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Arqueología y Prehistoria del
Interior Peninsular
08
2019
ARPI 08
Publicación: 2019 ISSN: 2341-2496 Dirección: Primitiva Bueno Ramírez (UAH) Subdirección: Rosa Barroso (UAH) Consejo editorial: Manuel Alcaraz (Universidad de Alca-lá); José Mª Barco (Universidad de Alcalá); Cristina de Juana (Universidad de Alcalá); Mª Ángeles Lancharro (Universidad de Alcalá); Adara López (Universidad de Al-calá); Estíbaliz Polo (Universidad de Alcalá); Antonio Vázquez (Universidad de Alcalá); Piedad Villanueva (Universidad de Alcalá). Comité Asesor: Rodrigo de Balbín (Prehistoria-UAH); Margarita Vallejo (Historia Antigua- UAH); Lauro Olmo (Arqueología- UAH); Leonor Rocha (Arqueología – Uni-versidade de Évora); Enrique Baquedano (MAR); Luc La-porte (Laboratoire d'Anthropologie, Université de Ren-nes); Laure Salanova (CNRS). Edición: Área de Prehistoria (UAH) Foto portada: Ricardo L. Barbas
SUMARIO Editorial 04– 24 El dolmen de La Pinilla en Alcolea del Pinar (Guadalajara) y el conjunto megalítico del sistema Ibérico central. Redescubriendo la Historia. Barbas Nieto, Ricardo L. 25– 30 Reuse of ancient megalithics monuments during Metal Ages: the dolmen of Serrinha (Monforte, Portugal). Rocha, Leonor y Morgado, Paula 31-50 Una perspectiva paleoambiental de la transición Bronce Medio-Final al Hierro en la Meseta Norte a través de sus contextos habitacionales: el castro de la Peña del Moro (Navas de Oro, Segovia) Martín Vela, Raúl; Pérez Díaz, Sebastián y López Sáez, José Antonio 51-66. La evolución de las investigaciones prehistóricas en el Departamento de Ille-et-Vilaine (Bretaña, Francia) Illana López, Sofía 67-85 Los infantes y la muerte en la antigua Celtiberia Moreno Ojeda, Lucía 86-105 Evidencias arqueológicas de la peste Justinianea en Hispania Benavides Barco, María 55-55 106-151 VRBS, PRAETORIUM, SVBVRBIA. Centro de poder en la civitas regia toletana y su territorio en época visigoda. Barroso Cabrera, Rafael; Carrobles Santos , Jesús; Morín de Pablos , Jorge y Sánchez Ramos, Isabel María.
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LA EVOLUCIÓN DE LAS INVESTIGACIONES
PREHISTÓRICAS EN EL DEPARTAMENTO DE ILLE-ET-VILAINE (BRETAÑA, FRANCIA)
THE EVOLUTION OF PREHISTORIC RESEARCH IN ILLE-ET-VILAINE DEPARTMENT
(BRITTANY, FRANCE)
Sofía Illana López (1)
Resumen
Desde finales del siglo XIX el interés por los vestigios prehistóricos ha sido una constante en la región
de Bretaña, especialmente en el departamento de Ille-et-Vilaine, tendencia que se ha mantenido y acrecenta-
do en la actualidad. En este trabajo se lleva a cabo un recorrido por la evolución de los estudios de la cultura
prehistórica y la creación de centros de investigación avanzada en estos territorios, que situaron al departa-
mento de Ille-et-Vilaine como referente en el estudio prehistórico a nivel nacional e internacional. También se
destaca el impacto de la difusión de estas investigaciones en el imaginario social de la región.
Palabras Claves: Prehistoria, Bretaña, Ille-et-Vilaine, investigación, megalitismo
Abstract:
Since XIXth century the interest in prehistoric vestiges was constant in Brittany, especially in
the Ille-et-Vilaine department, this tendency remained during the next centuries. This work offers a review of
the evolution of prehistoric studies in this territory and its impact in the collective imagination and in the crea-
tion of research centres, which convert the Ille-et-Vilaine department into a model in prehistoric investigation
nationally and internationally.
Keywords: Prehistory, Brittany, Ille-et-Vilaine, investigation, Megalithism.
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1.INTRODUCCIÓN
Desde finales del siglo XIX el interés por los
vestigios prehistóricos fue una constante en la
región de Bretaña, y en especial en el departamen-
to de Ille-et-Vilaine. Este trabajo tiene como obje-
tivos distinguir los factores que propiciaron la
identificación del pueblo bretón con su pasado
prehistórico, determinar las causas por las que la
región de Bretaña y el departamento de Ille-et-
Vilaine destacan a nivel nacional e internacional en
los estudios prehistóricos, y señalar los motivos
principales por los que estas investigaciones se
han centrado en mayor medida en vestigios mega-
líticos, dejando de lado otros yacimientos prehis-
tóricos.
Para abordar estos objetivos nos pareció ade-
cuado elaborar un estudio cronológico que refleja-
se el desarrollo de las investigaciones prehistóricas
en diferentes momentos, destacando el siglo XIX,
la primera mitad del siglo XX, la segunda mitad del
siglo XX y el siglo XXI; dejando constancia en todos
los casos de los nombres y datos aportados por los
investigadores de cada periodo, el papel de los
diferentes gobiernos en el fomento de los estudios
prehistóricos (mediante la creación de institucio-
nes o la promulgación de leyes), y las campañas
para la difusión de las investigaciones, pieza clave
para comprender cómo estos conocimientos han
llegado a la población.
2.LA REGIÓN DE BRETAÑA Y EL DEPAR-
TAMENTO DE ILLE-ET-VILAINE.
Bretaña es la región francesa más occidental
en territorio europeo. Se encuentra dividida en
cuatro departamentos: Côtes-d’Armor, Finistère,
Ille-et-Vilaine y Morbihnan. Las características
topográficas del territorio junto a la abundancia de
cursos de agua y la presencia de grandes masas
boscosas favorecieron que las orillas del río Vilaine
y sus afluentes fuesen elegidas como asentamien-
to de las primeras comunidades prehistóricas del
occidente francés.
Fig. 1.- Mapa de la región de Bretaña y del departa-
mento de Ille-et-Vilaine.
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3.LOS PRIMEROS INVESTIGADORES
PREHISTÓRICOS EN EL DEPARTAMENTO DE
ILLE-ET-VILAINE.
3.1. El Romanticismo en Bretaña y la Celto-
manie.
A finales del siglo XVIII se desarrolló el Ro-
manticismo, un movimiento cultural que se carac-
terizó por la exaltación de los sentimientos, la li-
bertad creativa, y el gusto por el pasado, lo que
favoreció el desarrollo de los estudios de Historia y
Arqueología. Paralelamente en cada país europeo
surgieron corrientes de corte nacionalista, defini-
das por la búsqueda de los orígenes de cada na-
ción, con el fin de construir un imaginario común.
Bretaña, vivió de una forma propia el Roman-
ticismo. Desde hacía varios siglos, en la zona había
enraizado un sentimiento de incomprensión,
menosprecio y particularismo respecto a Francia.
Las peculiaridades del lugar motivaron que los in-
telectuales retrocediesen a su pasado celta, sumer-
giéndose de lleno en la Celtomanie, movimiento
cultural de amplia repercusión europea, que se
desarrolló entre los siglos XVIII y XIX, cuyo objetivo
principal fue el estudio de la cultura celta.
Los intelectuales de la Celtomanie considera-
ron los megalitos de su entorno construcciones
celtas basándose en las historias que se habían
transmitido oralmente, y que fueron recogiendo
escritores como Théodore Hersart y François Marie
Luzel a lo largo de toda la región en obras como
Barzaz Breizh o Contes populaires de la Haute-
Bretagne, en cuyas ilustraciones se muestra la fun-
ción que se creía que cumplían los megalitos en los
rituales druidas de los celtas.
Fig.2.- Ilustración de la obra Contes et légendes de Basse-Bretagne, de F.M. Luzel. (Luzel 1891 : 63)
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3.2. Los primeros investigadores del periodo
prehistórico.
A mediados del siglo XIX, Émile Cartailhac se
aproximó a los megalitos desde una perspectiva
más científica. En su obra L’Âge de Pierre dans les
souvenirs et superstitions populaires, se alejó de la
datación céltica de los menhires, abogando por una
mayor antigüedad de estas construcciones. Paul
Sébillot apoyó la tesis de Cartailhac, considerando
que hasta ese momento se había inventado la tradi-
ción; con la interpretación libre de los cuentos y las
leyendas (Sébillot 1900: 561).
En 1844 se creó la Société Archéologique d’Ille
-et-Vilaine, cuyo objetivo fue el estudio de los mo-
numentos y la historia del departamento de Ille-et-
Vilaine. Desde 1860 las memorias anuales de esta
institución fueron recogiendo todo aquello que era
presentado en las reuniones mensuales de la aso-
ciación desde iglesias abandonadas hasta los men-
hires a las afueras de los pueblos bretones.
El 5 de diciembre de 1878 la Société d’Anthro-
pologie de Paris creó una comisión, presidida por el
historiador Henri Martin, encargada de valorar si los
monumentos megalíticos debían ser considerados
monumentos históricos. El 21 de noviembre de
1879 Martin redactó el informe Sous-commission
d’inventaire des Monuments mégalithiques et des
blocs erratiques de la France et l’Algérie, que consti-
tuía un detallado inventario de todos los monumen-
tos megalíticos que se habían registrado en el país
hasta la fecha (Hurel 2007: 82), llegando a registrar
alrededor de un centenar de megalitos en el depar-
tamento de Ille-et-Vilaine.
Unos años más tarde, en 1883, Paul Bézier,
miembro de la Société Archéologique d’Ille-et-
Vilaine, redactó el Inventaire des monuments
mégalithiques du département d’Ille-et-Vilaine. Este
documento supone una de las fuentes más
importantes para el estudio de los megalitos del
departamento de Ille-et-Vilaine, pues recoge con
detalle todos y cada uno de los monumentos
descubiertos hasta esa fecha, agrupados por
comunas y tipología, incluyendo detallados dibujos
de la posición y orientación geográfica de cada
megalito.
3.3. La difusión. El turismo y los primeros
visitantes.
En 1842 Bretaña puso en marcha el Plan Le-
grand, con el objetivo de extender la línea ferrovia-
ria nacional hasta el centro de la región (Reverdy
1993: 106). En los años posteriores la compañía
ferroviaria Chemins de Fer inició una campaña turís-
tica para atraer a visitantes de todas las regiones de
Francia al territorio bretón, mostrando unas image-
nes de playas, acantilados y tradición, en la que
tenían un gran peso los megalitos. Por otra parte, la
literatura de autores como Chateaubriand o
Théodore Hersart, en la que se describían los paisa-
jes bretones, propició que progresivamente se crea-
se una visión estereotipada e idílica de la región,
que atrajo a muchos curiosos que deseaban con-
templar los escenarios de los cuentos y leyendas
(Cornette 2008: 298).
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4. LAS INVESTIGACIONES PREHISTÓRICAS
DURANTE LA PRIMERA MITAD DEL SIGLO XX.
El periodo transcurrido entre los años 1900 y
1950 ha sido considerado como una etapa de
transición entre los inicios de la investigación
prehistórica y el surgimiento de una metodología
asociada a la misma (Coye 2011, 205).
4.1. Las primeras décadas del siglo XX
Debido a las convulsiones sociales de aquellos
años, las primeras décadas del siglo XX se caracteri-
zaron por la falta de innovación en los planteamien-
tos y el lento progreso de los avances científicos. La
Société Archèologique du Département d’Ille-et-
Vilaine se convirtió en el principal organismo dentro
de la región, que fomentó la actividad investigadora
y logró mantener el interés prehistórico.
El estallido de la Primera Guerra Mundial el 28
de julio de 1914, afectó a las actividades científicas
en el país, especialmente en Bretaña, donde gran
parte de la población masculina tuvo que marchar a
los frentes a combatir. En el primer año de la guerra
la actividad de la Société Archéologique du Dépar-
tement d’Ille-et-Vilaine no se vio afectada, hasta el
año 1915, en el que las reuniones cesaron; y no fue-
ron reanudadas hasta el fin de la guerra en 1918.
Durante el periodo de entreguerras, al igual
que en el resto de Francia, el departamento de Ille-
et-Vilaine se caracterizó por un estancamiento en
las actividades arqueológicas. Tras el conflicto el
territorio había quedado devastado, y la mayor par-
te de efectivos humanos fueron empleados en la
reconstrucción del país y la recuperación de la acti-
vidad industrial (Hurel 2007, 244). La Société Ar-
chéologique du Département d’Ille-et-Vilaine conti-
nuó actuando como mecenas de las actividades
científicas que se llevaban en la región. La más des-
tacable fue el inventario de monumentos megalíti-
cos llevado a cabo por Léon Colin entre los años
1929 y 1934 por todo el departamento de Ille-et-
Vilaine, cuyos avances fueron expuestos anualmen-
te en el Bulletin et mémoire de la Société archéolo-
gique du Département d’Ille-et-Vilaine.
4.2. La Segunda Guerra Mundial. La ocupa-
ción nazi y el interés antropológico.
Desde mayo de 1940 hasta finales de 1944 la
región de Bretaña estuvo bajo dominio alemán.
Junto a los militares nacionalsocialistas llegaron
Fig. 3.- Cartel de la compañía ferroviaria de Orleans en la que se representa a unas jóvenes con el traje típico de la región de Bretaña celebrando una festivi-dad junto a unos megalitos. Es un claro ejemplo de los carteles de aquel momento en los que se quería mos-trar las especificidades de la región con el fin de atraer a turistas y curiosos. (Bibliothèque National de Fran-ce)
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arqueólogos dispuestos a estudiar el pasado bre-
tón, que según ellos estaba relacionado con la raza
alemana. Herbert Jahnkun, lugarteniente de la SS,
se puso al servicio de las investigaciones científicas
en la región; escribiendo el Bretagne-Bericht, donde
recopiló datos arqueológicos sobre los enterra-
mientos prehistóricos y las construcciones megalí-
ticas. Jahnkun también fundo la Société Allemande
des études celtiques, conocida en alemán como la
DGKS. Junto a él destacaron otros investigadores
como Werner Hülle, conocido por sus
investigaciones en los alineamientos de Carnac; o
Leo Weisgerber y Werner Best, que mostraron en
sus tesis cómo los bretones eran superiores al resto
de franceses al ser de origen germánico.
Las pesquisas de los prehistoriadores nacio-
nalsocialistas se enfocaron tanto en los yacimien-
tos megalíticos como en los restos de habitación
humana o necrópolis. Su objetivo era establecer
relaciones entre las formas de vida celtas y las ger-
mánicas, demostrando que los primeros eran des-
cendientes de los segundos (Olivier 2012).
En 1941 se promulgó la Ley de 1941, que no
fue validada hasta el fin de la Segunda Guerra Mun-
dial en 1945, siendo una de las primeras leyes de
protección de los vestigios arqueológicos en el
país. En sus títulos y artículos se determinaban pre-
ceptos para la protección de los hallazgos como la
vigilancia de las excavaciones por parte del Estado
(Título I Artículo 1), la posibilidad de hacer excava-
ciones a la fuerza por razón de utilidad pública
(Título II Artículo 9) o la obligatoriedad de declarar
los descubrimientos (Título III Artículo 14). Este
corpus legislativo es resultado de la preocupación
por la protección, conservación y preservación de
los vestigios arqueológicos, que se fueron desarro-
llando de manera progresiva durante las décadas
posteriores (Souiah 2010: 296).
La mayor aportación de los científicos nacio-
nalsocialistas a la investigación prehistórica breto-
na fue la preocupación por las formas de vida
prehistóricas, rompiendo con la tendencia de los
años anteriores, centrada exclusivamente en el
estudio megalítico. Desafortunadamente, los do-
cumentos sobre las investigaciones de los arqueó-
logos alemanes, y los franceses que colaboraron
junto a ellos, se perdieron tras el fin de la guerra
durante el periodo de desnazificación, por miedo a
que sus autores fuesen relacionados con el Tercer
Reich.
5. LAS INVESTIGACIONES PREHISTÓRICAS
DURANTE LA SEGUNDA MITAD DEL SIGLO XX.
El enfoque que había adquirido el estudio
prehistórico durante la Segunda Guerra Mundial,
centrado principalmente en las formas de vida, fue
retomado tras el fin de la contienda desechando su
orientación racista. La década de los cincuenta y
sesenta en Francia supuso un periodo de
“renacimiento de las investigaciones prehistóri-
cas” (Monnier 2004: 355), encabezado por figuras
de renombre nacional e internacional como Leroi-
Gourhan, Annette Laming o François Bordes.
5.1. Los principales investigadores durante
la segunda mitad del siglo XX en el departamen-
to de Ille-et-Vilaine
En Bretaña destacó Pierre-Roland Giot,
prehistoriador, geólogo y antropólogo francés con-
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siderado el padre de la arqueología prehistórica
bretona moderna. Tras cursar sus estudios en las
universidades de París y Grenoble, en 1944 acudió a
Bretaña, donde fundó en el seno de la Université
Rennes 1 el Laboratoire d’Anthropologie, cuyo ob-
jetivo era el estudio de la prehistoria desde un pun-
to de vista multidisciplinar en el que colaboraban
conjuntamente profesores y alumnos de diversas
disciplinas. En la década de los sesenta el Labora-
toire d’Anthropologie se afianzó como centro de
referencia en la investigación prehistórica, no sólo a
nivel regional, sino nacional. (VV. AA. 2002: 5).
En su faceta como geólogo destacó como uno
de los primeros prehistoriadores en preocuparse
por los estudios petrográficos y sedimentológicos
que aplicó en las más de cuarenta excavaciones que
dirigió en la región bretona. En el departamento de
Ille-et-Vilaine puso en marcha numerosos proyec-
tos, cuyos resultados fueron expuestos en Circons-
cription de Rennes, Rennes o Aperçus sur l´Age de fer
du Nord-Est de la Bretagne, en los que Giot llevó a
cabo un seguimiento pormenorizado de los distin-
tos yacimientos. También destacó como divulga-
dor gracias a la publicación de más de seiscientos
artículos y obras en los que expuso los progresos en
sus investigaciones. En torno a su figura y al Labo-
ratoire d’Anthropologie se fue gestando un círculo
de intelectuales y alumnos interesados en su meto-
dología, entre los que destacan Yves Coppens, Jac-
ques Briard o Jean L’Helgouach.
Jacques Briard, alumno aventajado de Giot en
la Université de Rennes, con el que colaboró entre
los años 1953 y 1955 en algunas de sus excavacio-
nes, destacó en el estudio prehistórico bretón du-
rante las décadas de los sesenta y los ochenta. En
las investigaciones de Briard el estudio de los me-
galitos tuvo un papel más relevante, pues habían
permanecido olvidados durante décadas de las
líneas principales de investigación. En 1986 sucedió
a Giot como director del laboratorio de Antropolo-
gía y Prehistoria, convirtiéndose en el especialista
de referencia de la Edad del Bronce en la región
(VV. AA. 2002: 6).
Desde finales del siglo XIX, tras su descubri-
miento, los megalitos del Bosque de Broceliande
habían caído en el olvido. A partir de julio de 1982
Briard inició una serie de sondeos en la zona, y al
año siguiente comenzó la excavación y restaura-
ción de los monumentos. El exhaustivo estudio de
Briard en Broceliande constituye uno de sus pro-
yectos más importantes en el departamento de Ille-
et-Vilaine. Todo su trabajo en la zona se recogió en
varios artículos entre los que destaca Archéologie
et environnement en forêt de Broceliande, un exem-
ple d'études pluridisciplinaires, donde se explica con
detalle la multitud de tareas que se llevaron a cabo
en la zona, y en las que se pone de manifiesto el
concepto de multidisciplinariedad propuesto por
Giot.
Fig. 4.- Jean L’Helgouach y Jacques Briard junto a su
maestro, Pierre Roland Giot. (http://www.creaah.univ
-rennes1.fr/spip.php?rubrique27)
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El estudio del Bosque de Broceliande atrajo de
nuevo el interés por el megalitismo, y la puesta en
valor del patrimonio histórico, impulsado no sólo
por los intelectuales, sino de manera especial por
los propios vecinos de la zona, que veían los nuevos
descubrimientos como un atractivo para el turismo,
necesario para revitalizar el territorio (Briard, 1989:
397). A partir de estos trabajos, la Tombeau des
Géants, el Hôtié de Viviane y el Jardin aux Moines,
los tres megalitos más destacados del Bosque de
Broceliande, fueron incorporados a los circuitos
turísticos, instalando paneles informativos e infra-
estructuras que facilitasen su visita.
Jean L’Helgouach; maestro del megalitismo,
competente gestor de la arqueología francesa y
hombre profundamente concienciado con la pro-
tección del patrimonio bretón; como le definió Jac-
ques Briard (Briard 2000: 332), representa otra de
las figuras más destacadas en los estudios
prehistóricos de la segunda mitad de siglo. Colabo-
ró con Giot y L’Helgouach en numerosas publica-
ciones, aunque no fue hasta 1965 cuando adquirió
mayor notoriedad, con su tesis Les sépultures
mégalithiques en Armorique, que se convirtió en una
obra esencial para la comprensión de los megalitos
bretones. Sus trabajos se centraron principalmente
en el departamento de Pays de la Loire, donde ejer-
ció el cargo de Director de Antigüedades.
Tras la primera generación de alumnos de
Giot, conviene destacar los trabajos de Charles
Tanguy Le Roux, miembro de la segunda genera-
ción de alumnos formada en el Laboratoire d’Anth-
ropologie. Los proyectos de Le Roux se efectuaron
principalmente en el departamento de Morbihnan,
entre los que destaca el yacimiento de Gavrinis. En
el departamento de Ille-et-Vilaine su presencia fue
más limitada, asociándose con el equipo de Jacques
Briard en las tareas efectuadas en los alineamientos
de Saint Just o en el yacimiento de La Guerche.
5.2. El papel del gobierno francés. Las pri-
meras leyes de conservación del patrimonio y la
creación de instituciones.
A partir de la década de los setenta el Go-
bierno francés comenzó a mostrar una mayor con-
cienciación respecto a la protección del patrimonio
histórico. En 1977 se creó una institución en cada
departamento conocida como Direction Régional
des Affaires Cultureles, que tenía como objetivo la
gestión y protección del patrimonio cultural (Nadal
2003, 108). Al servicio del DRAC de Bretaña comen-
zaron a trabajar un número creciente de investiga-
dores formados en el Laboratoire d’Anthropologie
de l’Université Rennes I, entre los que cabe desta-
car Stéphane Blanchet, Gilles Leroux, o Guy Jumel.
Otra de las principales medidas, fue la promul-
gación de un conjunto de leyes dirigidas a la conser-
vación del patrimonio arqueológico entre las que
destacan la Ley de 1977 Artículo R 111-3-2 y la Ley
de 1986 Decreto 86-192 que prohibían la construc-
ción de inmuebles que pudiesen comprometer la
conservación o valorización de un sitio o vestigio
arqueológico (Souiah 2010: 26). El crecimiento y la
evolución del paisaje económico bretón, a partir de
los años 80, facilitó el desarrollo de numerosos tra-
bajos arqueológicos ligados a la construcción de
infraestructuras en los que participaron los técnicos
del DRAC de Bretaña. Uno de los proyectos más
importantes fue la construcción de una depuradora
en las orillas del río Vilaine en la que colaboraron
especialistas como Stéphane Blanchet, Guy Jumel
o Gilles Leroux (VV. AA. 1998: 173).
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A finales de siglo, el Gobierno francés creó la
denominación de “sites patrimoniaux remarqua-
bles”, con el fin de proteger y poner en valor los
conjuntos urbanos y paisajísticos de interés cultu-
ral en el territorio nacional. El procedimiento de
selección era realizado por la Comission Nationale
de l’Architecture du Patrimoine, encargada asimis-
mo de la elaboración de propuestas que posterior-
mente eran presentadas a los ciudadanos, que
podían dar libremente su valoración sobre los pro-
yectos, propiciando la participación vecinal en
cuestiones como la gestión, protección y valoriza-
ción del sitio arqueológico.
5.3. El apoyo popular. La creación de aso-
ciaciones vecinales para proteger el patrimonio.
A partir de la década de los noventa se apre-
cia un incremento progresivo de la participación
ciudadana en la protección de los sitios arqueoló-
gicos y del paisaje, gracias a la creación de nume-
rosas asociaciones culturales y vecinales que fo-
mentaron y estimularon la participación activa de
los ciudadanos en el territorio. Todas ellas recibie-
ron financiación estatal debido a su importante
labor de protección y divulgación del patrimonio
histórico y cultural.
Las comunidades de vecinos que disponían
en sus términos municipales de vestigios megalíti-
cos, decidieron asociarse con el fin de gestionar,
proteger y poner en valor los sitios arqueológicos.
El mejor ejemplo de esta puesta en marcha fue el
Bosque de Broceliande, que atrajo a gran número
de turistas gracias a los megalitos que tradicional-
mente habían sido relacionados, erróneamente,
con el ciclo artúrico. En 1988 se creó el Centre de
l’Imaginaire Arthurien, una de las muchas a
asociaciones locales que colaboraron con el
yacimiento, organizando diversas actividades cul-
turales, desde cuentacuentos a visitas teatraliza-
das en el yacimiento. Otra de las organizaciones
más destacadas fue el Centre Permanent d’Initiati-
ves pour l’Environnement, con asociaciones filiales
en cada departamento de Bretaña, como la Asso-
ciation Nature et Mégalithes encargada de la orga-
nización de actividades educativas desde un punto
de vista medioambiental en yacimientos prehistó-
ricos.
5.4. Las primeras exposiciones prehistóri-
cas en los museos del departamento de Ille-et-
Viliane.
Tras la segunda Guerra Mundial se creó la
Direction des Musées de France, institución impul-
sada por el museólogo Georges Henri Rivière cuya
función era gestionar y dirigir los museos de la
nación. Tras la reanudación de la investigación
prehistórica en Bretaña, uno de los sus primeros
objetivos fue la creación de un proyecto museísti-
co en la región que trazase un recorrido por la his-
toria de Bretaña desde la época prehistórica hasta
la actualidad. Aunque desde el siglo XIX la ciudad
de Rennes disponía de un edificio neoclásico que
albergaba el conocido como Museo de Rennes,
dedicado a las colecciones de bellas artes y ar-
queología confiscadas a la nobleza durante la Re-
volución Francesa, estas se encontraban desorde-
nadas en las distintas salas.
El proyecto planteado por la Direction des
Musées de France se llevó a cabo entre los años
1960 y 1975. Inicialmente se separaron ambas co-
lecciones, creando seis salas en las que el visitante
podía llevar a cabo un recorrido en orden
ARPI. Arqueología y Prehistoria del Interior peninsular 08– 2019 60
cronológico a través de la historia de Bretaña.
Debido al gran volumen de materiales que se reci-
bieron de las distintas excavaciones y prospeccio-
nes efectuadas en la región durante la década de
los setenta y los ochenta, en 1987 Jean-Yves
Veillard, conservador del museo, decidió cambiar
la sede a un nuevo edificio a las orillas del río Vilai-
ne en su paso por la ciudad de Rennes (Chevalier
2001: 342).
Pese a que los materiales prehistóricos que-
daron excluidos del primer proyecto, a medida que
se fueron recibiendo más materiales, estos pasa-
ron a tener una sala propia en el museo. Esta incor-
poración supuso un gran avance en la difusión y
visibilidad de las investigaciones prehistóricas, ya
que quedaban expuestos al público los materiales
de los proyectos que se estaban llevando a cabo a
lo largo de toda la región.
5.5. La difusión de los avances en las inves-
tigaciones prehistóricas.
Otro punto esencial para comprender la evo-
lución de los estudios prehistóricos en la segunda
mitad del siglo XX fue la creación de revistas cien-
tíficas y divulgativas en las que se dieron a conocer
los avances en las investigaciones prehistóricas
desarrolladas en el departamento de Ille-et-
Vilaine.
Entre las publicaciones más conocidas a nivel
regional destaca la Revue Archéologique de
l’Ouest, editada anualmente por l’Association pour
la Diffusion des Recherches archéologiques dans
l’Ouest de la France, desde el año 1984, dedicada a
la publicación de trabajos de los distintos
arqueólogos que trabajaban en todo el territorio
de Bretaña. Entre sus autores más brillantes, me-
recen citarse Pierre Roland Giot, Jacques Briard,
Jean L’Helgouach o Charles Tanguy Le Roux. A
nivel nacional destacó el Bulletin de la Société
Préhistorique Française, que recogía, desde 1904,
todos los avances científicos del periodo prehistó-
rico desde el Paleolítico hasta la Edad del Hierro y
que, experimentó una mejora muy notable en sus
publicaciones a partir de la década de los cincuen-
ta, merced al renacimiento de las investigaciones
prehistóricas tras la Segunda Guerra Mundial.
A nivel divulgativo se encontraba la revista
Paléo, editada por la Societé des amis du Musée
national de Préhistoire et de recherche, que desde
1989 y hasta final de la centuria informaba de los
nuevos descubrimientos y los avances en investi-
gación, con un lenguaje menos específico asequi-
ble a todos los públicos.
6. LAS INVESTIGACIONES DURANTE EL
SIGLO XXI.
A diferencia de otros periodos, la entrada del
siglo XXI no supuso una ruptura con la línea de
investigación mantenida desde finales del siglo
XX. La principal innovación de este periodo radicó
en el empleo de las nuevas tecnologías.
6.1. El papel destacado de los centros uni-
versitarios en el desarrollo de las investigaciones
prehistóricas a lo largo del siglo XXI.
En el departamento de Ille-et-Vilaine existían
dos centros universitarios, la Université Rennes 1 y
la Université Rennes 2. El primero de ellos se
mantuvo muy activo en la investigación prehistóri-
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ca desde la década de los sesenta del siglo pasado,
gracias a la fundación del Laboratoire d’Anthropo-
logie por Pierre Roland Giot; mientras que el se-
gundo se mantuvo inactivo, apenas colaborando
en la actividad científica.
Desde principios de siglo, en el seno de la
Université Rennes 2, se fue gestando al igual que
en los años sesenta en Rennes 1, un entorno de
intercambio de conocimientos entre profesores y
alumnos, que culminó con la creación en el año
2009 del Laboratoire d’Archéologie et Histoire
Merlat, en honor al historiador bretón Pierre Mer-
lat. Al igual que el Laboratoire d’Anthropologie de
Giot, los profesores de la Université Rennes 2 bus-
caron aproximarse al estudio histórico y prehistóri-
co en un marco de colaboración interdisciplinar, a
la vez que formaban a sus propios alumnos como
futuros investigadores. El apoyo decidido de la
universidad por este proyecto se materializó en la
dotación de nuevas instalaciones que inicialmente
constaban de un total de cuatro salas: una dedica-
da a seminarios, otra para el trabajo de laboratorio
y el estudio de las piezas obtenidas en las excava-
ciones, una más para el almacenaje y la limpieza de
los materiales, además de otra sala dedicada al
trabajo informático y la documentación.
Asimismo, El Laboratoire d’Archéologie et
Histoire Merlat organizó a lo largo de cada año
académico distintos seminarios y cursos, a los que
los alumnos de la Université Rennes 2 podían acu-
dir con el fin de completar su formación. Acabado
el año, los investigadores del Laboratoire organiza-
ban excavaciones arqueológicas para que los alum-
nos seleccionados pudiesen adquirir experiencia de
la mano de sus profesores en los distintos ámbitos
de especialización.
De manera paralela, la Université Rennes 1 se
consolidó como un centro más profesional y espe-
cializado, que contaba con un equipo de investiga-
dores pluridisciplinar heredero del Laboratoire
d’Anthropologie creado por Pierre Roland Giot,
cuyos miembros, en mayor medida, eran miem-
bros del equipo de profesores de la Université Ren-
nes 1, que compaginaban su labor educativa con su
faceta investigadora.
Entre ellos destaca Grégor Marchand, estu-
dioso del Paleolítico Final y el Neolítico en el oeste
de Francia. Desde sus inicios en la Université Ren-
nes 1 escribió un blog personal en el que informaba
de los avances en la investigación de la Prehistoria
bretona. En las diferentes excavaciones en las que
colaboró estudió los útiles líticos hallados, con el
fin de reconstruir las actividades de las
comunidades prehistóricas, gracias a las cuales
determinó la complejidad de los grupos neolíticos
de la fachada atlántica. Entre sus proyectos desta-
ca el llevado a cabo en el hábitat de Villeneuve-
Saint-Germain du Haut Mée en el departamento
de Ille-et-Vilaine (VV. AA. 1998: 41). Entre los in-
vestigadores más importantes destacan igualmen-
te Luc Laporte, especialista en megalitos y el pro-
ceso de ocupación de la fachada atlántica; Christi-
ne Boujot, especialista en arqueología funeraria; o
Virginie Defente, estudiosa de la protohistoria del
oeste francés.
Siendo conscientes de la importante labor
que se estaba llevando a cabo en ambos centros
universitarios, en 2008 se decidió crear el Centre
de Recherche en Archéologie, Archéosciences et
Histoire, conocido como CReAAH, con el objetivo
de coordinar los equipos investigadores de las dos
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universidades en proyectos comunes, a la par que
desarrollaban proyectos propios. Esta iniciativa
contó en los últimos años con la adhesión de nume-
rosos centros de prestigio como la Université de
Mans, la Université de Nantes, el INRAP o el Centre
National de Recherches Scientifiques.
El CReAAH llevó a cabo, no sólo una impor-
tantísima labor investigadora, sino también una
sobresaliente tarea de difusión gracias a la organi-
zación de seminarios en las distintas universidades
colaboradoras, mesas redondas en las que partici-
paban los investigadores más destacados, o publi-
caciones periódicas, que hacían partícipe a otros
miembros de la comunidad universitaria y a la po-
blación de los avances y del éxito que suponía la
colaboración de los equipos científicos.
6.2. Nuevas reformas y la creación de nue-
vas instituciones.
Pese a que tras la Segunda Guerra Mundial el
gobierno francés había tratado de poner en marcha
diversos proyectos dirigidos a la protección del pa-
trimonio, como la aprobación de la Ley 1941 o la
creación de l’Association pour les Fouilles Archéolo-
giques Nationales, estas iniciativas apenas cumplie-
ron los objetivos previstos. Es a partir de 1990 cuan-
do el Estado, preocupado por la situación de mu-
chos yacimientos arqueológicos decidió iniciar el
desarrollo de un proyecto de ley con el fin de dar un
mayor peso a la arqueología preventiva. Todo ello
culminó en 2002 con la creación del Institut Natio-
nal de Recherches Archéologiques Preventives. El
principal objetivo del INRAP fue desde sus inicios la
detección de yacimientos arqueológicos con el ob-
jetivo de protegerlos de la actividad humana. Tam-
bién se encargaba de la vigilancia del desarrollo de
las excavaciones arqueológicas, asegurándose del
cuidado de los materiales hallados y que tras el fin
de las excavaciones se devolviesen las áreas de tra-
bajo a la misma situación en el que se encontraban.
En el departamento de Ille-et-Vilaine el INRAP
llevó a cabo más de sesenta proyectos, de los cua-
les alrededor de una veintena se efectuaron sobre
yacimientos de época prehistórica, en los que cola-
boraron investigadores de la zona como Gilles Le-
roux o Stéphane Blanchet. Uno de los proyectos
más destacados fue Le Bois, en Plechatel, donde se
encontraron varias construcciones de periodo neo-
lítico junto a las orillas de uno de los afluentes del
río Vilaine, el río Semnon. Asimismo en la zona de
La Mézière, se hallaron los vestigios de una casa de
grandes dimensiones del periodo Neolítico.
Debido a la importancia que había tenido el
Musée de Bretagne durante el siglo pasado, en
2005 se decidió trasladar las colecciones a un nuevo
emplazamiento en uno de los centros de la ciudad
de Rennes, la plaza Charles de Gaulle. El nuevo edi-
ficio, les Champs Libres, estaba destinado a alber-
gar las colecciones del museo, y también una pe-
queña biblioteca y un planetario. La ampliación del
espacio expositivo permitió aumentar el número de
salas dedicadas a la colección prehistórica, al igual
que reservar un espacio para las exhibiciones tem-
porales.
En diciembre de 2011 se inauguró la exposi-
ción “Soyons Fouilles. Découvertes Archéologiques
en Bretagne” en la que se hacía un seguimiento de
todos los descubrimientos arqueológicos llevados a
cabo en los últimos años. El encargado de seleccio-
nar los contenidos del periodo prehistórico fue
ARPI. Arqueología y Prehistoria del Interior peninsular 08– 2019 63
Stéphane Blanchet, investigador del Service Ré-
gional d’Archéologie y colaborador del INRAP (VV.
AA. 2011).
6.3. Nuevas herramientas de difusión
El ámbito de la difusión experimentó una
mejora muy notable desde finales del siglo XX gra-
cias a la revolución tecnológica. Hasta ahora la
herramienta a través de la cual se informaba de los
avances en la investigación era el papel, mediante
de publicaciones periódicas y monografías; o la
televisión y la radio, en los casos en los que los
descubrimientos tuviesen una repercusión interna-
cional. Durante el siglo XXI muchas instituciones
emplearon herramientas como páginas web, con
el fin de acercar a los ciudadanos las novedades
científicas, sin ningún tipo de barreras.
La creación de la Bibliothéque numérique por
parte del Service Régional d’Archéologie de Bre-
tagne, puso a disposición de la población más de
3200 informes de excavaciones y prospecciones,
sondeos, operaciones de protección del patrimo-
nio o diagnósticos efectuadas en la región de Bre-
taña desde 1951 hasta la actualidad. Esta herra-
mienta pionera ha sido puesta en marcha exclusi-
vamente en la región de Bretaña y facilita al inves-
tigador la consulta desde su lugar de trabajo de
documentos sin necesidad de acudir a un archivo,
del mismo modo, permite a la población la consul-
ta de los trabajos arqueológicos que se llevaron a
cabo o se están llevando a cabo en su ciudad o en
la comarca.
Otro instrumento que el Service Régional
d’Archéologie ha proporcionado es GeoBretagne,
un mapa de la región en el que se marcan todos los
lugares donde se ha llevado a cabo alguna activi-
dad arqueológica. Para ello el usuario tiene un pa-
nel en el que puede seleccionar la época del yaci-
miento, los trabajos desarrollados y las fechas en
las que fueron realizados; asimismo esta herra-
mienta permite limitar o extender la búsqueda a
varios municipios, e incluso a la red de carreteras
con el fin de orientarse. Ampliando la zona geo-
gráfica, por ejemplo, un vecino puede ver las exca-
vaciones y vestigios de periodo medieval que se
han desarrollado en su ciudad desde la década de
los ochenta.
Por otra parte también ha sido esencial, la
creación de una páginas web como http://
www.persee.fr/, patrocinada por el Ministère de
l’Èducation Nationale de l’Enseignement Supéri-
eur de la Recherche et de la Innovation y por el
Centre National de Recherche Cientifique, que
tenía como objetivo principal la revalorización del
patrimonio documental, centrándose en su digita-
lización, con el fin de crear una colección completa
de publicaciones científicas abierta al público, que
permita acceder a boletines anuales de asociacio-
nes e instituciones, publicaciones de revistas y
artículos científicos de forma gratuita y sin necesi-
dad de registro previo.
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7. CONCLUSIONES
De acuerdo con lo expuesto, podemos consi-
derar que el principal factor que propició la identifi-
cación del pueblo bretón con su pasado prehistóri-
co fue el desarrollo del movimiento romántico a
comienzos del siglo XIX. Los intelectuales bretones
buscaron los orígenes de la región en su pasado
celta, al identificar los megalitos como construccio-
nes célticas. Posteriormente, durante la segunda
mitad del siglo XX, las investigaciones científicas
arrojaron luz sobre el origen prehistórico de estas
construcciones. La identificación de Bretaña con su
pasado prehistórico fue incorporada de manera
progresiva al imaginario social de la región gracias
a la renovación de las tradiciones, la publicación de
obras de carácter divulgativo y científico sobre la
prehistoria en la región, o la creación de una propa-
ganda turística que identificaba Bretaña con los
megalitos.
Durante la primera mitad del siglo XX, se pro-
dujo un movimiento de unidad nacional, derivado
de las guerras que asolaron el país. Sin embargo,
concluidas las dos guerras mundiales, volvieron a
renacer algunos principios del imaginario local y
regional como la identificación de la población con
el pasado prehistórico, gracias al fructífero trabajo
que en aquellos momentos estaban efectuando los
prehistoriadores en la región. En esos momentos el
apoyo vecinal fue mucho mayor gracias a la crea-
ción de asociaciones que se volcaron en la protec-
ción de los vestigios prehistóricos, convirtiéndolos
en símbolos y principal atractivo turístico de sus
comunidades; floreciendo la idea que pervive en la
actualidad: el sentimiento de identidad de la región
con su pasado prehistórico.
Desde el siglo XIX hasta nuestros días, la pre-
sencia de investigadores y asociaciones interesa-
das en el pasado prehistórico de Bretaña han mar-
cado la tendencia de la investigación en la región y
en el departamento de Ille-et-Vilaine, de manera
que ambos territorios se han convertido en cen-
tros de referencia nacional e internacional en la
investigación prehistórica.
Desde los primeros instantes del movimiento
romántico en Bretaña, muchos intelectuales se
volcaron en el estudio del pasado prehistórico de la
región, con el fin de fundamentar las tesis que de-
fendían la especificidad de Bretaña respecto al res-
to del país. De esta forma, y gracias a los estudios
mantenidos a lo largo de los años, Bretaña se con-
virtió en la primera región de Francia en estudiar de
manera científica sus vestigios prehistóricos. Los
primeros intelectuales contaron con el mecenazgo
de sociedades e instituciones de carácter privado
apadrinadas por las clases adineradas de la región,
como la Société Archéologique d’Ille-et-Vilaine,
que financiaron sus investigaciones; a la vez que
proyectos de carácter público, como los emprendi-
dos por Henri Martin o Paul Bézier que ya ponían
en relieve la presencia de numerosos vestigios
prehistóricos en la región.
En la segunda mitad del siglo XX las investiga-
ciones prehistóricas llegaron a su punto más álgido
gracias a la fundación del Laboratoire d’Anthropo-
logie por Pierre Roland Giot, que atrajo a un gran
número de intelectuales, convirtiéndose en centro
de investigación de referencia nacional e interna-
cional. El trabajo realizado por otras instituciones
como el Service Régional d’Archéologie, el INRAP,
el DRAC de Bretagne o el CReAAH; unidas a la
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participación ciudadana mediante la creación de
asociaciones culturales o el interés manifestado
por la población general hacia los descubrimientos
arqueológicos, ha facilitado que el departamento
de Ille-et-Vilaine sea considerado como uno de los
más sobresalientes en la investigación prehistórica
desde el siglo XIX hasta la actualidad.
Aunque el imaginario bretón se ha identifica-
do tradicionalmente con el megalitismo, las inves-
tigaciones prehistóricas han estudiado mucho más
allá. A lo largo del siglo XIX, las primeras investiga-
ciones prehistóricas centraron su estudio en los
megalitos, los vestigios más visibles de época
prehistórica. Sin embargo, la ocupación nazi sufri-
da entre los años 1940 y 1944, puso en relieve el
estudio de las formas de vida prehistóricas, cir-
cunstancia que no se había analizado previamente.
Pierre Roland Giot fue el primer investigador que
unió ambas perspectivas en sus trabajos en la re-
gión, transmitiendo esta nueva metodología a to-
dos sus discípulos y al resto de investigadores del
Laboratoire d’Anthropologie.
De esta forma, podemos afirmar que desde el
siglo XIX hasta la segunda mitad del siglo XX la
investigación prehistórica se centró en el estudio
megalítico y, desde la segunda mitad del siglo XX
hasta nuestros días los proyectos científicos han
continuado con el estudio de las formas de vida
prehistórica y los vestigios de los monumentos.
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