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0 Universidad Autónoma del Estado de Morelos Facultad de Ciencias Biológicas “Efectos de la perturbación del hábitat y la estacionalidad climática en la dieta del ratón espinoso mexicano Liomys irroratus (Gray, 1868) en una selva seca del sur del estado de Morelos” TESIS QUE PARA OBTENER EL TÍTULO DE BIÓLOGO PRESENTA: EDGARD DAVID MASON ROMO DIRECTOR DE TESIS: DR. DAVID VALENZUELA GALVÁN CUERNAVACA, MORELOS. DICIEMBRE 2005

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0

Universidad Autónoma del Estado de Morelos

Facultad de Ciencias Biológicas

“Efectos de la perturbación del hábitat y la estacionalidad

climática en la dieta del ratón espinoso mexicano Liomys

irroratus (Gray, 1868) en una selva seca del sur del estado de

Morelos”

TESIS

QUE PARA OBTENER EL TÍTULO DE

BIÓLOGO

PRESENTA:

EDGARD DAVID MASON ROMO

DIRECTOR DE TESIS:

DR. DAVID VALENZUELA GALVÁN

CUERNAVACA, MORELOS. DICIEMBRE 2005

I

Índice de contenido Página

I. Dedicatoria………………………………………………………………………………...2 II. Agradecimientos………………………………………………………………………...3 1. Resumen………………………………………………………………………………….5 2. Introducción……………………………………………………………………………...6 3. Antecedentes…………………………………………………………………………...10

3.1. Comprobación empírica del factor de estabilidad ambiental………………...10 3.2. Acercamientos metodológicos al problema de determinar la dieta…………11 3.3. La anatomía vegetal como un apoyo para determinar la

dieta de los herbívoros………………………………………………………………...17

3.4. Diferentes enfoques en los estudios de dieta………………………………….21 4. Justificación……………………………………………………………………………23 5. Objetivos………………………………………………………………………………..28

5.1. Objetivo general…………………………………………………………………..28

5.2. Objetivos particulares…………………………………………………………….28

6. Hipótesis………………………………………………………………………………..29 7. Especie de estudio……………………………………………………………………31

7.1. Taxonomía………………………………………………………………………....31 7.2. Características generales………………………………………………………..33

7.3. Biología…………………………………………………………………………….35

7.4. Ecología……………………………………………………………………………37

7.5. Dieta………………………………………………………………………………..38

8. Sitio de Estudio…………………………………………………………………….….43 9. Metodología…………………………………………………………………………….46

9.1. Delimitación de periodos estacionales………………………………………….46 9.2. Elección de los sitios y determinación del grado de perturbación…………...46

9.3. Metodología de trampeo………………………………………………………….49

9.4. Estimación de la diversidad y disponibilidad de recursos alimentarios……..50

9.5. Obtención y preparación del catálogo de referencia de los caracteres anatómico

II

foliares de las herbáceas disponibles para Liomys irroratus……………………...52

9.6. Análisis del contenido de abazones…………………………………………….53

9.7. Análisis de las excretas…………………………………………………………..54

9.8. Evaluación de la selectividad o preferencia relativas……………………….. 56

9.9. Análisis estadísticos…………………………………………………………….. 59

10. Resultados………………………………………………………………………..…...61 10.1. Resultados del trampeo de ratones……………………………………...……61

10.2. Dinámica de la comunidad de herbáceas………………………………...…..61

10.3. Dinámica del banco de semillas…………………………...………………......66

10.4. Resultados de las muestras del contenido de abazones………………..….70

10.5. Resultados del análisis de las excretas…………………………………..…...80

11. Discusión…………………………………………………………………….………. 90 12. Conclusiones…………………………………………………………………….....101 13. Referencias………………………………………………………………………….103

Tablas y Anexos

Tablas……………………………………………………………………………………..122

Tabla 1. Nomenclatura, condición y coordenadas UTM de la ubicación de los

cuadrantes. (Se tomó el punto de una esquina del cuadrante)…………………122

Tabla 2. Especies de plantas recolectadas durante los muestreos de vegetación

……………………………………………………………………………………….....122

Tabla 3. Especies recolectadas en el banco de semillas………………………..123

Tabla 4. Especies de semillas recolectadas de los abazones…………………..124

Tabla 5. Resultados del análisis de preferencia para las semillas de diferentes

especies encontradas en los contenidos de abazones, por condición por temporada

y total. El número indica el lugar relativo de preferencia en el que se encuentra la

especie por cada tratamiento. P=perturbado Np=no perturbado Ll=lluvias S1=secas

tempranas S2= secas tardías…………………………………………………….....124

Tabla 6. Especies de plantas herbáceas identificadas dentro de las excretas, incluye

cuales tienen datos de diversidad y disponibilidad en el

III

medio………………............................................................................................125

Tabla 7. Resultados del análisis de preferencia para las especies encontradas en

excretas, por condición por temporada y total. El número indica el lugar relativo de

preferencia en el que se encuentra la especie por cada tratamiento. P=perturbado,

Np=no perturbado, Ll=lluvias, S1=Secas iniciales, S2=secas finales, SD= Sin datos

de disponibilidad……………………………………………………………………...125

Tabla 8. Géneros y especies cuyas semillas se reportan como presentes en

abazones o madrigueras de Liomys pictus en las selvas secas de Chamela, Jalisco y

que estan presentes en la Sierra de Huautla (Dorado et al., en prensa) y fueron

encontrados para Liomys irroratus en el presente trabajo. 1. Este trabajo 2.Pérez-

Saldaña, 1978 3. Janzen, 1986, 4. Ceballos, 1989; 5. Mendoza, 1997. 6.

Domínguez, 2000, 7. Hernández, 2000. *son las spp no reportadas para L. pictus y

descritas para L. irroratus en este trabajo. Los datos (3.) de Janzen (1986) de

contenidos de los abazones de Liomys salvini en selvas secas de Costa Rica.126

Anexos……………………………………………………………………………………..129 Anexo 1. Medidas y datos tomados a los ratones capturados………………….129

Anexo 2. Fórmula del formaldehído alcohol; (F. A. A.)………………………….130

Anexo 3. Fórmula de la gelatina glicerinada……………………………………...130

Anexo 4. Técnica para la preparación de laminillas temporales……………….130

Anexo 5. Técnica para la preparación de laminillas permanentes……………..131

Anexo 6. Técnica para la preparación de las laminillas de las excretas……....133

1

or mí se va a la ciudad del llanto; por mí se va al eterno

dolor; por mí se va hacia la raza condenada: La justicia

animó a mi noble arquitecto; que hizo la divina potestad, la suprema

sabiduría y el primer amor. Antes que yo no hubo nada creado, a

excepción de lo eterno, y yo duro eternamente. ¡Oh vosotros los que

entráis, abandonad toda esperanza!

Canto III Infierno.

La Divina Comedia

Dante Alighieri

IN MEMORIAM:

Edgard Mason Villalobos; por el ejemplo paternal.

Manuel Víctor Romo Martínez; por el ejemplo de vida.

J. Félix Frías Sánchez; por el ejemplo académico.

P

2

I. Dedicatoria.

A ti fuerza invisible, intangible, omnipresente y amorosa que llamo con todo orgullo y

admiración: Dios, porque has estado conmigo en cada momento de mi vida cuidándome y

dándome fuerza para sobrevivir lo indeseable y humildad para no perder el camino, a

pesar que muchas veces, tu bien lo sabes, no te hago mucho caso, gracias por TODOS tus

ángeles.

A mi madre, quien me ha marcado con su amor y sin quien no estaría en este mundo e

igualmente importante; no sería quien soy, te amo y espero enorgullecerte.

A mi padre, con quien me faltó tanto por vivir juntos, pero quien está conmigo en todo

momento y siempre lo estará, en mi amor por el y por nuestra familia.

A mi hermano, a quien amo y con quien he compartido más de lo que ambos podemos y

queremos aceptar y con quien quisiera compartir muchos más.

A mi hermana, a quien amo mucho más de lo que he demostrado, pero quien finalmente es

mi hermanita y le tengo que dar lata y cuidarla, siempre.

3

II. Agradecimientos.

¡Muchas gracias!

A mi familia sin cuyo amor y apoyo incondicionales este proyecto nunca

hubiera sido posible.

Para todos los aquellos que, directa o indirectamente, ayudaron a que este

proyecto llegara a buen puerto, especialmente a los que, de manera involuntaria y

torpe pudiera olvidar en este apartado. ¡Ustedes disculparán!

Dr. David Valenzuela por haberme aceptado, asesorado y aguantado a lo

largo de todo el proyecto, así como por introducirme al mundo de la investigación

científica.

A CONACyT (proyecto J34490-V] por el financiamiento del proyecto y la beca

que fue me otorgada como parte del proyecto.

A mi compañero de tesis Martín Cadena por la gran ayuda prestada en el

trabajo de campo sin la cual este trabajo no hubiera sido posible.

Goyo Rendón; por que sin su apoyo, amistad y buena disposición, más allá de

cualquier recompensa u horario, en todo el trabajo de campo y la identificación del

material vegetal, no se hubiera podido llevar a cabo este proyecto.

M. en C. (ya casi Dra.) Estela Sandoval Zapotitla por su amistad, paciencia,

disposición y apoyo para el catálogo de referencia sin el cual esta tesis nunca

hubiera concluido de manera satisfactoria, así como a todos en el Jardín,

especialmente a: Barbarita, Alicia, Conchita, Ito y Miguel, por su siempre util ayuda.

Biol. Alejandro Flores, Biol. Rolando Ramírez, la M. en C. Martha Olvera y

4

Amado García por su invaluable apoyo en la identificación del material vegetal de

este proyecto.

Para los Drs: Jerry Holechek, Guy Cameron y Fernando Clemente, por sus

consejos de larga distancia que fueron básicos para estructurar la parte

metodológica del proyecto.

A mis revisores, por sus valiosas aportaciones durante las diferentes etapas

del proyecto; Biols. Marco Lozano, Rafael Monroy, Salvador Santillán, Drs. Antonio

Guerrero, y Nestor Mariano, quien sacó al proyecto y a mí de incontables problemas

con la estadística.

Al Dr. Valentino Sorani, jefe del Laboratorio de sistemas de información

geográfica del CEAMISH, quien otorgó los mapas de vegetación con los que se

eligieron los sitios de muestreo.

A los Drs: Ella Vázquez, Gerardo Ceballos, Rodolfo Dirzo, Daniel Janzen, J.

Félix Frías, Douglas Johnson, y Álvaro Miranda, por las interesantes sugerencias

que directa o indirectamente fortalecieron al proyecto.

A las (casi) M. en C. Yola y Bety quienes han ayudado, desde el inicio, tanto

con su trabajo como con su amistad.

A toda la banda, ellos bien saben quienes son, que me brindaron su cariño y

amistad incondicionales y siempre estuvieron prestos a escucharme y apoyarme en

lo que estuvo en sus manos, en especial a los que dieron su tiempo, sudor,

cansancio y trabajo sin recompensa alguna y que merecen más que este

agradecimiento y los que ya les di personalmente.

5

1. Resumen

Se estudiaron los efectos de la perturbación del hábitat y la estacionalidad

climática en la dieta de Liomys irroratus (Heteromyidae) en la selva seca de la

Reserva de la Biósfera Sierra de Huautla, Morelos, México. De agosto del 2002 a

mayo del 2003 se realizaron trampeos mensuales en seis sitios de muestreo: tres

perturbados y tres no perturbados. De los ratones se tomaron medidas

morfométricas estándares, muestras de excretas y contenido de abazones. Para

evaluar la estacionalidad, se determinaron tres épocas: lluvias, secas tempranas y

secas tardías. Se realizaron muestreos de herbáceas y banco de semillas por época,

para evaluar la disponibilidad y diversidad de alimento por sitio. La dieta de este

roedor se determinó con el contenido de los abazones y análisis microhistológicos de

excretas. La diversidad y disponibilidad de recursos variaron a lo largo del tiempo, en

lluvias fueron más importantes las herbáceas y en secas las semillas. La dieta de los

ratones reflejó el cambio en la disponibilidad siendo más herbívoros en lluvias y más

granívoros en las secas. La perturbación cambió la cantidad y la composición de los

recursos que utiliza L. irroratus, en los sitios no perturbados siendo más selectivo

mientras en los perturbados es más generalista.

6

2. Introducción

El conocer la dieta de una especie y la forma en la que consume los recursos

alimenticios en relación a su disponibilidad en el medio, es una pregunta relevante

para la ecología, puesto que ayuda a entender las causas de su distribución y

abundancia así como los cambios que se puedan suscitar en estos aspectos (Begon

et al., 1999; Litvaitis, 2000; Krebs, 1985; Kronfeld & Dayan, 1998; Smith & Smith,

2001).

Entre las consecuencias de la perturbación de los hábitats naturales se

encuentran la modificación de la heterogeneidad y el cambio en la disponibilidad de

los recursos alimentarios, que a su vez impactan en la diversidad biológica de un

lugar en particular (Begon et al., 1999; Brown, 2000; Laurance & Bierregaard, 1997;

Litvaitis, 2000; Miller, 1994).

Por otra parte, la estacionalidad ambiental, es decir, los cambios periódicos

en los factores abióticos particularmente en la temperatura y la precipitación (Krebs,

1985), también genera cambios en la disponibilidad temporal de recursos.

La perturbación y la estacionalidad causan cambios en la heterogeneidad,

disponibilidad y la diversidad de los recursos alimenticios (Begon et al., 1999; Brown,

2000; Laurance & Bierregaard, 1997; Litvaitis, 2000; Miller, 1994) y estos cambios a

su vez impactan en la diversidad biológica de un lugar en particular (Begon et al.,

1999; Brown, 2000; Laurance & Bierregaard, 1997; Litvaitis, 2000; Miller, 1994).

Algunos de los efectos sobre la diversidad biológica, pueden manifestarse con

cambios en aspectos de su ecología de forrajeo (sensu Rosenzweig, citado en

7

Brown, 2000) como la amplitud de nicho (Feisinger et al., 1981; Levins, 1961; May &

MacArthur, 1972). Esto es más notorio en sistemas con una alta variabilidad

estacional de recursos (Brown, 2000; Krebs, 1985).

Los comportamientos de forrajeo y la heterogeneidad (tanto espacial como

temporal) están muy relacionados (Brown, 2000). La mayoría de las especies tienen

comportamientos de forrajeo flexibles que permiten respuestas adaptativas a

contingencias (como la estacionalidad y la perturbación) en el ambiente en el que

forrajean. La forma en la que responde el animal a la contingencia incluye

modificaciones a sus tiempos de alimentación, distribución de su actividad y tácticas

de alimentación (Brown, 2000).

La escala a la que sucede la contingencia puede ser espacial o temporal y

ambas pueden variar en su duración o área de afectación, lo cual causa que se

generen diferentes respuestas por parte de los animales (discutidas a detalle por

Brown, 2000). A las contingencias con escalas temporales y espaciales pequeñas

(como podría ser la estacionalidad ambiental de la selva baja caducifolia y

perturbación relativamente reciente) los animales responden con cambios en sus

ecologías de forrajeo variando la selección de su dieta (Brown, 2000).

La distribución y abundancia de los recursos alimenticios disponibles para un

animal pueden influenciar de manera importante su comportamiento de forrajeo y por

lo tanto su dieta (Brown, 2000; Larter & Gates, 1991; Pyke, 1984).

El nicho (trófico) está definido como: la función (alimentaria) de un organismo

(o especie) en una comunidad (Krebs, 1985). La amplitud de nicho está definida

como la cantidad utilizada de un nicho disponible (Colwell & Futuyma, 1971). La

amplitud del nicho trófico de un animal (Levins, 1968) está determinada por la

8

cantidad de recursos (riqueza de especies o categorías tróficas) que consume, pero

también está determinada por la forma en que los consume. La amplitud de nicho

trófico será menor para una especie que muestra preferencia por algunas especies

(especialista) que para una generalista (Colwell & Futuyma, 1971; Swihart et al.,

2003).

La amplitud de nicho trófico es un factor determinante en la tolerancia de una

especie a la pérdida y fragmentación del hábitat. La habilidad de una especie a

depender de una diversidad mayor de alimentos (estrategia generalista) en su rango

geográfico le permitirá una mayor tolerancia a la perturbación del hábitat (Swihart et

al. 2003).

El factor de estabilidad ambiental (Krebs, 1985) establece que las regiones

con climas más estables (biológicamente más diversos) permitirán la evolución de

nichos “más pequeños” y más especializados, y viceversa para los organismos que

viven en ambientes menos estables, que se ven forzados a ser más flexibles (menos

selectivos).

Una mayor heterogeneidad ambiental, que promueve una mayor

biodiversidad, es seguida por comportamientos de selección de hábitat y de dieta

(Brown, 2000; Rozensweig, 1987; Rozensweig, 1991). En ambientes con más

especies para consumir, un forrajeador puede seleccionar algún (o algunos)

recurso(s) en particular (Brown, 2000).

En el caso específico de las selvas secas la estacionalidad causa cambios

abruptos en la fenología de las plantas y en la disponibilidad de agua y alimentos, lo

que presiona a los animales a generar estrategias para poder sobrevivir (Ceballos,

1995). Y la perturbación muchas veces causa disminución en la heterogeneidad

9

ambiental (Begon et al. 1999; Krebs, 1985).

Las selvas tropicales secas son uno de los ecosistemas con mayores

problemas de perturbación en el mundo (Dirzo & Raven, 2003; Janzen, 1986b;

Janzen, 1988; Lerdau et al., 1991; Murphy & Lugo, 1986).

Uno de los principales cambios, asociados a la perturbación de la selva seca

es una disminución de la cobertura arbórea (Cabin et al., 2002: Dirzo & Miranda,

1990; Janzen, 1988; Lerdeau et al., 1991; Maas, 1995; Murphy & Lugo, 1986).

También se ha documentado que la perturbación de la selva seca ocasiona una

menor disponibilidad de frutos carnosos (De León, 2005). Hay evidencias de

cambios estacionales notables en la disponibilidad y composición específica de

semillas en el banco de semillas (Arias, 1986). Ambos trabajos realizados en la

Sierra de Huautla.

En este escenario, se espera que las especies animales sean más selectivas

cuando el ambiente tenga más diversidad de recursos y más generalistas cuando el

ambiente sea menos diverso. De esta forma se decidió estudiar la dieta del ratón

Liomys irroratus, que es el único roedor granívoro presente en la zona y la segunda

o tercera especie más abundante (Cadena, 2003) y los efectos que sobre su dieta

pudieran tener la perturbación antropogénica, la estacionalidad climática y los

cambios en la heterogeneidad ambiental.

10

3. Antecedentes

3.1. Comprobación empírica del factor de estabilidad ambiental

Los factores que modifican la amplitud de nicho son: la riqueza de especies

disponibles y la forma de utilizar la riqueza por parte del consumidor (Colwell &

Futuyma, 1971; Swihart et al., 2003), para conocer en que forma interactúan estos

factores se analizaron los cambios en la amplitud de nicho trófico (Levins, 1968) con

datos de Cortés et al., (2002), Morris & Schwartz (1957), Murray & Dickman (1994),

Reichman (1977), Smith (1952) y Taylor (1954) y se encontró que:

1. La riqueza específica y la selección de elementos en la dieta afectan de

manera directa la amplitud de nicho trófico, como señala la teoría (Colwell &

Futuyma, 1971; Swihart et al., 2003).

2. En situaciones en las que la selección es indistinta (estrategia generalista)

el aumento de la riqueza específica disponible aumenta la amplitud de nicho trófico.

3. Cuando la riqueza de especies disponibles se mantiene estable en

diferentes circunstancias (ej. estacionalidad, perturbación, competencia) y la especie

selecciona los elementos disponibles de manera diferencial (especialista) la amplitud

de nicho trófico disminuye, comparativamente con la de una especie generalista en

la misma circunstancia.

4. Por lo tanto: en ambientes diversos (ej. tropicales, no perturbados o en la

temporada en la que tienen más recursos disponibles) una especie generalista

tendrá una amplitud de nicho trófico mayor que una especie con estrategia

especialista en sitios de baja diversidad (ej. perturbados, temporada baja en

11

recursos), a pesar que la primera consuma mayor riqueza de especies, lo que indica

que la amplitud de nicho trófico estará afectada en mayor medida por la estrategia

de forrajeo de un animal que por la diferencia en la diversidad del medio.

5. Estos datos empíricos corresponden a lo señalado por la teoría del factor

de estabilidad ambiental (Krebs, 1985): en ambientes menos estables los animales

tendrán dietas más generalistas y en ambientes más estables su dieta será más

especializada.

3.2. Acercamientos metodológicos al problema de determinar la dieta.

La dieta de las especies ha sido ampliamente estudiada durante muchas

décadas, con enfoques distintos, para un variado número de grupos y con

metodologías diversas.

Existen diferentes metodologías utilizadas para determinar la dieta de los

animales herbívoros. Holechek et al., (1982a.) las dividen en las siguientes

categorías:

(1) La utilización (utilization technique): es una de las formas más antiguas

para evaluar la dieta de herbívoros que pastan. Se evalúa mediante la comparación

del grado de remoción de vegetación por un herbívoro (Norbury & Sanson, 1992).

Entre sus ventajas se cuenta la rapidez además de que proveé información de

donde y en que grado es usada la vegetación. Esta metodología tiene desventajas

importantes como: pérdidas a larga escala por efectos diferentes a la herbivoría (ej.

climáticos, daño físico) y consumo por otras especies, así como en lugares donde el

crecimiento vegetal es muy activo y no permite medir la pérdida por herbivoría.

12

(2) La técnica de observación directa: en la cual se intenta observar e

identificar lo que el animal está ingiriendo en el momento en que lo consume (ej.

Laylock et al., 1972; Reppert, 1960; Smith & Hubbard, 1954; Weckerly, 1994). Esta

técnica tiene como ventajas el ser rápida, tanto en el campo como en el cómputo de

los datos (Laylock et al., 1972) y requiere un mínimo de equipo (Holechek et al.,

1982b; Norbury & Sanson, 1992). Entre las desventajas que tiene es que requiere un

amplio entrenamiento para identificar las especies vegetales que son consumidas

(Laylock et al., 1972; Holechek et al., 1982b), así como la dificultad para observar a

los animales en topografías agrestes, o cuando hay arbustos u otros obstáculos

bloqueando al observador (Sanders et al., 1980). Es complicado calcular la cantidad

de alimento que consume un animal en cada mordisco, pues ésto varía entre

individuos (Holechek et al., 1982b). Pero posiblemente la mayor limitante que

presenta esta técnica es que el observador necesita estar muy cerca del animal y

por lo tanto necesita de animales domesticados (Holechek et al., 1982b) y a pesar de

esto, la presencia del observador puede alterar la conducta del animal.

(3) Las metodologías que requieren de análisis microscópico (el cual se

discutirá a detalle más adelante) para determinar la dieta, entre las cuales destacan:

(a) Las sondas o fístulas esofágicas y, (b) la evacuación o fistulación de rumen.

Estas metodologías tienen como ventaja el presentar resultados parecidos a los de

la observación directa, relativamente precisos, sin los errores aducidos al observador

(Laylock et al., 1972), por lo tanto, muchas veces son preferidas para el estudio con

ganado (Free et al., 1970; Galt et al., 1969; Peden et al., 1974). Sin embargo, estas

metodologías también tienen problemas importantes, puesto que, en el mejor de los

casos, la cirugía de esófago es difícil y el gran número de pérdidas ha causado

13

escepticismo en su uso (Van Dyne & Torell, 1964). El comportamiento anormal de

los individuos con fistulación del rumen es un problema grave (Holechek et al.,

1982b; Peden et al., 1974), así como el alto costo de mantenimiento y cuidado (de

ambas) problemas que se acentúan cuando se le aplica a ungulados silvestres

(Peden et al., 1974). Estas técnicas también consumen una gran cantidad de tiempo,

tanto en campo como en el laboratorio (Laylock et al., 1972; Van Dyne & Torell,

1964), están limitadas a animales grandes (Holechek et al., 1982b; Olson, 1991) y

requieren un alto número de animales para poder generar datos precisos (Holechek

et al., 1982b). En específico, la recolecta de material del rumen no es posible en

lugares abiertos ni durante el invierno en localidades templadas (Olson, 1991).

En su trabajo, Galt et al., (1969) compararon los resultados de estas

metodologías contra los de la observación directa y demostraron diferencias

considerables entre ambas metodologías.

(c) El análisis de contenidos estomacales e intestinales (ej. Baumgartner &

Martín, 1939; Campos et al., 2001; Johnson, 1961) presenta la ventaja de poder

determinar con precisión la composición de la dieta, tanto cualitativa como

cuantitativamente. Su principal desventaja radica en la necesidad de sacrificar a los

animales, por lo tanto, está restringida a ser utilizada primordialmente con animales

silvestres con poblaciones grandes (Holechek et al., 1982b). La destrucción

diferencial de las especies durante la digestión causa cambios en las proporciones

de los diferentes elementos consumidos (Holechek et al., 1982b), el lugar donde

fueron consumidos no puede ser determinado (Holechek et al., 1982b) así como la

subestimación o simplemente el no detectar grupos completos (Westoby et al.,

1976).

14

(d) La obtención y análisis de excretas (ej. Dusi, 1949; Vázquez, 1997;

Stewart, 1967; Kronfeld & Dayan, 1998). Las ventajas que esta metodología confiere

han sido discutidas por: Anthony & Smith (1974), Fitzgerald & Waddington (1979),

Holechek et al., (1982a), Kronfeld & Dayan (1998), Johnson & Wofford (1983),

Litvaitis (2000), Norburg & Sanson (1992), Peden et al., (1974), Putman (1984),

Rogers & Dahlgren (1982), Sanders et al., (1980), Smith et al., (2002), Todd &

Hansen (1973), Vavra et al., (1978), Williams (1969) y Zyznar & Urness (1969), y

son las siguientes:

1. No interfiere con los hábitos naturales de los animales.

2. No restringe el movimiento de los animales.

3. Permite la determinación de la dieta sin importar las condiciones del terreno.

4. Es igual de útil para animales domésticos y silvestres.

5. No requiere de sacrificar animales.

6. Reduce al mínimo el contacto con los animales.

7. Es relativamente objetiva.

8. Tamaño de muestreo casi ilimitado.

9. Las excretas son relativamente fáciles de recolectar.

10. Se pueden comparar las dietas de dos o más especies a la vez.

11. En la actualidad el muestreo requiere de poco equipo.

12. Tiene un valor particular cuando los animales se desplazan en distintas

comunidades.

13. Es el único método adecuado para trabajar con especies raras o

amenazadas.

14. No requiere ningún método quirúrgico, por lo cual es el método más

15

apropiado para trabajar con ganado (Mohammad et al., 1995).

Pero esta metodología también tiene importantes desventajas y problemáticas, las

cuales fueron discutidas por: Fitzgerald & Waddington (1979), Hansen et al., (1973),

Holechek (1982), Holechek et al., (1982a), Holechek & Gross (1982a), Johnson &

Wofford (1983), Katona & Altbäcker (2002), Litvaitis (2000), Norbury & Sanson

(1992), Owen (1975), Sanders et al., (1980), Smith et al. (2002), Smith & Shandruk

(1979), Stewart, (1967), Vavra & Holechek (1980) y Williams (1969). Y son las

siguientes:

1. La precisión es un problema importante pues la proporción en que las

especies son registradas en las excretas muchas veces no es igual, o parecida,

a las consumidas.

2. Los índices de preferencia no pueden ser precisos porque no se puede

determinar donde fue consumido el alimento.

3. La identificación de las excretas (a que especie pertenecen) recolectadas en

campo puede ser un problema. Howard (1967) describe un método (que

involucra el pH) que puede servir para diferenciar entre animales diferentes con

excretas parecidas.

4. Equipo, trabajo y tiempo considerables son necesarios para el análisis.

5. Se requiere una vasta colección de referencia.

6. El observador requiere un entrenamiento considerable para identificar

correctamente los fragmentos de tejido vegetal (Holechek & Gross, 1982a).

7. En muchas plantas es difícil la identificación a nivel de especie y a veces de

género.

8. La identificación de los fragmentos es laboriosa y tardada.

16

9. La destrucción de algunas plantas puede ocurrir al preparar la laminilla

(Holechek, 1982; Vavra & Holechek, 1980).

10. Algunos procedimientos para la separación y preparación de la muestra

pueden causar errores.

11. Algunas especies pueden no ser identificables en las heces.

12. La identificación se complica mientras más tiempo tenga la excreta antes de

la recolecta.

13. La fragmentación puede diferir entre las especies durante la digestión

haciendo parecer diferente la proporción relativa de especies observadas.

1. El índice de digestión (uno de los problemas más notorios y más estudiados

de la técnica) puede variar dependiendo tanto de la especie consumidora como

de las características de la planta que esta consuma (Urness et al., 1977) por lo

cual, en algunos casos las estructuras de alguna(s) especie(s) puede(n) no

conservarse a pesar de ser ingeridas, o ser tan pequeñas que la identificación es

laboriosa y tardada (Williams, 1969). Bartolomé et al., (1995) encuentran

diferencias significativas en la digestión del tejido vegetal que generan la

subestimación de las hierbas y la sobreestimación de los pastos. En contraste

Johnson & Wofford (1983) y Todd & Hansen (1973) sostienen que el grado de

digestión no afecta la identificación de los fragmentos de manera importante.

Existen metodologías complementarias a las ya mencionadas: la comparación

de concentración de n-alcanos en las heces (Smith et al., 2002), la creación de una

válvula a control remoto ubicada en el esófago (Smith et al., 2002), así como otras

metodologías comparadas en ovinos por Laylock et al., (1972).

Existen otras metodologías menos comunes que son utilizadas por algunos

17

autores sin lograr generalizarse. Norbury & Sanson (1992) mencionan una técnica

poco utilizada que se basa en la toma directa del material vegetal recién comido de

la boca del herbívoro; el problema principal de la metodología es que la cantidad de

vegetación recabada por boca es muy baja y la técnica requiere del sacrificio de una

cantidad muy grande de animales, por lo que la refieren como indeseable.

Kronfeld & Dayan (1998) diseñaron una metodología, específicamente para

roedores y otros mamíferos pequeños, que consiste en la regurgitación del alimento

ingerido, por medio del bombeo del contenido estomacal. Ésta es una opción más

para evitar el sacrificio de los animales que es necesario al aplicar el análisis de

contenido estomacal e intestinal y que son las técnicas comúnmente utilizadas para

el trabajo con mamíferos pequeños.

En algunos casos, también se aplican fórmulas estadísticas para corregir las

fallas propias de la estimación por métodos de observación directa y las

metodologías indirectas (Peden et al., 1974; Smith et al., 2002).

3.3. La anatomía vegetal como un apoyo para determinar la dieta de los

herbívoros.

Los trabajos para determinar la composición de la dieta, por medio de

excretas (de mamíferos carnívoros y aves, específicamente rapaces) han sido

utilizados por muchas décadas [ej. Aranda et al., (2002); Clevenger et al., (1992);

Selko (1937); Sperry (1934); Taylor (1954)]; sin embargo; la identificación de las

especies a las que pertenecen los fragmentos en estos estudios está restringida a

grandes partes no digeridas, tales como exoesqueletos quitinosos de insectos, pelo,

18

huesos, semillas y agujas de pinos (Zyznar & Urness, 1969). Habitualmente los

mamíferos herbívoros mastican y degradan los elementos de su dieta tan finamente

que la utilización de la anatomía se vuelve necesaria para la identificación de las

especies (Zyznar & Urness, 1969).

La aplicación de análisis microhistológicos para la determinación de la dieta

de animales herbívoros fue publicada por primera vez por Baumgartner & Martin

(1939), para determinar los hábitos alimentarios de ardillas (Sciurius Níger, por

medio de contenidos estomacales). Posteriormente, Dusi (1949) aplicó esta

metodología para el trabajo con excretas de Sylvilagus floridanus, desde entonces

son muchos los autores quienes han trabajado con diversos grupos de animales, por

ejemplo: Hansen & Dearden (1975) con venado bura (Odocoileus hemionus);

Crawford (1982) con venado cola blanca (Odocoileus virginianus); Galt et al., (1969)

con ganado (Bos taurus); Rumble & Anderson (1993) con guajolotes (Meleagris

gallipavo); Sparks (1968) con liebres (Lepus californicus); Smith & Shandruk (1979)

con berrendos (Antilocapra americana), roedores (Johnson, 1961; Petersen, 1993),

Fitzgerald & Waddington (1979) con zarigüeyas (Trichosurus vulpecula) y, Owen

(1975) con gansos (Branta leucopsis y B. ruficollis). Esta técnica también ha

probado ser de utilidad para la determinación de la dieta de insectívoros, pero con

ciertas reservas en la cuantificación de insectos de cuerpos suaves (Dickman &

Huang, 1988). Esta técnica es útil también para conocer el traslape en la dieta de

especies que coinciden en una zona geográfica, como lo señalan en sus trabajos

Cameron (1983); Hansen et al., (1973); Hansen & Reid (1975); Hansen & Ueckert

(1970); Johnson (1961); Moro & Bradshaw (2002); Petersen (1993); Stancampiano &

Caire (1995); Wondolleck (1978).

19

La precisión de la técnica microhistológica, específicamente aplicada a

excretas, ha sido puesta en duda por varios autores (Anthony & Smith, 1974;

Johnson & Pearson, 1981; Norbury & Sanson, 1992; Sanders et al., 1980). A pesar

de ello existen trabajos teóricos que analizan dietas artificiales, compuestas a mano,

que sustentan la eficiencia de esta metodología para medir cualitativa y

cuantitativamente la dieta de los herbívoros (Holechek, 1982; Holechek et al., 1982;

Sparks & Malechek, 1968; Vavra & Holechek, 1980; Williams, 1969). En el trabajo de

Todd & Hansen (1973) sostienen que la técnica es igualmente eficiente al analizar

rumen y excretas, pues a pesar de que existe mayor grado de digestión en las

excretas ésta no afecta la discernibilidad del mismo.

La técnica descrita por Baumgartner & Martin (1939) genera la posibilidad de

analizar cualitativamente (presencia y ausencia) y cuantitativamente (que especie o

parte es preferida en relación con otras) la dieta de los herbívoros. En el caso de

este segundo enfoque, el cuantitativo, existen varios trabajos que han intentado

definir la preferencia de la dieta de diversos grupos (teniendo problemas en lograr su

objetivo).

Stewart (1967) alimentó con cantidades conocidas de plantas previamente

seleccionadas a siete especies de herbívoros africanos. Smith & Shandruk (1979)

consideran que “el conteo de fragmentos epidérmicos fue considerado inválido por la

diferencia en sus tamaños”.

Zyznar & Urness (1969) mencionan en su trabajo que: “Pocas veces las

muestras de excretas contenían algo más que un porcentaje bajo de fragmentos

identificables” eso puede ser explicable pues el método con el que fueron aclaradas

las excretas (hirviéndolas 15 minutos en hidróxido de sodio) destruye las estructuras

20

identificables (Holechek, 1982). Esto logró generar incertidumbre en la posibilidad de

cuantificar la dieta por medio de esta metodología.

Sparks & Malechek (1968) estimaron los porcentajes de composición por

medio de los pesos en seco de los elementos de una mezcla de vegetales

identificados, en proporciones conocidas, obteniendo que: “La relación entre el

estimado del porcentaje de peso en seco (densidad relativa) y los porcentajes reales

de peso en seco es aproximadamente de 1:1 para las tres categorías,”…“Por lo

tanto, la composición porcentual basada en el peso en seco de las mezclas puede

ser estimado directamente de la densidad relativa”.

Free et al., (1970) verificaron la eficiencia de esta metodología en la

cuantificación de los fragmentos de especies de plantas perennes en excretas de

becerros, desde entonces esta técnica ha sido ampliamente utilizada (Hansen &

Dearden, 1975; Hansen & Reid, 1975; Hansen et al., 1973; Havstad & Donart, 1978;

Holechek et al., 1982b; Holechek, 1982; Peden et al., 1974; Sanders et al., 1980;

Vavra & Holechek, 1980) obteniendo resultados positivos.

La parte matemática de la técnica ha sido tratada en extenso en el artículo

publicado por Johnson (1982) en el que describe detalladamente la fórmula por la

cual se obtiene la relación entre densidad relativa y peso en seco, tema nunca antes

tratado “presumiblemente pasado por alto dado que (el procedimiento) es

relativamente sencillo de entender para personas con una amplia formación en

matemáticas”.

Otra cuestión de suma importancia para la cuantificación de dietas por

métodos microhistológicos es el apropiado adiestramiento de quien vaya a preparar

y observar las muestras, ésto es destacado en los trabajos de Holechek & Gross

21

(1982a), Holechek et al. (1982), Vavra & Holechek (1980) y Westoby et al., (1976).

3.4. Diferentes enfoques en los estudios de dieta.

Además de existir gran cantidad de trabajos que se enfocan al conocimiento

de la dieta, de manera descriptiva de diversos taxa de herbívoros (Galt et al., 1969;

Holechek et al., 1982b; Reppert, 1960; Smith & Hubbard, 1954; Sparks, 1968; Uresk,

1984); existen trabajos dirigidos a mejorar las técnicas aplicadas al conocimiento de

la dieta, generando metodologías nuevas (Baumgartner & Martin, 1939; Peden et al.,

1974; Sparks & Malechek, 1968; Williams, 1969).

Reichman & Van de Graaf (1975) relacionan el consumo de material vegetal

fresco con la reproducción de roedores de zonas áridas.

Se han realizado distintos análisis y comparaciones de las metodologías

existentes para buscar la mejoría de los trabajos posteriores (Holechek, 1982;

Holechek et al., 1982; Mohammad et al., 1997; Sanders et al., 1980; Smith &

Shandruk, 1979; Urness et al., 1977; Vavra et al., 1978; Vavra & Holechek, 1980).

Existen de igual manera publicaciones enfocadas a la revisión del avance que las

diferentes metodologías han tenido como es el caso de Holechek et al., (1982a) para

el caso de la determinación botánica de la dieta en general y Van Dyne & Torell

(1964) para el caso específico de la fístula esofágica.

A pesar que Hansen & Dearden (1975), Reppert (1960), Sparks (1960) y

Ward & Keith (1962) sugieren que las preferencias alimentarias y la calidad del

forraje son influenciadas por el proceso estacional, una cantidad relativamente

pequeña de publicaciones analizan, de manera directa o indirecta, las repercusiones

22

de la estacionalidad ambiental como factores determinantes en la dieta (ej. Aleksiuk,

1970; Altrichter et al., 2000; Bradley & Mauer, 1971; Crawford, 1982; Grajales-Tam

et al., 2003; Hansen & Dearden, 1975; Jameson, 1952; Posse et al., 1996; Sparks,

1968; Taylor, 1954; Vázquez, 1997; Vázquez et al., 2000), sólo los dos últimos

fueron realizados en ambientes tropicales.

Las posibles repercusiones de la perturbación sobre la dieta es un enfoque

más reciente y existen muchos menos trabajos que lo analicen (Vázquez, 1997,

Vázquez et al., 2000).

23

4. Justificación

Los roedores son un eslabón fundamental en las redes tróficas dado que son

presa de muchos animales (Ceballos y Galindo, 1984; Fleming, 1983a; Fleming,

1983b; MacCracken et al., 1985; Sánchez-Cordero & Fleming, 1993) son

importantes como depredadores y dispersores de semillas, así como depredadores

de insectos y plántulas; también participan en mantener la fertilidad y la diversidad

vegetal a nivel local (Ceballos y Galindo, 1984; Ceballos y Miranda, 2000; Dhillion,

1999; Huntly & Reichman, 1994; MacCracken et al., 1985; McDonald, 2001; Villa y

Cervantes, 2003). Por lo tanto, los estudios dirigidos hacia el conocimiento y

conservación de éste grupo de mamíferos son de relevancia para conservar los

demás niveles tróficos que dependen de ellos para su existencia.

Como parte del proyecto (CONACyT J34490-V): “Mastofauna de la Reserva

de la Biósfera Sierra de Huautla, Morelos: diversidad, patrones espacio-temporales y

conservación”, ésta tesis está encaminada a conocer mejor los aspectos biológicos

y ecológicos de las especies de la zona de manera que se pueda generar

conocimiento básico y aplicado a la conservación y el manejo de los mamíferos de la

reserva y sus alrededores.

Liomys irroratus es un buen sujeto de estudio para alcanzar los objetivos

(determinados más adelante) de este trabajo porque:

1. Es el único heterómido en la zona, por lo que es fácil de identificar.

2. Presenta características de especialización a medios semiáridos, como son los

abazones: estructuras especializadas de almacenamiento y transporte de alimentos

24

(Ceballos y Galindo, 1984; Ceballos & Miranda, 2000; Dowler & Genoways, 1978) y

una alta capacidad de regulación de temperatura y agua, típicas de los heterómidos

(Hudson & Rummel, 1966).

3. Tomando en cuenta las características estacionales de la Sierra de Huautla se

puede inferir que su eficiencia biológica será alta lo que conllevará a un éxito

reproductivo alto y una densidad elevada (Begon et al., 1999; Darwin, 2001; Krebs,

1985). Esto está comprobado por estudios anteriores realizados en la zona (Álvarez-

Castañeda, 1996; Cadena (2003); García-Estrada et al., 2002; Morán, 1994 y

Sánchez & Romero, 1995) que reportan abundancias altas, por lo que se pueden

obtener tamaños de muestra suficientemente grandes. Cadena (2003) señala que el

35% de sus capturas, en los mismos sitios de muestreo, pertenecen a esta especie,

con densidades que varían de 0.96 a 40.37 individuos por hectárea (ind/ha) en sitios

no perturbados, y de 0.96 a 30.76 ind/ha en zonas perturbadas, estos cambios

fueron marginalmente significativos. La densidad entre ambas condiciones de

perturbación, si muestra diferencias significativas a lo largo del año (Cadena, 2003).

4. Se alimentan de semillas, hojas, tallos mientras que su consumo de invertebrados

es bastante bajo (Ceballos y Galindo, 1984; Ceballos & Miranda, 2000; Domínguez,

2000; Vázquez, 1997).

Por lo tanto, al generar un catálogo de formas micro histológicas de la cutícula

de estas estructuras vegetales y comparar el contenido de los abazones con lo

encontrado en el banco de semillas se puede suponer que se está tomando en

cuenta la gran mayoría de los componentes de su dieta, así como la frecuencia de

cada uno de ellos con un grado de confianza satisfactorio.

La utilización de la metodología de análisis de excretas por medios micro

25

histológicos, fue elegida para este estudio (por encima de otras metodologías

mencionadas) por que los ratones son muy pequeños para colocarles una fístula en

el esófago, así como por sus hábitos nocturnos, su talla y las condiciones

topográficas y de vegetación de la zona. La observación directa es ineficiente (si no

imposible). Se descartaron las metodologías habituales para mamíferos pequeños,

como el análisis de contenidos estomacales aplicado por Campos et al., (2001);

Dickman & Huang (1988); Kincaid & Cameron (1982); Jameson (1952); Luce et al.,

(1980); Reichman (1975), puesto que este trabajo se realizó en conjunto con una

tesis sobre la demografía de los roedores de la zona (Cadena, 2003) que requirió

marcar y recapturar a los ratones.

Existen una cantidad importante de estudios sobre la dieta de diferentes

grupos de mamíferos (Baumgartner & Martin, 1939; Dickman & Huang, 1988; Dusi,

1949; Katona & Altbäcker, 2002; Kincaid & Cameron, 1982; Preen, 1995; Smith &

Shandruk, 1979; Stewart, 1967; Wilson & Bertram, 1987).

La cantidad de trabajos con roedores es importante (ej. Cortés et al., 2002;

Dusi, 1949; Escobar & González, 1973; Fagerstone et al., 1981; Fleharty & Olson,

1969; Hansen & Ueckert, 1970; Jameson, 1952; Johnson, 1961; Luce et al., 1980;

Moro & Bradshaw, 2002; Petersen, 1993; Reichman, 1975; Torres-Contreras &

Bozinovic, 1997; Uresk, 1984; Voth & Black, 1973; Whitaker, 1966).

Un porcentaje importante de los trabajos sobre dieta de roedores se han

realizado con especies desérticas de la familia Heteromyidae (ej. Bradley & Mauer,

1971; Brown et al. 1979; Brown & Lieberman, 1973; Chapman, 1972; Frank, 1988;

Johnson, 1961; Lockard & Lockard, 1971; Reichman, 1975; Reichman, 1977;

Reichman & Van de Graaf, 1975; Rosenzweig & Sterner, 1970; Shaw, 1934; Smigel

26

& Rosenzweig, 1974; Wondolleck, 1978).

Para el caso de heterómidos tropicales es mucho menos lo que se conoce

(Reichman & Price, 1993; Sánchez-Cordero, 1993), existen muy pocos trabajos

sobre la dieta del género Heteromys, la información sobre la dieta de H. gaumeri, H.

nelsoni y H. oresterus es muy poca (Schmidt et al. 1989; Rogers & Rogers, 1992a y

Rogers & Rogers, 1992b; respectivamente) para Heteromys desmarestianus existen

algunos estudios sobre sus preferencias alimenticias en Costa Rica (Fleming, 1974a;

Fleming, 1977; Fleming & Brown, 1975; Vandermeer, 1979; Martínez-Gallardo &

Sánchez –Cordero, 1993).

Los trabajos sobre la dieta del género Liomys están limitados a dos especies:

L. pictus y L. salvini. La dieta de Liomys salvini ha sido estudiada a nivel de los

contenidos de abazones en varios trabajos, con enfoques diversos, en las selvas

secas de Costa Rica (Brewer, 2001; Fleming, 1974a, Fleming, 1977; Fleming &

Brown, 1975; Janzen, 1971; Janzen, 1981; Janzen, 1982a, Janzen, 1982b, Janzen,

1982c; Janzen, 1982d; Janzen, 1986a).

Los estudios realizados sobre la dieta de los Heterómidos tropicales

mexicanos han sido realizados con Liomys pictus, en Jalisco y solo se analizan

contenidos de abazones y madrigueras (Ceballos, 1989, Domínguez, 2000;

Hernández, 2000; Mendoza, 1997; Pérez-Saldaña, 1978). En un estudio de

laboratorio, Briones y Sánchez-Cordero (1999) compararon el nivel de consumo de

frutos y semillas por Liomys pictus y encontraron que los ratones son capaces de

distinguir las semillas más nutritivas y las potencialmente dañinas, encontraron

también que algunas de las especies que los ratones consumen de manera

importante no tienen altos niveles de nutrientes, por lo que suponen que pueden

27

utilizarlas con base en su disponibilidad o su humedad.

Existen muy pocos estudios que busquen entender el impacto de la

perturbación en la dieta de roedores en el país, como es el caso de los trabajos de

Vázquez (1997) y Vázquez et al., (2000) quienes determinaron la dieta de dos

especies de roedores (Reithrodontomys fulvecens y Peromyscus aztecus) en hábitat

con diferente grado de alteración en la Reserva de la Biosfera Sierra de Manantlán,

en Jalisco, México, en los que encontraron que la dieta varía dependiendo de la

estacionalidad y la perturbación del hábitat, debido a las diferencias en la

disponibilidad y la productividad generadas por la perturbación.

La importancia de esta investigación se debe a que no se han realizado

trabajos sobre dieta, con este enfoque particular, de esta especie en la zona de

estudio, siendo de este modo un proyecto original con un enfoque nunca antes

abordado en el estado de Morelos.

28

5. Objetivos

5.1. Objetivo general.

Conocer el efecto que tiene el grado de perturbación del hábitat y la

estacionalidad ambiental en la dieta de Liomys irroratus en la selva baja caducifolia

de la región de la Sierra de Huautla.

5.2. Objetivos particulares.

1. Determinar la abundancia, diversidad y valor de importancia de los recursos

alimenticios (ej. semillas y herbáceas) disponibles para Liomys irroratus en los sitios

de estudio.

2. Describir la dieta de Liomys irroratus (con base en el análisis de muestras del

contenido de abazones y en el análisis de muestras de excretas) y evaluar cómo

cambia entre sitios y temporadas.

3. Determinar la diversidad de la dieta y la amplitud de nicho trófico en la dieta de

Liomys irroratus en diferentes sitios y temporadas en la zona de estudio.

4. Evaluar si Liomys irroratus es selectivo con algunas de las especies que

consume y si esto cambia entre sitios y temporadas.

29

6. Hipótesis

Existe mayor disponibilidad y diversidad de semillas y de herbáceas en los

sitios no perturbados que en los perturbados. Por lo tanto, en vista de que se trata

de un ambiente más estable, se espera que la dieta de este roedor muestre mayor

selectividad y menor amplitud de nicho trófico en los sitios no perturbados que en los

perturbados.

Existe mayor disponibilidad y diversidad de semillas en la temporada de secas

en general comparativamente con las lluvias y una menor disponibilidad y diversidad

de herbáceas en la temporada seca. Se espera que la amplitud de nicho trófico para

semillas y herbáceas disminuya cuando existan más recursos disponibles (secas

para semillas y lluvias para plantas), por efecto de la selección que se da en

ambientes más estables, o que si L. irroratus forrajea de manera generalista una

mayor diversidad disponible aumente su amplitud de nicho trófico.

Se espera que en la dieta de este roedor la herbivoría sea más importante

durante la temporada de lluvias y disminuya al aumentar la desecación en el

ambiente y que la granivoría siga el patrón opuesto.

En la figura 1 se muestran, en una tabla, el tipo de respuestas que se

esperan para cada variable en los diferentes sitios y temporadas.

30

VARIABLE NP P LL S Semillas

en banco de semillas

Mayor diversidad y

disponibilidad

Menor disponibilidad y

diversidad

Menor disponibilidad y

diversidad

Mayor diversidad y disponibilidad

Herbáceas disponibles

Mayor diversidad y

disponibilidad

Menor disponibilidad y

diversidad

Mayor diversidad y disponibilidad

Menor disponibilidad y

diversidad

Semillas en abazones

A) preferencia evidente B) menor

amplitud nicho trófico

A) sin preferencia

evidente B) mayor

amplitud nicho trófico

Menor cantidad, menor diversidad

y menor selectividad

Mayor cantidad, mayor diversidad

y mayor selectividad

Consumo herbáceas

A) preferencia evidente B) menor

amplitud nicho trófico

A)sin preferencia

evidente B) mayor

amplitud nicho trófico

Mayor cantidad, mayor diversidad

y mayor selectividad

Menor cantidad, menor diversidad

y menor selectividad

Figura 1. Tabla del resumen de las respuestas esperadas para cada

variable en cada condición.

31

7. Especie de estudio

Liomys irroratus. Gray, 1868. (Proc. Zool. Soc. London, p. 205.).

(Ratón espinoso, Mexican Spiny Pocket Mouse).

7.1. Taxonomía.

Este ratón pertenece a la familia Heteromyidae la cual es endémica del

continente americano (Dowler & Genoways, 1978) y agrupa seis géneros y

aproximadamente 57 especies (Alexander & Riddle, 2005). La distribución de la

familia es principalmente en las zonas áridas y tropicales, siendo abundante en

vegetación xerófita, matorrales, pastizales, selvas secas y algunos bosques de pino-

encino (Ceballos y Galindo, 1984; Ceballos & Miranda, 2000; Dowler & Genoways,

1978; Schmidly et al., 1993). Los heterómidos son constructores de madrigueras y

comedores de semillas con ecologías superficialmente parecidas (Rosenzweig &

Sterner, 1970).

La familia se encuentra dividida en tres subfamilias: Perognathinae,

Dipodomyinae y Heteromyinae, en ésta última se encuentran dos géneros

cercanamente emparentados (Alexander & Riddle, 1993; Best, 1993; Dowler &

Genoways, 1978): Heteromys y Liomys (éste último descrito por Merriam en 1902).

Liomys comprende cinco especies, cuatro de éstas (L. irroratus, L. salvini, L. pictus y

L. spectabilis) habitan en México (Dowler & Genoways, 1978, Schmidly et al. 1993),

Liomys adspersus se encuentra en Panamá (Williams et al, 1993).

La distribución de los roedores pertenecientes a la subfamilia Heteromyinae

32

está fuertemente influenciada por factores como la humedad y la aridez, ninguna

especie se distribuye en zonas con menos de 250mm de precipitación anual y tienen

una marcada propensión ecológica por ambientes tropicales y sub-tropicales

(Hafner, 1993), Liomys es más tolerante a ambientes con mayor aridez (ej. selvas

secas) que Heteromys, quienes se encuentran en zonas menos áridas como selvas

medianas y altas (Schmidly et al., 1993).

Liomys irroratus se distribuye desde una porción al sur de Texas (EUA) hasta

el sur de Veracruz (México) siguiendo la vertiente del Golfo y en su distribución

occidental desde el centro norte de Chihuahua a partir de la parte norte de Jalisco en

todos los estados del centro de la República hasta llegar a Oaxaca (Figura 2)

habitando 20 estados de la República Mexicana (Ceballos y Galindo, 1984; Dowler &

Genoways, 1978; Schmidly et al., 1993; Villa & Cervantes, 2003). Se le encuentra

generalmente en selvas secas o matorrales espinosos (Sánchez-Cordero & Fleming,

1993; Schmidly et al., 1993). En zonas donde es simpátrico con L. pictus se ha

observado que este último prefiere hábitat más húmedos en comparación con los

hábitat xéricos preferidos por L. irroratus.

Junto con Perognathus flavus son las únicas especies de heterómidos

presentes en el estado de Morelos, pero P. flavus sólo esta registrado para la zona

norte del estado (Alvarez-Castañeda, 1996).

33

Figura 2. Mapa de la distribución de Liomys irroratus. (Villa & Cervantes, 2003).

7.2. Características generales.

Las características generales de este ratón son (Figura 3): pelaje hirsuto, formado

de pelos duros rodeados de pelos más suaves; las partes superiores son de color

gris oscuro con tonos cafés, los pelos rígidos son de color claro, cuentan con una

línea lateral, usualmente presente, de color rosa claro a beige, las partes inferiores

son blancas (Ceballos y Galindo, 1984; Dowler & Genoways, 1978). El pelaje del

juvenil es más gris y consiste de pelos más suaves (Dowler & Genoways, 1978). La

cola es bicolor con punta pincelada, las patas traseras tienen cinco tubérculos

plantares; la garra del segundo dedo de las patas traseras tiene forma de espolón,

diseñada para la huida, los últimos molares son más estrechos que los premolares.

Los huesos pterigoideos tienen un ala ancha, en forma de “U”, las bulas timpánicas

34

son aplanadas, sus incisivos superiores no tienen surcos y el báculo es oval y ancho

en la base terminando en una punta afilada, ligeramente dirigida hacia arriba y un

poco comprimida dorso-ventralmente. La fórmula dentaria de esta especie es la

misma de todos los heterómidos: i1/1, c0/0, p 1/1, m 3/3 para un total de 20. El

número de cromosomas diploides (2n) de este ratón es de 60, con un número

fundamental (FN) de 62 (Dowler & Genoways), algunos trabajos sobre aspectos

genéticos de esta especies son: Cervantes et al., (1999) Patton & Rogers (1993a),

Patton & Rogers (1993b) y Rogers (1990).

Figura 3. Fotografía de Liomys irroratus.

El dimorfismo sexual de esta especie es notorio, el macho es de mayor talla

que la hembra (Ceballos y Galindo, 1984; Dowler & Genoways, 1978; Sánchez &

Romero, 1995). Las medidas (en milímetros, primero se da el promedio y después el

rango, las medidas de machos preceden a las hembras) para esta especie (largo

total (LT) largo de cola (LC) Longitud de pata trasera (LPT)) son: LT: 238 ± 5.18mm

35

(216-262mm); 226 ± 3.14mm (207-251mm). LC: 120.1 ± 3.31mm (106-138mm);

112.5 ± 1.98mm (102-131mm). LPT: 29.2 ± 0.49mm (26-31mm); 28.2 ± 0.27mm (27-

30mm). Éstas y más medidas se pueden consultar en la revisión de la especie

(Dowler & Genoways, 1978). El peso de este ratón varía entre los 34-50 gramos

(Ceballos y Galindo, 1984). Best (1993) señala que la mayor diferencia se da en

medidas anatómicas no craneales, sólo encontrando cuatro medidas que fueron

significativamente diferentes, no siendo tan notorio el dimorfismo como antes se

señalaba, sólo en cuatro medidas, no en siete como señalan Dowler & Genoways

(1978).

7.3. Biología.

Tiene actividad reproductiva durante casi todo el año, aunque el pico

reproductivo parece ocurrir de agosto a noviembre (Dowler & Genoways, 1978).

Álvarez-Castañeda (1996) reporta para Morelos la presencia de hembras preñadas

en mayo y junio, así como lactantes de marzo a junio. Sánchez y Romero (1995)

reportan la mayor actividad reproductiva de machos de esta especie (en El Limón,

dentro de la Reserva de la Biosfera Sierra de Huautla) en julio y agosto, mientras

García-Estrada et al., (2002) reportan, para El Limón también, que la mayoría de las

crias y juveniles los capturaron en noviembre. Aunque en general se reporta que los

heterómidos tropicales tienen períodos reproductivos más prolongados que los de

los heterómidos de zonas desérticas, Sánchez-Cordero y Fleming (1983) reportan

que, varias especies de Liomys (entre las que no se tomó en cuenta a L. irroratus)

tiene un periodo reproductivo restringido estacionalmente y sobre todo a la

36

temporada seca y el periodo inicial de las lluvias.

En los mismos sitios de estudio de este proyecto, la actividad reproductiva de

L. irroratus se encuentra restringida por el régimen de lluvias, Cadena (2003)

encontró individuos reproductivos principalmente en la época de lluvias (de agosto a

noviembre), aunque reporta algunos individuos reproductivos en diciembre, enero,

mayo y junio.

Su ciclo reproductivo es generalmente monoéstrico y dura entre 21 y 28 días,

en cada parto nacen de dos a ocho crías y el promedio es de cuatro (Ceballos y

Galindo, 1984; Ceballos & Miranda, 2000; Dowler & Genoways, 1978).

Los heterómidos en general tienen un metabolismo del agua y una regulación

de su temperatura altamente eficiente, basada en un metabolismo basal bajo

(French, 1993), una actividad renal muy eficiente, la producción de excretas secas,

un bajo índice de pérdida de agua por evaporación y lactancia así como actividad

nocturna. Esto le permite a este grupo sobrevivir en medios secos y cálidos. En el

caso de Liomys estas adaptaciones están menos desarrolladas que en el resto del

grupo (Brylski, 1993; French, 1993; Hafner, 1993; Hudson & Rummel, 1966) ya que

no presenta, por ejemplo, ciclos de torpor comunes en otros miembros de su familia

(French, 1993).

El plano corporal de la subfamilia Heteromyinae es considerado como una

aproximación a la condición ancestral del resto de la familia Heteromyidae y

Geomyidae (Hafner, 1993).

37

7.4. Ecología.

Al igual que la mayoría de los roedores, tiene un lugar fundamental en la base

de diversas redes tróficas siendo un consumidor primario, especialmente de

semillas, por sus hábitos granívoros es un importante dispersor y depredador de

semillas (Ceballos y Galindo, 1984; Ceballos y Miranda, 2000; Dhillion, 1999; Huntly

& Reichman, 1994; MacCracken et al., 1985; McDonald, 2001; Villa y Cervantes,

2003). Es depredado por diversas especies de mamíferos, reptiles y aves (Ceballos

y Galindo, 1984; MacCracken et al., 1985; Sánchez-Cordero & Fleming, 1993; Villa y

Cervantes, 2003).

Su estructura social es compleja, es un ratón, igual que los demás miembros

de su familia, muy territorial que habitualmente tiene zonas de influencia bien

definidas por individuo (Ceballos & Miranda, 2000; Jones, 1993; Sánchez & Romero,

1995; Vázquez, 1997) y que construye madrigueras comunales clasificadas en muy

diversas formas y funciones (Domínguez, 2000). Aparentemente la distribución de

algunas especies está restringida por la presencia de otra especie de Liomys

(Schmidly et al., 1993).

Se ha argumentado que este ratón puede llegar a convertirse en una plaga

para la agricultura debido principalmente a la ausencia de depredadores y a sus

hábitos granívoros (Ceballos y Galindo, 1984). Sin embargo, la evidencia recopilada

por Cadena (2003) en la misma zona de muestreo en la que se realizó el presente

estudio, sugiere que es una especie que se ve afectada por la perturbación natural,

en este estudio se encontraron densidades bajas en hábitat previamente señalados

como muy utilizados por la especie (e. g. bardas de piedra y cercanías de campos

38

de cultivo) según Davis & Russell (1954), sembradíos y bordes (Mellink, 1995).

García-Estrada et al., (2002), éste último trabajo se realizó también en la Sierra de

Huautla.

7.5. Dieta.

Como fue señalado anteriormente (ver sección 4) la mayoría de los trabajos

de dieta de heterómidos han sido centrados en especies de zonas desérticas por lo

que existe muy poca información sobre la dieta de las especies tropicales

(Heteromyinae), aunque se ha observado que son principalmente granívoras y que

consumen, en general, semillas de mayor tamaño que las especies de zonas

desérticas (Reichman & Price, 1993). Se reporta que los heterómidos tropicales

pueden remover una gran proporción de las semillas de las sombras de semillas,

sobre todo en las selvas secas y que son importantes depredadores de semillas

post-dispersión (Howe & Smallwood, 1982; Janzen, 1986a; Sánchez-Cordero &

Fleming, 1993).

Los heterómidos tropicales consumen frutos y semillas encontrados en el

suelo pero su dieta también incluye otras partes de material vegetal y artrópodos

(Sánchez-Cordero & Fleming, 1993). Sin duda, su comportamiento de remoción de

semillas y almacenamiento de las mismas, tiene y ha tenido un papel preponderante

en la demografía de las plantas de bosques tropicales (Fleming, 1983a, Fleming,

1983b, Sánchez-Cordero & Fleming, 1993).

La evidencia sugiere (aunque es muy variable) que la dieta de los

heterómidos refleja la disponibilidad de recursos en un momento determinado y que

39

sus dietas varían substancialmente entre estaciones y años en la proporción total de

semillas, material vegetal e insectos, esencialmente de acuerdo a los patrones

temporales de abundancia de estas categorías (Reichman, 1975; Reichman y Price,

1993).

El consumo de una especie particular de semilla puede cambiar abruptamente

dependiendo de su abundancia y la de especies con diferente palatabilidad

(Reichman, 1975). En general los heterómidos pueden modificar la selección de

semillas en respuesta a cambios ambientales y a sus requerimientos nutricionales

(Reichman, 1975; Reichman y Price, 1993) o reproductivos (Reichman & Van de

Graaff, 1975). Por medio del almacenamiento de semillas, tanto en madrigueras

como en almacenes externos (Shaw, 1934), puede mitigar la escasez de estas

durante períodos estacionales (Sánchez-Cordero & Fleming, 1993). Reichman & Van

de Graaff (1975) reportan (para heterómidos de zonas desérticas) que al parecer

consumen plantas frescas en la temporada reproductiva.

Dado que no se ha hecho un estudio completo de la ecología de esta especie

es poca la información disponible sobre la dieta de Liomys irroratus. Se ha reportado

que se alimenta de una gran variedad de semillas y de hojas de plantas silvestres

(Villa y Cervantes, 2003). Sin embargo, se tiene mucha información sobre su especie

hermana (Cervantes et al., 1999) L. pictus que también habita en selvas secas y

dado que los heterómidos tienen ecologías parecidas (Rosenzweig & Sterner, 1970)

se puede suponer que L. irroratus se comportará de forma muy parecida. Villa y

Cervantes (2003) señalan que la cantidad de plantas y artrópodos en la dieta de

Liomys irroratus parece variar de acuerdo a las poblaciones, lo que sugiere su

carácter oportunista.

40

Hernández (2000) encontró en sus madrigueras semillas de 155 especies,

equivalentes al 23% de las plantas reportadas para la zona (Lott, 1985).

Predominaban las semillas de tres familias: Fabaceae, Convolvulaceae y

Euphorbiaceae, de especies arbóreas y lianas. Cuatro especies representaron el

80% de la biomasa total de semillas encontrada en las madrigueras: Spondias

purpurea, Jatropha sp., Cordia sp. y Serjania brachicarpa. Del total de géneros y

especies registradas en las madrigueras, 30 géneros (entre ellos 12 especies)

también están presentes en la Sierra de Huautla. En el mismo estudio se

encontraron 177 especies de semillas en muestras de suelo y la diversidad de estas

no difirió entre estaciones; un dato importante es que algunas de las semillas más

abundantes en las madrigueras no eran las semillas más abundantes encontradas

en el suelo.

Mandujano (2002) reporta a L. pictus como consumidor de frutos de Spondias

purpurea. Bullock (2002) reporta a este roedor como el depredador más importante

para las semillas de la especie Cordia eleagnoides, una de las especies arbóreas

más conspícuas y de gran importancia en las selvas secas del occidente del país.

Mendoza (1997) reportó que para este mismo roedor, de un total de 10,300

capturas, el 9.4% de los ratones tenían contenido en sus abazones y este consistió

en un 98% de semillas y apenas el 1.2% de restos de insectos y moluscos.

En dicho estudio se encontraron semillas de 144 diferentes especies en los

abazones, de las que sólo se pudo identificar 77 y de estas, el 60% pertenecían a

las siguientes familias: Fabaceae, Euphorbiaceae, Sapindaceae, Boraginaceae y

Convolvulaceae. Sin embargo, la especie que más semillas acumuló fue el pasto

Panicum sp. (17% del total de semillas), seguida de Lonchocarpus lanceolatus (7%)

41

e Ipomea sp. (5%). De las 77 especies identificadas, sólo se pudo obtener

información sobre la forma de vida para 44 especies, que sin embargo representaron

el 75% de las semillas encontradas en los abazones. La mayor parte fueron

especies que son árboles o lianas, es decir, estas formas de vida son las que

podrían verse más afectadas por la actividad de este ratón (Mendoza, 1997).

El número total de especies y el número total de semillas en los abazones

acumuladas por año varió entre años (Mendoza, 1997). El número de semillas por

muestra de abazón fluctuó entre una y 209, con un promedio de cuatro semillas por

muestra, con los valores mayores para la temporadas de secas temprana y los

valores menores para la temporada de lluvias (Mendoza, 1997).

Ceballos (1989) logró recolectar 46 especies de semillas en abazones en

selva seca y bosque de arroyo de Jalisco, encontró que las familias más frecuentes

fueron: Fabaceae, Euphorbiaceae y Convolvulaceae, siendo Phaseolus microcarpus,

Cyclanthera multifoliolata, Ipomoea spp., y Recchia mexicana las especies más

abundantes.

En la Sierra de Huautla se encuentran presentes varios de los géneros y

especies que se han reportado en abazones de otras especies del género Liomys,

(Carter & Genoways, 1978; Ceballos, 1989; Janzen, 1986a; Pérez-Saldaña, 1978;

Sánchez-Cordero & Fleming, 1993) como: Acacia farnesiana, Ceiba aesculifolia,

Cissus sp., Cochlospermum vitifolium, Crescentia alata, Enterolobium ciclocarpum,

Ficus sp., Ipomoea arborescens, Ipomoea sp., Lasiacis ruscifolia, Lonchocarpus sp.,

Lysiloma divaricata, Mimosa spp., Phaseolus lunatus, Phaseolus sp., Pithecellobium

sp., Serjania brachycarpa, Sida sp. y Tephrosia sp.

Un listado más completo de se encuentra en la Tabla 8 del presente trabajo.

42

Los ratones de la familia Heteromyidae son, junto con las hormigas, los

granívoros más importantes de los desiertos y hábitats áridos de norteamérica

(Brown et al., 1979) y han sido ampliamente estudiados en cuanto a su selectividad

alimentaria y su importancia como depredadores y dispersores de semillas (Briones

& Sánchez-Cordero, 1999; Brown et al., 1979; Fleming, 1983a; Fleming, 1983b;

Janzen; 1971; Janzen, 1986a; Reichman & Van de Graaf, 1975; Rosenzweig &

Sterner; 1970; Shaw, 1934; Smigel & Rosenzweig, 1974).

Los heterómidos tienen una función clave en las interacciones de las redes

tróficas, la dispersión, la depredación de semillas y en la estructura demográfica de

las plantas de los habitats donde se encuentran, sean selvas tropicales (Fleming,

1983a; Fleming, 1983b; Janzen, 1971; Janzen; 1986; Janzen & Martin, 1982;

Sánchez-Cordero & Fleming, 1993) o ambientes semi desérticos y desérticos (Brown

& Harney, 1993; Reichman & Price, 1993; Mares, 1993).

Janzen (1986a) indica que Liomys salvini consume casi la totalidad de las

semillas de Enterolobium ciclocarpum dispersadas por medio de las excretas de

mamíferos grandes.

Fleming (1983a y 1983b) señala que Heteromys desmarestianus y Liomys

salvini son elementos clave para las selvas medianas y secas, respectivamente, de

Costa Rica.

43

8. Sitio de Estudio

El estudio se realizó en la región sur del estado de Morelos, en sitios de selva

seca dentro de la Reserva de la Biosfera Sierra de Huautla y en su área de

influencia (figura 4).

Figura 4. Mapa de la ubicación de la sierra de Huautla.

Esta reserva limita al sur con los estados de Puebla y Guerrero y tiene una

superficie total de 59,310.65 hectáreas ubicadas entre altitudes de los 700 a los

2,400msnm (Dorado et al. En prensa). La mayor parte de dicha extensión protege

selva seca (Bosque Tropical Deciduo según la clasificación de Rzedowski, 1978 o

Dorado et al. En prensa.

44

Selva Baja Caducifolia según la de Miranda y Hernández, 1963). Dentro de la

reserva coexisten 29 comunidades de cinco municipios de Morelos (Amacuzac,

Puente de Ixtla, Jojutla, Tlaquiltenango y Tepalcingo). Con cerca de 20,000

habitantes, dedicados en su mayoría a actividades agropecuarias, como la cosecha

de maíz, frijol, calabaza, chile y cacahuate y la cría de ganado vacuno, caprino,

porcino y equino. Los principales tipos de suelo de la zona son: feozem háplico,

regosol éutrico y en los cuerpos montañosos se encuentran litosoles (Dorado et al.,

en prensa).

El clima en general es Awo"(w) (i’) g, correspondiente a un clima cálido, el

más seco de los subhúmedos, con régimen de lluvias de verano (junio a octubre, con

picos entre julio y septiembre) la precipitación media anual es de aproximadamente

900 mm y presenta canícula (Dorado et al., en prensa).

Para el periodo de 1980 a 2001, la precipitación media anual fue de 851 mm y

la temperatura media mensual oscilo entre 22.5o en diciembre y 26.6oC para mayo

(datos de la estación meteorológica de Huautla, Comisión Nacional del Agua).

A la fecha se han registrado en esta región un total de 937 especies de

plantas vasculares, incluidas en 449 géneros y 130 familias. Las familias más

abundantes en cuanto a número de especies son: Fabaceae, Poaceae, Asteraceae

y Burseraceae (Dorado et al., en prensa).

Se han registrado más de 350 especies de vertebrados (Dorado et al., en

prensa): ocho de peces, 11 de anfibios, 52 de reptiles, 220 de aves y en el caso de

los mamíferos se han reportado 66 especies (de 18 familias) que representan el 47%

de las especies registradas en el estado de Morelos; de éstas, 12 son roedores: dos

de las cuales son ardillas (Sciuridae) y 10 ratones, nueve de ellas pertenecen a la

45

familia Muridae: Baiomys musculus, Hodomys alleni, Reithrodontomys fulvescens

(recolectado por primera vez en la zona por Cadena (2003) y el presente estudio),

Reithrodontomys megalotis, Oligoryzomys fulvescens, Oryzomys couesi (probable,

no recolectado), Peromyscus levipes, Peromyscus melanophrys y Sigmodon

hispidus., y sólo un representante de la familia Heteromyidae: Liomys irroratus

(Sánchez y Romero, 1995).

A pesar de su protección, la selva seca de la Sierra de Huautla sufre de

amenazas tales como la tala de árboles, para venta o uso de la madera o leña; la

cacería de subsistencia y la deforestación de muchas áreas para la creación de

potreros y campos de cultivos (Dorado et al., en prensa). Esto ha ocasionado que

en el total de la superficie de la reserva que aún presenta selva seca (60%),

aproximadamente una tercera parte este cubierta por selva seca perturbada y que

del restante 40% de la reserva, la vegetación natural haya sido transformada en un

36% por las actividades humanas, en particular las agropecuarias (Dorado et al., en

prensa).

En un estudio realizado en la Sierra de Huautla se encontró que las familias

más abundantes que en el banco de semillas eran Fabaceae y Burseraceae,

(considerando sólo las especies arbóreas) tanto por el número de especies como por

el número de individuos (Arias, 1986). La cantidad (tanto de especies como de

semillas) y composición de especies del banco de semillas varía mucho a lo largo

del año, pudiendo prolongarse más allá de la temporada de fructificación de las

especies (Arias, 1986).

46

9. Metodología

9.1. Delimitación de períodos estacionales.

Para propósitos del análisis de los resultados y considerando que el factor

ambiental más notable en la zona es la estacionalidad climática, se determinaron

tres temporadas de análisis, con base en la distribución de la precipitación y su

efecto en el ambiente: a) temporada de lluvias de junio-octubre del 2002, meses en

los que hay agua disponible todo el tiempo y todas las plantas tienen follaje; b) la

temporada de transición entre la época lluviosa y los meses más secos del año, seca

temprana de noviembre del 2002-febrero del 2003, en la que ya no hay agua

disponible y la humedad en el suelo y el follaje de los árboles va disminuyendo

paulatinamente y; c) la temporada de mayor sequía o seca tardía de marzo-mayo del

2003, en la que la humedad del suelo se ha perdido, todas las plantas perdieron su

follaje y prácticamente no hay agua disponible.

9.2. Elección de los sitios y determinación del grado de perturbación.

La elección y determinación del grado de perturbación de los sitios de trabajo

se realizó con base en el mapa de vegetación de la Reserva de la Biosfera Sierra de

Huautla elaborado por el Laboratorio de Sistemas de Información Geográfica del

CEAMISH (Figura 5).

En dicho mapa se seleccionaron cuadros de 1 km2 (Figura 5) en áreas de la

reserva con la mayor cobertura de selva continua posible y áreas en donde fuera

evidente que la vegetación fue afectada o transformada. En total se seleccionaron

47

seis sitios pareados (un sitio poco perturbado y otro bastante perturbado) de forma

tal que se minimizarán los problemas logísticos para su estudio y que tuvieran el

mayor contraste posible en términos de su cobertura (Figura 6). Se seleccionaron

por pares para tratar de controlar el efecto que otras variables no evaluadas (e.g.

microcuenca, tipo de suelo) pudieran tener sobre el contraste entre un sitio no

perturbado y uno perturbado.

Se consideraron como sitios no perturbados aquellos con cobertura

continua y conservada de selva seca y una mínima presencia de campos de cultivo o

de tipos de vegetación secundaria en las cercanías, los sitios perturbados fueron

seleccionados en zonas donde la cobertura estuviera alterada y que tuvieran una

mayor cercanía con campos de cultivo, vegetación secundaria y mayor presencia de

ganado.

Una vez seleccionados los sitios en el mapa, se procedió a corroborar en

campo la condición de cada sitio con la obtención de datos sobre las características

de: a) la cubierta arbórea (e. g. diversidad, tamaño) y si había o no un estrato

arbustivo; b) la presencia de especies características de sitios poco perturbados (ej.

Conzattia multiflora; Crescentia alata; Pachycereus sp.; Cissus sp.; Rzedowski,

1978; Miranda & Hernandez, 1963) y, c) que hubiera baja intensidad de pastoreo y

baja evidencia de tala y agricultura.

Los tres pares de sitios fueron ubicados como indican la Figura 5 y la Figura 6.

La nomenclatura, condición y coordenadas geográficas donde se ubicaron los

cuadrantes se encuentran en la Tabla 1.

48

Figura 5. Ubicación de los cuadrantes de ratones (100Ha c/u)

46,9

96,7

25,9

88,6

15,13

38,75

0%

20%

40%

60%

80%

100%

XP XNP

AX

VIRG

EN QP

QNP

Sitios

Por

cent

aje de

tipo

de ve

getacióo

n

Erosion

Vegetación de Galeria

Cuerpos de Agua

Infraestructura

Pastizal

Veg. Sec.

Agricultura

sbc pertSelva Baja

Figura 6. Porcentajes de cobertura en los sitios de estudio (100 ha).

Quilamula

Qnp Qp

Vgn

Ajn Xnp

Xp

Laboratorio de Sistemas de Información Geográfica, CEAMISH.

Laboratorio de Sistemas de Información Geográfica, CEAMISH.

49

9.3. Metodología de trampeo. Dentro de cada sitio de muestreo se ubicó una gradilla 70x70 m cada una,

con estaciones de trampeo separadas entre sí cada 10 m. En cada gradilla se

colocaron un total de 88 trampas Sherman, 64 de ellas en el suelo y 24 en los

árboles o lianas aproximadamente a 1.5 m de altura, en las estaciones pares (Figura

7), estas últimas trampas se colocaron para capturar especies arborícolas en

conjunto con el trabajo de Cadena (2003).

Figura 7. Diseño de los sitios de trampeo. Cada punto es la ubicación de una trampa, los puntos rellenos señalan donde se pusieron las trampas en árboles y lianas.

En total cada gradilla estuvo compuesta por 88 trampas Sherman y un área

de muestreo de 4,900m2. Cada gradilla se operó tres noches consecutivas al mes,

durante 11 muestreos, de agosto de 2002 a mayo de 2003. Las trampas fueron

7

0

1

2

3

4

5

6

A B C D E F G H

50

cebadas con una mezcla de avena, mantequilla de cacahuate y extracto de vainilla,

siguiendo a Romero-Almaraz et al., (2000). Las medidas y datos que se les tomaron

a los ratones capturados están detallados en el Anexo 1.

Específicamente, por haber realizado el marcaje de los animales por medio de

ectomización de falanges (por si misma estresante) se trato de disminuir (en lo

posible) el estrés en la manipulación y el mismo marcaje de los roedores, siguiendo

las recomendaciones pertinentes hechas por diversos autores (Animal Care and Use

comittee, 1998; Jones et al., 1996; The Association for the Study of Animal

Behaviour, 2000; Rudran & Kunz, 1996).

9.4. Estimación de la diversidad y disponibilidad de recursos

alimentarios.

La preferencia de un consumidor para un componente particular (ej. alimento)

es el reflejo de la posibilidad de que dicho componente sea escogido si se oferta en

la misma proporción que todos los elementos (Chesson, 1983; Johnson, 1980). Para

poder determinar la preferencia sobre algún elemento de su dieta es necesario saber

la disponibilidad que tiene en el ambiente (Norbury & Sanson, 1992). Para calcular la

preferencia en campo, donde la disponibilidad no es la misma para los recursos, ésta

se calcula en valores de preferencia relativos. (Norbury & Sanson, 1992).

Muestreo de herbáceas.

Para obtener la información sobre la disponibilidad y la diversidad de los

recursos alimentarios de Liomys irroratus se diseñó un muestreo de cuadrantes para

el que se ubicaron de manera azarosa 10 cuadrantes de 1 m2 en cada uno de los

51

sitios de trampeo por cada temporada (Figura 8). En cada cuadrante se cosechó

toda la biomasa vegetal viva de tallos no leñosos y que midiese menos de 1.5 m de

alto que naciera dentro del cuadrante, el material se separó en campo en

morfoespecies (con base en diferencias en su morfología), para cada morfoespecie

se herborizaron ejemplares para su identificación.

0.25m2

1m2

0.25m2

1m2

Figura 8. Cuadrante de vegetación, el cuadrante de 0.25m2 fue utilizado

para muestraear el banco de semillas.

Del material recolectado se obtuvieron; su abundancia, frecuencia de

ocurrencia, biomasa en fresco y en seco (secando las muestras entre 60-70° C

hasta alcanzar un peso constante), todo para cada sitio en las tres temporadas ya

mencionadas.

Muestreo del banco de semillas.

En una sección de 0.25 m2 de cada cuadrante de 1 m2 (Figura 8), se

52

recolectó todo el suelo y hojarasca disponible (aproximadamente los primeros 5-7

cm) en bolsas de plástico que se etiquetaron con los datos respectivos. Estas

muestras fueron cribadas en el laboratorio, con mallas edafológicas de 1mm,

separando las semillas encontradas para determinar la disponibilidad y diversidad de

especies en el banco de semillas.

Las semillas encontradas fueron determinadas a nivel de especie, cuando fue

posible, consultando a especialistas y pobladores de la zona (sus nombres están

incluidos en los agradecimientos). También se comparó el material con colecciones

privadas de semillas y directamente con las plantas, que en ese momento tuvieran

semillas, en la zona de estudio. De cada muestra se contabilizó el número de

semillas, la biomasa (gr) por especie, el promedio de especies, de semillas

(individuos) y biomasa. Las especies que no pudieron ser identificadas se

agregaron al análisis como morfoespecies

9.5. Obtención y preparación del catálogo de referencia de los

caracteres anatómico foliares de las herbáceas disponibles para Liomys

irroratus.

Para la identificación de los fragmentos microscópicos de material vegetal en

las excretas, fue necesario generar un catálogo de referencia de estructuras

anatómico foliares de las herbáceas encontradas en los muestreos de vegetación y

que potencialmente podrían ser consumidas por los herbívoros (Baumgartner &

Martin, 1939; Dusi, 1949; Stewart, 1967). Para ello se hicieron preparaciones

microscópicas de las plantas, siguiendo las recomendaciones de Sandoval-Zapotitla

53

(en prensa). Para hacer las preparaciones es necesario tener material vegetal en

fresco o fijado utilizando formol-acético-alcohol, FAA, (Anexo 2) posteriormente se

prepararon laminillas siguiendo dos técnicas distintas: montadas con gelatina

glicerinada (fórmula en el Anexo 3 y técnica en Anexo 4) para un montaje temporal

con una duración de dos a tres años o por medio de un montaje permanente, con

tinción de Safranina (Anexo 5).

A partir de las laminillas se generó un catálogo de fotografías de estructuras

anatómicas de las especies recolectadas durante los muestreos de vegetación para

permitir la identificación (en las preparaciones microscópicas de las excretas) de

dichas estructuras y por tanto de la composición de la dieta de este roedor.

La nomenclatura e identificación de las estructuras anatómicas de las plantas

se logró con el apoyo de botánicos (incluidos en los agradecimientos) y con el uso

de bibliografía especializada para monocotiledóneas (Ellis, 1979; Johnson et al.,

1983; Sandoval-Zapotitla, en prensa) y dicotiledóneas (Johnson et al., 1983;

Sandoval-Zapotitla, en prensa).

9.6. Análisis del contenido de abazones.

Todos los abazones de los ratones capturados (capturas y recapturas) fueron

revisados visual y tactilmente en campo y todos los contenidos encontrados dentro

de ellos fueron recolectados, etiquetados y guardados para su análisis en el

laboratorio.

Éstos contenidos fueron identificados por medio de la comparación directa

con semillas encontradas en los muestreos de banco de semillas para tener un

54

catálogo de semillas unificado, en los casos en los que fue necesario para su

determinación se consultó a especialistas, pobladores de la zona de muestreo,

colecciones tanto privadas como públicas de semillas (mencionadas en los

agradecimientos) y se recolectaron posteriormente las plantas que las producen.

Para poder estimar la frecuencia relativa de cada especie de semilla en la

dieta, la diversidad de especies, la equidad, el valor de importancia y el análisis de

similitud del número relativo de individuos, selectividad y preferencia (todos por

condición por temporada) Se tomaron datos del material identificado (todos ellos por

condición y temporada) como: número de especies por muestra, número de

muestras, biomasa (gr) por semilla por muestra, promedio de especies, individuos,

biomasa y medida (mm) promedio por muestra .

9.7. Análisis de las excretas.

Las muestras de excretas se procesaron siguiendo la técnica (Anexo 6)

sugerida por Holechek (1982). Esta técnica es similar a la usada para la preparación

del catálogo de referencia, es más sencilla y rápida que otras (ej. Sparks &

Malechek, 1968; Williams, 1969) y ha sido ampliamente utilizada (Holechek & Gross,

1982a; Holechek et al., 1982a; Holechek et al., 1982b; Vavra & Holechek, 1980).

Se montaron y analizaron tres laminillas (cada laminilla compuesta por tres

pellets de una sola muestra, osea un individuo) por sitio y por temporada (para un

total de 54 laminillas analizadas). Cada laminilla se dividió en 20 campos, elegidos al

azar, siguiendo a Holechek & Vavra (1981) que reportan que éste es el número

mínimo de observaciones por laminilla para asegurar la representatividad de cada

55

muestra y permitir la comparación entre laminillas. La observación y conteo se hizo a

20X, aumentando a 40X o 100X cuando se requirío para facilitar la identificación de

un fragmento particular. Se siguió la recomendación de Holechek & Gross (1982b)

moviendo las laminillas al revisarlas para facilitar la identificación de fragmentos.

En cada laminilla analizada se determinó la frecuencia relativa de aparición de

cada fragmento diferente encontrado (Holechek, 1982; Sparks & Malechek, 1968). El

material se identificó a nivel específico hasta donde fue posible, si no a nivel de

familia tomando en cuenta por separado el material no determinable, para saber la

proporción de fragmentos que pudieron ser definidos.

Para conocer diferentes variables de la dieta se calcularon, por condición por

temporada, la diversidad, la equidad, la frecuencia relativa, la amplitud del nicho

trófico y un índice de similitud del número relativo de individuos.

La frecuencia de ocurrencia de cada especie en la dieta se estimó como el

número de campos microscópicos en los que se encontró esa especie, dividido entre

la suma total de ocurrencias en todos los campos analizados y multiplicado por 100.

Estoa valores se calcularon para cada condición y temporada.

Los fragmentos encontrados en las laminillas se determinaron por medio de la

comparación directa con las fotografías obtenidas del catálogo de referencia, las

principales características comparadas fueron:

1. La forma, alineación y tamaño de las células epidérmicas.

2. La forma y el grosor de las paredes anticlinales (perpendiculares al

mesodermo) y paradermales (paralelas al mesodermo) de las células epidérmicas.

3. La presencia o ausencia de tricomas y bases de tricomas, así como su

forma, grosor y características de las paredes, la cantidad y forma de sus células,

56

tanto de la proyección como de la base, en particular la célula Terminal.

4. La presencia de contenidos celulares (cristales de oxalato de calcio en

forma de drusas, rafidios, prismáticos, solitarios o agregados; sílice, especialmente

para monocotiledoneas; contenidos en idioblastos; contenidos de apariencias

resinosas, aceitosas, acuosas) tanto en tricomas como en células epidérmicas.

5. Refringencia a la luz polarizada, tanto de las paredes celulares como de los

contenidos.

9.8. Evaluación de la selectividad y la preferencia relativas.

Tanto la evaluación de la selectividad como de la preferencia de las especies de

semillas en abazones como las de herbáceas en excretas se analizaron de manera

relativa y no absoluta, siguiendo las sugerencias de Johnson (1980).

La selección de un componente de la dieta es el proceso por el cual el

consumidor elige dicho componente (Johnson, 1980) por lo que para este trabajo la

selectividad relativa (en adelante referida como selectividad) se determinó como

las especies que son seleccionadas dependiendo de su disponibilidad en el medio.

Una especie seleccionada es la que se consume por encima de su disponibilidad,

mientras que una especie utilizada puede ser consumida de manera accidental o por

debajo de su disponibilidad en el ambiente.

Para evaluar la selectividad de los diferentes recursos alimentarios en la dieta de

L. irroratus, se compararon los valores de las frecuencias de ocurrencia de las

diferentes categorías tróficas (especies) encontradas tanto en los contenidos de

abazones como en las excretas con los valores de disponibilidad de semillas y

57

herbáceas en los sitios de estudio utilizando el índice estandarizado de selección

de Manly-Gresson (Bi).

Éste índice es una estandarización del índice de selección (Krebs, 1999) de

forma en que la suma del Bi todos los recursos sea 1.0, utilizando la siguiente

fórmula:

Bi=ŵi / nΣi=1ŵi

Donde Bi= al índice estandarizado de selección para la especie i

ŵi= índice de selección para la especie i calculado como: ŵi=oi / pi.

Donde oi es la frecuencia relativa en que la especie i es consumida y pi es la

frecuencia de ocurrencia de la especie i en el medio, los valores superiores a 1.0

indican preferencia y valores menores a 1.0 indican aversión (Fagerstone et al.,

1981; Krebs, 1999; Reichman, 1975).

La estandarización del índice se llevó al cabo siguiendo las sugerencias de

Chesson (1978) y Manly et al., (1993, Citado de Krebs, 1999) para utilizar el índice

de modo que los radios estandarizados (los valores por medio de los cuales se

determina si una especie es o no preferida) se encuentren entre 0.0 y 1.0. Cuando

los radios estandarizados son iguales a 1/número de recursos indican que no existe

preferencia. Valores menores a éste indican que el recurso es relativamente evitado

y valores superiores indican que es seleccionado (Krebs, 1999).

La preferencia de un consumidor por una especie en particular es un reflejo

de la probabilidad de que este componente sea elegido si la disponibilidad en el

ambiente es igual en todas las especies (Johnson, 1980); por lo que la preferencia

relativa ( en adelante referida como preferencia) en este trabajo se define como la

58

posición de un componente de la dieta conforme a los demás, utilizando un método

por el cual la disponibilidad no varía dependiendo de los componentes incluidos en

el análisis.

La preferencia se determinó de acuerdo al índice de Johnson (tij) quien

señala que es importante que los índices de preferencia no sean dependientes de

las especies incluidas en ellos (pues índices como el de electibidad de Ivlev o el de

selectividad de Manly-Gresson tienen problemas al definir el orden de las especies

preferidas dependiendo de la inclusión o exclusión de especies al análisis) así como

de eliminar la probabilidad de que los resultados sean interpretados de forma

absoluta (Johnson, 1980).

El índice de Johnson (1980) se calcula con la siguiente fórmula:

tij =rij-sij

Donde tij es el índice de preferencia de la especie i para el consumidor j.

rij: el uso (consumo) de un componente i por un consumidor j.

sij: la disponibilidad de un componente i para un consumidor j.

A partir de los resultados de este índice se ordenan las especies

(componentes) de mayor a menor valor de tij para obtener una medida relativa del

orden en que son consumidos, siendo los componentes de valores más altos más

preferidos que los de valores menores.

Para ambos índices, (selectividad y preferencia) por requisito de las

metodologías, solo se incluyeron las especies que son consumidas y que tienen

valores de disponibilidad, las especies que no cumplen esto fueron excluidas del

análisis, dado que no es posible determinar ni la selectividad ni la preferencia de

59

especies para las cuales no se conoce la disponibilidad en el medio.

9.9. Análisis estadísticos.

Para calcular la eficiencia del trabajo de muestreo en todos los resultados

(herbáceas y semillas en el medio, así como en semillas en abazones y contenido de

excretas) se calcularon curvas de acumulación de especies (Spp observadas,

Chao1, Chao2, Jacknife1 y Jacknife2) que permiten observar que porcentaje del

total de especies se obtuvo en el muestreo, dependiendo de la tasa de

descubrimiento de nuevas especies. Éstas se calcularon con el programa

Biodiversity Pro (Mac Aleece et al., 1997).

Los análisis que se realizaron de: diversidad, Shannon (H´ log base 10),

Simpson (1/D), equidad (J´) y de similitud (distancias euclidianas, con anclaje

promedio mínimo). Todos fueron calculados con el programa Biodiversity Pro (Mac

Aleece et al., 1997).

El análisis de las diferencias en los valores de número de muestras, número

de especies (o morfoespecies), biomasa, frecuencia de ocurrencia, diversidad,

equidad y amplitud de nicho tanto para los datos de muestreo de ratones en campo,

herbáceas, semillas en suelo, contenido de abazones y dieta, fue realizado para la

condición de perturbación y la estacionalidad, por medio de un análisis de varianza

multivariado (MANOVA) de medidas repetidas con efecto de bloque (Von Ende,

1993). El diseño con bloques se realizó para disminuir el error experimental debido a

la heterogeneidad de los sitios. En los casos en los que la varianza no fuera

homogénea o que los datos tuvieran distribuciones no normales fueron normalizados

60

por medio de una conversión con Log base 10, para después analizarlos de nuevo.

Todos estos análisis fueron realizados con el programa JMP 3.2.2. (SAS institute

inc., 1997).

Para determinar la amplitud de nicho trófico de Liomys irroratus se utilizó la

fórmula de Levins (1968):

B= 1/ Σpi²

Donde pi es la sumatoria de los cuadrados de las frecuencias relativas de

cada categoría trófica (ej. especie de semilla o herbácea). Los valores de B están

entre 1 y el número de categorías tróficas (especies) consideradas. Estos valores se

calcularon por condición y temporada.

Para complementar los resultados de los índices de diversidad, equidad y

amplitud de nicho trófico y para tomar en cuenta la variación en la composición de

especies (la cual no es calculada por los índices anteriores) se calcularon:

1. El valor de importancia (Krebs, 1985): que es la sumatoria de la

abundancia, la biomasa y la densidad relativas de la especie i para conocer su

importancia ecológica comparativamente con las demás especies disponibles.

2. Y análisis de χ2 para determinar si la condición y la estacionalidad causan un

cambio en la composición de especies que L. irroratus transporta o consume (para lo

cual también se usó JMP (SAS institute inc., 1997).

61

10. Resultados

10.1. Resultados del trampeo de ratones.

El esfuerzo de trampeo (sensu Jones et al., 1996) fue de 9,124

noches/trampa reales. En este trabajo el esfuerzo de trampeo fue considerado como

el número de trampas colocadas por el número de noches operando, menos el

número de trampas encontradas inactivas (ej. cerradas sin ratón, abiertas sin cebo,

en las que se capturó otra especie) restando también el número de trampas en árbol

(no disponibles para Liomys irroratus).

Se capturaron 720 ratones (incluidas 400 recapturas), con un éxito de captura

del 7.9%. Las capturas fueron marginalmente más frecuentes (F(2,1)=135.214 p=0.06)

en los sitios no perturbados; (198 capturas y 266 recapturas contra 122 capturas y

134 recapturas en los perturbados).

10.2. Dinámica de la comunidad de herbáceas.

En los muestreos de vegetación se recolectaron 38 morfoespecies de

herbáceas de las cuales 29 fueron identificadas a nivel especie, siete hasta género,

una a familia y una que no pudo ser identificada (tabla 2). Se recolectaron, de

manera no significativa, más especies en lluvias que en cualquiera de las

temporadas secas. Los datos muestran un ligero aumento del número de especies

en sitios no perturbados sobre sitios perturbados a lo largo de la temporada seca,

ésta tendencia tampoco fue significativa.

62

Las curvas de acumulación de especies indican que la representatividad del

muestreo fue de 68-97% de las especies calculadas para la zona de muestreo.

Se encontraron diferencias marginalmente significativas (F(1,2)=10.965 p=0.08)

en la biomasa a lo largo del año, existe una mayor biomasa en la época de lluvias

que en cualquiera de las temporadas secas. Los datos muestran una tendencia no

significativa a que en los sitios no perturbados exista más biomasa que los

perturbados.

El número promedio de plantas y de biomasa por m2 no fueron

significativamente diferentes por la estacionalidad o condición.

A pesar que la diversidad no difirió significativamente por condición o

temporada se pueden observar dos tendencias (Figura 9 y Figura 10): para el caso

de los sitios no perturbados se observa la disminución de la diversidad en el inicio de

la temporada seca y un importante aumento al final de la temporada seca. Por el

contrario, los sitios perturbados muestran un aumento en el inicio de la temporada

seca y una disminución al finalizar la temporada seca.

63

0.6

0.8

1

1.2

Ll S1 S2

temporada

Shan

non

(H´)

PNp

Figura 9. Índice de diversidad de Shannon (H´Log10) para las herbáceas, por condición por temporada. P=perturbado Np=no perturbado Ll=lluvias S1=secas tempranas S2= secas tardías.

0

2.5

5

7.5

10

Ll S1 S2Temporada

Sim

pson

(1/D

)

PNp

Figura 10. Índice de diversidad de Simpson (1/D) para las herbáceas, por condición por temporada. P=perturbado Np=no perturbado Ll=lluvias S1=secas tempranas S2= secas tardías.

64

La equidad (Figura 11) no difirió a través de las temporadas, pero se nota

una tendencia no significativa al aumento de la equidad a través del tiempo, mayor

en secas tardías a menor en lluvias. Existe una tendencia no significativa a una

mayor equidad en los sitios no perturbados que en los perturbados. Este aumento en

la equidad a través de las temporadas secas es debido a un recambio en la

composición de las especies a lo largo del tiempo; algunas especies (ej. Oplismenus

burmannii, Panicum trichoides, Sida glabra) presentan disminuciones en su

abundancia con la desecación, mientras en otras (ej. Tetramerium nervosum,

Elytraria imbricata, Brickelia difussa y Mellampodium sp) se observa un aumento en

su abundancia durante las temporadas secas.

0.5

0.6

0.8

0.9

1.0

Ll S1 S2Temporada

Equi

dad

(J́)

PNP

Figura 11. Equidad (J´) de las herbáceas por condición por temporada. P=perturbado Np=no perturbado Ll=lluvias S1=secas tempranas S2= secas tardías.

El valor de importancia a nivel familia muestra alta heterogeneidad a lo largo

de las diferentes temporadas y ambas condiciones, teniendo como las familias más

importantes: Poaceae, Acanthaceae, Asteraceae y Fabaceae (Figura 12).

65

0

50

100

150

Aca

ntha

ceae

Am

aran

thac

ea

Ast

erac

eae

Con

volv

ulac

ea

Eup

horb

iace

ae

Faba

ceae

Lam

iace

ae

Mal

vace

ae

Mar

anta

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Poa

ceae

Por

tula

cace

ae

Rub

iace

ae

Ste

rcul

iace

ae

Tilia

ceae

Familias

VI

PLlPS1PS2NpLlNpS1NpS2

Figura 11. Valores de importancia (VI) de las familias de herbáceas por condición por temporada. Np=no perturbado Ll=lluvias S1=secas tempranas S2= secas tardías.

0

40

80

120

Ely

traria

imbr

icat

a

Des

mod

ium

proc

umbe

ns

Sid

a gl

abra

Hab

raca

nthu

ssi

lvat

icus

Tetra

mer

ium

nerv

osum

Pan

icum

trich

oide

s/O

plis

men

usbu

rman

ii

Laga

scea

mol

lis

especies

VI

PLlPS1PS2NpLlNpS1NpS2

Figura 12. Valores de importancia (VI) de las especies ecológicamente más importantes por condición por temporada. Np=no perturbado Ll=lluvias S1=secas tempranas S2= secas tardías.

66

Al igual que sucede a nivel familia existe un cambio en los valores de

importancia (Figura 12) de las especies a través del ciclo estacional y en las

diferentes condiciones. Las especies con valores de importancia más altos durante

las tres temporadas son, por orden de importancia de mayor a menor: Oplismenus

burmanii, Panicum trichoides, Tetramerium nervosum, Elytraria imbricata, Lagascea

mollis, Desmodium procumbens var. transversum y Sida glabra. Estas especies

constituyen el 82% de los ejemplares recolectados y el 69% de la biomasa total.

10.3. Dinámica del banco de semillas.

A partir del material obtenido de los muestreos de banco semillas se

determinaron 84 morfo-especies de semillas, de las cuales se lograron identificar 33

a nivel especie (pertenecientes a 25 familias), 20 a nivel género, 7 a nivel familia y

24 no pudieron ser identificas (Tabla 3). Las curvas de acumulación de especies

señalan que se recolectó entre el 88 y 95% de las especies esperadas para la zona

de muestreo.

El número de especies y la cantidad de semillas no variaron

significativamente a través del tiempo, pero muestran una tendencia a ser mayores

al final de la temporada seca que en el resto del año. Se encontraron tendencias no

significativas a mayor riqueza de especies de semillas en los sitios no perturbados y

a un mayor número de semillas en los sitios perturbados.

Se encontraron tendencias, no significativas, a menor diversidad y equidad

conforme avanza la época seca en los sitios perturbados y un aumento en los sitios

no perturbados (Figura 14 y Figura 15 para diversidad y Figura 16 para equidad).

67

0

0.5

1

1.5

Ll S1 S2

Temporada

Shan

non

(H´)

PNp

Figura 14. Índice de diversidad de Shannon (H´Log10) para el banco de semillas, por condición por temporada. P=perturbado Np=no perturbado Ll=lluvias S1=secas tempranas S2= secas tardías.

0

5

10

15

20

25

Ll S1 S2Temporada

Sim

pson

(1/D

)

PNp

Figura 15. Índice de diversidad de Simpson (1/D) para el banco de semillas, por condición por temporada. P=perturbado Np=no perturbado Ll=lluvias S1=secas tempranas S2= secas tardías.

68

0.5

0.6

0.7

0.8

0.9

Ll S1 S2 temporada

Equi

dad

(J́)

PNp

Figura 16. Equidad (J´) del banco de semilas, por condición por temporada. P=perturbado Np=no perturbado Ll=lluvias S1=secas tempranas S2= secas tardías.

Existen cambios notorios en los valores de importancia de las diferentes

familias encontradas en las muestras de semillas del suelo. Acanthaceae,

Convolvulaceae, Fabaceae, Malpighiaceae y Sapindaceae representan el 49% del

valor de importancia total. Los valores de importancia de las familias varían mucho a

través de las temporadas, posiblemente por las marcadas épocas de fructificación de

algunas especies (Figura 17).

Existen cambios notorios en los valores de importancia de las diferentes

especies; 14 de ellas (Aeschynomene americana, Amphipterygium adstringens,

Combretum farinosum, Ficus sp., Justicia candicans, Ipomoea pauciflora, Ipomoea

sp.1, Ipomoea sp.2, Mascagnia aff. Polybotrya, morfo 19., Nissolia fructicosa,

Ruprechtia fusca, Serjania triquetra y Vitex hemsleyi) representan el 70% de los

valores de importancia de todas las especies recolectadas (Figura 18).

69

0

40

80

120

160

Acanth

acea

e

Anaca

rdiac

eae

Convo

lvulac

eae

Faba

ceae

Malphig

iacea

e

Morac

eae

ND

Familias

VI

PLlPS1PS2NpLlNpS1NpS2

Figura 17. Valores de importancia (VI) de las familias del banco de semillas por condición por temporada. Np=no perturbado Ll=lluvias S1=secas tempranas S2= secas tardías.

0

30

60

90

120

150

Ipomoe

a sp.

1

I. pau

ciflor

a

S. triqu

etra

Morfo

19

J. ca

ndica

ns

R. fusc

a

Ficus s

p.

A. ameri

cana

A. ads

tringe

ns

C. fruc

ticos

um

N. fruti

cosa

M. poly

botry

a

V. hem

sleyi

Ipomoe

a sp.

2

Especies

VI

PLlPS1PS2NpLlNpS1NpS2

Figura 18. Valores de importancia (VI) de las especies más importantes del banco de semillas por condición por temporada (nombres completos en Tabla 3). Np=no perturbado Ll=lluvias S1=secas tempranas S2= secas tardías.

70

10.4. Resultados de las muestras del contenido de abazones.

Se recolectaron 102 muestras de contenido de abazones (14.16% del total de

ratones). El 64.6% de las muestras se recolectaron en sitios no perturbados y el

82.3% fueron recolectadas durante las dos temporadas secas.

El número de muestras difirió significativamente entre condiciones durante el

inicio de la temporada de lluvias y la parte final de las secas (F(2,1)=1663.48 p=0.017)

siendo el número de muestras más de 4 veces mayor, en promedio, en los sitios no

perturbados que en perturbados, ésto puede deberse a que en los sitios no

perturbados hay más ratones.

35.29% de los morfos de semillas se recolectaron exclusivamente en las dos

temporadas secas del año (ej. Pictecoctenium crucigerum, Ipomoea sp y Lysiloma

divaricata). El 30% de las morfoespecies se encontraron exclusivamente en sitios no

perturbados y el 21% es exclusivo de los sitios perturbados.

Se determinaron 34 morfos diferentes de semillas (26 de ellos se encontraron

en las muestras de suelo también), se pudieron identificar 13 de ellas a nivel

específico, ocho a nivel de género, 2 a nivel familia y 11 no pudieron ser

determinados (Tabla 4). Todas las identificadas fueron agrupadas en 14 familias.

Las curvas de acumulación de especies señalan que se encontraron entre el 43-68%

de las especies esperadas.

La riqueza de especies no difirió significativamente entre estaciones ni

condiciones, pero si existe una tendencia a un aumento en la riqueza en los sitios no

perturbados hacia el final de la temporada seca, mientras que los sitios perturbados

sufren una disminución, la diferencia es de 32% más especies en sitios no

71

perturbados que en perturbados.

En cuanto al número total de semillas recolectadas en las muestras de

abazones (341; promedio total de semillas por muestra de 1.71 semillas por

muestra) a pesar que no se encontraron diferencias significativas, sí existe una

tendencia que muestra una mayor cantidad de semillas en ambas épocas seca (300

semillas) en comparación con la época de lluvias (41 semillas). Y también una mayor

cantidad total de semillas recolectadas en las muestras de abazones (en promedio)

en los sitios no perturbados durante el final de las secas que en los sitios

perturbados (1.90 contra 0.90 de los perturbados).

El tamaño promedio (largo máximo de la semilla) por sitio de las semillas varió

de forma marginalmente significativa (F(1,2)=9.54 p=0.09) entre las dos condiciones

de perturbación, siendo ligeramente más grandes en los sitios no perturbados que

en los perturbados.

En cuanto a la diversidad y la equidad en semillas de las muestras de

abazones, los sitios no perturbados, muestran una tendencia (no significativa) a ser

más diversos y equitativos que los sitios perturbados. A través de las diferentes

temporadas se muestran dos tendencias (no significativas) dependientes de la

condición de los sitios, la diversidad y la equidad disminuyen de forma importante en

los sitios perturbados y hacia la temporada seca tardía, mientras que los sitios no

perturbados mantienen su diversidad y su equidad a lo largo del año (Figura 19,

Figura 20 y Figura 21 respectivamente).

72

0

0.4

0.8

1.2

Ll S1 S2

Temporada

Shan

non

(H´)

PNP

Figura 19. Índice de Shannon (H´) del contenido de abazones, por condición por temporada. P=perturbado Np=no perturbado Ll=lluvias S1=secas tempranas S2= secas tardías.

0

2.5

5

7.5

10

Ll S1 S2Temporadas

Sim

pson

(1/D

)

PNp

Figura 20. Índice de Simpson (1/D) del contenido de abazones, por condición por temporada. P=perturbado Np=no perturbado Ll=lluvias S1=secas tempranas S2= secas tardías.

73

0.7

0.8

0.9

1.0

Ll S1 S2Temporadas

Equi

dad

(J´)

PNp

Figura 21. Equidad (J´) del contenido de abazones, por condición por temporada. P=perturbado Np=no perturbado Ll=lluvias S1=secas tempranas S2= secas tardías.

Las familias más importantes, encontradas en abazones, son: Burseraceae,

Cochlospermataceae, Convolvulaceae, Fabaceae y Sapindaceae, las cuales

representan el 78.8% del valor de importancia total. Los valores de importancia de

estas familias cambian de manera notable a lo largo de las tres temporadas y en

ambas condiciones (Figura 22). Familias como Burseraceae, Caricaceae y

Cochlospermataceae son más importantes en los sitios no perturbados (Caricaceae

y Cochlospermataceae sólo se encuentran en sitios no perturbados) mientras

Sapindaceae y Apocynaceae tienen valores de importancia más altos en sitios

perturbados. Existen tres patrones estacionales delimitados de manera general: 1.

Familias con valores de importancia mayores en lluvias (Caricaceae, Sapindaceae y

ND). 2. Con valores de importancia estables durante el año (Bignoniaceae,

Convolvulaceae) y 3. Con incremento en sus valores de importancia durante las

74

temporadas secas (Apocynaceae, Burseraceae, Cochlospermataceae, Fabaceae y

Rutaceae).

Los valores de importancia a nivel de especies muestran el mismo patrón que

se observa a nivel familia (Figura 23). Existen especies que son transportadas de

manera más importante en sitios perturbados que en no perturbados (ej. Bursera

aloexylon, Lysiloma divaricata, Aeschynomene americana, Mimosa, sp., Ruprechtia

fusca, Senna sp., Stemmadenia bella). Otras con valores más altos en sitios no

perturbados que en los perturbados (ej. Cochlospermum vitifolium, Bursera

copallifera, Ipomoea pauciflora, Jacaratia mexicana, Justicia candicans).

Los patrones temporales para especies son parecidos a los encontrados para

familias: 1. Especies con valores de importancia mayores en la temporada de lluvias

(ej. Bursera copallifera, Jacaratia mexicana, Serjania triquetra.) 2. Especies que

mantienen sus valores de importancia a lo largo del año (ej. Desmanthus virgatus,

Zanthoxylum culantrillo). En el tercer caso vale la pena separar la tercera categoría

en dos subcategorías: 3.1. Especies que tienen un aumento notable en el valor de

importancia en el inicio de la temporada de secas (ej. Aeschynomene americana,

Guazuma ulmifolia, Ipomoea sp., Lysiloma divaricata, Stemmadenia bella, Triumfetta

semitriloba) y 3.2. Especies que tienen un aumento en sus valores de importancia al

final de la temporada seca (ej. Cochlospermum vitifolium, Ipomoea pauciflora,

Justicia candicans, Mimosa sp., Pithecoctenium crucigerum, Ruprechtia fusca).

75

0

50

100

150

200

Acanth

acea

e

Apocy

nace

ae

Bursera

ceae

Cochlo

sperm

acea

e

Convo

lvulac

eae

Faba

ceae

Rutace

ae

Sapind

acea

e

Sin de

termina

r

Familias

VI

PLlPS1PS2NpLlNpS1NpS2

Figura 22. Valores de importancia (VI) de las familias en el contenido de abazones, por condición por temporada. Np=no perturbado Ll=lluvias S1=secas tempranas S2= secas tardías.

Figura 23. Valores de importancia (VI) de las especies más importantes en el contenido de abazones, por condición por temporada (nombres completos en la Tabla 4). Np=no perturbado Ll=lluvias S1=secas tempranas S2= secas tardías.

Cabe también hacer dos excepciones a los patrones antes mencionados,

Bursera grandifolia y Conzattia multiflora mantienen algunos de los valores de

importancia más altos a lo largo del estudio y parece ser que su transporte en

abazones tiene un patrón diferente a las demás especies, pues en ambos casos la

importancia es muy alto en la temporada de lluvias, disminuye de manera importante

en la temporada inicial de secas y aumenta, de nuevo, a niveles altos al final de la

temporada seca.

76

Para las semillas en abazones existe, una amplitud de nicho trófico, a nivel de

familia, significativamente menor (F(1,2)=19.637 p=0.047) en los sitios no perturbados

que en los perturbados, al inicio de la temporada seca y mayor al final temporada

seca, en estos últimos la amplitud es similar a lo largo del año, mientras en los sitios

perturbados disminuye en la época seca tardía (Figura 24).

0

4

8

12

Ll S1 S2Temporadas

Am

plitu

d ni

cho

trófic

o (B

)

PNp

Figura 24. Amplitud de nicho trófico (B) del contenido de abazones, por condición por temporada. P=perturbado Np=no perturbado Ll=lluvias S1=secas tempranas S2= secas tardías.

Los cambios en la selectividad de semillas de diversas especies por Liomys

irroratus a lo largo de las temporadas son muy notorios, (Figura 25), existen

especies que son seleccionadas durante una sola temporada (ej. Bursera aloexylon

en lluvias; Ipomoea sp al inicio de las lluvias e Ipomoea pauciflora al final de las

secas) y otras que son seleccionadas durante todo el año de forma importante (ej.

Bursera grandifolia, Conzattia multiflora y Serjania triquetra).

77

Especie PLl PS1 PS2 NpLl NpS1 NpS2 Morfo 3 0.533 0.103 0.090 0.028Morfo 5 0.182 0.042Morfo 6 0.182 0.135 0.042Morfo 9 0.061 0.180 Morfo 19 0.010 B. aloexylon 0.267 B. copallifera 0.141 B. grandifolia 0.250 0.061 0.207 0.030 0.617C. multiflora 0.125 0.091 0.621 0.424 0.131Ipomoea sp. 1 0.364 0.113 0.014I. pauciflora 0.090 0.025J. candicans 0.011Mimosa sp. 1 0.061 Mimosa sp 2 0.028P. crucigerum 0.056R. fusca 0.069 S. triquetra 0.125 0.424 0.271 0.006T. semitriloba 0.090

Figura 25. Tabla del índice estandarizado de selección de Manly-Gresson (Bi) para los contenidos de abazones, por condición y temporada (nombres completos en Tabla 4). P=perturbado Np=no perturbado Ll=lluvias S1=secas tempranas S2= secas tardías. Los valores sombreados indican lo seleccionado por encima de su disponibilidad, los no sombreados indican lo seleccionado por debajo de su disponibilidad.

Al analizar la preferencia se observó que, entre sitios perturbados y no

perturbados existen diferencias importantes relacionadas con la composición y la

preferencia de las especies encontradas en los abazones. Existen especies sólo

preferidas en sitios no perturbados (ej. Bursera copallifera, Pithecoctenium

crucigerum, Triumfetta semitriloba) y otras sólo en sitios perturbados (ej. Bursera

aloexylon, Mimosa sp). Aun en especies ampliamente preferidas (ej. Bursera

grandifolia y Conzattia multiflora) existen cambios dependientes de la temporada del

78

año que hacen que su grado de preferencia sea distinto y disminuya en algunas

temporadas. (Tabla 5).

El dendrograma basado en el índice de similitud (Figura 26) muestra que los

sitios no perturbados durante la parte final de la temporada seca se comportan de

forma diferente a todos los demás. También indica que no existe diferencia entre

condiciones durante el principio de las secas y que durante las lluvias los sitios de

ambas condiciones son similares. Lo más notorio es que los sitios perturbados

durante la temporada seca tardía son muy cercanos al comportamiento de estos

mismos sitios durante la época de lluvias, en que la granivoría es mínima.

Figura 26. Dendrograma del índice de similitud para número relativo de semillas en el contenido de abazones, por condición por temporada. P=perturbado Np=no perturbado Ll=lluvias S1=secas tempranas S2=

79

secas tardías.

Los análisis de X2 para ambos tipos de condiciones, existe una composición

de especies significativamente diferente (p=0.0021) entre ambas condiciones, esto

es especialmente notorio en algunas especies como Bursera grandifolia, los morfos

3, 5, 6 y Serjania triquetra. En contraste Conzattia multiflora está representada de

manera muy similar en ambos sitios, haciendo notorio que: algunas especies son

recolectadas de manera diferente entre las condiciones hay algunas que son

buscadas independientemente de la perturbación.

Para el caso de las diferentes temporadas la X2 sólo se analizó para tres

especies (Bursera grandifolia, Conzattia multiflora y Serjania triquetra) dado que son

las únicas que especies que se encontraron en todas las temporadas y que

cumplieron los requerimientos de la prueba (menos del 20% de las especies con #

ind<5). La prueba determinó que existen diferencias muy significativas (<0.001) en la

abundancia de estas especies entre las temporadas, particularmente en los casos

de Bursera grandifolia y Serjania triquetra.

10.5. Resultados del análisis de las excretas.

Del muestreo de ratones se obtuvo un total de 477 (66% de los ratones

capturados) muestras de excretas, (160 en la temporada de lluvias, 204 en secas

tempranas y 113 en secas tardías), estos resultados no fueron significativamente

diferentes. En los sitios no perturbados se obtuvieron, de manera no significativa,

más muestras que en los perturbados (339 contra 138 de los perturbados).

Se observaron entre el 75 y 85% de las especies esperadas por los

80

estimadores en la dieta.

Se encontraron 31 (17.75%) fragmentos de material que no pudieron ser

determinados y 144 que si pudieron identificarse. Estos últimos se dividieron en 28

morfo especies, que fueron comparadas con el catálogo de referencia (Figura 27),

por esta comparación se pudieron determinar 10 especies pertenecientes a siete

familias, la más diversa fue Acanthaceae (4), mientras las demás estan

representadas por una especie. Para dos especies (Ludwigia octovalvis y Plumbago

scandens) no se tienen datos de diversidad y disponibilidad, por lo que se

excluyeron de los análisis (Tabla 6).

81

Figura 27. Ejemplos de comparaciones entre el contenido de las

excretas (40X izquierda) y el catálogo de referencia (100X derecha). Las

especies que se observan son, de arriba abajo: Tetramerium nervosum

(Acanthaceae), Desmodium procumbens (Fabaceae) y Oplismenus

burmannii (Poaceae).

82

Resulta importante destacar que en el caso de los resultados de excretas, al

igual ocurrió con la disponibilidad de recursos y contenido de abazones, existe un

importante recambio de especies entre sitios de ambas condiciones. En el caso de

excretas el 27% de las morfoespecies son exclusivamente de sitios perturbados y el

23% son de sitios no perturbados solamente. Este recambio también es notorio para

las diferentes temporadas pues el 30% de las morfoespecies sólo se encontró

durante las temporadas secas, siendo también el 23% exclusivo de la temporada de

lluvias.

Los índices de diversidad y equidad (Figura 28, Figura 29 para diversidad y

Figura 30 para equidad) muestran que la dieta de los ratones de los sitios

perturbados es ligeramente más diversa y equitativa que en los sitios no

perturbados, estas diferencias no fueron significativas. También se muestran dos

tendencias, no significativas, a través de las temporadas; en los sitios perturbados

existe un leve decremento durante la temporada seca inicial y un aumento muy

notorio hacia el final de la temporada seca (el índice de Simpson marca un aumento

para seca inicial y un decremento para seca tardía, pero el aumento es en general).

En el caso de los sitios no perturbados se da el caso opuesto, un leve aumento al

inicio de la temporada de estiaje y un declive al final de la temporada seca.

83

0.45

0.55

0.65

0.75

Ll S1 S2temporadas

Shan

non

(H´)

PNp

Figura 28. Índice de Shannon (H´) de las excretas, por condición por temporada. P=perturbado Np=no perturbado Ll=lluvias S1=secas tempranas S2= secas tardías.

1.5

2.5

3.5

4.5

5.5

Ll S1 S2Temporadas

Sim

pson

(1/D

)

PNp

Figura 29. Índice de Simpson (1/D) de las excretas, por condición por temporada. P=perturbado Np=no perturbado Ll=lluvias S1=secas tempranas S2= secas tardías.

84

0.0

0.3

0.6

0.9

Ll S1 S2Temporadas

Equi

dad

(J´)

PNp

Figura 30. Equidad (J´) de las excretas, por condición por temporada. P=perturbado Np=no perturbado Ll=lluvias S1=secas tempranas S2= secas tardías.

El análisis de la amplitud de nicho trófico muestra que la amplitud en los sitios

no perturbados (1.985) es en general más baja que el de los sitios perturbados

(2.096). También es visible una tendencia a un aumento de la amplitud para sitios

perturbados a lo largo del inicio de la temporada seca inicial y disminución hacia el

final de la época de estiaje y una disminución al final de la temporad seca en sitios

no perturbados (Figura 31). Éstos resultados no fueron estadísticamente

significativos.

85

0

1

2

3

4

5

Ll S1 S2Temporadas

Am

plitu

d de

nic

ho tr

ófic

o (B

)

PNp

Figura 31. Amplitud de nicho trófico (B) de las excretas, por condición por temporada. P=perturbado Np=no perturbado Ll=lluvias S1=secas tempranas S2= secas tardías.

Al analizar la selectividad se observa (Figura 32) que el consumo de

herbáceas es selectivo para el pasto más común en el estudio, Oplismenus

burmannii, cuyo consumo es muy alto en ambas condiciones y todas las

temporadas. Aunadas a este patrón existen varias especies con índices de

selectividad menores que van cambiando su importancia en la alimentación de L.

irroratus a lo largo de las temporadas (Desmodium procumbens y Elytraria imbricata

durante las lluvias, Habracanthus silvaticus y Maranta arundinacea para el inicio de

la temporada seca), particularmente en la temporada de lluvias y el inicio de la seca.

Los sitios perturbados presentan una mayor cantidad de especies de manera

simultánea que los no perturbados. Al analizar la selección por condición se observa

de nuevo que Oplismenus burmannii es ampliamente buscado en ambas

condiciones y que Maranta arundinacea es seleccionada en sitios perturbados. Las

86

demás especies no muestran un patrón claro en las diferentes condiciones de

perturbación (Figura 32).

0.0

0.2

0.4

0.6

0.8

1.0

D. proc

umbe

ns

E. imbri

cata

H. silv

aticu

s

M. arun

dinac

eae

O. burm

annii

T. nerv

osum

Especies

Sele

ctiv

idad

(Bi) Pll

Ps1PS2NpLlNpS1NpS2

Figura 32. Selectividad de Manly-Gresson (Bi) para las excretas, por condición por temporada (nombres completos en Tabla 6). P=perturbado Np=no perturbado Ll=lluvias S1=secas tempranas S2= secas tardías.

El análisis de preferencia relativa indica que existe un recambio de entre

especies consumidas y su preferencia. En los sitios perturbados algunas especies

son más preferidas (Habracanthus silvaticus y Maranta arundinacea) que en los

sitios no perturbados, en los cuales otras especies (Tetramerium nervosum) son más

consumidas que en los sitios perturbados (Tabla 7).

El patrón temporal de especies preferidas también tiene un notorio recambio

87

en las (Tabla 7). Durante las lluvias y el inicio de la temporada seca se observa una

mayor riqueza de especies (más especies preferidas) en la dieta que al final de la

temporada seca en la cual solo se consume Oplismenus burmannii; entre la

temporada de lluvias y la de inicio de secas se observan también diferencias en la

composición de la dieta. Desmodium procumbens y Tetramerium nervosum que son

consumidas durante las lluvias son cambiadas por Habracanthus silvaticus y

Maranta arundinacea, mientras Elytraria imbricata es consumida a lo largo de ambas

temporadas. Durante todo el año Oplismenus burmannii es preferida más que todas

las demás especies consumidas. (Tabla 7).

El dendrograma del análisis de similitud de especies (Figura 33) genera dos

grupos, el primero constituido por sitios no perturbados durante las lluvias y el final

de las secas y sitios perturbados durante la parte inicial de las secas. El segundo

grupo se compone de los sitios perturbados durante lluvias y el final de las secas y

sitios no perturbados durante el inicio de las secas. Es importante señalar que la

menor similitud se dio entre los sitios de ambas temporadas secas. Se observa

también que los sitios no perturbados durante lluvias y los perturbados al inicio de

las secas son los más parecidos entre si. Los sitios peturbados durante secas

tardías son diferentes a todos los demás sitios en las otras temporadas. De estos

últimos resultados se puede inferir que durante este período, en los sitios

perturbados los ratones están consumiendo especies y proporciones de las mismas,

diferentes con respecto a las que consumen durante los demás muestreos (Figura

33).

88

Figura 33. Dendrograma del índice de similitud para número relativo de especies de herbáceas en las excretas, por condición por temporada. P=perturbado Np=no perturbado Ll=lluvias S1=secas tempranas S2= secas tardías.

Las pruebas de X2 señalan que existen cambios significativos (p=0.013) entre

ambas condiciones de perturbación. Estos cambios son especialmente notorios en

algunas especies (Gomphrena decumbens y Oplismenus burmannii) indicando que

el consumo realizado por L. irroratus sobre estas especies está influenciado por la

perturbación.

Oplismenus burmannii es consumida en mayor proporción en los sitios no

perturbados que en los perturbados, en estos últimos el consumo de Gomphrena

decumbens (y algunas especies no determinadas) aumenta, posiblemente por que el

ratón no es más generalista en su dieta en los sitios no perturbados o por que estas

89

especies sean comunes de sitios perturbados.

Para el caso de las diferentes temporadas la X2 no muestra ninguna

diferencia significativa. Posiblemente las mismas especies son consumidas a lo largo

del año y sus proporciones cambian de manera ligera.

90

11. DISCUSIÓN.

Varios de los resultados estadísticos de este estudio no fueron significativos

pero, en ellos, se observan tendencias como lo muestra la figura 33.

VARIABLE NP P Resultado LL S Resultado

Herbáceas en suelo

Mayor div y disp

Menor disp y div

tendencia no

significativa

Mayor div y disp

Menor disp y div Si

Banco de semillas

Mayor div y disp

Menor disp y div

tendencia no

significativa

Menor disp y div

Mayor div y disk Si

pref evidente

sin pref evidente

ambas muestran

pref Semillas en abazones menor

amplitud nicho trófico

mayor amplitud nicho trófico

Si

Menor cantidad y menor div

Mayor cantidad y mayor div

SI

pref evidente

sin pref evidente Si

Consumo herbáceas

menor amplitud nicho trófico

mayor amplitud nicho trófico

tendencia no

significativa

Mayor cantidad y mayor div

Menor cantidad y menor div

tendencia solo en algunas

temporadas

Figura 33. Tabla comparativa de las respuestas esperadas y los resultados obtenidos para cada variable en cada condición y por temporada. Disp= disponibilidad. Div=diversidad. Pref=preferencia. P=perturbado, Np= no perturbado, Ll=lluvias, S=secas (incluye ambas temporadas secas).

91

Esto podría sugerir que los efectos de la perturbación ambiental y la

estacionalidad no son notorios sobre la dieta de Liomys irroratus, aunque por los

resultados obtenidos se sabe que los ratones consumen diferentes especies, tanto

de herbáceas como de semillas, entre las diferentes condiciones y temporadas de

estudio.

Un factor a considerar en los resultados estadísticos encontrados, es que el

diseño experimental usado es muy conservador (Von Ende, 1993) y tiende a no dar

como significativos resultados que con análisis más potentes podrían considerarse

significativos. En conjunto con lo anterior es importante destacar que el diseño con

efecto de bloque substrae grados de libertad al modelo lo cual resta aún más la

potencia del MANOVA, dado que este estudio tuvo pocas replicas.

Una serie de análisis exploratorios, sin el efecto del bloque, mostraron que:

en muy pocos casos el bloque tuvo un efecto significativo, y que si se realizan los

análisis sin él, varios resultados son significativamente diferentes a los encontrados

con el efecto de bloque.

Von Ende (1993) sugiere varias posibilidades para resolver este tipo de

problemas con el MANOVA de medidas repetidas, entre las cuales sugiere modificar

la α para que resultados de p≤0.1 sean significativos; o cambiar el modelo a un

ANOVA de medidas repetidas. El diseño de este proyecto se mantuvo como estaba

establecido para no romper con las formas ni caer en el error de ajustar el diseño

experimental de forma que favorezca los resultados que se esperan obtener,

intentando que sea lo más imparcial posible.

Desde luego, los datos generados presentan una gran variabilidad natural y

92

posiblemente eso lo reflejan los resultados no significativos de los análisis, a pesar

de la robustez del MANOVA para éste tipo de problemas. Este factor pudo haberse

minimizado aumentando el número de replicas, aunque logísticamente eso

complicaba mucho el desarrollo del trabajo.

Un factor adicional a considerar es que un par de sitios de estudio (un bloque)

aún cuando tenía contraste entre los dos sitios (perturbado vs no perturbado) en el

grado de perturbación, éste no fue tan intenso como el que indicaron los otros cuatro

sitios. Esta falta de contraste pudo haber resultado en respuestas más parecidas

entre esos sitios y por tanto afectar los análisis generales.

Otras variables, no consideradas en este estudio, que podrían estar

afectando la ecología de forrajeo de este ratón son: la interacción con otras especies

animales (competidoras o depredadoras), la calidad nutricional de semillas y

herbáceas y el efecto de la ganadería sobre la vegetación, sobre todo en el

sotobosque, lo que pudo causar que la perturbación y la estacionalidad no

mostrasen un efecto más contundente sobre la dieta de L. irroratus.

Es importante resaltar, de nuevo, que se detectaron cambios en la

composición de especies disponibles y utilizadas (tanto en abazones como excretas)

por este ratón, tanto estacionalmente como entre condiciones de perturbación. Esto

puede ser omitido por índices como el de diversidad, de forma tal que si el número

de especies y sus abundancias relativas son similares, no se detectan diferencias en

la diversidad o amplitud de nicho trófico en los análisis, pese a que las especies

sean distintas. El cambio en la composición del banco de semillas también es

señalado por Arias (1986), en la misma zona.

93

Los resultados de este trabajo muestran una tendencia (no significativa) hacia

una mayor disponibilidad y diversidad de herbáceas durante la temporada de lluvias

y en los sitios no perturbados y el patrón estacional inverso para el banco de

semillas, más diversidad y disponibilidad mientras más avanza la temporada de

estiaje y también mayor diversidad en los sitios no perturbados sobre los

perturbados. Ésto concuerda con lo esperado en las hipótesis de éste trabajo.

Se observó una tendencia a que la perturbación y la estacionalidad causen

una disminución en la heterogeneidad ambiental de la Sierra de Huautla, ésto

también es señalado en la teoría (Begon et al., 1999; Brown, 2000; Krebs, 1985;

Ceballos, 1995; Laurance & Bierregaard, 1997; Litvaitis, 2000; Miller, 1994).

Considerando que los lugares menos heterogéneos son menos estables (Krebs,

1985) es posible señalar que la estacionalidad climática de la zona, aunada con la

perturbación genera que el ambiente sea menos estable que en los sitios sin

perturbación.

Se encontró, tanto en la dieta como en el contenido de abazones, que existe

una flexibilidad en la selección alimentaria de Liomys irroratus, esto concuerda con lo

señalado por el factor de estabilidad ambiental (Krebs, 1985) que indica que el

alimentarse de manera más generalista (mayor amplitud de nicho trófico) es una de

las estrategias de las especies para enfrentar ambientes menos estables. Y que la

especialización se da en sitios más estables (no perturbados y con estacionalidad

menos marcada) en los que se alimentan de manera más selectiva (menor amplitud

de nicho trófico).

El patrón observado, para el contenido de abazones, a la disminución en la

amplitud de nicho trófico (generada por la selectividad) encontrada en este trabajo

94

concuerda con lo descrito en otros estudios (Cortés et al., 2002; Morris & Schwartz,

1957; Murray & Dickman, 1994; Reichman, 1977; Smith, 1952; Taylor, 1954), en los

que se observa como influye de manera notoria la especialización en la dieta en

disminuir la amplitud de nicho trófico, a pesar que los animales consuman una

riqueza de especies mayor a otras condiciones en las que son más selectivas.

Estudios compilatorios y de inventario realizados anteriormente (Ceballos &

Galindo, 1984, Davis & Russell, 1952, Villa & Cervantes, 2003), así como el de

García-Estrada et al. (2002) realizado en la Sierra de Huautla sugieren que por sus

características de adaptación a los medios semiáridos Liomys irroratus es resistente

a cambios ambientales como la aridez y la perturbación. Cadena (2003) en un

trabajo diseñado para comprobar los efectos de la perturbación y la estacionalidad

climática en la comunidad de ratones en la misma zona y tiempo en los que se

realizó este estudio sugiere que la perturbación y la estacionalidad si causan

cambios en la estructura poblacional de L. irroratus.

El presente trabajo sugiere de qué forma podrían darse estos cambios. Si

bien es cierto que las características morfofisiológicas de L. irroratus pueden

disminuir los efectos de los cambios en la cobertura vegetal o del aumento en la

aridez, asociados a la perturbación y la estacionalidad. También es cierto que los

cambios en la diversidad y disponibilidad de alimentos generan una presión de

índole diferente para los ratones. Al menos, los resultados de este trabajo evidencian

que si la selección de las especies que consumen, si cambia en función de la época

del año y del grado de perturbación de la selva y esto a su vez, podría reflejarse a

nivel de la dinámica poblacional, ocasionando diferencias como las reportadas por

Cadena (2003).

95

Poblaciones en sitios perturbados, en donde los recursos estan más limitados,

podrían tener mayor emigración y mayor competencia intrapoblacional e

interespecífica. Esto se ha encontrado para otras especies de roedores (Brown,

1973; Brown & Lieberman, 1973; Rosenzweig & Sterner, Reichman, 1975 con

comunidades de heterómidos desérticos; Cameron, 1977 con Sigmodon hispidus y

Reithrodontomys fulvescens; Cameron, 1982 con Sigmodon hispidus,

Reithrodontomys fulvescens y Oryzomys palustris; Cortés et al., 2002 con Lagidium

viscacia y Abrocoma cinerea; Kotler & Brown, 1990 con Gerbillus allenby y G.

pyramidum; Stancampiano & Caire con tres especies de Peromyscus (P. attwateri,

P. leucopus y P. maniculatus) y Reithrodontomys fulvescens). En estas

cirunstancias, una disminución en la selectividad alimentaria, tiende a disminuir la

competencia con congeneres o especies que consumen dichos recursos limitados,

pero podría aumentar la competencia con otras especies generalistas.

En este trabajo se considera que el contenido de abazones estima de manera

adecuada la dieta granívora de Liomys irroratus, sobre esto se tienen opiniones

diferentes, Jameson (1954) y Reichman (1975) sugieren que el contenido de

abazones no es un buen indicador de lo que los ratones consumen, pero que da

una idea cercana de los recursos que pueden utilizar y, posteriormente, varios

trabajos (Bradley & Mauer, 1971; Chapman; 1972; Johnson, 1961) complementan

ésta información encontrando que la cantidad relativa de insectos en la dieta es lo

que puede generar que el contenido de abazones sea diferente a lo encontrado en la

dieta, sugiriendo que en especies con un menor consumo de insectos el contenido

de abazones representa de manera objetiva lo encontrado en la dieta. Al no haber

encontrado rastros de insectos en la dieta o en los abazones de Liomys irroratus es

96

posible que el contenido de los abazones posiblemente indique lo que consume de

manera confiable, teniendo siempre en mente que bien puede ser que los consuman

en el lugar donde los encuentren o casualmente no hayan estado representados en

las muestras de excretas. También es importante tomar en cuenta que Liomys

salvini guarda semillas que nunca ha visto en los abazones, posiblemente para

llevarlas a su madriguera donde las prueba evitando ulteriormente las especies no

palatables, peligrosas o que simplemente no son de su gusto (Janzen, com. pers).

Para poder verificar la funcionalidad del contenido de los abazones como

indicador de la dieta de Liomys irroratus es necesario realizar el análisis de las

excretas comparando las estructuras con un catálogo de referencia de las semillas

disponibles, ésto no fue posible en este estudio por que, a pesar de existir una

metodología a seguir (Dacar & Giannoni, 2001) ésta fue localizada cuando el

proyecto estaba casi terminado y por cuestiones de tiempo y logística no fue posible

utilizarla).

El consumo de diferentes especies de semillas y herbáceas por Liomys

irroratus parece estar influenciado por su disponibilidad, como está descrito para

otros miembros de la familia Heteromyidae (Fleming, 1983; Janzen, 1986a;

Reichman, 1975; Reichman & Price, 1993, Villa & Cervantes, 2003) a los que se

considera consumidores más bien generalistas.

De forma contrastante se encontró que Liomys irroratus también selecciona

algunas especies (ej. Bursera grandifolia y Conzattia multiflora) a las cuales prefiere

independientemente de su disponibilidad (o de la de otras especies) el que las esté

transportando aun cuando no estén disponibles en el banco de semillas y no se

encuentren en la temporada de fructificación (tomadas de Arias, 1986) puede

97

significar que estos ratones tienen comportamiento parecido a L. pictus que

almacena una mayor cantidad de semillas en madrigueras con una gran cantidad de

túneles y cámaras, que no contienen nidos (Domínguez, 2000; Hernández, 2000); o

en almacenes superficiales externos como lo hacen otros heterómidos (Lockard &

Lockard, 1971; Shaw, 1934), por lo que posiblemente las vuelven a transportar

cuando las llevan a sus nidos para consumirlas, lo cual puede explicar por qué se

encontraron en los abazones durante todo el año. O que ésta especie esté

consumiendo dichas especies de manera preferente por encima de las demás, como

sugieren los resultados del índice de preferencia de Johnson (1980) obtenidos en

éste estudio.

En algunos casos Liomys irroratus selecciona familias (ej. Convolvulaceae,

Fabaceae, Sapindaceae) y especies (ej. Cochlospermum vitifolium, Ficus sp.,

Ipomoea sp., Jacaratia mexicana) que son reportadas como muy consumidas por L.

pictus (Ceballos, 1989, Mendoza, 1997) y L. salvini salvini (Fleming, 1974a; Fleming,

1974b; Janzen, 1986a) lo cual sugiere que los efectos de la perturbación en las

dietas de las tres especies pueden ser parecidos, puesto a que algunas de estas

especies se encuentran ausentes en sitios perturbados analizados en este trabajo.

Al comparar las especies encontradas en abazones durante este estudio

(Tabla 8) con las reportadas para Liomys pictus (Ceballos, 1989, Domínguez, 2000;

Hernández, 2000; Mendoza, 1997; Pérez, 1978) en Jalisco y para Liomys salvini en

Costa Rica (Fleming, 1974a; Fleming, 1974b; Janzen, 1971 y Janzen, 1986a), se

observa que algunas de las especies (ej. Bursera alloexylon, B. grandifolia, B.

copallifera) no estaban registradas anteriormente en abazones del género Liomys.

A pesar que muchas especies encontradas en abazones de L. pictus y L.

98

salvini se encuentran presentes en la Sierra de Huautla no fueron encontradas en

los abazones de L. irroratus, a pesar de que algunas son sugeridas por los autores

como preferidas por los roedores (ej. Enterolobium cyclocarpum por Liomys salvini

(Janzen, 1986a) y Serjania brachycarpa para Liomys pictus (Ceballos, 1989;

Mendoza, 1997)). Esto es posiblemente porque no están presentes en la zona de

muestreo o porque casualmente no fueron encontradas en los abazones.

Las semillas que L. irroratus transporta son de mayor tamaño que las

descritas para heterómidos desérticos (≤3mm) como lo señalan Reichman & Price

(1993), pero también parece haber diferencias con respecto a la perturbación. Los

ratones transportan semillas de especies más grandes en sitios no perturbados, y a

pesar de esto el número de semillas no varía significativamente entre condiciones, y

existe una tendencia a un mayor número de semillas por muestra de abazones en

los sitios no perturbados. Esto se relaciona a que las semillas preferidas por Liomys

irroratus son, generalmente, semillas más grandes, que posiblemente sean de

árboles poco comunes en sitios perturbados, las semillas más grandes fueron las de

Conzattia multiflora (5 a 12mm) y Bursera grandifolia (7 a 11mm) o también es

posible que sean más nutritivas y éste sea una forma de Liomys irroratus para

forrajear optimizamente (Cassini, 1994; Reichman, 1977; Pyke, 1984).

Para el caso de las herbáceas existe poca información con la cual comparar

este trabajo y la existente es básicamente sobre heterómidos desérticos (Reichman,

1975; Reichman, 1977; Reichman & Van de Graaf, 1975) por lo que se discutirán

estos resultados de manera menos extensa que los de contenido de abazones.

Liomys irroratus consume de manera muy preferente Oplismenus burmannii por

encima de todas las demás especies y mantiene su consumo a pesar de la condición

99

de perturbación y la temporada en la que se encuentre, esto es posiblemente

generado porque almacenan fragmentos de esta especie en las madrigueras y la

consumen durante todo el año. Éste ratón consume otras especies de forma menos

generalizada, por una tempor ada o una condición, pero durante la parte final de las

secas sólo consumen Oplismenus burmannii, lo cual indica que la están

almacenando para esa temporada desde las lluvias lo cual es más notorio en los

sitios no perturbados, situación que concuerda con la primera hipótesis del proyecto,

ésta supone que la disponibilidad y diversidad son mayores en sitios no perturbados

que en perturbados y por lo tanto la selectividad será mayor que en los perturbados.

Estos resultados permiten inferir que, como lo reportado por Reichman & Van de

Graaf (1975) para Dipodomys merriami y Perognathus amplus, en el caso de Liomys

irroratus es posible que el consumo de plantas esté ligado a sus ciclos reproductivos.

Se puede señalar, basándose en la información de éste trabajo y la literatura

disponible de la familia Heteromyidae (ej. Fleming, 1983a; Fleming, 1983b; Janzen,

1971; Janzen, 1986a; Sánchez-Cordero & Fleming, 1993) que L. irroratus tiene una

importante labor como depredador de semillas (Ceballos y Galindo, 1984; Ceballos y

Miranda, 2000; Dhillion, 1999; Huntly & Reichman, 1994; MacCracken et al., 1985;

McDonald, 2001; Villa y Cervantes, 2003), pues utiliza diversas especies y las utiliza

de manera diferencial, por que puede estar afectando su reproducción y causando

cambios en la fisonomía de la selva.

La importancia de este ratón como dispersor tiene que ser analizada por

medio de estudios de la estructura de las madrigueras y de germinación de semillas

encontradas en los abazones, a pesar que las mayoría de las especies encontradas

en los abazones no tenían daños que aparentemente pudiesen hacerlas inviables,

100

es probable sean almacenadas en madrigueras, a mayor profundidad que la que

requiere para germinar y no se dispersen de manera adecuada o que el ratón las

consuma cuando empiezan a germinar y pierden dureza como es señalado por

Janzen (1986a) para Liomys salvini en Costa Rica.

101

12. CONCLUSIONES.

1. Liomys irroratus tiene una dieta herbívora basada en 10 especies distintas

de las que consume la herbácea Oplismenus burmannii (la más común en las

muestras de vegetación) de forma preferente y en magnitud independiente a su

disponibilidad, a la perturbación y la estacionalidad. Mientras que la selectividad y la

composición específica de las demás categorías tróficas que consume cambian

conforme su disponibilidad, la estacionalidad y la condición.

2. La dieta granívora de Liomys irroratus es más diversa que la herbívora,

utiliza 34 especies diferentes; de las cuales la mayoría las usa en la misma

proporción que en la que se encuentran en el medio. Mientras que Bursera

grandifolia y Conzattia multiflora (especies muy abundantes en la zona) las recolecta

de manera preferente en ambas condiciones de perturbación y en todas las

estaciones.

3. Liomys irroratus consume especies indicadoras de un buen estado de

conservación (ej. Cochlospermum vitifolium y Jacaratia mexicana) lo cual puede

tener efectos en la estructura vegetal de la selva, sugiriendo la importancia en los

cambios en la composición de especies en el banco de semillas de L. irroratus como

depredador o dispersor de semillas en la Sierra de Huautla.

4. Aún cuando se notan tendencias que sugieren un efecto claro de la

perturbación y la estacionalidad en la dieta de Liomys irroratus en la zona, pocos

resultados fueron significativos (solo el promedio de medida de las semillas en

abazones, la cantidad de muestras de abazones, la amplitud de nicho trófico de

102

semillas en abazones).

5. Por otra parte fue notorio que, asociado a la perturbación y la

estacionalidad, hubo cambios en la composición especies que son los recursos

alimentarios que selecciona este ratón.

6. De manera general se observa que los sitios no perturbados son más

estables que los perturbados en la disponibilidad y diversidad de recursos

alimenticios para este ratón, lo que fue particularmente notorio para la parte final de

la época seca.

7. Liomys irroratus utiliza sus recursos alimentarios (semillas) de forma más

selectiva (menor amplitud de nicho trófico) en sitios no perturbados y temporadas

secas y más generalista (mayor amplitud de nicho trófico) en sitios perturbados y

temporada de lluvias.

8. Es importante complementar los resultados de este trabajo con estudios

sobre las madrigueras, análisis de nutrientes de los recursos que consume ésta

especie contra los disponibles y comparación del contenido de abazones con lo

encontrado en las excretas.

103

13. Referencias.

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121

Tablas y Anexos

122

Tablas.

Tabla 1. Nomenclatura, condición y coordenadas UTM de la ubicación de los cuadrantes. (Se tomó el punto de una esquina del cuadrante). Par Nombre Condición Coordenadas (UTM) 1 Axuchitlán (Ajn) Perturbado X=14Q 0499720 Y=2041006 1 Virgencita (Vgn) No perturbado X=14Q 0501664 Y=2041934 2 Xantiopan perturbado (Xp) Perturbado X=14Q 0499847 Y=2038167 2 Xantiopan no perturbado (Xnp) No perturbado X=14Q 0500915 Y=2039368 3 Quilamula perturbado (Qp) Perturbado X=14Q 0499847 Y=2041934 3 Quilamula no perturbado (Qnp) No perturbado X=14Q 0498746 Y=2047136

Tabla 2. Especies de plantas recolectadas durante los muestreos de

vegetación.

Especie Familia Panicum trichoides Poaceae

Oplismenus burmanii Poaceae Brickellia diffusa Asteraceae

Elytraria imbricata Acanthaceae Brickellia sp. Asteraceae Desmodium

procumbens var. Transversum

Fabaceae

Maranta arundinaceae Marantaceae Euphorbia graminea. Euphorbiaceae

Dicliptera cf. (peduncularis) membranacea

Acanthaceae

Senna uniflora Fabaceae Bidens bigelovi. Asteraceae

Melochia sp. Sterculiaceae Sida glabra Malvaceae

Bidens odorata. Asteraceae Bouteloua triaena Poaceae Salvia mexicana Lamiaceae

Habracanthus silvaticus. Acanthaceae Tetramerium nervosum. Acanthaceae

Talinum paniculatum Portulacaceae Cf. Mellampodium sp. Asteraceae

Stachys sp Lamiaceae Evolvulus alsinoides Convolvulaceae

Mellampodium sp. Asteraceae Stachys cf. agraria Lamiaceae Bouteloua triaena Poaceae Lagascea mollis. Asteraceae

Phaseolus microcarpus. Fabaceae Gomphrena decumbens. Amaranthaceae

Sanvitalia procumbens. Asteraceae Iresine sp. Amaranthaceae

Triumfetta semitriloba. Tiliaceae Cf. Mellampodium sp. Asteraceae

Herissantia crispa Malvaceae Aeschynomene

americana Fabaceae

Plumbago scandens PlumbaginaceaeBorreria laevis Rubiaceae Delilia biflora Asteraceae

Aristida jorullensis Poaceae Euphorbia hirta. Euphorbiaceae

Henrya imbricans Acanthaceae Iresine calea Amaranthaceae

Dalea sp. ó Marina sp. Fabaceae Cf. Lamiaceae ó

Malvaceae

Selaginella sp. Selaginellaceae

123

Tabla 3. Especies recolectadas en el banco de semillas

Morfo 3 Morfo 6 Morfo 9

Morfo 12 Morfo 14 Morfo 19 Morfo 36 Morfo 39 Morfo 41 Morfo 43 Morfo 44 Morfo 46 Morfo 47 Morfo 51 Morfo 56 Morfo 57 Morfo 58 Morfo 73 Morfo 81 Morfo 83 Morfo 85 Morfo 87 Morfo 91

Justicia sp. Acanthaceae Ruellia sp. Acanthaceae

Amphipterygium adstringens Anacardiaceae

Spondias purpurea Anacardiaceae Stemmadenia bella Apocynaceae

Marsdenia sp. Asclepiadaceae cf. Bidens sp. Asteraceae Delilia biflora Asteraceae Montanoa. cf.

grandifolia Asteraceae

Morfo 59 Asteraceae Pithecoctenium

crucigerum Bignoniaceae

Ceiba aesculifolia Bombacaceae Bursera aloexylon Burseraceae Bursera copallifera Burseraceae Bursera grandifolia Burseraceae

Opuntia sp. Cactaceae Pachycereus grandis Cactaceae

Morfo 74 cf. Fabaceae Morfo 52 cf. Rubiaceae. Morfo 37 Cf. Solanaceae.

Combretum fructicosum Combretaceae

Ipomoea conzattii Convolvulaceae Ipomoea pauciflora Convolvulaceae

Ipomoea sp 1 Convolvulaceae Ipomoea sp 2 Convolvulaceae Ipomoea sp. 3 Convolvulaceae

Morfo 86 Euphorbiaceae. Acacia cochliacantha Fabaceae

Acacia farnesiana Fabaceae Acacia sp. Fabaceae

Aeschynomene americana Fabaceae

cf. Aeschynomene americana Fabaceae

Chamaecrista sp. Fabaceae Conzattia multiflora. Fabaceae

Desmanthus virgatus. Fabaceae Gliricidia sepium Fabaceae

Lysiloma divaricata Fabaceae Mimosa benthamii Fabaceae Mimosa poliantha Fabaceae

Mimosa sp. 1 Fabaceae Mimosa sp. 2 Fabaceae

Morfo 5 Fabaceae Morfo 50 Fabaceae

Nissolia fruticosa. Fabaceae Senna sp 3. Fabaceae Senna sp. 1 Fabaceae Senna sp. 2 Fabaceae Senna sp. 4 Fabaceae Hippocratea acapulcensis Hippocrateaceae

Mascagnia aff. polybotrya Malpighiaceae

Ficus padifolia Moraceae Ficus sp. Moraceae

Polygonum sp. Polygonaceae Ruprechtia fusca Polygonaceae

Zanthoxylum culantrillo Rutaceae Serjania triquetra Sapindaceae

Guazuma ulmifolia. Sterculiaceae Heliocarpus pallidus Tiliaceae

Triumfetta semitriloba. Tiliaceae Vitex hemsleyi. Verbenaceae

Vitex mollis Verbenaceae

124

Tabla 4. Especies de semillas recolectadas de los abazones.

Morfo 3 Morfo 6 Morfo 8 Morfo 9

Morfo 12 Morfo 14

Morfo 15B Morfo 19

Morfo 20B Morfo 31 Morfo 33

Justicia sp. Acanthaceae Stemmadenia bella Apocynaceae

Pithecoctenium crucigerum Bignoniaceae

Bursera aloexylon Burseraceae Bursera copallifera Burseraceae Bursera grandifolia Burseraceae Jacaratia mexicana Caricaceae

Ipomoea pauciflora Convolvulaceae Ipomoea sp. 1 Convolvulaceae

Cochlospermum vitifolium Cochlospermaceae

cf. Aeschynomene sp. Fabaceae Conzattia multiflora Fabaceae

Desmanthus sp. Fabaceae Lysiloma divaricata Fabaceae

Mimosa sp. Fabaceae Morfo 5 Fabaceae

Senna sp. Fabaceae Polygonum sp. Polygonaceae

Ruprechtia fusca Polygonaceae Zanthoxylum cf.

culantrillo Rutaceae

Serjania triquetra. Sapindaceae Guazuma ulmifolia. Sterculiaceae

Triumfetta semitriloba Tiliaceae

Tabla 5. Resultados del análisis de preferencia para las semillas de diferentes especies encontradas en los contenidos de abazones, por condición por temporada y total. El número indica el lugar relativo de preferencia en el que se encuentra la especie por cada tratamiento. P=perturbado Np=no perturbado Ll=lluvias S1=secas tempranas S2= secas tardías. Especie PLl NpLl PS1 NpS1 PS2 NpS2 Total Conzattia multiflora 4 2 2 1 8 1 Bursera grandifolia 2 5 8 2 6 2 5 3 2 3 Ipomoea sp 1 1 1 4 3 1 4 3 9 5 6 4 3 3 6 Serjania triquetra 5 1 2 5 7 Desmanthus virgatus 8 Lysiloma divaricata 9 Stemmadenia bella 10 9 6 5 4 11 Bursera aloexylon 3 1 12 12 13 Mimosa sp 1 7 10 14 Zanthoxylum culantrillo 15

125

cf.Aeschynomene americana 16 14 17 Senna sp. 18 Triumfetta semitriloba 7 19 Pithecoctenium crucigerum 7 20 Mimosa sp. 2 21 Bursera copallifera 3 22 Ipomoea pauciflora 6 23 Ruprechtia fusca 4 24 Justicia candicans 25 19 4 26 Tabla 6. Especies de plantas herbáceas identificadas dentro de las excretas, incluye cuales tienen datos de diversidad y disponibilidad en el medio.

Familia Especie Datos disponibilidad Acanthaceae Elytraria imbricata Si Acanthaceae Habracanthus silvaticus Si Acanthaceae Justicia candicans Si Acanthaceae Tetramerium nervosum Si Amaranthaceae Gomphrena decumbens Si Fabaceae Desmodium procumbens Si Marantaceae Maranta arundinaceae Si Onagraceae Ludwigia octovalvis No Plumbaginaceae Plumbago scandens No Poaceae Oplismenus burmannii Si Tabla 7. Resultados del análisis de preferencia para las especies encontradas en excretas, por condición por temporada y total. El número indica el lugar relativo de preferencia en el que se encuentra la especie por cada tratamiento. P=perturbado, Np=no perturbado, Ll=lluvias, S1=Secas iniciales, S2=secas finales, SD= Sin datos de disponibilidad.

Especie Familia PLl NpLl PS1 NpS1 PS2 NpS2 TotalOplismenus burmannii Poaceae 1 1 1 1 1 1 1 Gomphrena decumbens Amaranthaceae 2 Justicia candicans Acanthaceae 3 Maranta arundinaceae Marantaceae 2 4 Habracanthus silvaticus Acanthaceae 3 5 Desmodium procumbens Fabaceae 2 2 6 Tetramerium nervosum Acanthaceae 3 7 Elytraria imbricata Acanthaceae 3 2 8 Ludwigia octovalvis Onagraceae SD Plumbago scandens Plumbaginaceae SD

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Tabla 8. Géneros y especies cuyas semillas se reportan como presentes en abazones o madrigueras de Liomys pictus en las selvas secas de Chamela, Jalisco y que estan presentes en la Sierra de Huautla (Dorado et al., en prensa) y fueron encontrados para Liomys irroratus en el presente trabajo. 1.- Este trabajo 2.-Pérez-Saldaña, 1978 3.- Janzen, 1986a, 4.-Ceballos, 1989; 5.-Mendoza, 1997. 6.- Domínguez, 2000. 7.- Hernández, 2000. *son las spp no reportadas para L. pictus y descritas para L. irroratus en este trabajo. Los datos de Janzen (1986a) son de contenidos de abazones de Liomys salvini en Costa Rica.

Familia especie 1 2 3 4 5 6 7 Acanthaceae Dicliptera sp. X Acanthaceae Justicia candicans* X Acanthaceae Justicia sp. X Acanthaceae Ruellia sp. X X X Anacardiaceae Comocladia engleriana X X X X Anacardiaceae Spondias purpurea X X X X Apocynaceae Stemmadenia bella* X Bignoniaceae Crescentia alata X X Bignoniaceae Pithecoctenium crucigerum* X Bignoniaceae Tabebuia sp. X Bombacaceae Ceiba aesculifolia X X Boraginaceae Cordia elaeagnoides X X Boraginaceae Cordia sp. X Burseraceae Bursera aloexylon* X Burseraceae Bursera copallifera* X Burseraceae Bursera grandifolia* X Cactaceae Opuntia sp. X Capparaceae Cleome sp. X Capparaceae Crataeva tapia X X Caricaceae Jacaratia mexicana X X X Cochlospermaceae Cochlospermum vitifolium X X X X Combretaceae Combretum fruticosum X Convolvulaceae Evolvulus sp. X X Convolvulaceae Ipomoea arborescens X Convolvulaceae Ipomoea pauciflora* X Convolvulaceae Ipomoea sp. X X X X X X Convolvulaceae Ipomoea wolcottiana X X X Cucurbitaceae Echinopepon racemosus X X Cucurbitaceae Cucurbita sp. X

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Euphorbiaceae Cnidoscolus sp. X X Euphorbiaceae Cnidoscolus tubulosus Euphorbiaceae Croton sp. X X X X Euphorbiaceae Euphorbia sp. X X Euphorbiaceae Jatropha sp. X X Euphorbiaceae Manihot sp. X Fabaceae Acacia farnesiana X X Fabaceae Bauhinia sp. X Fabaceae Caesalpinia pulcherrima X X X Fabaceae cf. Aeschynomene americana* X Fabaceae Conzattia multiflora* X fabaceae Crotalaria sp. X X X Fabaceae Desmanthus virgatus* X Fabaceae Entadopsis polystachya X X X Fabaceae Enterolobium cyclocarpum X Fabaceae Hymenaea courbaril X Fabaceae Leucaena lanceolata X Fabaceae Leucaena sp. X Fabaceae Lonchocarpus sp. X X Fabaceae Lysiloma divaricata X X Fabaceae Mimosa sp. X X X Fabaceae Nissolia fruticosa X X X X X Fabaceae Phaseolus lunatus X X X X X Fabaceae Phaseolus microcarpus X X X X Fabaceae Phaseolus sp. X X X Fabaceae Phaseolus vulgaris X Fabaceae Tephrosia sp. X X Fabaceae Senna sp.* X Malvaceae Abutilion sp. X Malvaceae Sida sp. X X Meliaceae Swetenia humilis X Moraceae Ficus cotinifolia X Moraceae Ficus sp. X X X X X X Phytolaccaceae Rivinia humilis X Plumbaginaceae Plumbago scandens X Poaceae Lasiacis ruscifolia X Poaceae Panicum sp. X X X Poaceae Setaria sp. X Polygonaceae Ruprechtia fusca X X X Rubiaceae Randia sp. X X Rutaceae Zanthoxylum culantrillo* X

128

Sapindaceae Cardiospermum halicacabum X X Sapindaceae Serjania brachycarpa X X X Sapindaceae Serjania sp. X Sapindaceae Serjania triquetra* X Sapindaceae Thouinidium decandrum X X Solanaceae Physalis leptophylla X X Solanaceae Solanum sp. X X X Sterculiaceae Guazuma ulmifolia X X Theophrastaceae Jacquinia pungens X X Tiliaceae Heliocarpus pallidus X X X X Tiliaceae Triumfetta semitriloba X

27 81 23 17 3 34 29 26 29

129

Anexos

Anexo 1. Medidas y datos tomados a los ratones capturados.

De todos los animales capturados se registró el número de trampa, la fecha

y sitio de captura y los siguientes datos (Romero-Almaraz et al., 2000):

1. Identificación a nivel especie utilizando las guías de Álvarez-Castañeda

(1996); Ceballos & Miranda (2000); Sánchez & Romero (1995).

2. Datos morfométricos: Longitud total (LT), Longitud de cola (LC), Longitud de la

pata izquierda trasera (LPI), Longitud de la oreja izquierda (LOI), en milímetros y

peso en gramos.

3. Sexo, clase de edad (ej. cría, juvenil o adulto) y condición reproductiva (ej.

inactivo, con testículos escrotados, preñada y en lactancia).

4. Contenido de los abazones y muestras de excretas (de cada individuo

incluyendo recapturas) para la estimación de la dieta de Liomys irroratus

De manera complementaria se recolectaron muestras de ectoparásitos, pelo y

tejido, para la realización de estudios posteriores.

Además, los animales se marcaron por medio de ectomización de falanges

(Martoff, 1963 citado en Romero-Almaraz et al., 2000) para permitir su identificación

posterior y la obtención de información demográfica y para obtener muestras de

tejido, necesario para los objetivos del proyecto general dentro del cual se inserta

este trabajo. Los animales fueron devueltos el día siguiente al lugar exacto de la

trampa donde fueron capturados.

130

Anexo 2. Fórmula del formaldehído alcohol; (F. A. A.).

(Gaviño et al., 1999).

Alcohol de 96°.

Ácido acético glacial.

Formol comercial.

Agua destilada

50ml.

5ml.

10ml.

35ml.

Anexo 3. Fórmula de la gelatina glicerinada. (Gaviño et al., 1999; Sandoval-

Zapotitla, en prensa).

Gelatina (grenetina) 3.5gr.

Glicerina 25 ml.

Ácido fénico 1 gr.

Agua destilada. 21 ml.

Disolver la gelatina en agua caliente, cuando esté tibia, agregar las otras

sustancias. Filtrar utilizando un lienzo fino. Esta solución se debe conservar en

frascos pequeños y en refrigeración. Antes de utilizar se debe fundir en baño María

(o en microondas por 10 segundos) evitando la formación de burbujas.

Anexo 4. Técnica para la preparación de laminillas temporales. (Sandoval-Zapotitla, en prensa).

1. Cortar secciones de aproximadamente 1cm2 del material fijado con F. A. A.

2. Colocar las secciones en frascos con NaOH al 20 o 30%. Hasta que la sección

tenga una apariencia translúcida (normalmente toma entre 20 y 40 minutos).

3. Lavar con agua destilada, al menos dos veces.

4. Colocar las secciones el cloro comercial en concentración similar a la anterior

solución y permanecerán ahí por un mínimo de 30 minutos, hasta que las secciones

131

se tomen blanquecinas (transparentes). Esto es un buen indicio de que la

separación de la cutícula/epidermis será más fácil.

5. Lavar las secciones en repetidas ocasiones con agua destilada para

eliminar el exceso de cloro.

6. Colocar la muestra en un portaobjetos, agregando de tres a cinco gotas de

gelatina glicerinada.

7. Cubrir la laminilla con un cubre objetos y colocarle un peso sobre el para

mantener la muestra en un solo plano, dejándola secar hasta que la gelatina

glicerinada esté totalmente sólida.

Anexo 5. Técnica para la preparación de laminillas permanentes. (Sandoval-Zapotitla, en prensa).

Esta técnica permite observar la forma y tamaño de las células epidérmicas,

orientación de las mismas, ornamentaciones epidérmicas o cuticulares, tricomas,

papilas u otros apéndices epidérmicos, estomas y cristales.

1. Cortar secciones de aproximadamente 1cm2 del material fijado con F. A. A.

2. Colocar las secciones en frascos con NaOH al 20 o 30%. Hasta que la sección

tenga una apariencia translúcida (normalmente toma entre 20 y 40 minutos).

3. Lavar con agua destilada, al menos dos veces.

4. Colocar las secciones en cloro comercial en concentración similar a la anterior

solución y permanecerán ahí por un mínimo de 30 minutos, hasta que las secciones

se tornen blanquecinas (transparentes). Esto es un buen indicio de que la

separación de la cutícula/epidermis será más fácil.

5. Lavar las secciones en repetidas ocasiones con agua destilada para

eliminar el exceso de cloro.

6. Colocar el material en cajas Petri y bajo el microscopio estereoscópico tratar de

separar la cutícula con ayuda de pinzas de punta fina y agujas de disección. Eliminar

132

el tejido adherido a la cutícula con ayuda de un pincel de cerdas finas, cuidando que

esta no se rompa o dañe.

7. Cuando la cutícula está totalmente desprovista de tejido parenquimático se

procede a la tinción. Para evitar que la cutícula se enrolle y sea más fácil su manejo,

se recomienda colocar en un portaobjetos una gota de gelatina glicerinada

diluida con agua. Extenderla en una fina capa y colocar sobre esta la cutícula;

esperar a que la gelatina seque.

8. Asegurarse que la superficie expuesta hacia arriba sea la externa de la

epidermis. Agregar unas gotas de Safranina "O" por un mínimo de 15 minutos.

9. Lavar con agua destilada el excedente de colorante. Deshidratar gradualmente

con etanol al 30, 50, 70, 96% y absoluto, dos cambios en cada alcohol de 1 a 3

minutos en cada uno.

10. Agregar unas gotas de aceite de clavo durante 10 minutos para lograr su

aclaramiento. Lavar el aceite con tres cambios de xilol, un minuto o dos en cada

cambio y montar en resina sintética (o Permount).

Nota: ésta metodología fue modificada para optimizar su funcionamiento con

el material recolectado (herbáceas), el cual al ser delgado requirió de menores

tiempos que el material más grueso (hojas de árboles) por lo que se requiere de un

mayor tiempo en los diferentes reactivos, tiempos que el material del presente

trabajo no puede estar inmerso en dichos químicos pues presenta daño celular.

En múltiples ocasiones se omitieron los pasos 6 y 7, por no haber sido posible

la separación de la epidermis, por lo mismo se tiñó la sección (±1cm2) completa,

dando resultados muy similares al material del cual la epidermis fue separada.

133

Anexo 6. Técnica para la preparación de las laminillas de las excretas.

(Holechek, 1982).

Esta es la técnica utilizada para la preparación de las laminillas de material fecal:

1. Secado del material en horno, entre 60ºC y 70ºC, hasta estabilizar el peso (Hinnart &

Kothman, 1988).

2. El material es molido a mano y cribado a través de una malla de 1mm, antes de

iniciar el tratamiento.

3. El material se coloca en blanqueador casero (hipoclorito de sodio) durante 30

minutos.

4. El material se hierve en agua destilada durante 2 minutos.

5. Se monta en la laminilla con Permount.

Ésta metodología se modificó de Holechek (1982) pues dentro del equipo

necesario se requiere un molino de cuchillas (Wiley mill) para moler las excretas a

1mm, equipo que no se encuentra disponible para este trabajo por lo tanto el

material se maceró a mano a un tamaño que los fragmentos coincidieran con las

dimensiones sugeridas por el trabajo de Holechek (1982), pasándolas a través de

malla de 1mm, esperando poder acceder a ese equipo posteriormente y comparar

los resultados de ambos métodos.

La inmersión en NaOH es recomendada por Holechek (1982) y Vavra &

Holechek (1980, recomendando también el uso del molino de cuchillas en conjunto

con el aclarador. La aplicación de Hipoclorito de sodio (blanqueador casero) se

recomienda en Holechek (1982) y en Williams (1969), a pesar de que ambas son

factibles de generar destrucción en las células, por lo tanto se recomienda probar los

resultados de ambas y compararlos (Holechek, 1982).

La temperatura óptima de secado del material fecal se obtuvo del trabajo de

Hinnant & Kothmann (1988), donde se señala que el secado a esas temperaturas se

puede utilizar para proveer un método rápido y eficaz para analizar el material fecal,

dado a que Holechek (1982) no detalla la temperatura a la que se deben secar las

excretas.