diagnosticado31.

    Gammagrafía

    Permite determinar el estado funcional del nódulo.

    Ante TSH baja, la confirmación gammagráfica de

    nódulo hiperfuncionante disminuye la probabilidadde malignidad y, por tanto, la necesidad de PAAF. En

    pacientes con nódulos tiroideos múltiples, permite

    seleccionar los que son hipofuncionantes y, por tan-

    to, requerirían PAAF30.

    Bocio

    El aumento de tamaño tiroideo es una afección muy

    frecuente (con características endémicas en muchos

    países europeos) y en muy pocos casos se asocia a

    malignidad. La ecografía no es coste-efectiva en la

    evaluación de pacientes con bocio. A pesar de ello,

    dada su inocuidad, su uso en la valoración del bocio

    se ha generalizado, realizándose esta prueba en la

    mayor parte de los casos.

    — Puede ser útil en la evaluación de un bocio con

    zonas de consistencia dura a la palpación31 (tabla 5).

    — Puede identificar, dentro de un bocio multinodu-lar, los nódulos que son dominantes y cuyo riesgo

    de malignidad a partir de un estudio retrospectivo es

    similar a los nódulos solitarios31.

    — Si hay sospecha de crecimiento intratorácico, se

    puede utilizar radiografía para visualizar tanto el en-

    sanchamiento mediastínico, como el estrechamiento

    de la vía aérea. Sin embargo, la medida del bocio y

    su efecto en las estructuras circundantes se evalúan

    mejor por TC o RM10,32.

    Masa en el cuello

    Presentación del tema

    El diagnóstico diferencial de masas en el cuello con-

    templa tres categorías33:

    — Masas congénitas: suelen estar presentes en el

    nacimiento, pero puede presentarse a cualquier

    edad. Los quistes de la hendidura, quistes del con-

    ducto tirogloso, las anomalías vasculares, laringoce-le, ránula (mucocele), teratoma, quiste dermoide y

    del timo.

    — Masas inflamatorias: linfadenopatía viral general-

    mente reactiva y linfadenopatía supurativa.

    — Masas neoplásicas: enfermedad metastásica (en

    su mayoría relacionada con el carcinoma escamoso

    del tracto digestivo), tumores de tiroides, paragan-

    gliomas,  schwannomas, linfomas y tumores de las

    glándulas salivares (aproximadamente el 80% de los

    tumores salivales surgen en la glándula parótida, de

    los cuales un 80% son de naturaleza benigna. La

    malignidad es más frecuente en los tumores de laglándula submandibular).

  • 8/18/2019 ALOPECIA EDITION 2016

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    FMC – Protocolos

    15

    En los adultos, una masa en el cuello es más proba-

    ble que sea inflamatoria, sobre todo si cursa con fie-

    bre, o neoplásica, sobre todo si hay antecedentes

    de tabaquismo34. Por ello, se recomienda un aborda- je completo y protocolizado que incluya pruebas de

    imagen.

    Ecografía

    Es más utilizada en Europa que en Estados Unidos.

    — Ventajas: su naturaleza no invasiva, la capacidad

    para guiar fácilmente las aspiraciones con aguja fi-

    na, la capacidad para diferenciar entre lesiones sóli-

    das y quísticas, así como la capacidad para diferen-

    ciar entre malformaciones vasculares de flujo alto y

    bajo34,35.

    — Desventajas: dependencia de la experiencia del

    radiólogo35.

    Tomografía computarizada

    Es la prueba de elección35. La utilización de contras-

    te intravenoso mejora la rentabilidad de la prueba,

    ya que permite evaluar los márgenes del tumor y es

    esencial para detectar abscesos cervicales, así co-

    mo para distinguir los vasos de los ganglios linfáti-

    cos ante masas pulsátiles, por lo que, en ausenciade contraindicación, la TC con contraste es de pri-

    mera elección en la mayoría de los pacientes34,35.

    Por el contrario, el contraste puede ocultar la visuali-

    zación de sialolitos, por lo que si hay sospecha de li-

    tiasis salivar, se recomienda TC sin contraste. Igual-

    mente, no se ha de utilizar contraste iodado en estu-

    dio tiroideo34.

    Tomografía computarizadamultidetector

    Actualmente parece ser la modalidad preferida parala evaluación inicial de un paciente con un nódulo

    palpable, ya que la mayor velocidad en adquisición

    de imágenes de la TC multidetector permite reducir

    los artefactos por los movimientos fisiológicos respi-

    ratorios y produce una calidad de imagen mayor encomparación con la RM34.

    Resonancia magnética

    Tiene la ventaja de una mejor resolución para los te-

     jidos blandos, así como un mejor rendimiento ante la

    sospecha de diseminación perineural34,36  y la falta

    de radiación ionizante34. Como desventaja, el coste35 

    del estudio.

    AngiografíaSu papel para el diagnóstico inicial es muy limitado34.

    Angiotomografía computarizada

    Es la técnica de imagen inicial para evaluar una ma-

    sa cervical pulsátil (tumor glómico, aneurisma), que

    parece preferible a la angio-RM para estas indica-

    ciones34.

    Tomografía computarizada poremisión de positrones/tomografíacomputarizada

    Aunque es útil para la evaluación posterior de los

    tumores malignos, desempeña un papel menor en

    la evaluación inicial de la masa en el cuello34,35. La

    elección de la prueba de imagen vendrá determi-

    nada por la conjunción de hallazgos derivados por

    la exploración física y la historia clínica, lo cual

    conforma variantes diferentes: masa pulsátil, masa

    no pulsátil con o sin fiebre, masas múltiples y ma-

    sa en paciente con antecedentes de cáncer34  (ta-bla 6).

    Tabla 5. Recomendaciones de pruebas de imagen en el bocio y nódulos tiroideos

    Motivo de consulta/sospecha diagnóstica Opción 1.ª Opción 2.ªIndicada en determinadas

    circunstancias

    Nódulo tiorideo palpable o incidentaloma Ecografía GGa

    Bocio Ecografíab

    TC/RMc

    GG: gammagrafía; RM: resonancia magnética; TC: tomografía computarizada; TSH: hormona tirotrópica.aAumento de TSH o presencia de nódulos múltiples.bEvaluación de una región de bocio de características especiales a la palpación.cSi presenta síntomas obstructivos con sospecha de crecimiento de bocio intratorácico.

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    FMC – Protocolos

    16

    Tórax

    Dolor torácico

    Presentación del tema

    El dolor torácico representa hasta un 2,7% de las

    consultas en AP37.

    En todas las fuentes consultadas, la etiología más

    frecuente es el dolor de naturaleza osteomuscular

    presente en un amplio grupo de pacientes que osci-

    la entre un 21 y un 50% de los casos. Le siguen en

    frecuencia el dolor torácico debido a causas digesti-

    vas y el ocasionado por enfermedad cardiovascular,

    con porcentajes similares en torno al 15% de los ca-

    sos. La cuarta posición la ocupan los problemas psi-

    quiátricos, que representan un 7%, y en último lugar

    las causas respiratorias, con un 5% aproximada-

    mente37-39

    .En este apartado señalaremos la utilidad de las

    pruebas radiológicas en las enfermedades más

    importantes que conforman los grupos menciona-

    dos, a excepción del dolor torácico de causa os-

    teomuscular.

    Dolor torácico de origen digestivo

    Reflujo gastroesofágico

    Es la causa digestiva más frecuente de dolor toráci-

    co. La radiología no está indicada para su diagnósti-co40-42.

    Espasmo esofágico y otras alteracionesmotoras

    Esofagograma baritado

    Hay un trabajo que señala que  el diagnóstico se

    sustenta en la historia clínica y los estudios mano-

    métricos, dado que los hallazgos, si los hay, en los

    estudios baritados son muy variables y poco especí-

    ficos43. Sin embargo, hay varios trabajos que, aun

    afirmando que la manometría es la forma más preci-

    sa de diagnosticar estos trastornos, antes de reali-

    zarla aconsejan practicar una radiografía barita-

    da44-46. En una guía de disfagia se señala que el

    esofagograma de doble contraste tiene una S y una

    E cercanas al 90% para los trastornos de motilidad

    esofágica, y pueden revelar alteraciones que no se

    han detectado en estudios manométricos47.

    Cuerpo extraño esofágico

    Radiografía póstero-anterior y lateral

    Indicada para visualizar el cuerpo extraño y buscar

    signos de rotura o mediastinitis. La radiografía barita-

    da no está indicada porque dificulta la endoscopia48.

    Tomografía computarizada torácica

    En un estudio de coste-efectividad en que se com-

    para la radiografía de tórax y la TC torácica frente a

    la endoscopia (método de referencia), los autores

    señalan que la radiografía es la prueba estándar pa-

    ra el diagnóstico, pero por su baja sensibilidad se

    puede considerar la TC como primera alternativa siestá disponible49 (tabla 7).

    Tabla 6. Recomendaciones de pruebas de imagen ante la presencia de una masa en cuello

    Motivo de consulta/sospechadiagnóstica

    Opción 1.ª Opción 2.ªIndicada en determinadas

    circunstancias

    Masa cervical solitaria/múltiple

    (con/sin fiebre)

    TC con

    contraste

    Ecografíaa RM con contrasteb

    TC sin contrastec

    Masa cervical pulsátil TC concontraste/angio-TCd

    Ecografía RM con contraste

    Masa en el cuello con antecedentesde cáncer

    TC concontraste/PETe

    Ecografíaf RM con contraste

    PET: tomografía computarizada por emisión de positrones; RM: resonancia magnética; TC: tomografía computarizada.aPuede ser una alternativa si no se dispone de TC/RM. Utilizada como guía para la biopsia con aguja f ina.bMejor resolución para los tejidos blandos. Ante sospecha de diseminación perineural.cSi la relación con la glándula tiroides es dudosa o se sospecha existencia de sialolito.dIndicadas ambas de forma complementaria.eIndicadas ambas de forma complementaria.f Utilizada como guía para la biopsia.

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    FMC – Protocolos

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    Dolor torácico de origen cardiovascular

    Cardiopatía isquémica

    Radiografía póstero-anterior y lateral

    Indicada en dolor de reciente inicio de probable ori-

    gen isquémico si hay sospecha de complicaciones,

    como edema agudo de pulmón o fallo cardíaco50.

    Disección aórtica

    Radiografía póstero-anterior y lateral

    Indicada de inicio a la búsqueda de ensanchamiento

    mediastínico, aunque entre el 11 y el 20% resultaría

    normal51,52.

    Tomografía computarizada con contraste

     yodado

    Tiene una alta S (83-98%) y E (87-100%), y parece

    que aún se obtienen mejores resultados con la

    TC helicoidal. Por sus buenos resultados y su dis-

    ponibilidad, es considerada como la prueba de

    inicio51,52.

    Resonancia magnética

    Presenta una S y E del 100%, pero, por la falta de

    disponibilidad, sus contraindicaciones y el tiempo

    requerido para su realización no la consideran de

    primera elección y sí adecuada para el seguimien-

    to de pacientes estables y con disecciones cróni-

    cas51,52.

    Ecocardiografía transesofágica multiplano

    Tiene una alta S y E, cercanas al 99%, pero precisa

    de profesionales altamente cualificados; además

    hay zonas ciegas en aorta ascendente que puedendar lugar a falsos positivos51,52.

    Valvulopatías

    Las lesiones valvulares, sobre todo aórticas y en

    menor medida mitrales, pueden ser causa de dolor

    torácico. El dolor es de tipo anginoso53.

    Ecocardiografía

    Se considera la prueba de inicio para el estudio de

    las valvulopatías en sus múltiples variantes, incluida

    la ecocardiografía Doppler53-57.

    Tomografía computarizada y resonancia magnética

    No están indicadas de entrada, sus hallazgos mues-

    tran buena concordancia con la ecocardiografía y

    tienen interés para valorar la raíz aórtica y la aorta

    ascendente56,57.

    Pericarditis

    Radiografía

    Las fuentes consultadas señalan que se debe reali-

    zar en los pacientes con sospecha de pericarditis

    para valorar la existencia de derrame pericárdico,

    aunque con frecuencia es normal. Es necesario un

    derrame pericárdico mayor de 200 μl para que sepueda apreciar un agrandamiento de la silueta car-

    díaca58-60.

    Ecocardiografía

    Se considera la prueba indicada para evaluar a to-

    dos los pacientes con sospecha de enfermedad pe-

    ricárdica. Es muy útil para observar la existencia de

    derrame pericárdico y la existencia de enfermedad

    cardíaca o paracardíaca concomitante58-61.

    Tomografía computarizada y resonancia magnética

    Se consideran pruebas opcionales si el resto no sonconcluyentes60 (tabla 8).

    Tabla 7. Recomendaciones de pruebas de imagen ante la sospecha de etiología digestiva del dolor torácico

    Motivo de consulta/sospecha diagnóstica Opción 1.ª Opción 2.ªIndicada en determinadas

    circunstancias

    Reflujo gastroesofágicoa

    Espasmo esofágico y otras alteracionesmotoras esofágicas

    Esofagograma dedoble contraste

    Cuerpo extraño esofágico/roturaesofágica/mediastinitis

    Rx de tórax, PAy Lb

    TC torácicac

    L: lateral; PA: póstero-anterior; Rx: radiografía; TC: tomografía computarizada.aPruebas radiológicas no indicadas.bVisualización del cuerpo extraño y búsqueda de signos de rotura o mediastinitis.cSi hay dudas tras radiografía y disponibilidad.

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    18

    Dolor torácico de origen respiratorio

    Neumonía

    Ver “Neumonía”.

    Tromboembolia pulmonar 

    Ver “Disnea”.

    Neumotórax 

    Ver “Disnea”.

    Cáncer de pulmón

    Ver “Cáncer de pulmón”.

    Patología pleural/derrame pleural 

    Ver “Derrame pleural”.

    Sarcoidosis

    En el 90% de los casos de sarcoidosis hay afecta-

    ción pulmonar y es muy frecuente (50%) que su

    diagnóstico se realice de forma casual en pacientesasintomáticos después de realizar una radiografía

    de tórax por cualquier otra causa. Los síntomas res-

    piratorios incluyen la existencia de tos, disnea y do-

    lor torácico62,63.

    Radiografía póstero-anterior y lateral

    Permite además definir el estadio de la afectación

    pulmonar62,63.

    Tomografía computarizada de alta resolución

    No debe utilizarse de modo sistemático. Se puede

    considerar en los pacientes con hallazgos radiológi-

    cos atípicos, en los que hay fuerte sospecha de en-

    fermedad y la radiología de tórax es negativa, o en

    los casos de sospecha de coexistencia con otrasenfermedades pulmonares62,63 (tabla 9).

    Disnea

    Presentación del tema

    La disnea es una experiencia subjetiva de malestar

    ocasionado por la respiración que engloba sensa-

    ciones cualitativas distintas que varían en intensi-

    dad. Esta experiencia se origina a partir de interac-

    ciones entre factores fisiológicos, psicológicos, so-ciales y ambientales múltiples, que pueden a su vez

    Tabla 8. Recomendaciones de pruebas de imagen ante la sospecha de etiología cardiovasculardel dolor torácico

    Motivo de consulta/sospecha diagnóstica Opción 1.ª Opción 2.ªIndicada en determinadas

    circunstancias

    Cardiopatía isquémica Rx de tórax, PA y La

    Disección de aorta Rx de tórax, PA y Lb RMd

    TC con contrasteyodadoc

    Ecocardiografíatransesofágica multiplanoe

    Valvulopatías Ecocardiografía TC y RMf

    Pericarditis Rx de tórax, PA y Lg TC y RMi

    Ecocardiografíah

    E: especificidad; EAP: edema agudo de pulmón; L: lateral; PA: póstero-anterior; Rx: radiografía; S: sensibilidad; TC: tomografía

    computarizada.aRealizar ante sospecha de complicaciones, como EAP o insuficiencia cardíaca.bUn 11-20% resulta normal,cMejores resultados la TC helicoidal. Considerada de primera elección.dS y E 100%, pero por su falta de disponibilidad, contraindicaciones y larga duración, no se considera de primera elección y sí adecuada

    para el seguimiento en pacientes con procesos crónicos y estables.eAlta S y E, pero precisa de profesionales muy cualificados. Falsos positivos.fValoración de raíz aórtica. Buena concordancia con la ecocardiografía.gCon frecuencia es normal, se necesitan 200 μl de derrame para apreciar agrandamiento de la silueta cardíaca.hValoración de derrame y de enfermedad paracardíaca.iSi el resto de pruebas no es concluyente.

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    FMC – Protocolos

    19

    inducir respuestas fisiológicas a comportamientos

    secundarios64.

    La prevalencia de la disnea en AP es de un 1%. La

    etiología más frecuente en AP es la causa respirato-

    ria (tabla 10).

    La radiografía de tórax en la disnea raramente sirve

    para hacer un diagnóstico no sospechado. Sin em-

    bargo, su práctica es habitual en estos pacientes y,

    en ocasiones, sirve para encontrar hallazgos poco

    frecuentes65,66.

    A continuación, se comenta el valor de las explora-

    ciones radiológicas (radiografía y TC) en algunas de

    las causas de disnea más importantes para un mé-

    dico de familia.

    Insuficiencia cardíaca

    Ver “Insuficiencia cardíaca”.

    Enfermedad pulmonar obstructiva crónica

    Aunque sin valor para el diagnóstico de la enferme-

    dad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), la biblio-

    grafía revisada coincide en recomendar la realiza-

    ción de una radiografía de tórax en el momento del

    diagnóstico con la finalidad de descartar otras enfer-

    medades, así como en el caso de que se produzcan

    complicaciones de la enfermedad67-70.

    AsmaMisma recomendación que en el caso anterior71-73.

    Tromboembolia pulmonar

    El conocimiento de la probabilidad de experimen-

    tar cualquier trastorno (probabilidad preprueba) es

    necesario antes de solicitar cualquier prueba diag-

    nóstica. En el caso de la tromboembolia pulmonar

    (TEP), se recomienda estimar la probabilidad pre-

    prueba mediante reglas de predicción o el mejor

     juicio clínico74. En el caso de clasificar a un pacien-

    te como de baja probabilidad, previamente a las

    pruebas de imagen se recomienda realizar el dí-mero-D75.

    Tabla 10. Etiología de la disnea en atenciónprimaria

    Muy frecuentesBronquitis/bronquiolitis aguda (27%)Asma (10%)Insuficiencia cardíaca (9%)Menos frecuentes

    Enfermedad pulmonar obstructiva crónicaNeumoníaInfección respiratoria de las vías altasHiperventilaciónExcepcionalesTromboembolia pulmonarNeumotóraxDerrame pleuralDerrame pericárdico

    Modificada de Dyspnea64.

    Tabla 9. Recomendaciones de pruebas de imagen ante la sospecha de etiología pulmonardel dolor torácico

    Motivo de consulta/sospecha diagnóstica Opción 1.ª Opción 2.ªIndicada en determinadas

    circunstancias

    Sarcoidosis Rx de tórax, PAy La

    TC torácica de altaresoluciónb

    Neumonía Véase tabla 18

    TEP Véase tabla 11

    Neumotórax Véase tabla 11

    Cáncer de pulmón Véase tabla 19

    Patología pleural Véase tabla 14

    L: lateral; PA: póstero-anterior; Rx: radiografía; TC: tomografía computarizada; TEP: tromboembolia pulmonar.aDiagnóstico y estadio de enfermedad pulmonar.bDudas diagnósticas o enfermedad pulmonar asociada.

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    Radiografía de tórax 

    Los hallazgos en la radiografía de tórax que se han

    relacionado clásicamente con la TEP obtienen ba-

     jos coeficientes de probabilidad (CP): derrame

    pleural (CPP 1,4), atelectasia lineal (CPP 2,1) yelevación del hemidiafragma (CPP 2,0). En este

    caso, la radiografía sólo es útil al inicio del estudio

    del paciente con disnea para confirmar diagnósti-

    cos alternativos a la TEP, como el neumotórax o la

    neumonía74-76.

     Angio-TC (multidetector)

    Constituye la prueba de elección en el estudio de la

    sospecha de TEP. Su S y E son del 83 y el 96%,

    respectivamente. El valor predictivo positivo (VPP)en un paciente con una TC positiva es de entre el 58

    y el 96%, según la probabilidad preprueba. Por con-

    tra, el VPN es del 96, el 89 y el 60%, respectivamen-

    te10,74,75.

    Gammagrafía pulmonar 

    Después de realizar esta prueba, una alta propor-

    ción de pacientes se encuentra con una probabili-

    dad entre un 15 y un 85% que resulta insuficiente

    por si sólo para tomar decisiones. La realización de

    esta prueba quedaría relegada al segundo lugar en

    aquellas situaciones en las que la angio-TC multide-

    tector no está disponible o cuando haya contraindi-

    cación para su utilización (insuficiencia renal, alergia

    al contraste o dificultades en el acceso veno-

    so)10,74,75,77,78.

    Neumotórax espontáneo

    Radiografía

    — Bipedestación e inspiratoria póstero-anterior (PA)

    es la forma indicada de realizarla. Su S y E es próxi-

    ma al 100%

    79-82

    .— Bipedestación y espiratoria PA. No está indicada

    dada su dificultad para realizarla correctamente y no

    haber demostrado beneficio adicional con su reali-

    zación79,80.

    — Bipedestación y L. Puede contribuir al diagnóstico

    en los casos de duda, pero no debe realizarse de

    forma sistemática79,80.

    — Decúbito supino y L. Aporta menor S y se ha utili-

    zado en los pacientes con traumatismo a los que no

    es posible movilizar79,80.

    Tomografía computarizada

    Se considera el método de referencia en la detec-

    ción de neumotórax. Debe indicarse cuando la ra-

    diografía no detecta el neumotórax y hay una alta

    sospecha clínica de su existencia (tabla 11).

    Insuficiencia cardíaca

    Presentación del tema

    La insuficiencia cardíaca es un síndrome clínico en

    el que los pacientes presentan las características si-

    guientes: síntomas como falta de aire en reposo o

    durante el ejercicio; signos de retención de líquidos,

    como congestión pulmonar o edemas en extremida-

    des inferiores, y evidencia objetiva de una alteración

    cardíaca estructural o funcional en reposo83.

    Tabla 11. Recomendaciones de pruebas de imagen ante la disnea

    Motivo de consulta/sospecha diagnóstica Opción 1.ª Opción 2.ªIndicada en determinadas

    circunstancias

    EPOC Rx de tóraxa

    Asma Rx de tóraxa

    TEP Rx de tóraxa

    Angio-TCmultidetector

    GGb

    Neumotórax Rx de tóraxestándar

    TCc

    EPOC: enfermedad pulmonar obstructiva crónica; GG: gammagrafía; Rx: radiografía; TC: tomografía computarizada; TEP: tromboembolia

    pulmonar.aRecomendado para descartar otra enfermedad.bEn aquellas situaciones en las que el angio-TC multidetector no está disponible o cuando haya contraindicación para su utilización.cConsiderada prueba oro, se reserva para cuando la radiografía es negativa en pacientes con alta sospecha clínica.

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    FMC – Protocolos

    22

    asociada a diferentes procesos. Mientras los derra-

    mes bilaterales no se asocian generalmente a enfer-

    medad pulmonar o pleural, no ocurre lo mismo en

    los derrames unilaterales90. Las causas más fre-

    cuentes son la insuficiencia cardíaca, la neumonía y

    la afección tumoral

    91

    .El proceso diagnóstico del derrame pleural comien-

    za con la realización de la anamnesis, la exploración

    física del paciente y el estudio mediante una radio-

    grafía de tórax. En los casos en los que no haya una

    enfermedad que justifique el derrame (cardíaca, re-

    nal, hepática) o no haya una respuesta adecuada al

    tratamiento, se valorará llevar a cabo una toracocen-

    tesis diagnóstica. En ocasiones, es preciso hacer

    otras pruebas complementarias, como la TC toráci-

    ca, la biopsia pleural, la toracoscopia o la broncos-

    copia91.

    La radiografía de tórax y la TC torácica son las prue-bas de imagen que se utilizan inicialmente para va-

    lorar el derrame pleural. La ecografía y la RM son

    pruebas que también podrían utilizarse en determi-

    nadas circunstancias92.

    Radiografía

    La afección del espacio pleural es fácilmente detec-

    table por la radiografía convencional92. Es preciso un

    mínimo de 200 ml para que sea visible en la radio-

    grafía de tórax PA, mientras que 50 ml pueden vi-

    sualizarse en la radiografía L en el ángulo costofré-

    nico posterior93. La radiografía puede orientar hacia

    la etiología del derrame; una masa podría ser sos-

    pechosa de malignidad, mientras que un engrosa-

    miento pleural puede ser resultado de un empiema,

    tuberculosis (TBC) o mesotelioma. Los procesos in-

    fecciosos pueden ocasionar un derrame metaneu-

    mónico90.

    Los derrames subpulmonares elevan la base del

    pulmón y se visualizan en la radiografía PA de tórax

    como elevaciones de la cúpula diafragmática92.

    En todos los pacientes con sospecha de derramepleural debería realizarse una radiografía PA y L90,92,93.

    Ecocardiografía

    La ecografía permite identificar fácilmente la presen-

    cia de líquido libre o derrames encapsulados y facili-

    ta el diagnóstico entre un derrame encapsulado y

    una masa sólida92.

    La ecografía es superior a la radiografía para diag-

    nosticar y cuantificar el derrame pleural y diferenciar

    líquido pleural de engrosamientos de la pleural, asícomo para detectar pequeños derrames. Es más

    sensible que la TC torácica para detectar derrames

    encapsulados93.

    Permite identificar derrames exudativos cuando el lí-

    quido es complejo, está encapsulado o es ecogéni-

    co; sin embargo, un líquido anecoico puede ser tan-

    to un exudado, como un trasudado

    93

    .La ecografía tiene una S del 79% y una E del 100%

    (IC del 95%, 82-100) para diferenciar un derrame

    pleural de origen benigno y maligno93.

    Por otro lado, la aspiración guiada por ecografía fa-

    cilita la punción del derrame y reduce el riesgo de

    punción del pulmón93.

    Tomografía computarizada

    La realización de la TC torácica con contraste debe

    ser previa al drenaje completo del líquido pleural pa-

    ra que la enfermedad que afecte a la pleura puedavisualizarse mejor. La TC es útil para el diagnóstico

    de empiema y para el diagnóstico diferencial entre

    empiema y absceso pulmonar.

    Algunos hallazgos de la TC con contraste, como el

    engrosamiento pleural nodular, circunferencial, el

    engrosamiento pleural mediastínico o el parietal ma-

    yor de 1 cm, son indicativos de malignidad, con una

    S del 94, el 100, el 94 y el 88%, respectivamente, y

    una E del 51, el 41, el 36 y el 45%, respectivamente.

    Sin embargo, la TC no permite diferenciar el meso-

    telioma de metástasis pleurales. La TC es una prue-

    ba que debe realizarse durante el estudio de todos

    los derrames pleurales que no estén diagnostica-

    dos93.

    También estaría indicada cuando la historia clíni-

    ca es indicativa de embolia pulmonar (ver TEP)

    (tabla 14).

    Tos

    Presentación del tema

    La tos es un mecanismo reflejo protector de la vía

    aérea, cuya finalidad es limpiar el árbol traqueobron-

    quial de las partículas extrañas, facilitando la elimi-

    nación de las secreciones94. Se clasifica a partir de

    la duración del síntoma en: aguda (< 3 semanas),

    subaguda (3-8 semanas) y crónica (> 8 sema-

    nas)94-97.

    Tos aguda

    En AP la causa más frecuente de tos aguda es la

    infección respiratoria97,98. En general, es un procesobenigno y autolimitado, que no requiere estudios

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    FMC – Protocolos

    23

    adicionales. En los casos en los que se asocia a

    hemoptisis, fiebre, dolor torácico, pérdida de peso y

    disnea, estaría indicada la realización de una radio-

    grafía de tórax inicial95.

    Tos crónica

    La prevalencia de tos crónica varía entre el 3 y el

    40%98, según diferentes estudios poblacionales.

    Las causas más frecuentes se muestran en la ta-

    bla 15.

    Otras causas menos frecuentes son la neoplasia

    pulmonar, TBC e insuficiencia cardíaca. En los pa-

    cientes con tos crónica, la historia clínica debe in-

    cluir el antecedente de la posible toma de inhibido-

    res de la enzima de conversión de la angiotensina y

    la existencia previa al inicio de la tos de un procesoinfeccioso de las vías respiratorias altas97.

    Radiografía de tórax 

    Debe realizarse en todas las personas con tos de

    más de 8 semanas de duración94-97,99,100. En pacien-

    tes con radiografía normal, las causas más frecuen-

    tes de tos son la rinitis, el asma y la enfermedad porreflujo gastroesofágico97,99. En un estudio se indica

    que el 31% de radiografías realizadas en pacientes

    con tos persistente presenta hallazgos radiológicos

    anormales95. En función de los hallazgos patológi-

    cos y la sospecha clínica, se deben realizar otras

    exploraciones adicionales (ver neoplasia de pulmón,

    insuficiencia cardíaca) (tabla 16).

    Hemoptisis

    Presentación del tema

    Se denomina así a la expulsión de sangre proce-

    dente del árbol bronquial o del pulmón, habitualmen-

    te con la tos. Se excluye de este manual el estudio

    de la hemoptisis masiva, la cual según la bibliografía

    se define entre 100 μl y 1 l/24 h, y un volumen acep-

    tado generalmente es el de 300 μl101-104.

    En AP la causa más frecuente de hemoptisis son las

    infecciones respiratorias, tanto altas como bajas, se-

    guidas del asma, la EPOC y las neoplasias105.

    A continuación veremos las pruebas de imagen queresultan útiles en el estudio inicial de la hemoptisis.

    Tabla 15. Etiología de la tos crónica98

    Rinitis 34%Asma 25%Enfermedad por reflujo gastroesofágico 20%

    Bronquitis crónica 12-16%Tos postinfecciosa 13-27%Bronquiectasias 4-18%Bronquitis eosinófila 13%

    Tabla 14. Recomendaciones de pruebas de imagen ante la sospecha de derrame pleural

    Motivo de consulta/sospecha diagnóstica Opción 1.ª Opción 2.ªIndicada en determinadas

    circunstancias

    Sospecha de derrame pleural Rx de tórax Ecografíaa 

    TC con contrasteb

    Rx: radiografía; TC: tomografía computarizada.aDerrames pequeños, guía para el drenaje.bDerrames no diagnosticados, sospecha de tromboembolia pulmonar.

    Tabla 16. Recomendaciones de pruebas de imagen ante la tos

    Motivo de consulta/sospecha diagnóstica Opción 1.ª Opción 2.ªIndicada en determinadas

    circunstancias

    Tos aguda Rx de tórax*

    Tos crónica Rx de tórax

    Rx: radiografía.*En caso de hemoptisis, fiebre, dolor torácico, pérdida de peso.

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    FMC – Protocolos

    24

    La clínica, la edad y los posibles factores de riesgo

    del paciente concreto dirigirán los estudios más per-

    tinentes y su orden en cada caso.

    Radiografía

    Indicada inicialmente, ya que puede dar lugar a ha-

    llazgos que orienten el diagnóstico, como es el caso

    de una masa pulmonar o una infección localizada.

    Sin embargo, hasta el 40% de los casos presentará

    una radiografía normal y, entre estos, un 5-6% pue-

    den tener una neoplasia102-104.

    Tomografía computarizada

    Su uso permite detectar fácilmente algunos de los

    procesos más frecuentes que dan origen a la he-

    moptisis (masas pulmonares, bronquiectasias o

    TBC). En algunos estudios la angio-TC multidetec-

    tor se considera como la prueba más fiable en el

    estudio de la hemoptisis102,104 (tabla 17).

    Neumonía adquiridaen la comunidad

    Presentación del tema

    La neumonía adquirida en la comunidad es la infec-

    ción aguda del parénquima pulmonar que se ha ad-

    quirido en la comunidad, en contraposición a la que

    se ha adquirido en el hospital106.

    No hay acuerdo sobre si la realización de pruebas

    de imagen es imprescindible para confirmar la im-presión clínica10,106-110.

    Radiografía

    En la bibliografía hay acuerdo en que es el método

    de referencia para el diagnóstico de la neumonía106,107.

    Se han ensayado varias reglas de predicción basa-

    das en datos clínicos, con una S entre el 91 y el 92%

    y una E entre el 40 y el 56%, respecto a la radiogra-

    fía, por lo que disponer de una radiografía que nos

    confirme o descarte la neumonía nos será muy útil

    para evitar sobretratamientos con antibióticos110.

    Tomografía computarizada

    La realización de una TC de alta resolución podría

    mejorar ligeramente la sensibilidad diagnóstica de la

    radiografía, por lo que en caso de duda podría estar

    indicado realizar una TC106,110 (tabla 18).

    Cáncer de pulmón

    Presentación del tema

    La sospecha deberá surgir en pacientes de más de

    45 años y fumadores que presenten alguno de los

    síntomas siguientes111:

    — Cambios en la tos habitual.

    — Neumonías de repetición.

    — Hemoptisis.

    — Pérdida de peso y mal estado general.

    Las pruebas radiológicas indicadas son las siguien-tes10,110.

    Tabla 17. Recomendaciones de pruebas de imagen ante la hemoptisis

    Motivo de consulta/sospecha diagnóstica Opción 1.ª Opción 2.ªIndicada en determinadas

    circunstancias

    Hemoptisis Rx de tórax TC*

    Rx: radiografía; TC: tomografía computarizada.

    *Sin diagnóstico tras la Rx de tórax.

    Tabla 18. Recomendaciones de pruebas de imagen ante la sospecha de neumonía

    Motivo de consulta/sospecha diagnóstica Opción 1.ª Opción 2.ªIndicada en determinadas

    circunstancias

    Neumonía Rx de tórax TC*

    Rx: radiografía; TC: tomografía computarizada.

    *En caso de duda tras la Rx.

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    FMC – Protocolos

    25

    Radiografía

    Debe ser la prueba inicial cuando haya sospecha.

    Sin embargo, se deberá continuar el estudio cuando

    la sospecha clínica sea importante y no se aprecie

    lesión en la radiografía.

    Tomografía computarizada

    Su utilización temprana puede aumentar la sensibili-

    dad en los casos de sospecha no comprobada con

    la radiografía (tabla 19).

    Tuberculosis pulmonary torácica

    Presentación del tema

    La TBC sigue siendo un problema de salud impor-tante en nuestro medio y presenta una localización

    pulmonar en el 82% de los casos108. Las localiza-

    ciones torácicas pueden dar lugar a formas de pre-

    sentación distintas, con afectación tanto del parén-

    quima pulmonar, como de otras estructuras: bron-

    quios, ganglios mediastínicos, pleura o incluso

    pericardio.

    Radiografía

    Es la prueba de imagen de elección. En los casosde presentación extratorácicas, la realización de una

    radiografía de tórax está también siempre indicada

    para descartar la coexistencia con una TBC pulmo-

    nar y el riesgo de contagio112-116.

    Tomografía computarizada y resonanciamagnética

    Se han de reservar para los casos en los que haya

    una sospecha clínica fundada y la radiografía o las

    pruebas microbiológicas no resulten diagnósticas.

    Por el contrario, en las formas de presentación ex-

    tratorácica resultan de gran utilidad112-114. La TC to-

    rácica se puede contemplar en niños con contac-

    to con TBC, tuberculina positiva que presenten o

    no clínica, y con radiografía normal o dudosa113 (ta-

    bla 20).

    Afección de la mama

    Presentación del tema

    La afección mamaria es muy variada, e incluye des-

    de procesos banales, hasta neoplásicos. En este

    apartado haremos alusión a los que consideramos

    más habituales.

    Mastalgia

    Es un motivo frecuente de consulta que puede de-

    berse a múltiples causas (premenstrual, quistes

    ductales, mamas pendulares, etc.)117-119. Hay diver-

    sos trabajos que señalan que la existencia de uncáncer de mama entre las mujeres que consultan

    Tabla 19. Recomendaciones de pruebas de imagen ante la sospecha de cáncer de pulmón

    Motivo de consulta/sospecha diagnóstica Opción 1.ª Opción 2.ªIndicada en determinadas

    circunstancias

    Cáncer de pulmón Rx de tórax TC

    Rx: radiografía; TC: tomografía computarizada.

    Tabla 20. Recomendaciones de pruebas de imagen ante la sospecha de tuberculosis pulmonar

    Motivo de consulta/sospecha diagnóstica Opción 1.ª Opción 2.ªIndicada en determinadas

    circunstancias

    TBC torácica Rx de tóraxa  TCb

    RMb

    RM: resonancia magnética; Rx: radiografía; TC: tomografía computarizada.aIndicada también en formas en formas extratorácicas para descartar enfermedad pulmonar.

    bEn casos de sospecha y duda diagnóstica.

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    FMC – Protocolos

    26

    por mastalgia oscila entre el 1,2 y el 7% de los ca-

    sos; la mastalgia suele ser unifocal y mantenida117,118.

    Los pilares diagnósticos son la historia clínica y la

    exploración117-119.

    EcografíaEstá indicada cuando es unifocal, mantenida y no

    hay causas aparentes, independientemente de la

    edad117-119.

    Mamografía

    Indicada en los mismos casos en mujeres con histo-

    ria familiar de cáncer de mama temprano y puede

    ser también considerada de inicio en las mujeres

    mayores de 30 años117,119.

    Mastitis y abscesos mamarios

    Son inflamaciones del tejido mamario que pueden

    estar asociados o no a procesos infecciosos. Los

    abscesos mamarios, la mayor parte de las veces,

    constituyen una complicación de las mastitis119.

    Ecografía

    Está indicada tanto para el diagnóstico ante una

    sospecha de absceso mamario, como para el drena-

     je guiado de la colección de pus120,121.

    Pezones invertidos

    Pueden ser unilaterales o bilaterales, congénitos o

    adquiridos, y dentro de los adquiridos pueden ser

    benignos (progresivos y relacionados con la edad) o

    malignos. Cuando los cambios suceden rápidamen-

    te, pueden estar en relación con enfermedades co-

    mo ectasia ductal, mastitis periductal, necrosis gra-

    sa o a un proceso maligno subyacente122

    .

    Ecografía y/o mamografía

    Indicadas cuando los cambios suceden en un espa-

    cio de tiempo corto para descartar enfermedad

    neoplásica122.

    Telorrea

    Fuera de la lactancia, la telorrea benigna suele ser

    bilateral, espontánea, de textura lechosa y colora-ción variable; puede deberse a múltiples causas

    (endocrinológicas, traumáticas o farmacológicas,

    entre otras). La secreción unilateral, espontánea,

    uniductal y de aspecto seroso, hemático o serohe-

    mático, es más sospechosa de malignidad; en el

    50% de los casos se debe a un papiloma intraduc-

    tal, mientras que en el 5-10% de los casos se debea un carcinoma ductal in situ117,118,121,122.

    Ecografía y/o mamografía

    Indicadas en el estudio de secreciones sospecho-

    sas de malignidad117,122,123.

    Resonancia magnética

    Pueden estar indicadas en el estudio de estos pro-

    cesos según los hallazgos o a criterio del radiólo-

    go117,122,123.

    Bultos palpables en el pecho

    La existencia de bultos palpables en las mamas es un

    hecho frecuente. El 90% de los casos en mujeres en-

    tre 20 y 50 años corresponde a lesiones benignas122.

    Sin embargo, la posibilidad de que se deban a un

    cáncer de mama hace necesario un estudio detallado

    de ellos. Las pruebas de imagen constituyen un pun-

    to muy importante en la valoración, y ocupan un lugar

    destacado la mamografía y la ecografía. La elección

    de una u otra opción para iniciar el estudio depende,

    en gran medida, de la edad de la paciente que condi-

    ciona, además de otros factores, la densidad de las

    mamas, la cual es mayor en las pacientes más jóve-

    nes y disminuye la S de la mamografía para detectar

    lesiones. Por otra parte, las pacientes jóvenes pre-

    sentan un riesgo menor de experimentar un proceso

    neoplásico122,124-127.

    Mamografía

    Indicada de inicio en mujeres mayores de 30 añoscon masa palpable. Está también indicada en muje-

    res menores de 30 años que presenten lesiones

    sospechosas o dudosas de malignidad después de

    realizar una ecografía inicial118,124-126.

    Ecografía

    Indicada de inicio en las mujeres menores de 30

    años y en las mujeres embarazadas que presentan

    masas palpables. La ecografía permite además dife-

    renciar si se trata de una masa sólida o quística, lo

    cual permite la toma de biopsias dirigidas o la aspi-ración y/o vaciado del contenido quístico. Su realiza-

  • 8/18/2019 ALOPECIA EDITION 2016

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    FMC – Protocolos

    27

    ción está también indicada después de mamografía

    anormal en mujeres mayores de 30 años, con el ob-

     jeto de buscar una concordancia en los hal laz-

    gos118,124-126.

    Resonancia magnética

    Su papel es controvertido en el estudio de las ma-

    sas mamarias. Presenta un alto índice de falsos po-

    sitivos, por ello no debe indicarse de forma sistemá-

    tica en el estudio inicial de estos procesos. Debe

    restringirse a los casos en los que haya discordan-

    cia entre la exploración clínica y los hallazgos en la

    mamografía y/o la ecografía, así como para las pa-

    cientes en las que la densidad de las mamas dificul-

    ta la mamografía119,122,124,127-131. La RM en la mama

    debería realizarse siempre y cuando se tenga la po-sibilidad de hacer biopsia guiada por RM de las zo-

    nas sospechosas, y que tal vez no sea posible ver-

    las con otras pruebas de imagen122 (tabla 21).

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    Tabla 21. Recomendaciones de pruebas de imagen en la patología de la mama

    Motivo de consulta/sospecha diagnóstica Opción 1.ª Opción 2.ªIndicada en determinadas

    circunstancias

    Mastalgia Ecografíaa

    Mamografíab

    Mastitis/abscesos Ecografíac

    Inversión del pezón Ecografía y/o mamografía

    Telorrea Ecografía y/o mamografíae

    RMf

    Masa palpable Ecografíag

    MamografíahRMi

    RM: resonancia magnética.aUnifocal, mantenida y sin causa aparente.bMismas situaciones en mujeres con historia familiar de cáncer de mama temprano, o de inicio en mayores de 30 años.cSospecha de absceso, permite aspiración guiada.d

    Si se produce en corto espacio de tiempo.eSi hay sospecha de malignidad.fSegún los hallazgos de pruebas previas, a criterio del radiólogo.gDe inicio en mujeres menores de 30 años, embarazadas. Tras mamografía en mujeres mayores de 30 años.hDe inicio en mujeres mayores de 30 años y en menores de 30 años, si hay duda diagnóstica tras ecografía de inicio.iRealizar si hay dudas diagnósticas tras radiología convencional o si hay mamas densas que dificultan la mamografía. Necesario

    disponer de posibilidad de biopsia dirigida por RM.

  • 8/18/2019 ALOPECIA EDITION 2016

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