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La casa de Bernarda Alba

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  • FoU'

    omI!mzao

    rt!

  • BeRrRorPoNcrAAneusrnsADELAMARTTRToMconleueAuelreMnn JoserCnnoPnuoerucnTRapecrsre

    REPARTO

    Mara Jess ValdsJulieta SenanoGloria MuozRoser CamRosa VilaChantal AimeMnica LpezGoncha RedondoMaife GilJesusa AndanyMarisa Prada

    EQUIPO ARTISTICO

    DlRecclt Galixto BieitoAyuorre oe orRecclru Manel DuesoESCENoGRAFA Alfons FloresVesruRto y cARAcrERrzAcrH Merc PalomalLUMrNAclNEspcro soNoRoCoLneoRAcrN ESPEcTAL

    Xavi Clotscar RoigCarles Santos

  • EQUIPO TCNICO Y DE PRODUCCIONDrREccrN TcNrcACooRolnctt ARTsncAJere oe PBoDUcctNDrREcroRA DE PRoDUcctN

    Avuonrute oe pRoouccttlUrL.enlREGTDoRSesrnaTcNrcos coMPAiA

    CosrRucctH EscENocRFlcACoNFEccrN vESruARtoPELUoUERiAEsruDlo DE soNtDoFoToGRAFAPTNTURA oRtctNALDrsEo

    Miguel MontesMerc AnglsEster AlonsoAmparo Martnez

    Laia AlzuetaMontse CasasSalvador FerrerLourdes PrezRamn MariegasJosep FenerAntonio Navarro

    Alfons FloresGorettiSantosParamtricRos RibasMariona MillPubliespec/SSB

    Es uNA PRoDUccrN DE FOCUS, S.A.

  • I siglo XX comienza, Por lo que aloanorama lterario de nuestro pas serefiere, con aires nuevos de cambio y

    renovacin tanto en la poesa -con elModernsmo y otros smos que Yamarcaron el fnal de la centuria anterior-como en la prosa -con la obra de losescritores de la llamada generacin del 98-.Pero no ocurre lo msmo con respecto alteatro.

    Ante los graves acontecimentos quesacudieron el pas desde 1.898 y quedesembocaron en nuestra guerra cv1, losautores teatrales adoptaron dferentesacttudes que podran agruparse en tornoa dos intenciones prncipalesr la deenfrentarse a s mismos y enfrentar al

    espectador con los problemas de la poca de una manera realista, o la de apartar alpblico de esos problemas, recurriendo a la comcidad o no presentando msonflctos que los que se consideraban propios de la buena sociedad de la poca o losque t" r..itfan al mbito puramente familiar. A este segundo grupo pertenecen loscreadores y segudores del llamado drama burgus, con Echegaray y Benavente a lacabeza, que sern los que gocen mayoritariamente del favor del pblico. Al prmergrupo pertenecen los autores de la mencionada generacin del 98 que cultivaron elieatro: Unamuno, Azorn, Baroja y, muy destacadamente, Valleincln, cuyas obrasresultaron tan nnovadoras para su poca que en algunos casot sobre todo susesperpentot no se estrenaron hasta muchos aos despus de haber sido escrtas'

    A estas dos tendencas venen a sumarse las que irn apareciendo en las dosprmeras dcadas del siglo: los autores del teatro potico (como Eduardo Marquina) yvanguardista (Ramn Gmez de la Serna), los de la llamada generacin cmica del 98(Arniches, Muoz Seca) y la cada vez ms mportante produccin teatral d los autoresque formarn la conocda como generacn del 27, como Rafael Alberti y el propoGarca Lorca.

    sta ser, a grandes rasgos, la situacn de la produccin teatral que encuentreLorca, en tempos del reinado de Alfonso Xlll, incluido el perfodo de la Dctadura dePrmo de Rivera (1 .923-1.931) y hasta la llegada de la ll Repblica, momento en que,como seala Manuel Gmez Garca,el panorama teatral comienza a modifcarse por elagotamiento de las frmulas tradiconales, la consolidacin de los autores del 27, laaaricin de una nueva generacin de dramaturgos (la de Alejandro Casona) y unncioiente teatro del absurdo (con las obras Miguel Mihura y de Jardiel Poncela), undo

  • todo ello a una poltica gubernamental destnada a educar a las clases msdesfavorecidas tambin medante el teatro que conllevaba una polftica depotenciacn del hecho teatral.

    Y a la renovacn de este panorama se aplicar nuestro autor con todas susfuerzas y sus muchas capacidades artsticas. Desde muy joven, Lorca haba mostradosu sensibilidad para las artes interesndose por la msica y la pintura aun antes quepor la lteratura, pero se dedic finalmente a la poesa y al teatro uniendo ambosgneros medante una simboss que los entremezcla y los hace inseparables en laobra lorquiana,donde los poemas adquieren un evdente tono dramtco y donde losdramas son poesa. "Yo he abrazado el teatro porque sento la necesidad de laexpresin en la forma dramticadir el autor."Por eso no abandono el cultivo de lapoesa pura. aunque sta igual puede estar en la peza teatral que en el mero poema']"El teatro es la poesa que se levanta del lbro y se hace humana.Y al hacerse, habla ygrta.llora y se desespera':

    Como hemos sealado anterormente, el inters del pblico y de gran parte de lacrtca teatral en los dos primeros decenios del siglo XX se volcaba en favor del dramaburgus, por lo que no resulta extrao que el estreno de la primera obra de Lorca enel Teatro Eslava de Madrid en 1.920, una tragedia llena de simbolismo y de poesattulada El malefico de la mariposa, cosechara un fracaso total.

    La tarea no iba a ser fcil, pero ese fracaso ncial no le hizo renunciar a lospropsitos renovadores que tien toda la obra lorquiana. En Mariana Pneda, dramahistrico estrenado con xito en Barcelona en 1.927, se encuentra ya no slo uno delos temas recurrentes delautor (la lucha de la libertad y el amor contra la opresn,quelleva a la muerte) sino tambin su personal concepcin esttica de la obra y delescenario, especialmente por lo que se refere a la integracin en el arte dramtico deotras artes plsticas. musicales o coreogrficas. La utlizacn de estos recursosresultar fundamental en las Farsas, dos para guol (Tragcomedia de don Cristbal y lase Rosita y El retablillo de don Crstbal) y dos para persona (La zapatera prodgiosa yAmorde don Perlimplln con Belisa en su jardn).

    "Yo en el teatro he seguido una trayectora definida. Mis primeras comedias sonirrepresentables. (...) En esas comedias mposibles est mi verdadero propsto. Peropara demostrar una personalidad y tener derecho al respeto he dado otras cosas'iEnesas comedias rrepresentables es donde la intencin de renovacn delteatro alcanzaen Lorca cotas de verdadera subversin, sobre todo en Aslque pasen cinco aos y en lainacabada El pblico, obras ambas de tan complejo simbolismo (de'triptodramas" lascalifca Francisco Ruz Ramn) que su comprensn e interpretacin no estn exentasde dficultad. Esta difcultad, y la experencia obtenida de su fracaso con El maleficio dela mariposa ser lo que mueva alautor a educar no slo por elteatro,sino tambin parael teatro. "Un pblico al que hay que domar con altura y contradecirlo y atacarlo en

  • muchas ocasiones. El teatro se debe imponer al pblico y no el pblico al teatro'"Alpblico se le puede ensear. (...) Hay necesidad de hacer esto para bien del teatro':

    Al decir educar por el teatro hacemos alusin a la funcin social de este gneroliterario, que para Lorca es indudable y primordial. En muchos de sus escritos ydscursos recalca que "la verdadera msn del teatro es educar a las multitudes':Y ensu afn de cambio, para este teatro nuevo que propone quiere tambin un pbliconuevo."El teatro, para volver a adquirir su fuerza, debe volver al pueblol"Yo arrancarade los teatros las plateas y los palcos y traera abajo el gallnero. En el teatro hay quedar entrada al pblico de alpargatas . (...) Lo burgus est acabando con (...) el teatroespaol': A la bsqueda de ese pblico nuevo se embarcar con su obra escrita, perotambn con la creacin de la compaa teatral La Barraca, con la que desde 1.932 a1.935 realiz gras por toda Espaa, con un magnfico repertorio basado en el teatroclsico espaol de los Siglos de Oro.

    Para ese pblco concibe Lorca su 'trilogfa dramtica de la terra espaolal de laque slo pudo escribir Bodas de sangre y Yema, antes de ser vlmente asesinado. Sonobras en las que util iza un esquema clsico en la forma y en la eleccin de los temas yel diseo de los personajes, hroes que pretenden oponerse a un trgico destino(Yerma como mujer estril y en Bodas de sangre la pasin de la Novia por un hombrecuando es otro el que le imponen para casarse) que al final tendrn que asumr porqueuna fuerza superior les mostrar que es mposible escapar de 1. En este sentido,tambin es de corte clsco Doa Rosita la soltera, "drama de la cursilera espaola'lcomo lo defin su autor, en el que el personaje principal luchar infructuosamentecontra eltempo,contra el olvido,contra las convencones sociales,contra el derrumbede unas esperanzas que muy pronto sabe el espectador o lector que son baldlas einfundadas.

    En 1.936, con treinta y ocho aos recin cumplidos, Lorca termna de escrbr Lacasa de Bernarda Alba, de la que dice Francsco Ruz Ramn:'Final y cima de unatrayectora dramtica y abertura a un modo ms desnudo, ms esencial y ms hondode hacer teatro, esta tragedia, que debi ser la primera del ciclo de plena madurez deldramaturgo, la primera de una ms profunda y universal dramaturga, ha vendo a serla ltma obra de Lorca, por destino mpuesto brutalmente'i

    (Para cuestiones referidas a las fuentes del teatro lorquiano, sus remasfundamentales y las caractersticas generales de su estilo, remitimos al CuadernoPedaggco n" 7, dedicado a la Tragicomedia de don Cristbal y la se Rosita y Elretablllo de don Crstbal, obras representadas en la Sala Olimpia de Madrd en latemporada 1.997-98)

  • BERNARDA ALBA (fi9urn)

  • Itexto de La casa de Bernarda Alba nosha llegado en su redaccin autgrafa,Dendiente tal vez de una ltima

    revsn por parte de su autor antes dedarlo a la imprenta u ofrecerlo a la escena:ya hemos dicho que Lorca termin la obraslo dos meses antes de ser asesinado, yapenas s tuvo tiempo de realizar algunalectura del texto para 5us amgos. Suestreno sobre las tablas se produjo enBuenos Ares en 1.945, a cargo de lacompaa de Margarita Xirgu y, aparte deuna representacin a cargo del Teatro deCmara en 1.948, hubo que esperar hasta'1.94 (iveintiocho aos despus de habersido escrtal) para verla representada enEspaa, tanto por problemas de censuracomo por no autorizarlo la familia.

    Aquel estreno tuvo lugar en el teatro Goya de Madrd, bajo la direccin de JuanAntonio Bardem, y supuso en certo modo un hto en nuestra reciente hstoria teatral,entre otras cosas porque Garca Lorca se habfa convertido en un verdadero mito fueray dentro de nuestras fronteras, Rcardo Domnech confiesa en su artfculo "Un vejodeseo cumplido" (publicado en Ia revista Primer Acto, precsamente con motivo delestreno de 1.9&) que'antes de estreno albergbamos una certa inquietud, un temor.Estamos asistiendo a la cada estrepitosa de algunos mtos (...). Era nevitable, porconsiguiente, que nos preguntramos s ocurrra lo mismo con Garca Lorca'l

    De hecho,y a pesar del xito de pblco que acompa a la puesta en escena deBardem, el xito de crtica que casi unnimemente haba cosechado el teatro de Lorcaen Espaa mientras no era representado dej paso entonces a algunas vocesdiscrepantes con la mayora que, de modo honesto y razonado, expresaron su rechazoa la esttca teatral de Garcfa Lorca.

    Para ntentar explicar este cambio de valoracin en algunos hombres de teatrode la poca,Angel Fernndez Santos seala en su artculo"La vuelta de Federico GarcaLorca" que la nnegable calidad artstica de la obra lorquiana junto a otras cuestonesexternas (includa la ominosa muerte del autor) le proporconaron un xito en elextranjero que, contando adems con el pobre panorama del teatro espaol de laposguerra, proyectaron sobre obra y autor una "veneracin religosa" en nuestro pas yconvirtieron a Lorca en un mito.

    Asf, Eusebo Garca Luengo en su artculo "Revisin del teatro de Garca Lorcajse

  • propone liberarse de la exageracin con que la crt ica ha tratado sempre la obra lor-quiana y, sin dejar de alabar la "magia del poeta'; tacha su teatro de tener algo de noconvncente, probablemente debido a su "acusado artif icio esttco,j para GarcaLuengo "toda obra es forzosamente una interpretacin, sntess o acotacn de la vda.Depende su importancia de la riqueza o densidad de ese esquema. Visto a esta luz,como esquema vtal, el teatro de Lorca resulta pobrg y como penetracn en los mis-terios de la vida resulta tambin igero y superficial ' ly aade adems que Lo coso aeBetnardq Albo es"la obra ms teatral de Lorca, en el peor sentido de la palabra; y aun-que valora en ella que es "donde (Lorca) ha logrado un punto mayor de dificultadmecnica y donde ha hecho el alarde de interesar nicamente con mujeres en la esce-na';califca este drama de "tremendamente efectsta, carcaturesco y falso,l

    Y es que, efectvamente, las obras de Lorca ressten a duras penas un anlsisdesde el punto de vsta del realismo ms puro, seguramente porque no era el realismolo que ms interesaba a nuestro utor, sino crear una obra l iterara en la que la bellezade las formas no estorbara la expresin de los sentmentos, en la que las convencronesdel gnero estuveran al servicio del autor y no al contrario, utl izando los recursos ora-mtcos a su antojo sn temor a mezclarlos con los recursos poticos o smblcos delos que tan magistralmente se sirve en su obra lrica. No hay que olvidar, como dceJos Monlen en su artculo"La visin de Lavell i ' lque "Lorca nunca fue un escritor natu-ralista (...) bueno ser recordar la veta surrealsta que cruza por toda su obra y l lega ainformar con plentud Aslque pasen cinco qos y El pblico. Federico nunca ha queridocontar la historia escueta de unos personajes. Siempre ha ntentado bombardear elnivel tendo por realsta en nuestros escenarios, siempre ha querido ver lo que habadetrs de los rostros, detrs de las ceremonias, detrs de las paredes y los muros de lascasas. De ah, probablemente, el valor trascendente de las historas que cuenta, la mul-tiplicidad de las nterpretaciones Ictas que permite y, en defintiva, su categora dedramaturgo'i

    Tras la puesta en escena de 1964, Angel Facio present en i.976 en el teatroEslava de Madrid el montaje de Lo coso de Bernordo Alba que ya haba dirgido en 1.972en Oporto, y el CDN programa en la temporada 1.982-83 la representacin de estaobra a cargo de la compaa Tiempo de 5evlla, dirjgida por Ramn Resino.y para con-memorar el cincuenta aniversaro del estreno de yerma en lo que luego fue elTeatroEspaol de Madrid, en este teatro se represent la obra en 1.984 bajo la dreccn deJos Carlos Plaza,y de la que lgnacio Amestoy escrbe:"Era algo muy mportante el vol-ver a poner La cc5a de Bernardo Alba en la Espaa de 1.984. (...) Conoc soore et escena-rio las versiones magnfcas que de Lo Bernardo hicieron Bardem y Faco, recreacionesdeformes para una Espaa deforme. Por esto pensaba en la nueva versin como en lade la normalidad'l

    fal vez esa normalidad se ha impuesto tambn en la crtica, que despus de esamitif icacin ms que comprensible y acaso necesaria de la obra lorquiana ha sealado

  • con unanimidad los muchos acertos y la riqueza expresiva de la esttica teatral de esteautor, la hondura con la que refleja la frustracin de sus personajes' sus trgcosdestinos al enfrentarse con el mito del deseo imposible como si de hroes clscos seiri i"r" p"ro rin olvdar la humandad muchas veces desgarradora que late en ellos yque no es sino el reflejo del "hondo malestar'; del "dolor de vivr" que tantas veces"*pr"rur" el poeta. Caractersticas stas que mpregnan toda la obra dramtca deLorca, pero que se evidencian de modo magistral en La casa de Bernarda Alba y laconvierten en todo un clsco y en una de las cimas de nuestro teatro'

    Junto a esto, y dejando a un lado las mltples interpretacones y valoraconesouesehanhecho5obre [ casadeBernardaAlba , lac r t cahadestacados iempre lamodernidad de la obra, su cercana al espectador al mostrar el sentimiento humanodesatado por las ansias de l ibertad, la lucha contra la tirana y la dnuncia de lasactitudes y estructuras que favorecen la opresin. Como seala Rcardo Domnech'"Veo esa modernidad y esa cercana (...) en el esprtu crtco que anma al autor' en laespecial manera como enfoca el problema, en su acierto al mostrarnos la enajenacinque unas determinadas formas de vida provocan en la concienca humana':

    Para termnar, no hay que olvidar las consderacones que tan oportunamenteresalta el msmo Domnech en su ya citado artculo "Un viejo deseo cumpldo": "Lacasade Bernarda Alba, al propio tempo que un fundamentalpaso adelante en elteatrode su autor, es la evolucin de una lnea dramtca originada por Valle y continuadalcdamente por Lorca. (...) esta llnea dramtca habra llevado al teatro espaol a sums alto vrtice s el nico autor lo suficentemente dotado para esta aventura'Federico Garca Lorca, no hubiera muerto trgcamente' Su muerte acab con la nicaposibil idad de que el teatro espaol saliera de un atasco de siglos; concretamenteiesde el Siglo ie Oro. Cuando se tiene en cuenta la evolucin que hay entre Elmaleficio de la marposa, su prmera peza dramtica, escrita en 1 919, y La casa deBernarda Alba, escrita en 1.936; cuando se tiene en cuenta que esta lt ima obra fueescrta a los treinta y ocho aos, se ve con mayor clardad todo lo que el teatro espaol-v en defintva toda la cultura espaola- ha perddo con Garca Lorca

    "

  • ANGUSTIAS (figurn)

  • 6ara los poetas y dramaturgos, en vez deFrhomenajes yo organizara ataques y desafosI en los cuales se nos dijera gallardamente y con

    verdadera saa: "A que no tenes valor de haceresto?""A que no eres capaz de expresar la angustiadel mar en un personaje?" "A que no te atreves acontar la desesperacn de los soldados enemigosde la guerra?'l

    Los teatros estn Ilenos de engaosas srenascoronadas con rosas de invernadero, y el pblicoest satisfecho y aplaude viendo corazones de serrny dlogos a flor de dientes; pero el poeta dramticono debe olvidar, si quiere salvarse del olvido, loscampos de rosas, mojadas por el amanecer. dondesufren los labradores, y ese palomo, herido por uncazador misteroso, que agonza entre Ios juncos sin

    que nade escuche su gemido.

    Yo no hablo (...) sino como ardiente apasionado del teatro de accn socal. Elteatro es uno de los ms expresivos y tles nstrumentos para la edifcacin de un pasy el barmetro que marca su grandeza o su descenso. Un teatro sensible y bienorientado en todas su ramas, desde la trageda al vodevil, puede cambar en pocosaos la sensibil idad del pueblo; y un teatro destrozado, donde las pezuas susttuyena las alas, puede achabacanar a una nacin entera.

    El teatro es una escuela de l lanto y de risa y una tribuna libre donde los hombrespueden poner en evidencia morales viejas o equvocas y explicar con ejemplos vivosnormas eternas del corazn y del sentimiento del hombre.

    Un pueblo que no ayuda y no fomenta su teatro, si no est muerto, estmoribundo; como el teatro que no recoge el latdo social, el latido histrico, el dramade sus gentes y el color genuno de su paisaje y de su espritu, con risa o con lgrmas,no tene derecho a l lamarse teatro, sino sala de juego o stio para hacer esa cosahorrible que se l lama "matar el tempo':

    (Extractos de la Charla sobre el teatro, pron u nciada por Federico Garcia Lorca el2 de febrero de 1.935)

  • MAQUETAS DE LA ESCENOGRAF

  • rimer dfa de ensayo, prmera lectura dela obra: ante m aparecen diez mujeresDoderosas. intensas e intuitivas. Mi

    trabajo se me antoja,desde este da, sencillo;he empujado a las actrices, con sucomplicidad,a un espaco inmaculado, puro,limpio, como un %ltar", en una liturgia deodio fraternal, desamor, intolerancia yvolenca. como la defne m buen amgocarlos Santos, se trata de "una obra lquda.de flujos". Yo aadira de 'torazonesinundados de sangre en pechos de agua",Yello me evoca la Espaa de erotsmoreprimido, de fantica relgin y de unprofundo sentimiento de muerte; imgenesen blanco y negro de "sbado tarde"moosibles de olvidar.

    Nos gustara poder compartir con Federco Garca Lorca ese teatro "donde lagente no se asuste de que un rbol, por ejemplo, se convierta en bola de humo, o deque tres peces, por amor de una mano y una palabra,se conviertan en tres mllones depeces para calmar el hambre de una multitud". El teatro debe ser mgico, qu si no.

    Calixto Bieitooctubre 1.998

    PONCIA Y LAS HIJAS DE BERNARDA ALBA

  • 1. Menos que nunca en este ao en que se cumple e primer centenario delnacimento de Lorca es preciso buscar razones para poner en escena cualquiera de susobras. Pero, por qu La casa de Bernarda Alba? eu representa para usted La casa deBernarda Alba dentro de la obra dramtca lorquiana?

    Las razones por as que uno lleva su espectculo a escena resultan en muchoscasos mltiples y diversas y a veces son muy sencillas; son el resultado de un snffn dehechos no slo subjetivos sno a veces materales que confluyen en un momentodado... La Casa en este caso viene de lejos. euiero recordar en estos momentos misprimeros trabajos universitarios acerca de la obra y ms primeras aproximaciones alteatro; tambn quiero recordar mi trabajo de La Bernarda con los actores de laCompaa del Piccolo de Miano, en 1.994 en Miln, una de mis primeras grandessatsfacciones. Supongo que el que un proyecto del que se hablaba con Focus y elTeatro Mara Guerrero desde hace cerca de dos aos se haya finalmente materializadoahora ha sido por una coincidencia de calendaros y una oportunidad histrca. Encuanto a la segunda parte de la pregunta, no me acostumbran a gustar lasafirmacones categricas y seguramente no me corresponde a m hacerlo, pero creoque se trata de una de las obras maestras de Lorca.

    2. Qu elementos del drama o del montaje destacara usted como los msnteresantes (por su importancia, por su actualdad o por cualquer otra razn) para elpblico joven que ver el espectculo?

    El ritmo del texto cercano a lo que ahora llamamos thril ler, historia oe suspense.La escritura de Lorca es prodigiosa en ese sentido. Evidentemente, una trama devolencia, sexo y muerte est muy cerca de un pblco contemporneo acostumbradoa ello en el cine,la televisn y en su realidad daria.

    3, Las acotaciones que encontramos en el texto son, adems de relativamenteescasas, sobrias en la mayora de las ocasiones; tal vez el propio autor las hubieraenrquecido s l mismo hubiera podido llevar su obra a la escena. Con qu espfrtuha abordado desde la direccn la interpretacin de tantas posibilidades comoquedan abiertas al representar una obra con tan pocas indicacones del auror en esteasoecto?

    Pocas acotaciones no suponen que el autor no d pautas o pstas en su textopara entender su obra. Nuestro prmer trabajo ha sido leer bien aquello que estabaescrto, es decir, como s de un detective se tratara, buscar las pstas rtmicas,semntcas o pscolgicas que aparecen ordenadas y trabajar en diferentes frentes. Elespritu, una vez hecho esto, es de una total libertad en relacn con los actores v tasacotaciones... Hay que construir las propias acotacones.

  • 4. Cul ha sido el enfoque de la dreccin respecto al trabajo de los actores?

    5empre dgo que mi obligacn en los ensayos es crecr un espaco de generosi-

    d"d yi;;;;;;;"-Ji un rudt a"nae no hava miedo al ridculo' donde el nivel de

    energa sea altsimo y donde sea posible probar y buscar todo.'El resultado del trabajo con los actores debe ser fresco' directo' muy fsco' nstn-

    tuo, n-o pr-.o, cambinte diariamente'y' en este caso'yo dira que un poco soa-do.

    5.Lacr t icahaapuntado|asm| t ip lesnterpretac ionesquepuedenhacersedeLa casa de BemordoAtba, sn que haya unanimidad a la hora de considerar cul

    pudo

    ser la intencin de su autor. A este specto, qu lectura ofrece su visn de la obra?

    ;"; ;;i.;;.h.s conflicto-s presentes en e-l drama lorquiano ha querdo usted des-

    tacaf en su puesta en escena,

    La base de un espectculo de teatro es el actot 1o sangre y 'os huesos-' un learront uof,a"-[ta- y una idea,.o,una intuicn' ms bien' Para esta Bernotda me he sen-tido certamente como un aqotescente. Durante los ensayos me han vendo a la cabe-.u-""-* pif".t " Buuel:"Los dos sentmentos bsicos de m nfancia'

    que perdu-i"rn nurtu bien entrada la adolescencia, fueron los de un profundo erotismo al prin-

    :;;;,,-li;J;;; una gran fe religiosa,v una permanente conciencia de la muerte'i

    La exploracin del conflicto.bsico desde estas notas de la obra' el enfrentamen-ao "rrtr" "lu y Bernarda, conduce a encontrar todas las varantes' tonos y coloresDosibles deltexto qu" oao"n upu'"t"' "n esta puesta en escena'fodo ello sin olvidarlu.i" ir"au " un" obra de mujeres'Una obra de fluios'de lquidos'

    6. Respecto a las puestas en escena que le han precedido' qu cree que aportaa" noJ"Joio ,u propulsta artstica de La casa de Bemorda Albo? cree que el camboi" ..iJ"."a*;ricas y sociales oblgan a una revsin del montaje de esta obra'L"LJ. ". .t"*" que elirlblico actuaino es el mismo que el de 1'964 1'984'

    pol

    citar fechas de dos fepresentaclones memorables de este mismo drama?

    No|os. . .Perosfqueesnecesaraunarev is in:soydeIosquepiensanquenues-tros clsicos deben renovarse continuamente'

  • BERNARDA ALBA Y LA PONCIA

  • Katicas reflexiones sobre La casa de Bernarda AlbaPersonajes empeados en una macabra solidaridad con la muerte;el luto. El luto

    como forma de vvir muertos. Una plstica (no me gusta esta palabra) inspirada en unaiconograffa de pasn, la pasin de Crsto. Pasin como dolor, pero tambn pasincomo amor vehemente, perturbacin de los sentidos.,. violenca.

    Mar de luto.El prlblico encuentra la sala cubierta de negro. Luto. Luto que romper una

    violentsima rrupcin de luz blanca cegadora... como la vehemencia. De nuevo lapasin. El blanco,la blancura,la locura... (Moby Dck)

    Lo blanco,lo puro,lo lmpio,lo no usado,la virgindad, el celbato. La5 hjas nohan conocdo hombre, Bernardas. Por bernardos se conoce a los monjes de la ordendel cster. Blanco como la sbana, la piedra, de nuevo la pasin, El blanco comoausencia,como vacfo, desnudez. El blanco como opuesto al negro,que es la muerte. Elnegro barroco, lleno,la muerte llena de cosas que perdemos. El blanco limpio, puro,pero vaco de vida o, mejor dicho, de sexo. Sexo sinnimo de vida. Muerte llena contravida vacfa.

    LA CENALa cena,un ahorcado.La madre, Marfa; el padre,Jos; la hermana, Magdalena; un

    forastero, Pepe "el Romano"; Ponca, que se lava las manos; Adela y su corona deespinas, La angustia, el martiro y fnalmente de nuevo la muerte. De nuevo el mar deluto. Un mar que apaga la violenca,la vehemencia amorosa que es la luz blanca.

    Mara Jos,la madre que quiere casarse vieja, podra ser aquella vehemenca delas nietas convenida en demencia, demenca sen1.

    La pasin dolor nos lleva a la no pasin amorosa,a la demencia.

    La luz a la oscurdad.Vva la muerte.

    Vivir muertos nos aleja de las pasones, del dolor del amot de la maledcenca,de los sentmientos, de los desengaos; pero tambin de la vida... y de la demencia.Nos aleja tambn de la demencia?

    Bernarda Alba, Dos del Antiguo Testamento, teme a la locura Se apoya en unsistema de valores absolutos. No hay trmino medo. Pero quizs envejezca sola ydemente como su madre Marfa Jos. Cuando muera dominada por lo negro, quizdesee alcanzar esa luz blanca y bril lante al final del tnel.Quiz sea demasiado tarde.

    silenco.

    Alfons Flores, EscengEfo

  • DIBUJOS PARA LA ESCENOGRAF

  • I tema en La casa de Bernarda Alba es el enfrentamento entre el principio de

    ;;;;;, ;.;;;o e un modo cieso v visceral en Bernarda' v el princpio de

    ri"""a,r,"""itado por Mara Josia y' sobre todo' por Adela' y ejemplificadooor el nstintosexualy la obsesin por el hombre'

    Este tema se presenta estructuralmente medante una divisin en tres actos que

    Oen puee aiustarse al clsco patrn de planteamiento-nudo-desenlace:

    Acto l:ocho aoshombres.

    Presentacin de los personajes y del conflcto: la mposicin de un Iuto deo"iu-fui tt"t de Brnarda Alba frente a la obsesn de stas

    por los

    Acto ll: El conflicto se complica cuando Pepe el Romano va a casarse con

    nngurii", .on "f aonsentimiento de Bernarda:es un matrimono de conveniencia' pues

    i"ti"t "t la nica de las hermanas que ha heredado; Martro y Adela estn

    "n"--or"d", de Pepe el Romano, y ser la hermana menor quien se converta en su

    amante.

    Acto lll: El trgico desenlace se desata cuando Martrio delata a Adela' que est

    ."" ;;;"" ;i';""in"iJ" t" atp"'u v Adela' crevndole muerto' se sucda'

    Estosac tos t enenunaest ruc turarecur ren te :par tendeunas i tuac in in ic ia ldetranqulidad al menos aparenre que se va perdendo con la.aparcin

    de diferentes

    .ontj. iot v qu" t",mina en un clmax de tensin y de violencia:

    ACTO I:

    s i tuac in in ic ia l i conversacndeIascr iadasyapar c inde|ospersona jesene|duelo.

    conflictos: mposicn del tuto y obsesin de las hijas por los hombres' Pepe eln.rn-" t"ri i i t" " 'nngustias, lo que iesata las tensiones entre las hermanas'

    clmax: Mara Josefa, en su locura, grta las mismas ansias de l ibertad que las hijas

    de Bernarda no se atreven a expresar; ser sacada de escena a la fuerza' arrastrada por

    t"i .r iua", y pot tut propas nietas, a una orden de Bernarda'

  • ACTO II:

    situa(in ncal: las cinco hijas conversan mientras cosen el ajuar para la bodade Angustias; la aparente calma est cuajada de tensin.

    conflictos: desaparcin del retrato de Pepe el Romano, que desata los recelosde Angustias hacia sus hermanas; su aparcin en la cama de Martrio enfrenta a stacon Adela. Bernarda no quiere ver, a pesar de las insinuaciones de la poncia.

    clmax: la muerte de la hija de la Librada sirve de aviso, de premoncn de latrageda en la casa de Bernarda Alba.

    ACTO t:

    stuacn incial: la escena de la comida en presencia de Prudencia, una vecina,encubre de nuevo el enfrentamiento entre las hermanas, que se insina, no obstante,en la conversacn.

    conflctos: Poncia contina con sus acusacones ante Bernarda y, an msclaramente, ante la criada. La aparicin de Mara Josefa insiste metafncamenre en taatmsfera rrespirablemente opresva de la casa.

    clmaxi estalla la rivalidad entre Adela y Martrio, que termina con la rebelinv el suicidio de Adela.

    BERNARDA ALBA Y ADELA

  • 1. EXPRESION ORAL

    En este apartado se proponen unas cuestones que pueden servir de gua para,"ulr"iun a"U"t" aon los alumnos/as sobre el montaje al que han asstido. El presen-te cuestonaro deber enriquecerse con las aportaciones que tanto ellla profesor/acomo los/as alumnos/as propongan respecto a los aspectos aqu tratados o a cuales-quiera otros que surjan durante el debate'

    1.1. Antes de empezar, la obra ya plantea algn problema respecto a lainterpretacn de| subttulo,,,Drama de mujeres en |o5 pueb|os de Espaa,,: Por quiiioi ttog"an ? La referenca a los pueblos de Espaa' Lstra la obra en las con-vencioes del diama rural? (Pueden aqu repasarse las caracterstcas principales de lossubgneros teatrales ms comunes)'

    1 ,2. Del mismo modo, la nota del autor en la primera pgina' 'El poeta

    adverte que estos tres actos tlenen la intencin de un documental fotogrfico'l pare-l. ,"-ur.", "t carcter fundamentalmente realista del texto' cuando son innegablesiusvalores smUOlcos y potcos. cul puede ser el inters de Lorca en resaltar el rea-ii." J" t" obra? Esto iuede daipie a que el/la profesor/a repase someramente losln."ft* a" ,"urirmo y de verosimilitui en el teatro'y la intencin de Lorca cuando'levendo la obra a sus amlgot comentaba algunas escenas exclamando orgulloso:"iNu;a gota de poesa! iRealidad! Realismo!':

    1.3. De Bernarda, por ejemplo, hace el autor un detallado retrato a travesde|oquehaceydiceydeIoqueIosdemspersonaje5dicendee| la ,yexagerandosus;sgt';i ln;ilt im"unt" l" hiprbole) convierte a.este personaie en simbolo deuiZui.i.i "n,'nunte e intransgente. Analzar los siguientes personajes y stuaconesi"r-.1-a"iqr rtay en ellos de realy qu de smbolo'y cmo se consigue

    ese pasoe una presentacin realista a un signfcado simblico:

    Personajes:BernardaAdelaMarla JosefaPePe el Romano

    Stuaciones:Obsesin de las hjas de Bernarda por los hombres'Muerte de la ha de la Librada'Suicidio de Adela.

  • 1 .4. Tambn respecto al espacjo y al tempo se ofrecen en ta oora unapresentacin real y un signfcado trascendente o simblico. Analizar ambos aspectosreferidos al espacio -tanto interno (la casa) como externo (el pueblo)- y al t iempo, quese seala en las acotaciones y en el parlamento de los personajes.

    1.5. Como seala Ruiz Ramn, el tema de La casa de Bernarda Alba es elenfrentamiento entre "el prncipo de autoridad encarnado en Bernarda y el princpode libertad representado por las hijas'iPero junto a ese tema central aparecen tratadosen mayor o menor medida otros, como la njustica socal, la hipocresa,la marginacnde la mujer... Sealar su aparicn en el texto y razonar en qu medida han quedadoresaltados o no en la puesta en escena que se ha presenciado.

    '1.6. Como hemos visto en este Cuaderno pedaggico, la obra presentauna estructura crcular. Pero esta estructura circular va ms all de la mera construccnde Ios actos, (Eduardo Galn observa una estructura cclica y repetitva en el movmientointerno de cada acto). Ell la alumno/a deber sealar en qu elementos se percbe esarepetcin y qu valor esttco y significatvo tiene. seala remos como eiemplos que laobra comienza y termina con la muerte, que la primera y la lt ima palabra quepronuncia Bernarda es "Silencio':,.

    1.7. Sobre a ntencin de Lorca al escribir esta obra, sobre su propsitoprincipal, mucho se ha escrito. Como los temas que trata son variados, tampoco suinterpretacn ha sido unnme entre los crtcos: se habla de la denuncia social queencerra la obra, de una posble lectura poltca, de su intencin moralzadora, de susvalores poticos y artstcos... Analizar en qu pueden basarse cada una de estasnterpretaciones y otras que puedan apuntar los/as alumnos/as, valorando culespueden ser a su juicio las ms adecuadas.

  • 2. EXPRESIN ESCRITA

    2.1 . Anlsis de las crtcas

    Proponemos como activdad el anlisis y comparacn de las dferentescrtcas que se p;blquen en los daros los das posterores al estreno de esta funcn'Sera convenente recordar a los/as alumnos/as que pueden recoplar esta nformacinen hemerotecas, biblotecas u otros centros donde habitualmente archvan la prensadiaria. Una vez que se hayan hecho con dversas crticas, debern analizar qu puntostienen en .o-n, "n qu puntos dferen y el carcter objetvo o subjetivo de lasmsmas,

    2.2. Anliss de los Personajes

    Ellla alumno/a deber elaborar un esquema de los personajes de la obraatendiendo a la diferencia entre los personajes que apafecn y aquellos que slo sonaluddos. Entre los primeros, puede todavfa dstngurse entre personajes principales ypersonajes secundaiios, as como entre los segundos puede sealarse la existencia debersonales aluddos ms mportantes y menos mportantes' De cada uno, se har unai...rioln atendiendo a lo que dicen o hacen, a lo que de ellos se dice en boca deotros personajes y al valor simblico que adqueren'

    2.3. Anlsis del lenguaje

    No podemos trazar una lfnea separadora del Lorca dramaturgo y el Lorcapoeta: el arte de Garca Lorca ha creado una obra dramtica con un lenguaje a la vezsobrio y potico, real y simblico, como hemos vendo viendo en este CuadernoPedaglico. Del mismo modo que su poesa, su lenguaje dramtco se nutre a la vezde loi cursos propos del lenguaje ms popular (en La casa de Bernarda Alba conescasos rasgos del andalucismo tan importante en sus poemas) y de otros recursosiultos y poticos. Recoger ejemplos de ambos registros y analzar el uso que de elloshace a autor (por ejeplo las frases hechas y las exageraciones que caracterzan ellenguaje de Poncia de la criada,junto a las metforas y comparaciones que abundanen el texto y que le dan una gran fuerza expresva)'

  • 3. DRAMATIZACION

    A cont nuac in se propone, en t re las muchas pos ib les , una ser ie dedramatzacones para famliarizar a los/as alumnos/as con el quehacer teatral: se tratade crear unas situaciones que no estn en la obra de Lorca, por lo que antes de l levara cabo cada una de las dramatizaciones propuestas, los/as alumnos/as debernanalizar los personajes en cuestin, para que las distintas soluciones resultenverosmiles en relacin a la obra que han vsto representada. Se puede dvdir la claseen grupos, cada uno de los cuales escoger una de las propuestas para desarrollarladelante de los dems compaeros/as. Por ltmo, se debe hacer una puesta en comn,ya que seguramente el proceso de creacin habr sido tan nteresante como laspropas soluciones dramatizadas por cada grupo.

    3.1. Dramatizacin de una conversacn entre Peoe el Romano v Adela.

    3.2. Dramatizacin de una conversacn entre Pepe el Romano y Angusttas.

    3.3. Ponca, despus del funeral de Adela, les cuenta a unas vecinas Ia situacronen la que ha quedado la casa.

    3.4. Continuar la obra, tal vez con una nueva rebelin por parte de alguna de lash.ias, o aceptando todas la trana de Bernarda.

    LA Y ANGUSTIAS

  • 4. CONTEXTO HISTORICO, SOCIAL Y CULTURAL

    Junto a los datos biogrficos y los referdos a la obra de Federco Garca Lorca,proponemos a contnuacn un cuadro con acontecmentos histrcos, sociales y cul-turales que le fueron contemporneos; ellla alumno/a deber analzar en qu medidadichos acontecimientos influyeron en la vida y en la produccin lteraria del autor,

    Asmsmo, puede utlizarse este cuadro para proponer otras actvdades, ofre-ciendo los datos para que sean colocados en la fecha adecuada, presentndolo incom-pleto o pidiendo alla la alumno/a su elaboracn completa.

    El5 e iunio oce e Flenisoquebs fEs lo suer on lor EE.UU., Espoopie.de sus llimo! colonios lPuerto Rico,

    Resecio de Morio Cdrtio.

    Alfoso Xlll es pf ocLomodo

    or iniereses .ddos, de Benovenre.

    Se rruslodo o Gronodo. Coiezo eL

    Condlelds 6 osesinodo.

    to olquerdd, de Benovente.

    P/o,ierc / /o, de luo. RomnJimez.N,eb/d, de Unomuno.

    Comienzo en Gronodo sur estudios

    Lo seatito e Ttvelez, e Nni.hes.

    ucl de ctubreen Rusio. Espoolris socioly polirko qle llevo o laHuelgo Generol Re'oluciororio.

    Publi.o su prmer lexlo: fo.rdiio ibli'

  • II

    I

    It1

    Pubr.o 5u prim libro, /hp.e5ner ), po, T",.ino lo P,-e.o Gu.,o M"ndiot lo-vqonzd de Don Menrla, c Mot

    Se rrodado o Modrd, o lo Rcside.ia de cgueridr, e cmcz de la Semo

    Erreno en Modr d Eioolefi.i de 1o oripro, que rcrulro un k.o5o

    Mle coir. Dryinor polobrs y ucerde /rmo, e vole lc

    P,bli.o 'u P.i-., tib," d" po.;;;l;; Deso3rre deAnuol. Ascsinob de DoroFundocin de PcE Los .ehos.le DFialero,e vole Lo Espahve ebrcdo, e abga

    EKti6-c hasnnecld e don crctbol y Msoliniosume e p.d", ." [.li. .P-.nNober o 8enov.re. U/er d Joycc/oger de Gerord Digo.

    Gpe de erodo de Pr mo de ReJo. Se

    Erreno cln ga. xno de Moiono p;edo s" .. "b,o "t I c"nr"no"o d;;eo;

    Publ,o el Rond'.ero GJronoVai o Nuevo Yo*. E(ribe pelo enNlevo Yorl, que no se plblicor horot9Q

    ' 'Crdck 'de o Eoso c Nueva y , [ .

    Vioto o Cuho Erm Modfid o zdp Dimisin de pio e Ri,e.o E/ om6redeshobodo, e Atbetti L rcbeln e

    Pbti. Pae el .o"te anda se pro.dmo lo RePbtko AfoN xtl

    Fu.do Lo Boro.o unro o Edlord ugorh Pron!nciomie.ro de Gsl sonturiMihrc eribe lrer rnbreor de.op,esr,odo ef t952. E podos coo /06,0r,

    E,t .not " B"o, d" ,"ng," y a.* d.don Perlpln con Belsa en sr odi^

    at".onio rt"' ", .o.b,o!o .on-iliiEn Espoo. toi erho3 gonan to5 eeccoes d 5reo,o/od, de Coson

    tuion.io e Argeniina, nde se rpresero 5us bro5 con gron xlt Erren deyro con xto obsouto, pr.on crric3por ponc de o prcro conserodoro

    Gbemo d lo CEDA n-"t," +oclubrc: eler.iro iniefti.ne en arufosy Cat. d Anseiih a el hhor de nbrsder, e )dde pon.eto. to vz o 1idebJijo, d Pedro so os

    Errcno en Bdrcelono de Doo Rorto /o Dimin d tetrux. Formocin delFrre Popu/r Olro vez e/olo, de

    fehino ld.so d Bsntrdo A/6d, 9@reonle un grupo de omlgd. El ose5ino-do en Vznor (Glonodo)e tgdesosro.

    T,lolo edoro de Frere ppulorPronunciom eb de genero Fon.o

    nMorue.i e in cio de lo Curo CilMern Volle.lncln y Unomuo E/ olq no ceso. de M. Hemnez Roznde oor de P.@ Solino, ,ruo, JeMoireno, de a. M.60a Ld reoto y

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