revista_hyg_32_ucsh_2015

Upload: manuel-ramirez-espindola

Post on 08-Jul-2018

214 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    1/156

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    2/156

    2

    Presidente y Gran CancillerP. Alberto Lorenzelli sdb.

    Rector 

    Jorge Baeza Correa

    Vicerrector AcadémicoManuel Pérez Pastén

    Decano de la Facultad de EducaciónMarisol Álvarez Cisternas

    Director Escuela de Educación en Historia y GeografíaLeopoldo Tobar Cassi

    Jefa de Ediciones UCSH-DIPOSFabiola Hurtado Céspedes

    DirectorLeopoldo Tobar Cassi

    EditorDavid Home Valenzuela

    Asistente de EdiciónDenisse Salvo Reyes

    Comité EditorialEnrique Aliste, Departamento de Geografía, Universidad de Chile (Chile)

    Eduardo Cavieres, Instituto de Historia, Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (Chile)

    Joaquín Fermandois, Instituto de Historia, Pontificia Universidad Católica de Chile (Chile)

    Rodrigo Hidalgo, Instituto de Geografía, Pontificia Universidad Católica de Chile (Chile)

    Freddy Timmermann, Pedagogía en Historia y Geografía, Universidad Católica Silva Henríquez (Chile)

    Comité CientíficoCarlos Antonio Aguirre, Instituto de Investigaciones Sociales, UNAM (México)

    Fabián Araya, Departamento de Ciencias Sociales, Universidad de La Serena (Chile)

    Federico Arenas, Instituto de Geografía, Pontificia Universidad Católica de Chile (Chile)Juan Cáceres, Instituto de Historia, Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (Chile)

    Marcela Cubillos Poblete, Departamento de Ciencias Sociales, Universidad de La Serena (Chile)

    Hernán Escobar, Departamento de Ciencias Geográficas, Universidad de Playa Ancha (Chile)

    Cristián Henríquez, Instituto de Geografía, Pontificia Universidad Católica de Chile (Chile)

    Jorge Hidalgo, Departamento de Ciencias Históricas, Universidad de Chile (Chile)

    José Luis Martínez, Centro de Estudios Culturales Latinoamericanos, Universidad de Chile (Chile)

    Luis Ortega Martínez, Departamento de Historia, Universidad de Santiago de Chile (Chile)

    Jorge Pinto, Departamento de Ciencias Sociales, Universidad de La Frontera (Chile)

    Enriqueta María Quiroz, Instituto Mora (México)

    Osvaldo Silva Galdames, Departamento de Ciencias Históricas, Universidad de Chile (Chile)

    Antonio Vieyra Medrano, Centro de Investigaciones en Geografía Ambiental, UNAM (México)

    Diseño y diagramación: Ángela AguileraCorrección de pruebas: Juan Álvarez de Araya Muñoz

    Impresión: Santiago de Chile, 2015

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    3/156

    3

    Universidad Católica Silva HenríquezFacultad de Educación

    Escuela de Educación en Historia y GeografíaPedagogía en Historia y Geografía

    Revista de Historia y Geografía

    La Revista de Historia y Geografía es una publicación periódica bianual(junio y noviembre) editada por la carrera de Pedagogía en Historia y Geografíade la Universidad Católica Silva Henríquez.

    Publicada desde 1986, la Revista de Historia y Geografía pretende contri-buir a la divulgación de estudios originales, empíricos o teóricos de las másdiversas corrientes historiográficas, de la ciencia geográfica y de la enseñanzapedagógica de ambas disciplinas, referidas al caso chileno e internacional.Está destinada a un público relacionado con la enseñanza e investigación delas disciplinas señaladas.

    El Comité Editorial, con el apoyo del Comité Científico, aprueba los tra-bajos que son enviados para su publicación.

    Universidad Católica Silva Henríquez’s Revista de Historia y Geografía isa twice-yearly publication (June and November) edited by the university’sHistory and Geography Education program.

    Published since 1986, the journal aims to contribute to domestic andinternational diffusion of original (empirical or theoretical) research from: anyschool of historiography, the field of geographical science, or the teaching ofeither discipline. The journal’s target readership includes those with connec-tions to teaching and research in the aforementioned disciplines.

    The Revista de Historia y Geografía’s editorial board, with support fromthe scientific board, approves work submitted for publication.

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    4/156

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    5/156

    5

    Índice

    Editorial ...................................................................................................... 11

    Artículos

    Raimundo Meneghello MatteEl Dios de las batallas: el providencialismo en la

    cronística hispana en la batalla de las Navas de Tolosa(1212) ............................................................................19

    Diego Canales RamírezEfectos de la reforma protestante en el sistema derelaciones internacionales de Europa Occidental .............41

    Ricardo López MuñozLa solidaridad chilena con la primera guerra deindependencia de Cuba: sus tensiones y

    contradicciones ..............................................................53

    Diego Barría Traverso

    Empleados públicos y clase media, Chile 1880-1920un análisis exploratorio a partir de cifras oficiales ............77

    Jesús Marolla GajardoLa educación para la igualdad, la diferencia y laenseñanza de la historia de las mujeres: reflexiones y

    desafíos .......................................................................101

    Sebastián Rodríguez LeivaGeografía cotidiana y prácticas culturales:construcción simbólica de los patios del CementerioGeneral de Santiago .....................................................117

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    6/156

    6

    TribunaAndrés Estefane

    Viajeros y burócratas en la historia de la exploración

    territorial de la República de Chile ................................133

    ReseñaFabián Bustamante Olguín

    La derecha en la crisis del Bicentenario, de Hugo Herrera.Santiago de Chile: Ediciones Universidad Diego Portales,2014, 213 páginas. ......................................................147

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    7/156

    7

    Table of contents

    Editorial ...................................................................................................... 11

    Articles

    Raimundo Meneghello MatteThe god of battles: providentialism in the hispanic chronicle

    in the battle of las Navas de Tolosa (1212) ......................19

    Diego Canales Ramírez

    Effects of the protestant reformation in the internationalrelations system in Western Europe ................................41

    Ricardo López MuñozChilean solidarity in the Cuba’s first war of independence:tensions and contradictions ............................................53

    Diego Barría TraversoCivil servants and middle class, Chile 1880-1920: anexploratory analysis based on official figures...................77

    Jesús Marolla GajardoEducation for equality, difference and teaching

    of women’s history: challenges and reflections ............101

    Sebastián Rodríguez Leiva

    Daily geography and cultural practices: a symbolicconstruction of the general cemetery courtyards in

    Santiago, Chile .............................................................117

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    8/156

    8

    TribuneAndrés Estefane

    Travellers and bureaucrats in the history of land

    exploration in the Republic of Chile ..............................133

    ReviewFabián Bustamante Olguín

    La derecha en la crisis del Bicentenario, by Hugo Herrera.Santiago de Chile: Ediciones Universidad Diego Portales,2014, 213 pages. .........................................................147

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    9/156

    9

    Índice

    Editorial ...................................................................................................... 11

    Artigos

    Raimundo Meneghello MatteO deus das batalhas: o providencialismo na

    crônica hispana na batalha dasNavas de Tolosa (1212) ...................................................20

    Diego Canales RamírezEfeitos da reforma protestante no sistema de relaçõesinternacionais da Europa Ocidental ................................42

    Ricardo López MuñozA solidariedade chilena com a primeira guerra daindependência de Cuba: suas tensões e contradições .....54

    Diego Barría TraversoFuncionários públicos e classe média, Chile 1880-1920:

    uma análise exploratória a partir de dados oficiais. .........78

    Jesús Marolla Gajardo

    Educação para a igualdade, a diferença e ensino dahistória de mulheres: reflexões e desafios .....................102

    Sebastián Rodríguez LeivaGeografia cotidiana e práticas culturais: construção

    simbólica dos pátios do cemitério geral de Santiago .....118

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    10/156

    10

    TribunaAndrés Estefane

    Viajantes e burocratas na história da exploração

    territorial da República do Chile ..................................133

    ResenhaFabián Bustamante Olguín

    La derecha en la crisis del Bicentenario, do Hugo Herrera.Santiago de Chile: Ediciones Universidad Diego Portales,2014, 213 páginas. ......................................................147

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    11/156

    11

    Editorial

    Editorial

    El presente número de la Revista de Historia y Geografía, busca dar cuen-ta de una variedad de temáticas que hoy ocupan a los estudios históricos ygeográficos y que están presentes en este número in comento. Además, se

    incorpora una temática relevante para la formación pedagógica, como loes el artículo que aborda materias vinculadas con la didáctica de la historia.

    Los trabajos del ámbito de la historia que se presentan en este número

    son cuatro, agrupados en Historia Universal e Historia de Chile. El primerartículo es del académico Raimundo Meneghello, que se titula “El Dios dela Batallas: El Providencialismo en la Cronística Hispana en la Batalla de las

    Navas de Tolosa (1212)”, en donde se establece una relación entre los hechosde la Reconquista y como actuaba el providencialismo en éstos. El segundotrabajo es del profesor Diego Canales Ramírez y lleva por título “Efectos de

    la Reforma Protestante en el Sistema de Relaciones Internacionales de Euro-pa Occidental”, en el cual se manifiesta una nueva lógica en el sistema delas relaciones internacionales de Europa Occidental a partir de los eventos

    religiosos originados durante la reforma protestante. El tercer artículo es delacadémico Ricardo López Muñoz, “La solidaridad chilena con la PrimeraGuerra de Independencia de Cuba: Sus tensiones y contradicciones”, en elque se estudia el impacto del americanismo en las elites y sociedad chilena

    durante la primera guerra de independencia de Cuba en la segunda mitaddel siglo XIX. El último trabajo de historia es el del profesor Diego BarríaTraverso, titulado “Empleados públicos y clase media, Chile 1880-1920: Un

    análisis exploratorio a partir de cifras oficiales”, en el que se explora sobreel origen social de los empleados públicos chilenos entre 1880 a 1920, y

    los efectos sobre la empleabilidad que posibilitó el Estado chileno y la tra-yectoria de la conformación de la burocracia estatal a finales del siglo XIX ycomienzos del XX.

    El artículo del ámbito de la geografía es del investigador Sebastián Rodrí-

    guez Leiva y se titula “Geografía cotidiana y prácticas culturales: Construcciónsimbólica de los patios del Cementerio General de Santiago”, en el que sepretende establecer la relación existente entre el cuidador y su patio, es decir,

    una geografía de las percepciones que busca como producto del significado

    y sentido que éste ha dotado a ese espacio, el patio.

    El último artículo está dedicado a la didáctica de la historia y corresponde

    al profesor Jesús Marolla Gajardo titulado “La educación para la igualdad,la diferencia y la enseñanza de la historia de las mujeres: Reflexiones y desa-fíos”. Este trabajo pretende establecer que los temas de género, inclusión,

    ISSN 0719-4137  Revista de Historia y Geografía Nº 32 / 2015 • 11-12

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    12/156

    12

    Revista de Historia y Geografía Nº 32 / 2015

    igualdad, entre otros, son aspectos cruciales a considerar al momento de laformación inicial docente en nuestras universidades, pues ellos marcarán unadiferencia relevante en su desempeño futuro como docentes de aula en el

    sistema de educación secundario.

    El número incluye, además, una contribución del investigador AndrésEstefane Jaramillo a la sección Tribuna, titulada “Viajeros y burócratas en la

    historia de la exploración territorial de la República de Chile”. En este texto,el autor reflexiona en torno al papel de los viajeros en la historia de la explo-ración territorial de Chile durante los siglos XIX y XX.

    Una reseña se incluye en el presente número. Ha sido escrita por FabiánBustamante y en ella se analiza el libro La derecha en la crisis del Bicente-nario, de Hugo Herrera, publicado por Ediciones Universidad Diego Portalesel año 2014.

    Para nuestra Escuela es grato alcanzar el N° 32 de esta tradicional pu-

    blicación en el marco de las reformas educacionales que afectan al sistemaUniversitario. Invitamos a toda la comunidad académica a hacerse parte deeste esfuerzo editorial.

     

    Leopoldo Tobar CassiDirector

    Escuela de Educación en Historia y Geografía

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    13/156

    13

    Editorial

    Editorial

    This volume of the History and Geography Journal aims to account for avariety of issues addressed by today’s historical and geographical studies that

    are present in this number in comment. It also includes a relevant subject forteacher training in an article about the teaching of history.

    In the field of history, this issue presents four works grouped in Universal

    History and Chilean History. The first article, by the academic RaimundoMeneghello, is entitled “The God of Battles: Providentialism in the Hispanicchronicle in the Battle of Las Navas de Tolosa (1212),” which establishes a

    relationship among the facts of the Reconquista and the function of Provi-dentialism in them. The second work, by Professor Diego Canales Ramirez, isentitled “Effects of the Protestant Reformation in the international relations

    system in Western Europe.” It reflects on a new logic manifested in the sys-tem of international relations in Western Europe since some religious events

    arising during the Protestant Reformation. The third articles was written bythe academic Ricardo Lopez Muñoz. “Chilean solidarity in the Cuba’s FirstWar of Independence: Tensions and contradictions” studies the impact ofAmericanism on the elites and the Chilean society during the first indepen-

    dence war of Cuba in the second half of the Nineteenth Century. The lasthistory work by Professor Diego Barría Traverso is entitled “Civil servantsand middle class, Chile 1880-1920: An exploratory analysis based on official

    figures,” which explores the social origin of the Chilean public employeesbetween 1880-1920, the effects on employability allowed by the Chilean

    State and the establishment of the State bureaucracy in the late Nineteenthand early Twentieth Centuries.

    The article in the field of geography was written by the researcher Sebas-tian Rodriguez Leiva and is entitled “Daily geography and cultural practices:

    A symbolic construction of the General Cemetery courtyards in Santiago,Chile,” aimed at establishing the relationship between the grave keeper andhis or her yard, that is, a geography of perceptions about the meaning andthe sense provided to that space, the courtyard.

    The last article is dedicated to the teaching of History and was writtenby Professor Jesus Marolla Gajardo. It is entitled “Education for equality, dif-

    ference and teaching of women’s history: Challenges and reflections.” Thiswork aims to establish that gender issues as inclusion and equality amongothers are fundamental aspects to consider in the initial teacher training in our

    ISSN 0719-4137  Revista de Historia y Geografía Nº 32 / 2015 • 13-14

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    14/156

    14

    Revista de Historia y Geografía Nº 32 / 2015

    universities, because they will make a significant difference in the future rolesof those students as classroom teachers in the secondary education system.

    This issue also includes a contribution by the researcher Andres EstefaneJaramillo to the section Tribune, entitled “Travelers and bureaucrats in thehistory of territorial exploration in the Chilean Republic”. In this text, theauthor reflects on the role of travelers in the history of territorial exploration

    in Chile during the Nineteenth and Twentieth Centuries.

    This issue includes a review written by Fabian Bustamante on the book Laderecha en la crisis del Bicentenario (The right wing in the Bicentennial crisis)by Hugo Herrera, published in 2014 by Ediciones Universidad Diego Portales.

    Our School is very pleased for reaching this publication volume 32 in theframework of educational reforms affecting the university system. We invitethe academic community to become a part of this publishing effort.

     

    Leopoldo Tobar CassiDirector

    School of Education in History and Geography

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    15/156

    15

    Editorial

    Editorial

    O presente número da Revista de História e Geografia procura dar contade uma variedade de temáticas que hoje ocupam aos estudos históricose geográficos que estão presentes neste número in comento. Além disso,

    incorpora-se uma temática relevante para a formação pedagógica, como éo artigo que trata de questões relacionadas com a didática da história.

    Os trabalhos no campo da história apresentadas nesta edição são quatro,

    agrupados em História Universal e História do Chile. O primeiro artigo é doacadêmico Raimundo Meneghello intitulado “O Deus das Batalhas: O Pro-videncialismo na Crônica Hispana na Batalha das Navas de Tolosa (1212),”

    onde se estabelece uma relação entre os fatos da Reconquista e como agiao Providencialismo neles.

    O segundo trabalho é do Professor Diego Canales Ramírez que leva por

    titulo “Efeitos da Reforma Protestante no sistema de Relações Internacionaisda Europa Ocidental”, no qual se manifesta uma nova lógica manifesta no

    sistema de relações internacionais da Europa Ocidental a partir dos eventosreligiosos que surgiram durante a Reforma Protestante.

     O terceiro artigo é do acadêmico Ricardo López Muñoz, “A solidariedadechilena com a Primeira Guerra da Independência de Cuba: Suas tensões e

    contradições”, no qual se estuda o impacto do americanismo nas elites esociedade chilena durante a primeira guerra de independência de Cuba nasegunda metade do século XIX.

    O último trabalho de história é do professor Diego Barría Traverso intitu-

    lado “Funcionários públicos e classe média, Chile 1880-1920: Uma análiseexploratória a partir de dados oficiais”, no qual se explora sobre a origem

    social dos funcionários públicos chilenos entre 1880-1920, e os efeitos so-bre a empregabilidade, que possibilitou o Estado chileno e a trajetória daconfiguração da burocracia estatal no fim do séculos XIX e no início do XX.

    O artigo no campo da geografia é do pesquisador Sebastian RodriguezLeiva e é intitulado “Geografia cotidiana e práticas culturais: Construçãosimbólica dos pátios do Cemitério Geral de Santiago”, o qual pretende

    estabelecer a relação existente entre o cuidador e seu quintal, ou seja, umageografia de percepções que procura como produto o significado e sentidoque este lhe deu a aquele espaço, o pátio.

    O último artigo é dedicado ao ensino da história e corresponde aoprofessor Jesús Marolla Gajardo intitulado “A Educação para a igualdade,

    ISSN 0719-4137  Revista de Historia y Geografía Nº 32 / 2015 • 15-16

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    16/156

    16

    Revista de Historia y Geografía Nº 32 / 2015

    a diferença e o ensino da história das mulheres: Reflexões e desafios”. Estetrabalho pretende estabelecer que as questões de género, inclusão, igualdade,entre outros, são aspectos cruciais a serem considerados no momento da

    formação inicial docente em nossas universidades, pois eles vão fazer umadiferença significativa em seu futuro papel como docentes de aula no sistemado ensino secundário.

    Esta edição inclui uma contribuição do pesquisador Andres EstefaneJaramillo na seção Tribuna intitulada “Viageiros e burocratas na história daexploração territorial da República do Chile.” Neste artigo, o autor reflete

    sobre o papel dos viageiros na história da exploração territorial de Chiledurante os séculos XIX e XX.

    Uma resenha se inclui na presente edição. Foi escrita por Fabian Bus-

    tamante e nela analisa-se o livro La derecha en la crisis del Bicentenario (Adireita na crise do Bicentenário), de Hugo Herrera, publicado por EdicionesDiego Portales no ano 2014.

    Nossa escola tem o prazer de alcançar o número 32 desta tradicionalpublicação, no marco das reformas educacionais que afetam ao sistemaUniversitário. Convidamos a toda a comunidade acadêmica para formar

    parte deste esforço editorial.

     

    Leopoldo Tobar CassiDiretor

    Escola de Educação em História e Geografia

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    17/156

    Artículos

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    18/156

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    19/156

    19

    El Dios de las batallas: el providencialismoen la cronística hispana en la batalla de

    las Navas de Tolosa (1212)

    Raimundo Meneghello Matte1

    Recibido: 20 de abril de 2015 · Aceptado: 25 de mayo de 2015

    ResumenEn el siglo XIII, las crónicas muestran una consolidación de los tópicosprovidencialistas, especialmente respecto de uno de los acontecimientoscentrales de la Reconquista: la batalla de Las Navas de Tolosa de 1212. Paralos cronistas, este evento reúne todos los elementos del providencialismo:una batalla entre la alianza de los cristianos contra el Islam y que mostró laspericias de un rey pecador, Alfonso VIII, que logró la redención. Por lo demás,los relatos son abundantes en milagros y otros sucesos que sirvieron paraconvertir a la batalla en un ícono del providencialismo. No obstante, debemos

    destacar que estos episodios providenciales evidencian cambios en relación ala forma en que habían sido presentados anteriormente, dado que se trataríade portentos menos espectaculares. Se relatan pequeños milagros que ensu conjunto componen una gran historia providencial; a su vez, la mano deDios es menos directa, resaltando en su lugar las acciones de los hombres,siempre bajo la premisa de que sus actos eran impulsados por la Providencia.

    Palabras clave:Reconquista, Providencialismo, Navas de Tolosa, Alfonso VIII

    The god of battles: providentialism in the hispanic chronicle inthe battle of las Navas de Tolosa (1212)

    AbstractIn the Thirteenth century, chronicles show a consolidation of the providentialtopics, especially on one of the central events of the Reconquista – the battleof Las Navas de Tolosa in 1212. For historians, this event brings together allthe elements of Providentialism: A battle between the alliance of Christiansagainst Islam showing the skills of a sinner King Alfonso VIII, who achieved

    1 Chileno. Doctor en Historia Medieval, Universidad de Salamanca, España. Este trabajo esparte de mi tesis doctoral titulada “Tópicos y continuidades en el discurso sobre la expansióny en la reafirmación de la monarquía castellana (siglos XII y XIII): Una propuesta de Análisisde la cronística en la Reconquista”. Académico Universidad Finis Terrae, Chile. E-mail:[email protected]

    Artículo

    ISSN 0719-4137  Revista de Historia y Geografía Nº 32 / 2015 • 19- 39

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    20/156

    20

    Meneghello • El Dios de las batallas: el providencialismo en la cronística hispana

    redemption. Furthermore, stories abound in miracles and other events thatserved to turn the battle into a Providentialism icon. However, we must em-phasize that these providential events show changes in relation to how they

    had been presented before as they would be less spectacular wonders. Smallmiracles which jointly make up a large providential history are recounted; thehand of God is less direct, highlighting instead the actions of men, under thepremise that their actions were driven by Providence.

    Keywords: Reconquista, Reconquest, Providentialism, Navas de Tolosa,Alfonso VIII

    O deus das batalhas: o providencialismo na crônica hispana na

    batalha das Navas de Tolosa (1212)ResumoNo século XIII, as crónicas mostram uma consolidação dos temas providen-cialistas, especialmente referente de um dos acontecimentos centrais daReconquista: a Batalha das Navas de Tolosa em 1212. Para os cronistas,este evento reúne todos os elementos do providencialismo: uma batalhaentre a aliança dos cristãos contra o Islão, mostrando as habilidades deum rei pecador, Alfonso VIII, que logrou a redenção. Além disso, os relatosabundam em milagres e outros sucessos que serviram para transformar a

    batalha num ícone do providencialismo. Porém, deve-se destacar que estesepisódios providenciais mostram mudanças em relação à forma que tinhamsido apresentados anteriormente, devido a tratar-se-ia de maravilhas menosespetaculares. Relatam-se pequenos milagres que no seu conjunto, compõemuma grande história providencial; por sua vez, a mão de Deus é menos direta,ressaltando no seu lugar as ações dos homens, sob a premissa de que suasações foram impulsionadas pela Providência.

    Palavras-chave: Reconquista, Providencialismo, Navas de Tolosa, Alfonso VIII

    Reconquista y Providencialismo

    El proceso de la Reconquista Hispánica, comprendida como el periodo deenfrentamiento y convivencia entre cristianos y musulmanes en la PenínsulaIbérica, entre los siglos VIII y XV, constituye un elemento clave para la compren-sión de la historia de España y por extensión de Occidente, con proyección ala época Moderna y posteriores2. Se trató de un extenso proceso que permite

    observar la evolución de los distintos elementos característicos de la mentalidad

    2  Aunque a nivel general suele situarse a la Reconquista entre los siglos VII y XV, actualmenteexiste cierto consenso entre los especialistas, que ubican el inicio del proceso en torno alsiglo XI luego del colapso del Califato de Córdoba.

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    21/156

    21

    ISSN 0719-4137 Revista de Historia y Geografía Nº 32 / 2015

    hispánica medieval reflejada en las crónicas y fuentes del periodo, tales como elpensamiento goticista, el providencialismo, la guerra, la frontera, el cautiverio, elintercambio cultural y la consolidación monárquica, solo por nombrar algunos.

    En ese marco es que los siglos XII y XIII fueron los de mayor actividadreconquistadora, época en la que se desarrolló la llamada “España de loscinco reinos” (Castilla, León, Aragón, Portugal y Navarra) y el al-Andalus,que durante ese periodo fue dominado sucesivamente por las Taifas, el Im-perio Almorávide, las Segundas Taifas y el Imperio Almohade3. Es así comola Reconquista debe ser entendida como reflejo de las dinámicas de unasociedad de frontera entre dos culturas-religiones opuestas, por lo que todoel enfrentamiento y convivencia, con sus periodos de guerra y treguas, se

    encontraba inmerso en una cosmovisión providencialista.En este contexto pretendemos presentar el caso del providencialismo

    en torno a la batalla de las Navas de Tolosa. Utilizamos como eje central eldiscurso providencialista y su relación con el poder político, en el entendidode que para los soberanos hispanos, y de Europa en general, era importantedemostrar que tenían el favor de Dios como una forma de validación de supoder y para ello contaban con la ayuda de los cronistas que plasmaron ensus relatos un discurso en el que señalaban todos aquellos elementos en que

    el juicio de Dios beneficiaba al soberano.Pero antes de entrar directamente al análisis de este problema, considera-

    mos prudente realizar una breve explicación respecto a las batallas campalesen la Edad Media. Partimos del hecho de que, pese a lo que dan a entenderlas fuentes, la gran batalla era un acontecimiento extraordinario y excepcional,puesto que una derrota podía decidir no solo la guerra sino que el destinode un reino. Eran, por lo tanto, un riesgo que se prefería evitar. En relacióna lo mismo la batalla compartía las características de una ordalía, es decir,

    un encuentro entre iguales para dirimir una disputa donde Dios se pondríade parte del vencedor, demostrando así las virtudes de éste. En vista de ello,habitualmente los cronistas exageraban sus relatos dándoles a los combatestintes dramáticos y fantásticos, como parte del discurso cronístico de exaltaro denostar a un bando y otro4.

    Complementario a lo anterior, la presencia de la divinidad, medianteapariciones o milagros, en los hechos de armas cristianos, es un tópico rela-

    3  A modo de orientación general, la cronología del al-Andalus puede dividirse en Califato deCórdoba (929-1031), Primeras Taifas (1031-1085), Imperio Almorávide (1085-1144), SegundasTaifas (1144-1172), Imperio Almohade (1172-c1230) y, finalmente, Terceros reinos de Taifas.

    4  En relación a las formas de guerra del mundo medieval y en especial para el escenariopeninsular recomendamos revisar, entre otros, los trabajos de Francisco García Fitz (2001,2002, 2003, 2008); Philippe Contamine (1984); y Maurice Keen (2005).

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    22/156

    22

    Meneghello • El Dios de las batallas: el providencialismo en la cronística hispana

    tivamente común en las fuentes del periodo, y puede ser visto casi siempreen relación a alguno de los siguientes elementos: 1) intervenciones directasde Dios o el Espíritu Santo para influir, favorecer o castigar a los hombres;

    2) apariciones de santos o mensajeros celestes; y 3) ejércitos celestiales queparticipan directamente en las batallas por el bando cristiano. Asimismo estetipo de providencialismo era parte de una tradición que encuentra sus raícesdirectas en el Antiguo Testamento, en especial en el Éxodo y los llamadosLibros Históricos, como Josué, Jueces, Judit y Macabeos.

    Para el caso cristiano-hispánico las intervenciones providenciales aparecendurante el periodo del Reino Visigodo, pero se hacen más frecuentes despuésde la invasión islámica del 711. En primera instancia, se asumió esta invasión

    como un castigo divino por los pecados de los visigodos y, luego, como señalde reconciliación a partir de los relatos míticos de las batallas como las deCovadonga y Clavijo.

    Es fundamental, eso sí, destacar que para el caso de la cronística medievalno debemos juzgar todos los relatos providenciales como meras invencionespropagandísticas, puesto que las apariciones de santos y otros milagros eranparte del imaginario colectivo de la sociedad medieval y, por ende, fruto deuna tradición que rara vez era rebatida por los contemporáneos.

    Las Navas y sus fuentes

    Dentro de este contexto ideológico cultural, la batalla de las Navas deTolosa del 16 de julio de 1212 es uno de los acontecimientos fundamentalesde la Reconquista Hispánica, ya que señala un punto de inflexión en la guerracontra el al-Andalus. A partir de este enfrentamiento, el imperio Almohadecomenzó su colapso en la Península y los andalusíes fueron anulados mili-

    tarmente y obligados a adoptar una posición defensiva. Se define ademásel punto de partida para las posteriores exitosas campañas de Fernando III(1217-1252) y la política de expansión de Alfonso X (1252-1284).

    Por todo lo anterior, la batalla es ampliamente destacada en las fuentesde la época y en las inmediatamente posteriores, contándose, entre otras,las cartas de Alfonso VIII de Castilla a Felipe II de Francia (octubre 1211) y aInocencio III (agosto –septiembre 1212), la misiva de Berenguela de Castillaa su hermana Blanca, princesa de Francia (julio-agosto 1212), y las epístolas

    del califa al-Nasir relatando la conquista de Salvatierra (septiembre 1211) yla batalla de las Navas (julio 1212).

    Respecto a las crónicas, destacan Los Anales Toledanos I y II  (de mediadosdel siglo XIII), el texto de Lucas de Tuy, Chronicon mundi (1236), la crónicade Rodrigo Jiménez de Rada (quien además participó personalmente en la

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    23/156

    23

    ISSN 0719-4137 Revista de Historia y Geografía Nº 32 / 2015

    batalla), el De Rebus Hispaniae (escrito entre 1241 y 1242), la Crónica Latinade los Reyes de Castilla (compuesta entre 1226 y 1236), la alfonsina Cróni-ca General de España (de finales del siglo XIII) y la Crónica de veinte reyes 

    (compuesta entre 1270 y 1289). En todas estas fuentes, como es comúnpara eventos de esta magnitud, se ve una importante exageración propa-gandística, aumentando notablemente los números de combatientes, enespecial los referidos a los enemigos y a los muertos, y además editando losacontecimientos para que se adaptaran a la ideología del bando triunfador,en este caso los cristianos y la Iglesia5.

    Todo ello, en concordancia con los testimonios de la época y los estudiosactuales, en los cuales existe el consenso en que la campaña de las Navas

    de Tolosa fue una cruzada formal, dentro del contexto de la Reconquista6

    .

    5  La historiografía también ha escrito bastante sobre este acontecimiento, destacando JoséGoñi (1958), Ambrosio Huici Miranda (1956), Carlos Vara Thorbeck (1999), Martín AlviraCabrer en su tesis doctoral y en distintos artículos (1995, 1996, 1997), Manuela GarcíaPardo (2002), y Francisco García Fitz (2005), solo por mencionar algunos.

    6  En vista de lo anterior, creemos que es prudente puntualizar que para los pensadoresmedievales la Cruzada, con cualquiera de sus nombres, era una realidad sobre la cual,

    aparentemente, no se realizó una discusión teológica al nivel de la efectuada en torno ala Guerra Santa. Por lo mismo, aventuramos que para los intelectuales contemporáneos lacruzada fue interpretada como la evolución o la continuación de la Guerra Santa, más queun fenómeno totalmente nuevo, al menos para los siglos estudiados. Un planteamiento quecreemos compartir con Riley-Smith cuando afirma que “Desde luego, el problema radicabaen que las cruzadas se convirtieron en un elemento tan conocido del paisaje medieval queno requería una descripción detallada. Las personas que vivieron en esa época sabían per-fectamente lo que era una cruzada. En los escritos de los cronistas, de los apologistas y loscanonistas, así como en las expresiones empleadas por quienes redactaban cartas papales,podemos identificar las señales que informaban a los fieles que se estaba predicando unacruzada” (Riley-Smith, 2012). Para una panorámica general en torno a estas discusionesy las distintas posturas, recomendamos ver, entre otros textos relacionados al tema, lostrabajos de Frederick Russell y su texto clásico The Just War in the Middle Ages, donde laCruzada es comprendida como un híbrido entre la Guerra Justa y la Guerra Santa, cada vezmás controlado y que como tal, será tratado como un todo por la filosofía cristiana: “Hencethe crusade became a strange hybrid of holy war and just war marked by an increasinglyexplicit chain of command. The holy war and the crusade will here be considered only asa part of the general medieval debate of the right to war rather than as an independent phenomenon” (Russell, 1977: 2). Junto a él y ya tratando de elaborar una definición máscompacta, encontramos a Antonio García y García, que define cruzada como “una guerra promovida o bendecida por el Papa o por su representante, cualificada de espiritualmentemeritoria y, por ende, premiada con la indulgencia plenaria de los pecados de quienescumplieran su voto de cruzados en alguna de las expediciones para la recuperación delos santos lugares de Palestina o de la Península Ibérica o para otras causas declaradas por los papas como cruzadas” (García, 1985: 222). Destacando, adicionalmente, que esteautor postula la importancia del I y II Lateranense en la caracterización formal del término y agregando, al mismo tiempo, a su difusión original la afirmación de que el fenómeno seorigina a partir de Urbano II y que, por lo tanto, es inseparable de la iniciativa pontificia.Complementando a García, podemos identificar a Ricardo García Villoslada que presentauna definición muy similar pero destacando el carácter pontificio y supranacional de la

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    24/156

    24

    Meneghello • El Dios de las batallas: el providencialismo en la cronística hispana

    Contexto: Alfonso VIII, Reconquista y Cruzada

    A comienzos del siglo XIII, bajo el reinado de Alfonso VIII (1158-1214),

    Castilla había comenzado a destacar en el contexto peninsular, pese a susconstantes enfrentamientos con los reinos cristianos vecinos y, en especial,León y su rey Alfonso IX (1188-1230). Por su parte, el al-Andalus se encon-traba sometido a los Almohades, al mando del Califa Abu Yaqub Yusuf al-Mansur, quien en 1195 inició una serie de ofensivas contra tierras castellanas,derrotando a Alfonso VIII en el desastre de Alarcos el 19 de julio de 11957.

    Alarcos fue el inicio de una serie de acontecimientos que redefinirían lahistoria de la Reconquista. Ante el peligro del avance de Yusuf al-Mansur,

    los monarcas de Navarra, Aragón y León acudieron al auxilio de Alfonso VIII.Pero el castellano decidió no esperar a los refuerzos y se enfrentó en solitarioa los musulmanes, resultando la operación en el desastre de Alarcos.

    Para los cronistas, la derrota tuvo explicaciones simbólicas y providencia-listas. El rey había cometido dos graves pecados que le restaban la Gracia dela Providencia y precipitaron su infortunio (García F., 1988: 54-55): el primerofue la soberbia, ya que se había atrevido a creer que podía prescindir de la

    campaña: “el nombre de ‘Cruzada’ se debe reservar exclusivamente a aquellas guerras santas predicadas y en cierto modo dirigidas por el Papa en cuanto cabeza y jefe de todala cristiandad. Tienen, consiguientemente, un carácter supranacional y universal, y por eso suelen participar en ellas soldados de diversas naciones cristianas” (García V., 1967: 433).Extendiendo su ejecución más allá de Jerusalén, están autores como Geoffrey Hindley en sutexto Las Cruzadas, peregrinaje armado y guerra santa (2005) que destaca cómo la cruzadafue utilizada contra el conjunto de los enemigos de la Iglesia, sean estos cismáticos, herejes, paganos o musulmanes. En tanto que José Manuel Rodríguez García (1994) realiza unadefinición bastante amplia donde procura incorporar la Reconquista dentro del contextoideológico cruzado: “Una cruzada era una guerra santa autorizada por el Papa, quien la proclamaba en el nombre de Dios o Cristo. Se creía que era una empresa emprendida porCristo, legitimizada por su mandato personal. Propuesta, como todas las acciones cristianasde violencia justa, como una respuesta defensiva a la injuria o a la agresión o como unintento de recobrar territorios cristianos perdidos a manos de los infieles, contestaba a lasnecesidades de la Iglesia de toda la Cristiandad, concebida como un estado único, universal y transcendente, más que una nación o región particular: muchas de las campañas de laReconquista española, que se lucharon en nombre no sólo de España sino de la Cristian-dad al fin y al cabo y que se abastecieron de hombres provenientes de toda Europa, erancruzadas.” (Rodríguez, 2002). Finalmente, Franco Cardini (2003) no realiza una definiciónconcreta de cruzada y de hecho afirma que la Iglesia nunca elaboró una propia, peroanaliza el tema desde sus orígenes en la guerra santa, la paz y tregua de Dios y la ReformaGregoriana, agregando al discurso religioso los factores políticos, sociales y económicosque contribuyeron a su popularidad en el medioevo.

    7  La derrota de Alarcos fue el primer gran revés cristiano en campo abierto desde la batallade Uclés en 1108, y puso en entredicho la legitimidad de Alfonso VIII, que luego de elladebió enfrentarse nuevamente a sus vecinos cristianos que buscaban resarcir sus antiguaspérdidas, al mismo tiempo que trataban de contener la ofensiva almohade (García Fitz,2008: 120-121).

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    25/156

    25

    ISSN 0719-4137 Revista de Historia y Geografía Nº 32 / 2015

    ayuda de los otros reinos cristianos, y en un impulso de orgullo injustificado,se lanzó imprudentemente a conquistar la gloria; fue un acto de desprecio ala humildad y piedad que debían caracterizar a un rey cristiano. Al respecto

    la Crónica Latina señala:“Ignis ascensus uidebatur in furore Domini et elationem animi, si qamconceperat rex nobilis ex gloria precedenti, deprimere uidebatur, utintelligeret rex prudens et nobilis quod regnum filiorum hominum inmanu Dei est et cuicumque uoluerit dabit illud ” (Crónica Latina delos reyes de Castilla, 1997 [s. XIII], 14: 48)8. 

    Esta versión es reforzada por el autor de la Crónica de veinte reyes, quienno duda en afirmar que “mas non quiso Dios que los chistianos saliesenende onrrados, que non eran de vn coraçón nin ayudaron a su señor commodeuían, e fueron vençidos e malandantes e murieron y muchos cristianos” 

    (Crónica de veinte reyes, 1991 [s.XIII], XIII, 25: 280).

    En ambos casos los testimonios no dejan dudas, Alfonso y sus huestesno contaron con la protección de la Providencia, que airada por la actituddel monarca, dejó que éste fuese vencido por sus enemigos.

    Asimismo, podemos observar en las mismas fuentes que Alfonso no sólo

    atrajo la ira divina sobre él mismo, sino también sobre toda la comunidad. Elcastigo fue para el conjunto de los castellanos que no lucharon o auxiliarona su señor como debían hacerlo. Esto se hace extensivo para el resto de loscristianos, como lo indica la Crónica Latina, que afirma que Alfonso de León nollegó con ayuda a la batalla de Alarcos, debido al “consejo de algunos satélitesde Satanás” (Crónica Latina de los reyes de Castilla, 1997 [s. XIII], 14: 47). Estaes una explicación providencialista y política a la vez, puesto que justifica laderrota de Castilla apelando a la intervención del Mal y al mismo tiempo, acusaal rival de Alfonso VIII de traicionar a su primo, al dejarse influenciar por eldemonio. Dicha acusación equivale a señalar al rey de León como un hombretraicionero, entendido en el contexto de disputas que afectaba a ambos reinosy al interés de los cronistas por favorecer a los bandos según su origen.

    Junto a la soberbia, el segundo pecado del rey castellano fue el hecho deque se encontraba en falta en el momento de iniciar la campaña, por haberengañado9 a su legítima esposa, Leonor de Plantagenet, con una amante

    8  “El fuego de la ira del Señor parecía crecer y abatir la soberbia, que quizá tuviese el noble reypor su gloria anterior, para que entendiera el prudente y noble rey que el reino de los hombresestá en manos de Dios y lo da a quien quiere.” (Crónica Latina, 1999 [s. XIII], 14: 40).

    9  Si bien la posesión de concubinas no era extraño en los reyes cristianos, siempre fue unasituación incómoda, que se trataba de no ventilar, puesto que era una grave falta al sacra-mento matrimonial.

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    26/156

    26

    Meneghello • El Dios de las batallas: el providencialismo en la cronística hispana

     judía10. Una falta agravada por el hecho de que su favorita era miembro deun pueblo hacia el cual solían dirigirse recelos y acusaciones de corte religio-so. En otras palabras, el rey se encontraba en pecado y había atraído la ira

    de Dios, que lo había castigado con la derrota militar, al igual que lo habíahecho con los reyes del antiguo Israel11.

    Los pecados del rey, la soberbia y la lujuria, incluso trascendieron de laPenínsula y atrajeron voces críticas contra la actitud del soberano, que porsus actos ponía en riesgo la muy noble misión de combatir al Islam, y permitíael aumento de las fuerzas de los poderosos almohades. Esto se evidencia enuna de las obras del trovador y posterior Obispo, Fulco de Marsella, quienamonesta al rey por su conducta12.

    La derrota de Alfonso VIII, justo en un momento de conflictos entre losmonarcas cristianos peninsulares, desató una serie de luchas entre los reinoshispanos y favoreció el avance de los musulmanes, el que no obstante se detuvoprontamente en razón del agotamiento de los esfuerzos de los almohades, loque permitió a los castellanos reorganizar sus fuerzas y contener a sus vecinos.

    La idea de un castigo divino como explicación al desastre de Alarcos encon-tró eco en el mismo Alfonso VIII. Según García Fitz, el rey cambió su actitudluego de la derrota, enmendando su conducta y renegando de sus pecados.Ello en la lógica cristiana de que si una mala acción era motivo de castigodivino, su enmienda atraería el favor de la Providencia (García, 1988: 54-55).

    Paralelamente a estos hechos, Alfonso VIII había logrado restablecer elorden en su reino y firmado una tregua con los almohades. Aún así –en ver-sión de distintos cronistas– el rey se encontraba profundamente afectado porsu descalabro en Alarcos, al punto de que la idea de una revancha se habíaconvertido prácticamente en una obsesión13. Algo que no es de extrañar, sirecordamos que para la visión providencialista la derrota era interpretada

    10  Este episodio es destacado por García Fitz (1988). Aquí el autor expone que en la ediciónde la Primera Crónica General de Florián Ocampo, se rescata la presencia de la amante

     judía de Alfonso VIII, que no aparece en la edición de Pidal. En el episodio se narra cómola amante fue ultimada por los hombres del rey, que consideraban que dicha relación eraperjudicial para todo el reino. Un acto que entristeció al rey, lo que implicó que un ángel leadvirtiera que sus actos y actitud atraerían el castigo divino (García Fitz, 1988: 54-55).

    11  En el Antiguo Testamento existen diversos episodios en los que se relata cómo Dios castigóa los soberanos de Israel por sus pecados. Emblemáticos son los casos de Saúl y David.

    12  Un reproche no menor viniendo de él, que como obispo a partir de 1205, jugó un rolimportante en la lucha y persecución contra los albigenses en Francia (Alvar, 1977: 95).

    13  Al respecto la Crónica Latina nos dice “Manebat in alta mente regis positum, quod nunquamde ipsa exciderat: infortunium quod passis fuerat in bello de Alarcos. Sepe reuocabat adanimun diem illam, habens desiderium uicem reddere regi Marroquitano et pro hac re sepeDominum deprecabatur.” (Crónica Latina de los reyes de Castilla, 1997 [s. XIII], 18:53).

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    27/156

    27

    ISSN 0719-4137 Revista de Historia y Geografía Nº 32 / 2015

    como el fracaso ante un juicio divino. Parecía entonces que Dios habíaabandonado al monarca por sus pecados, y por ello había sido puesto enentredicho por sus enemigos. En consecuencia, el rey debía probar que era

    digno de su alto cargo, y sólo una victoria podría demostrar su reconciliacióncon la Providencia y legitimarse ante sus enemigos y súbditos.

    Por todo ello, Alfonso comenzó a preparar su desagravio militar, empezandopor crear un escenario favorable en la Península y en Europa; consciente de lanecesidad de un esfuerzo mayor; comenzó a formar una alianza con sus vecinosy el papado. El castellano procuró difundir los peligros de la amenaza almohadepor el continente, sirviéndose de una verdadera campaña de propaganda14.

    La oportunidad de poner en acción sus planes se le presentó al rey de Cas-tilla en 1211, cuando, finalizadas las treguas, una nueva ofensiva Almohade,liderada por el nuevo Califa Muhammad Al-Nasir, el llamado Miramamolín, seapoderó del castillo Salvatierra. Un hecho que significaba una gran amenazapara toda la Península.

    Alfonso VIII solicitó al papa Inocencio III (1198-1216) una bula de cruza-da, que le fue concedida15. Al mismo tiempo, el Papa exhortaba a todos losseñores, monarcas y autoridades religiosas peninsulares a apoyar el esfuerzobélico y amenazaba con la excomunión a cualquiera que se aprovechase de laocasión para atacar a Castilla durante la campaña. Finalmente, el Papa tam-bién ordenó a los prelados franceses que predicasen la Cruzada Hispánica porlas tierras de los francos (Rodríguez L., 1988: 19; Rodríguez G., 2002: 582).

    14  Entre los instrumentos que utilizó Alfonso se destacaron el capítulo general del Císter ylos trovadores. La orden monástica con sus redes de influencia política e intelectual ayudóa difundir el mensaje en las esferas de poder europeas, apelando a la lucha contra losenemigos de Dios. En tanto que los trovadores, con sus obras, conmovieron a las Cortesde Francia, recalcando el peligro del avance moro en Hispania. Así, los guerreros francoseran exhortados desde los altares y los palacios para ir a buscar la gloria al servicio de Dios.Una táctica que al parecer surtió efectos, como veremos más adelante, cuando Alfonso déinicio formal a la campaña de las Navas (Alvira, 2006: 193).

    15  Hay indicios de que el Papa no confiaba plenamente en los resultados de la próxima campaña.Al parecer el Pontífice dudaba de lo oportuno de la misión y, en especial, temía la merma queesta nueva cruzada podía generar entre los combatientes provenzales que luchaban contralos albigenses. Por estas razones, el pontífice aconsejó a Alfonso VIII aceptar una tregua sies que ésta era ofrecida por los Almohades y postergar la campaña para un momento máspropicio (Huici Miranda, 1956: 229). Pero al perseverar el castellano en sus intenciones, el Pontífice emitió una serie de documentos mediante los cuales patrocinaba la campaña,aunque sin comprometer el envío de un legado o de recursos extraordinarios. Respecto aestos documentos, Mansilla, en su recopilación de documentos pontificios hasta Inocencio III,reúne entre otros: un mandato al arzobispo de Sens para prestar auxilio a Alfonso VIII (Letrán,31 de enero de 1212), Notificación al rey de Castilla sobre el mandato anterior (Letrán, 4de febrero de 1212), Ordena a los arzobispos de Toledo y Compostela a obligar a los reyeshispanos a hacer la paz y unirse contra el Islam (Letrán, 5 de abril de 1212), manda realizarrogativas en Roma por el éxito de la cruzada (Letrán, 16 de mayo de 1212).

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    28/156

    28

    Meneghello • El Dios de las batallas: el providencialismo en la cronística hispana

    Gracias a la intervención papal, Alfonso VIII pudo pactar treguas contodos sus adversarios peninsulares, además de forjar alianzas, puesto que laspromesas espirituales, sumadas a la esperanza de la obtención de un gran

    botín en caso de victoria, influyeron para que los reyes de Navarra, Sancho VII(1194-1234) y de Aragón, Pedro II (1196-1213), se sumasen a la campaña,mientras que el rey de Portugal, Alfonso II (1211-1223), otorgó libertad deacción a sus vasallos para que se sumasen a la cruzada.

    Para aunar más fuerzas, Alfonso VIII aprovechó la bula de cruzada paraenviar al arzobispo de Toledo, Rodrigo Jiménez de Rada, a la corte de Felipe IIde Francia, para invitarlo a unirse a la campaña bajo las promesas de expiacióncruzada y el botín. Pero el monarca franco no estaba dispuesto a arriesgarse

    en las lejanas tierras extremeñas, más cuando su propio reino se hallaba enuna cruzada contra los herejes albigenses16.

    No obstante, Jiménez logró convencer a numerosos señores francos, entreellos los obispos de Narbona, Burdeos y Nantes, que aportaron unas fuerzasque según las crónicas sumaban alrededor 40 a 60 mil hombres, aunque lascifras modernas los han reducido a alrededor de 15.000 guerreros. De todasformas un número significativo de hombres para la época.

    Estos cruzados ultramontanos se suman a los guerreros castellanos,además de destacamentos portugueses, navarros, aragoneses, y a los de lasÓrdenes de Santiago, Calatrava, Temple y San Juan. Conformaron así unagran alianza peninsular, algo inédito en la guerra de Reconquista17.

    Camino a la batalla

    Forjadas las alianzas, en febrero de 1212 las tropas cristianas comenzarona reunirse en Toledo. Es a partir de este momento que las fuentes cronísticastoman un matiz cada vez más providencialista en su discurso.

    Ejemplos de ello los podemos observar en las palabras de Jiménez deRada, que nos dice: “y aumentaba por días el número de los que lucían ensu cuerpo la señal del Señor y reinaba la armonía entre ellos” (Jiménez deRada, 1989 [s. XIII]: VIII, 2: 308). Sin embargo otras fuentes como los AnalesToledanos nos mencionan que los francos, venidos de la cruzada contra los

    16  La cruzada albigense o cruzada contra los cátaros, fue la guerra desarrollada entre los años1209 y 1244, por iniciativa del papa Inocencio III con el apoyo de la monarquía francesa,con el fin de reducir por la fuerza a la herejía albigense o cátara, en los territorios feudalesdel Languedoc.

    17  Frente a ellos estaban las tropas del califa Muhammad Al-Nasir que. según cálculos actuales,duplicaban o triplicaban a los cristianos, es decir, tenían entre 40 a 60 mil hombres.

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    29/156

    29

    ISSN 0719-4137 Revista de Historia y Geografía Nº 32 / 2015

    cátaros, tuvieron fuertes roces con los judíos de Toledo a los que acosaron yatacaron, obligando la intervención de las milicias locales para asegurar la paz:

    “Quando se perdió Salvatierra envío el rey D. Alfonso al arzobispoD. Rodrigo á Francia, é Alemaña, é al apostoligo de Roma, é dio elapostoligo á tal soltura por todo el mundo que fuesen todos soltosde sus pecados: é este perdon fue poque el rey de Marruecos dixoque lidiaria con cuantos adoraban cruz en todo el mundo, é movien-dose los dultra puertos, é vinieron a Toledo en dia de Cinquesma,é volvieron todo Toledo, é mataron de los Judios dellos muchos, éarmaronse los Caballeros de Toledo é defendieron a los Judios.”  (Losanales toledanos I y II  , 1993: 172).

    La omisión que hace Jiménez de Rada a estos enfrentamientos puedeexplicarse por una doble razón; primero, la de hacer patente la supuestagracia divina, la que se manifestaba en la supuesta armonía existente entrelos cruzados y, por otro lado, quizás, la de proteger su propia imagen comoel responsable de reclutar a los ultramontanos.

    El suceso de los judíos también refleja la particularidad de la realidadpeninsular. Los guerreros francos eran hombres que provenían de la cruzadacontra los albigenses, por lo tanto acostumbrados a una guerra santa másbrutal y total contra los enemigos de la fe. En sus mentes era inconcebiblela convivencia con los no cristianos, más si como los judíos de Toledo, seencontraban en una ventajosa posición económica.

    Superados los altercados, el día 20 de junio los cristianos se pusieronen camino a la batalla; se iniciaba así la campaña y, con ella, una serie demilagros. Los cronistas procuraron demostrar cómo la Providencia protegió alos guerreros, como en el caso del cruce del río Guadiana, que los cristianossortearon sin sufrir grandes percances, a pesar de haber sido sembrado deabrojos por los almohades (Alfonso X, 1977 [s. XIII], 1015: 695). Esto sirvióa los cronistas para afirmar que Dios protegía a los cruzados, y que ningúninstrumento humano podría dañar a quienes contasen con su protección,como nos relata Jiménez de Rada:

    “Set quia humana artificia contra Dei prouidenciam nichil ualent, sicDeus uoluit ut paucissima uel nulli fere illis tribulis lederentur; et gracieDei manu supposita transiuimus flumen Anam et castramentati fuimusin circuitu Calatraue” (Jiménez de Rada, 1988 [s. XIII]: V: 264)18.

    18  “Pero como las invenciones de los hombres nada pueden hacer contra la providencia deDios, la voluntad de Dios fue que escasísimos, o casi ninguno, se hiriera con aquellos abrojos;y sobre la mano de la Gracia de Dios, a modo de puente, atravesamos el río Guadiana yacampamos en derredor de Calatrava.” (Jiménez de Rada, 1989 [s. XIII]: VIII, 5: 313).

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    30/156

    30

    Meneghello • El Dios de las batallas: el providencialismo en la cronística hispana

    Nótese que el arzobispo no afirma la inutilidad de los abrojos y que, porel contrario, reconoce que algunos guerreros resultaron lastimados, lo quehace más interesante su discurso, puesto que intenta dar a cada dificultad

    una explicación providencial que refuerce las motivaciones ideológicas dela campaña.

    En su trayecto las huestes cruzadas debían poner cerco a dos fortifica-ciones que se encontraban en manos andalusíes, los castillos de Malagóny Calatrava. El primero de ellos, Malagón, fue capturado por la vanguardiacristiana, compuesta por los francos, que realizaron una matanza de todos losprisioneros. Acción extrema y poco común en la Península que generó rocesentre los líderes cruzados. A continuación, el segundo bastión, Calatrava,

    fue capturado por el conjunto de los cruzados y Alfonso pactó la rendiciónperdonando la vida a los prisioneros. Este hecho aumentó a tal punto lastensiones entre los hispanos y los francos, que la gran mayoría de estos últi-mos abandonaron la campaña acusando a los hispanos de traición y amistadcon los enemigos de Dios19. Según los cronistas, la deserción fue causadapor acción del demonio, quien contaminó el corazón de los ultramontanos,haciéndolos abandonar la causa divina:

    “Set quoniam humani generis inimicus nos cessat christianis actibus

    inuidere, misit Sathan in exercitum caricatis et corda emulanciumconturbauit, et qui ad certamen fidei se accinxxerant, retrorsum abono proposito abierunt. Omnes enim fere ultramontani comuni proposito statuerunt ut relictis crucis signaculis, omissis etaim bellilaboribus, ad propria remearent ” (Jiménez de Rada 1989 [s. XIII],VIII. 6: 265)20.

    Luego, Alfonso X incluyó el relato en su Crónica General , agregándolemás detalles en relación a que los ultramontanos, influenciados por el diablo,

    conspiraron para desertar de la campaña:“Entre tod esto, porque ell enemigo de los omnes, et este el diablo,que nunca queda de inuidiar los buenos fechos de los omnes, metiosseen la huste de los fieles de Cristo et de la su caridad, et conturuio

    19  Actualmente, diversos especialistas atribuyen la deserción de los ultramontanos a un con- junto de factores, tales como las penurias climáticas, los problemas de abastecimiento ylas diferencias ente los caudillos en relación al trato dado a los musulmanes. (Al respectover García Fitz, 2008).

    20  “Pero como el enemigo del género humano no deja de malquerer las obras cristianas,introdujo a Satán en el ejército de caridad y encizañó los corazones envidiosos; y quienes sehabían aprestado para la contienda de la fe dieron marcha atrás en sus buenas intenciones.Pues casi todos los ultramontanos, dejadas las enseñas de la cruz, abandonados tambiénlos trabajos de la batalla, tomaron en común la determinación de regresar a sus tierras.”(Jimenez de Rada, 1989 [s.XIII] VIII, 6: 314).

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    31/156

    31

    ISSN 0719-4137 Revista de Historia y Geografía Nº 32 / 2015

    los coraçones de los enuidiosos que se auien guisado pora yr a estabatalla. Et fizolos arredar de yr, et fizoles desuiar de la buena posturaque auien fecha: ca por la mayor parte todos los trasmontanos de

    comunal postura establesçieron que tolliessen las sennales de la cruçque auien tomadas de que se cruçaran pora esta batalla, et que dexas- sen los trabaios de su lit, et se tornassen pora sus tierras” (Alfonso X,1977 [s.XIII], 1015: 696).

    Estas explicaciones providencialistas deben ser comprendidas en razón dealgunos hechos que se infieren de las crónicas, y que se encuentran relacio-nados con el discurso validador de la guerra y la política peninsular. Primero,destacar el providencialismo presente en la campaña, ya que sólo una obra

    querida por Dios podría ser sujeto de una acción tan claramente diabólica,como la deserción de la cruzada, con la cual el Mal debilitaba a los cristianos.Al mismo tiempo, es posible concluir que la deserción de los ultramontanossirvió a los intereses hispanos, puesto que sin ellos la victoria fue de exclusivaresponsabilidad de los peninsulares –en especial de Castilla y su rey–, quehabían organizado y financiado la campaña, conformando ahora el grueso de las tropas. La gloria sería así para Alfonso VIII y su reino, desligando sutriunfo de la participación extranjera y desmereciendo a los francos, que enel Pseudo Turpin despreciaron a los peninsulares21.

    Pese a la deserción del contingente ultrapirenaico, los cruzados hispanoscontinuaron su avance, llegando al paso de La Losa, el que fue bloqueadopor los musulmanes. Ante la imposibilidad de avanzar se produjo una crisisentre los cristianos, cundió el desánimo y las divisiones. Es en este contextoque se produce el milagro más característico de la campaña y presente entodas las crónicas, aunque con matices.

    Los relatos concuerdan que, mientras los caudillos cristianos discutían qué

    hacer, apareció un hombre al que califican de simple, un pastor, que pidióser recibido por Alfonso VIII. En la reunión el hombre le habla al rey de unpaso desconocido y no vigilado. El monarca envía una avanzada a corroborarla información y a ocupar el paso, por el que luego pudo pasar el ejércitocristiano. Luego de ello el pastor desapareció misteriosamente.

    No pasa mucho tiempo para que la figura de este hombre se rodearade un aura milagrosa, pasando de ser un simple pastor, en los primerosrelatos, a un enviado de Dios, para finalmente, en las fuentes más tardías,

    21  Destacamos que, según las crónicas, los ultramontanos no fueron objeto de algún tipo decastigo divino por su deserción. Pareciera que toda su sanción fue no haber participado dela victoria y quedar señalados como traidores a sus votos y ajenos a la gloria alcanzada porlos hispanos.

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    32/156

    32

    Meneghello • El Dios de las batallas: el providencialismo en la cronística hispana

    ser identificado como un ángel mensajero, a semejanza de algunos episodiosbíblicos. Alfonso VIII se refiere brevemente a él en su carta al Papa: “[…]nuestros magnates que iban en la vanguardia, guiados por un rústico que

    Dios nos envió impensadamente, encontraron allí mismo otro paso bastantefácil” (Gonzales, 1960: 566). Por su parte Lucas de Tuy, al referirse a él dice:“[…] presentose por divina inspiración al rey Alfonso un hombre, a modode pastor de ovejas, que les enseñó un camino ancho” (Lucas de Tuy, 1926[s. XIII], IV, 83: 415). S egún Jiménez de Rada, era un hombre simple que“[…] resultó cierto como un enviado de Dios, que se sirve de las escoriasdel mundo [...]” (Jiménez de Rada, 1989 [s. XIII], VIII, 8: 318). Por su partela Crónica Latina afirma que: “Se cree por los que juzgan con rectitud queno era ‘un puro hombre’, sino alguna virtud divina, que en tanta angustia,

    ayudó al pueblo cristiano, ya que por una parte, tantos adalides, tantospastores, tantos hermanos de Calatrava discurrían a menudo por aquelloslugares y, sin embargo, ninguno de ellos sabía algo de aquel lugar, y porotra, no compareció posteriormente el pastor” (Crónica Latina de los Reyesde Castilla, 1999 [s. XIII], 23: 52), dando a entender que él camino fueabierto por Dios. De forma más tardía, Alfonso X en su Crónica Generales más preciso y dice “assi Dios omnipotent, por cuya gracia spiritual seenderesçaua el fecho, enui alli entonçes al rey don Alffonsso un omne del pueblo, assaz uil de uestido et de persona” (Alfonso X, 1977 [s.XIII], 1016:698). Finalmente, la Crónica de Veinte Reyes afirma. “Cuenta la estoria queellos estando en este pensamiento, llegó vn omne bueno por la merçed deDios, en semejança de pastor, que demandaua por los rreyes amuy gran priesa. Mas commo quier quel pastor semejase, çierto era ángel mandaderode Dios.” (Crónica de Veinte Reyes, 1991, [s.XIII], XIII, 31: 283). 

    Esencialmente el episodio del pastor puede interpretarse como que laaparición de este personaje, un hombre humilde, rústico y simple, permitela continuación de la campaña y levanta el ánimo de los cristianos, todasellas razones para asociar al personaje con un enviado de Dios, que de estamanera demostraba su beneplácito con la cruzada y sus líderes. No obstante,ninguno de los autores profundiza mucho en el personaje, ya que lo realmenteimportante fue su providencial aparición y la información que portaba, másque su identidad.

    Es de destacar que algunos autores también han interpretado estafigura de baja condición como una señal de Dios para infundir humildad alos reyes cristianos y recordarles el mensaje de Cristo sobre los pequeñosdestinados a grandes cosas (García Pardo, 2002: 215-228). Ello en la líneadel pensamiento providencialista medieval, construido sobre los relatosbíblicos, como son la historia veterotestamentaria de David (Samuel, I 16:1y ss.) las Bienaventuranzas (Mateo 5:3-12 , Lucas 6:20-23) y el relato deMateo 20:16.

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    33/156

    33

    ISSN 0719-4137 Revista de Historia y Geografía Nº 32 / 2015

    La batalla y sus milagros

    Superados los obstáculos, el domingo 15 de julio de 1212, en vísperas

    de la batalla, los obispos y clérigos recorrieron el campamento exhortandoa los guerreros cristianos, reiterándoles las indulgencias de las cruzadas yamenazando con la excomunión a aquellos que dejasen el combate pararecoger el botín (Crónica Latina de los Reyes de Castilla, 1999 [s. XIII], 24:61-62. Crónica de Veinte Reyes, 1991 [s. XIII], XIII, 31: 284).

    Que las arengas y las instrucciones de cómo comportarse en la luchafuesen dadas por los clérigos y no por los reyes, confirma el espíritu cruzadode la campaña, puesto que ellos como jefes espirituales recuerdan las recom-

    pensas celestiales y pueden disponer de las gracias espirituales concedidaspor Inocencio III.

    Durante estas operaciones, según la Crónica de Veinte Reyes, se produceun nuevo y significativo portento para sacralizar la campaña y elevar el ánimode los cruzados: “aparece en el cielo una cruz muy hermosa de oro y muchoscolores que los cristianos vieron y tomaron como buena señal” (Crónica deVeinte Reyes, 1991 [s. XIII], XIII, 32: 284).

    Finalmente el lunes 16 de julio de 1212, ambos ejércitos se enfrentaron.Después de un duro combate los cristianos rompieron las líneas almohadesy las fuerzas musulmanas huyeron en desbandada.

    De esta manera, la jornada fue una victoria completa para los cristianos,aunque parecía que ésta por sí misma no bastaba para resarcir a Alfonso desu anterior derrota; fue así que los relatos se complementaron con distintosportentos que resaltaban las características providenciales del triunfo ante lospoderosos almohades. De esa forma, el triunfo sería de Dios, por intermedio

    de los hombres.Es así como se relatan varios milagros, por ejemplo, uno narrado en las

    crónicas de Jiménez de Rada y Alfonso X: un canónigo toledano que llevabala cruz del Arzobispo, cruzó todo el campo musulmán, pasando por unalluvia de flechas sin que ninguna de ellas lo alcanzara a él o la cruz (Jiménezde Rada, 1989 [s. XIII], VIII, 10: 322. Alfonso X, 1977 [s. XIII], 1019: 702).

    Al ver la batalla perdida, Miramamolín abandona el campo y los musul-manes que escapan son perseguidos y masacrados por los cristianos, puesto

    que según Jiménez de Rada “no queriendo los nuestros poner límites a lagracia de Dios […]” (Jiménez de Rada, 1989 [s. XIII], VIII, 11: 323).

    Obtenida la victoria, los clérigos cristianos entonan himnos de gracia, paraluego proceder a recoger el inmenso botín, momento en que se revela otromilagro: “A su vez, los agarenos que fueron hallados junto al ya mencionado

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    34/156

    34

    Meneghello • El Dios de las batallas: el providencialismo en la cronística hispana

    palenque […] cosa sorprendente, aunque quedaron tremendamente mutiladosy ya habían sufrido el pillaje de los pobres, no se podía descubrir en todo elcampo ni un rastro de sangre” (Jiménez de Rada, 1989 [s. XIII], VIII, 10: 322.

    Alfonso X, 1977 [s. XIII], 1019: 702-703). Lo que bien podría significar la in-tención de los cronistas por demostrar que fue una victoria limpia, pura, queno contaminó la tierra sagrada de Hispania con la sangre de los musulmanes.

    Asimismo, las crónicas también atribuyen a la intervención de la Provi-dencia las exageradas cifras de muerte de musulmanes –en algunas fuentesmás de cien mil– en comparación a los pocos caídos en el bando cristiano–no más de cien– (Jiménez de Rada, 1989 [s. XIII], VIII, 10: 323. Alvira, 1995:414). Los cronistas ven en estas cifras la intervención protectora de Dios y

    las utilizan para reforzar el discurso que convertía a los guerreros cristianosen paladines de la fe, en oposición a los musulmanes, que producto de sumaldad, sufrieron el castigo espiritual, como lo relata la Crónica Latina: los“moros” caídos “in profundum inferni descenderunt ” (Crónica Latina de losReyes de Castilla, 1999 [s. XIII], 25: 62). 

    Después de la batalla

    Asegurado el triunfo, los cruzados decidieron aprovechar su ventaja estra-tégica y abandonado el campo de batalla se encaminaron a la población deÚbeda para cercarla. Allí los defensores ofrecieron una fianza de piezas de oropara rescatar la ciudad (la cantidad del monto ofrecido varía según las fuentes).Inicialmente el rescate tentó a los reyes cristianos, pero los arzobispos y demásautoridades religiosas lo prohíben tajantemente, puesto que ello sería contrarioa los principios cruzados, por lo que la ciudad finalmente fue capturada porasalto y su población sometida a cautiverio (Jiménez de Rada, 1989 [s. XIII],VIII, 12:325. Crónica Latina de los Reyes de Castilla, 1999 [s. XIII], 25: 63).

    A continuación las fuentes dan a entender que la codicia demostrada porlos reyes cristianos, sumado al hecho de que se vanagloriaban de su victoria,motivó la última intervención divina en la campaña; una peste azotó a lahueste cristiana, obligándola a abandonar la campaña y regresar a Toledo(Crónica Latina de los Reyes de Castilla, 1999 [s. XIII], 25: 55. Alfonso X,1977 [s. XIII], 1021: 705). Jiménez de Rada es bastante explícito al respectoal afirmar que:

    “Y como ya la gracia de Dios se estaba marchitando por causa de losexcesos de los hombres, los cristianos, presa de su avaricia, se dedica-ban a los delitos y los robos, por lo que el Señor les colocó un frenoen sus bocas y los golpeó con enfermedades a ellos y sus animalesde tiro, y apenas había en las tiendas quien pudiera atender a su ca-marada o a su señor.” (Jiménez de Rada, 1989 [s. XIII], VIII, 12: 325).

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    35/156

    35

    ISSN 0719-4137 Revista de Historia y Geografía Nº 32 / 2015

    De esta forma Dios castigaba la falta de humildad y la codicia de loscaudillos cristianos, al atribuirse como propia una victoria que Él les otorgó.

    Pese a este último revés, las crónicas cierran el capítulo de Las Navasseñalándolo como una gran victoria cristiana, y una señal inequívoca de la justicia providencial de la causa de Reconquista.

    A modo de conclusión

    Los relatos en torno a la batalla nos permiten aproximarnos al uso de laguerra religiosa como instrumento diplomático y a las crónicas como instru-mentos al servicio de la monarquía y sus intereses.

    También nos revelan un aspecto más radical de la guerra en Hispania, unextremismo relacionado con la idea de cruzada y que podemos apreciar enla matanza de Malagón, las amenazas de excomulgar a los que por recogerbotín dejen de matar a los musulmanes y la intransigencia frente a la ofertade los defensores de Úbeda.

    Junto a lo anterior, respecto a la concepción providencialista de la guerra,Las Navas nos demuestra importantes cambios, principalmente en lo referido

    a las figuras celestes. En batallas anteriores de la Reconquista, los cronistassolían incluir la participación de mensajeros divinos o guerreros santos, comolos ya conocidos casos de Santiago e Isidoro. También eran comunes lossueños premonitorios, donde los enviados de Dios advertían o instruían a loslíderes cristianos. En resumen, entre los siglos VIII y X, y en menor medida enel siglo XI, las intervenciones providencialistas fueron directas y presentadasde manera indiscutible. Por el contrario, en el caso de las Navas, la inter-vención providencialista es mostrada de manera distinta; ejemplo de ello esque el gran milagro de la batalla, el episodio del pastor, no genera consensoen los cronistas en cuanto a su naturaleza. Sus interpretaciones van desdesu consideración como un hombre humilde, hasta la de un ángel, versiónque gana adeptos a medida que las crónicas se alejan del suceso. Donde sícoinciden los cronistas, es en que la afortunada intervención se debió a undesignio divino. Sin embargo, lo realmente interesante a nuestro parecer, esque este “mensajero” solamente se limita a señalar un camino, dejando alos cruzados la decisión de tomarlo y proseguir la campaña22.

    22  A diferencia de otras apariciones celestes, el pastor no da instrucciones ni consejos, ni si-quiera dirige palabras de ánimo a los apesadumbrados reyes cristianos como, por ejemplo,lo hacía Isidoro o Santiago. Al respecto reiteramos que no es nuestra intención afirmar queel providencialismo desapareció de las crónicas y creencias populares en el siglo XIII, sinoque éste fue mutando. Los santos siguieron apareciendo, como en el caso de la ayuda queSantiago otorgó a Alfonso IX en la batalla de Alfanje, pero sus apariciones directas como

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    36/156

    36

    Meneghello • El Dios de las batallas: el providencialismo en la cronística hispana

    Esta relativa pérdida de la importancia del providencialismo manifiesto pudodeberse a múltiples factores, entre los que se pueden considerar el cambio dementalidad que manifiestan los cronistas a partir del siglo XII. Este cambio se

    refleja en un mayor uso de fuentes diplomáticas y una posición más cercanaal poder político, ya que no hay que olvidar que la mayoría de las crónicas dela batalla fueron escritas por personajes contemporáneos de la misma y queademás experimentaron el proceso de unificación de Castilla y León en 1230.

    Entonces, la batalla de las Navas refleja una nueva visión del providencia-lismo de cruzada, ya que si bien los cronistas insisten sobre la intervencióndivina, a fin de cuentas son los hombres quienes deciden los cursos a seguir,siendo ellos los que luchan contra los enemigos de Dios, aunque inspirados

    por sus señales.A nuestro juicio, esta concepción va en la misma línea que los otros

    portentos observados en la batalla de Las Navas, puesto que los milagrosquedan reducidos prácticamente a hechos anecdóticos, como los abrojosque no dañan, la aparición de una cruz en el cielo, el estandarte invictode la Catedral, o la ausencia de sangre en el campo de batalla; es decir, setrata de hechos secundarios que no afectan el desarrollo del combate ni lasdecisiones estratégicas de los combatientes. De esta forma, la interpretación

    de la victoria nos lleva a conjeturar que es una intención por parte de loscronistas de mantener el discurso providencialista, pero dirigiendo el peso delas acciones a la voluntad humana. Dios y su poder rodea toda la narraciónde la batalla, pero en su centro se encuentra Alfonso VIII, que como simplehombre es el encargado de dirigir la cruzada.

    El rey es mostrado como una criatura sujeta al pecado y, en especial,a la vanidad, puesto que los cronistas no ocultan sus flaquezas –como susdudas ante el bloqueo del paso de La Losa–, aunque al mismo tiempo narran

    sus virtudes, su generosidad y valor. Entonces el eje de la acción ya no es laProvidencia sino el rey, que como mortal debe elegir los caminos que Diospone a su disposición. El monarca se convierte así en un nuevo modelo aseguir, en un hombre inspirado por Dios, pero esencialmente un mortal convirtudes y defectos que enfrenta obstáculos que es capaz de superar graciasa la ayuda de la potestad divina.

    En síntesis, se puede afirmar que a partir del siglo XII, y ya decididamente enel siglo XIII, las crónicas restringen cada vez más los episodios providencialistas.

    En textos como las crónicas de Lucas de Tuy, Jiménez de Rada o la Crónica

    blancos guerreros se hicieron cada vez más esporádicas. En cambio, se refuerza la imagendel soberano, que poseído por el espíritu de Dios, o siguiendo los consejos de la Providencia,realiza actos gloriosos, como la conquista de Córdoba por Fernando III.

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    37/156

    37

    ISSN 0719-4137 Revista de Historia y Geografía Nº 32 / 2015

    General  se puede apreciar este cambio, puesto que en los episodios anteriores asu redacción se narran acciones providencialistas directas, como las aparicionesde santos, mensajeros y combatientes divinos. Sin embargo, cuando los autores

    narran episodios contemporáneos a ellos, estas acciones directas se reducen,al punto que en sucesos como las conquistas de Fernando III, los milagros yotros prodigios prácticamente desaparecen o no son relevantes.

    De esta manera, el rey se presenta como el sujeto principal de la narración,trasmitiéndose la idea de que sus acciones eran validadas y legitimadas porla Providencia. Así, la instrumentalización de la religiosidad al servicio de losfines políticos y militares de la Reconquista castellana se mantenía, aunquede un modo que se adaptaba mejor a los nuevos tiempos de fortalecimiento

    del poder de las monarquías.

    Referencias bibliográficas

    Fuentes primarias

    Alfonso X (1977). Primera Crónica General de España. Editada por Ramón Me-néndez Pidal con un estudio actualizador de Diego Catalán, 2º tomo de la tercera

    reimpresión. Madrid: Gredos.

    Biblia de Jerusalén (1975). Bilbao: Desclée de Brouwer.

    Crónica de Veinte Reyes (1991). Burgos: Ayuntamiento de Burgos.

    Crónica Latina de los Reyes de Castilla (1999). Edición de Luis Charlo Brea, Ma-drid: Akal.

    De Tuy, L. (1926). Crónica de España. Primera edición del texto romanceado, con-

    forme a una copia de la Academia preparada y prologada por Julio Puyol. Madrid.Gonzales, J. (1960). El reino de Castilla en la época de Alfonso VIII , III Documen-tos. Madrid: Consejo Superior de Investigaciones Científicas, Escuela de EstudiosMedievales.

    Jiménez de Rada, R. (1989). Historia de los hechos de España, Introducción,traducción, notas e índices de Juan Fernández Valverde. Madrid: Alianza.

    Los anales toledanos I y II  (1993). Edición de Julio Porres Martín-Cleto, Toledo:

    Instituto provincial de Investigaciones y Estudios Toledanos, Diputación Provincialde Toledo.

    Ximenii de Rada, R. (1988). Opera Omnia, Pars I, Historia de revus Hispaniae.Corpus Christianorum, Continuatio Mediaevalis, LXXII. Turnholti: TypographiBrepols Editores Pontificii.

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    38/156

    38

    Meneghello • El Dios de las batallas: el providencialismo en la cronística hispana

    Fuentes secundarias

    Alvar, C. (1977). La poesía trovadoresca en España y Portugal. Madrid: Cupsa, D.L.

    Alvira, M. (1995). “La muerte del enemigo en el Pleno Medioevo: cifras e ideología(el modelo de las Navas de Tolosa)”, en Hispania: Revista Española de Historia,190. LV/2, pp. 403-424.

    Alvira, M. (1996). “La imagen del Miramamolín al - Nasir (1199-1213) en lasfuentes cristianas del siglo XIII”, en Anuario de Estudios Medievales, Vol. 26/2,pp. 1003-1030.

    Alvira, M. (1997). “El desafío del Miramamolín antes de la batalla de Las Navasde Tolosa (1212): Fuentes, datación y posibles orígenes”, en al-Qantara: Revistade estudios árabes, Vol. 18, 1, pp. 463-490.

    Alvira, M. (2006). “Del sepulcro y los sarracenos meridionales a los herejes occi-dentales”, en Baloup, D. y P. Josserand (Editores), Regards Croisés sur la GuerreSainte. Guerre, Idéologie et Religion Dans L’espace Méditerranéen Latin (XI-XIIISiècle). CNRS-Université de Toulouse-Le Mirail.

    Cardini, F. (2003). “Guerra y Cruzada”, en Le Goff, J. Y J.C. Schmitt (Editores),Diccionario razonado del Occidente medieval , Madrid: Akal.

    Contamine, P. (1984). La Guerra en la Edad Media, Barcelona: Labor.

    García F. (2003). La Edad Media. Guerra e ideología, justificaciones jurídicas yreligiosas. Madrid: Sílex.

    García, A. (1985). Iglesia, Sociedad y Derecho. Salamanca: Universidad Pontificiade Salamanca.

    García, F. (2002). Relaciones Políticas y Guerra. La experiencia castellano-leonesafrente al Islam. Siglos XI-XIII . Sevilla: Universidad de Sevilla.

    García, F. (1988). “La conquista de Andalucía en la cronística castellana del sigloXIII: Las mentalidades historiográficas en los relatos de la conquista”, en Cabre-ra, E., Andalucía entre Oriente y Occidente (1236-1492), Actas del V ColoquioInternacional de Historia Medieval de Andalucía, Córdoba: Excma. DiputaciónProvincial de Córdoba.

    García, F. (2001). Castilla y León frente al Islam: Estrategias de expansión y Tácticasmilitares (Siglos XI – XIII). Sevilla: Universidad de Sevilla.

    García, F. (2008). Las Navas de Tolosa. Barcelona: Ariel.

    García, M. (2002). “El pastor de Las Navas de Tolosa. La realidad y la leyenda”, enHistoria, tradiciones y leyendas en la frontera: IV Estudios de Frontera: Congresocelebrado en Alcalá la Real en noviembre de 2001: Homenaje a Don Enrique Toraly Peñaranda. Coordinado por F. Toro Ceballos y J. Rodríguez Molina.

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    39/156

    39

    ISSN 0719-4137 Revista de Historia y Geografía Nº 32 / 2015

    García, R. (1967). Historia de la Iglesia Católica en sus cuatro grandes edades: Antigua, Media, Nueva y Moderna. Madrid: Editorial Católica.

    Goñi, J. (1958). Historia de la Bula de Cruzada en España. Vitoria: Editorial delSeminario.

    Hindley, G. (2005). Las Cruzadas, peregrinaje armado y guerra santa. BuenosAires. Ediciones B.

    Huici, A. (1956). Las grandes batallas de la Reconquista durante las invasionesafricanas (Almorávides, Almohades y Benimerines). Madrid: Instituto de EstudiosAfricanos, Consejo Superior de Investigaciones Científicas.

    Keen, M. (2005). Historia de la guerra en la Edad Media. Madrid: Antonio Ma-

    chado.

    Riley-Smith, J. (2012). ¿Qué fueron las cruzadas? Barcelona: Acantilado.

    Rodríguez, A. (1988). “La política eclesiástica de la monarquía castellano-leonesadurante el reinado de Fernando III (1217-1252)”, en Hispania Revista Españolade Historia, N° 168, pp. 7-48.

    Rodríguez, J. (1994). “Fernando III y sus campañas cruzadas en el contexto cruzadoeuropeo, 1217-1252”, en Archivo Hispalense, 234-36, pp. 205-217.

    Rodríguez, J. (2002). “Cruzados y fronterizos. Discusión sobre el carácter cruzadode la guerra en la frontera, 1214-1314”, en Toro Ceballos, F. y J. Rodríguez Molina(coordinadores). III Estudios de Frontera, Jaén, Diputación.

    Russell, F. (1977).  The Just War in the Middle Ages. Cambridge: CambridgeUniversity Press.

    Vara, C. (1999). El lunes de Las Navas, Jaén: Universidad de Jaén.

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    40/156

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    41/156

    41

    Efectos de la reforma protestante en elsistema de relaciones internacionales de

    Europa Occidental

    Diego Canales Ramírez1

    Recibido: 8 de enero de 2015 · Aceptado: 20 de marzo de 2015

    ResumenLas críticas de Martín Lutero a la Iglesia Católica provocaron una fuerteconvulsión en el seno de la sociedad occidental, pero también provocaron uncambio ideológico que repercutiría fuertemente en el sistema de relacionesinternacionales de Europa Occidental, al generar una polarización entre dosbloques de Estados claramente enfrentados. Por un lado, se encontraban lospaíses que adoptaron la Reforma, especialmente aquellos del norte de Europa,sobre todo Inglaterra, Suecia y Dinamarca, y por el otro lado, aquellos queaún seguían fieles ideológicamente al mandato del papado, como España.

    La Reforma permite a los Estados que adoptan dicha confesión el control dela Iglesia por el Estado, y a través de ésta, obtener beneficios económicosque permiten el enriquecimiento de las arcas fiscales, pero que generaronuna separación en Europa entre un bloque católico y otro protestante, queconducirían a enfrentamientos armados entre ambos.

    Palabras clave: Reforma Protestante, Iglesia, Relaciones Internacionales,Europa

    Effects of the protestant reformation in the internationalrelations system in Western Europe

    AbstractMartin Luther’s criticism about the Catholic Church provoked a strong con-vulsion within Western society, but also an ideological change that wouldimpact heavily on the system of international relations in Western Europe,generating a polarization between two blocks of States clearly confronted.On the one hand, there were countries that adopted the Reformation, espe-cially those in Northern Europe, as England, Sweden and Denmark, and on

    1  Chileno. Doctorando en Historia, Programa Europa y el Mundo Atlántico: Poder, Cultura,Sociedad , dictado por el Instituto de Historia Simancas, Universidad de Valladolid, España.Becario Erasmus Mundus PEACE. Profesor Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Paisaje,Universidad Central de Chile. E-mail: [email protected] 

    Artículo

    ISSN 0719-4137  Revista de Historia y Geografía Nº 32 / 2015 • 41- 52

  • 8/19/2019 REVISTA_HyG_32_UCSH_2015

    42/156

    42

    Canales • Efectos de la reforma protestante en el sistema de relaciones internacionales

    the other hand, those who were still ideologically faithful to the mandate ofthe Papacy, as Spain. The reform allows States adopting such a confession tohave control over the Church and through it, to get economic benefits that

    allow the enrichment of the treasury, but that created a separation in Europebetween Catholics and Protestants leading to armed conflicts between them.

    Keywords: Protestant Reformation, Church, inter